Disclaimer: Los personajes no son de mi autoría.

Summary: Reborn llega a Namimori y… quema toda la información que le dieron. (Aka: Los gatos son escurridizos y francamente indiferentes a los que no les interesa. A Reborn no le pagan suficiente para esto.)

Happy Kitty

Reborn llega a Namimori una mañana de junio con informes del CEDEF sobre Tsunayoshi Sawada metidos en una carpeta en algún rincón de su camaleón y planes tortuosos que realizar. Ya le ha echado un vistazo al registro escolar del niño y es bastante regular, con un historial de ausencias tres veces peor que Xanxus en sus tiempos más difíciles, al de actividades extracurriculares –vacío- y al de relaciones –vacío-.

No se preocupa. Él es el Sicario más Fuerte del Mundo y sabe cómo pulir los carbones para sacar las gemas preciosas.

Sawada Tsunayoshi no será una excepción.

Las cosas se doblan un poco a la derecha cuando pisa Namimori y prácticamente flota sobre llamas de cielo.

Al parecer, el sello de Nono no estuvo a la altura. O sucedió algo que lo rompió.

Nana Sawada es tal como figura en los informes. Una ama de casa despistada que ama a su esposo y a su hijo y cocina como los dioses.

—¿Un tutor para Tsu-kun? Mmm, discúlpame pero no creo que sea necesario, Reborn-san.—Le dice con una sonrisa amable. —Sin embargo, te daré una oportunidad. Pero la decisión final es de Tsu-kun, ¿está bien? Mi hijo puede ser un poco testarudo así que mucha suerte.

Reborn termina su desayuno mientras esconde su sonrisa en su tenedor. — Gracias, Mamma, estoy seguro que Tsuna-kun me aceptará.

Como el mayor sicario del mundo es una promesa.

Nana le deja entrar al cuarto del Tsuna.

Es una habitación extraña para un niño de catorce años. Hay cajas para todo el suelo con mantas en su interior, suficientes para una tropa de gatos. Y pelo, mucho pelo marrón. También hay un poste rascador en una esquina en el que debe haber magia involucrada para que todavía se mantenga en pie.

Es el sueño húmedo de un gato. O de muchos gatos.

Por supuesto, Tsuna no está en ninguna parte.

Reborn deja algunos insectos en la casa y se marcha a buscar a su futuro estudiante.

Recorre Namimori dos veces enteras antes de encontrarlo en el patio de la casa tomando sol en una camiseta demasiado grande y calzoncillos.

Tsuna no quiere ser jefe de la mafia.

Su razón es tan simple como su apariencia. Si se convierte en un jefe mafioso no va a tener tiempo para las siestas.

Las siestas, dice Tsuna, son muy importantes.

Y luego lo deja allí, escalando el muro y desapareciendo entre los techos con una agilidad inhumana.

Reborn llama a Iemitsu para advertirle que va a matarlo la próxima vez que lo vea.

Luego sigue con Nono para contarle que su heredero es mitad gato y probablemente muera antes de verlo asumir el trono.

Timoteo deja el asunto en sus manos, el muy hijo de puta. Obviamente no quiere lidiar con youkai desde la última vez que un hombre lobo casi se comió su brazo.

Pero Reborn es el sicario más grande del mundo y no va a dejar que un antepasado travieso manche su reputación.

Otra idea media loca que estaba guardado por ahí. :D