Bienvenidos a una nueva historia mía llena de mucha mierda dramática como es típico de mi si habéis leído Perverse, que espero que sí. Hice una encuesta en Twitter preguntando si subía o no esta, por que es una temática parecida, tambien yaoi, aunque aquí solo me debato entre un TheoHarry o Snarry, tal vez los dos si se me va la cabeza, aunque un Drarry también me tienta mucho.

Bueno, dejando eso de lado, advierto como siempre que esta temática es oscura, que Hermione, Ron Dumbledore y los Weasley excepto los gemelos probablemente sean malos, que se menciona abuso, violación, violencia, habrá escenas gráficas y todo eso, normalmente a los menores os diría que no lo leyeseis, pero lo haréis aunque yo diga nada.

Ahora sí, os dejo leer, nos vemos mas abajo

DISCLAIMER: Harry Potter no me pertenece, aunque Danny y Navi si, yo solo uso el plt para mis liadas mentales, Harry Potter es de J.K. Rowling y sus estudios y editoriales.


Miro a través de los barrotes de la ventana del cuarto que tenía desde que era un bebé, miró el bonito cielo azul, el sol, las nubes y los pájaros que sobrevolaban la casa de sus tíos. Intentó recordar cuándo fue la última vez que sintió el sol o el viento en su propia carne directamente y no a través de los barrotes de la ventana que lo mantenían alejado de la vista de nadie.

-¡Chico!- Gritó su tía desde el otro lado de la puerta llena de cerrojos- Aquí tienes tu comida, nosotros nos vamos, nos vemos en dos semanas, si haces algo malo ya sabes lo que te espera.

Miró la bandeja llena de comida y supo que tendría que racionarlo para poder comer al menos un poco todos los días, pero antes que nada levanto una de las tablas del suelo y guardó allí toda la comida que le habían dado, junto con la botella de agua que sabía tendría que rellenar con la de la pequeña ducha que estaba en su cuarto junto al váter, una cosa que sus tíos pusieron hace pocos meses para no tener que sacar al niño del cuarto nunca. El chico sabía que sus parientes le odiaban y ya no tenía esperanza de saber ni siquiera el porque le trataban tan mal, a sus 10 años se pasaba las noches llorando y soñando que alguien le vendría a buscar del infierno en el que se encontraba. Sus días eran bastante aburridos, sobretodo durante los veranos ya que sus tíos simplemente lo encerraban en su cuarto y apenas le daban comida, al menos durante el curso podía salir al colegio y pasar por el único lugar donde podía verdaderamente relajarse y disfrutar un mínimo haciendo algo, aunque ese algo solo fuese leer y estudiar. Después de haberse los tres últimos años yendo a la biblioteca todos los días tenía ciertos privilegios y estos consistían en que la bibliotecaria le dejaba llevarse muchos libros durante todo el verano sabiendo que no iba a poder venir entre medias y viendo lo mucho que el niño se aplicaba decidió concederle esos privilegios. Ese verano había visto que sus tíos cada vez estaban más descuidados con él por lo que, siendo previsor, decidió tomar el doble de libros que normalmente cogía ya que otros veranos le había tocado hacer las tareas del hogar, pero este último año ni siquiera le quisieron ver la cara y lo encerraron en el cuarto.

Por esta última razón, poco tiempo después de que sus tíos se fueron, el chico se sorprendió al oír a alguien entrar de nuevo en la casa sabiendo que sus tíos nunca solían dejarse nada en casa y que nadie más tenía acceso a la casa. Escucho pasos recorriendo toda la casa hasta que la persona se paró justo delante de su puerta y sin oírse el sonido de los candados desbloquearse la puerta se abrió dando paso a un hombre rubio con ropas raras en su cuarto. El chico se escondió debajo de la cama inmediatamente sin saber que hacer pues esto era muy diferente a lo que pasaba en los libros de aventura que él leía pues sabía que no iba a haber ningún salvador para él dado que nunca había habido nadie que de verdad lo apreciase.

No podía ver más que los pies del hombre que acababa de entrar en su cuarto y aun así solo veía una pequeña parte de las botas que eran de un tejido parecido al cuero.

Mientras tanto el hombre analizó la habitación en busca del muchacho que sabía que estaba allí escondido. Esto le recordó a las pocas veces que había jugado a las escondidas con su hijo, cosa que nunca admitiría en público, y recordó que su hijo solía esconderse en el armario por lo que miró alrededor suyo en busca del dicho armario pero no fue capaz de encontrarlo en su lugar soltó un gruñido por las malas condiciones en las que mantenían al niño viendo que tenía hasta un váter y una, si se le puede llamar así, ducha dentro de la habitación, también vio que había una placa levantada del suelo y pudo apreciar la comida en un estado cuestionable que suponía que sus "parientes" le habían dejado al crío.

Se agacho para tomar uno de los productos dudosamente consumibles que tenía el chico en el lugar cuando vio una silueta bajo la cama. Sonrió por lo gracioso que era ya que viendo el estado del cuarto era presumible que solo se podía esconder allí y se maldijo por no haberlo deducido antes. Se agachó, cosa que nunca admitiría haber hecho, hasta que pudo ver debajo de la cama y se topó con unos ojos verde esmeralda que reflejaban miedo y sobretodo cansancio, junto con un sentimiento que pudo identificar como resignamiento, cosa que nunca antes había visto en los ojos de un niño y que se juró a sí mismo nunca permitiría ver en los ojos de su hijo, ni de ningún otro muchacho bajo su cuidado. Con una maestría increíble dejo esos pensamientos a un lado y extendió su mano al muchacho mientras ponía la sonrisa más tranquilizadora y reconfortante que podía.

El niño miró temeroso la mano del adulto pero una calidez inundó su pecho, algo que no recordaba haber sentido nunca pero que conocía de haberlo leído en sus libros. Aun sabiendo que, como siempre le habían dicho sus profesores, no debía acercarse a los extraños cogió la mano que se le ofrecía y salió de debajo de la cama observando como, nada más levantarse el hombre se limpiaba lo que él creía que era un vestido con una mueca de disgusto y por inercia el niño se miró también dándose cuenta de que solo llevaba puesta una camiseta, de su primo, ya que no tenia nada mas de ropa además de su uniforme del colegio, que también era reutilizado de su primo, y que su tía había decidido tirar a la basura y darle otro usado de su primo el año siguiente.

-Hola- Dijo el niño- ¿Quién eres?

El hombre dejó de limpiarse y miró al niño que parecía asustado mientras preguntaba y se fijó que solo llevaba puesta una camiseta vieja enorme, parecía un elfo doméstico. Puso una mueca e inmediatamente respondió.

-Mi nombre es Lucius Malfoy-dijo el adulto-Y vengo a sacarte de este horrible lugar y llevarte a donde perteneces.

Los ojos del niño brillaron con entusiasmo al saber que iba a irse de allí, no más aguantar a sus tíos, tal vez hasta ese hombre era su padre y sus "tíos" lo habían secuestrado y ahora venía a salvarle porque los había descubierto como pasaba en sus historias.

-¿Es usted mi padre?-Dijo el niño con toda la educación posible

Los ojos del mayor se oscurecieron por un momento pensando en que responderle al niño que tenía enfrente.

-No-dijo Francamente- Yo no soy tu padre pero si lo deseas de ahora en adelante puedo serlo.

El niño se entristeció al saber que no era su padre pero cuando dijo lo último sintió una leve esperanza en su pecho que le hizo asentir fervientemente.

-Ahora deberíamos irnos-Dijo el rubio- ¿Hay algo que quieras llevarte de aquí?

El niño miró a su alrededor y vio lo único que apreciaba de todo lo que tenía en su cuarto, los 2 cuadernos, uno su diario y el otro su cuaderno de historias, los cogió en un apresurado momento y vio cómo el hombre se sorprendía al ver que eso era lo único que apreciaba y le sonrió cálidamente.

-Señor-Dijo el niño-¿A dónde vamos a ir? ¿Cómo?

-Nos vamos a mi casa Harry-Dijo el mayor- Y nos vamos a aparecer por lo que debes agarrar mi mano.

El niño hizo caso sin preguntar pero en su mente las dudas eran grandes ya que no entendía lo que decía de aparecerse hasta que sintió un tirón en el estómago y luego sintió como sus pies tocaban el suelo de nuevo y si no fuese por la mano del rubio habría caído al suelo.

-Señor- Volvió a decir Harry-¿Cómo sabe mi nombre? ¿Cómo hemos llegado hasta aquí?

La curiosidad del niño era implacable y el rubio suspiro y sonrió satisfecho de que el niño no fuese un vago, pero preocupado porque no sabía nada de su propio mundo, ni de la magia.

-Harry-comenzó Lucius-todo el mundo conoce tu nombre en este mundo, y nosotros, tu y yo, y otro montón de gente más somos magos, y para venir aquí he hecho magia, algo que tú también vas a aprender pronto, pero primero, te voy a presentar al resto de mi familia, tengo una esposa y un hijo de tu edad, espero que os llevéis bien, luego vamos a bañarte y vestirte e iremos a varios sitios mas, pero no sin antes comer algo.

Lucius los llevó a través de muchos pasillos mientras Harry se admiraba por todo lo que veía, todo era lujoso y había cosas moviéndose solas y los cuadros se movían también y hablaban. Lucius se detuvo frente a la puerta de lo que parecía ser el salón principal y entró a la vez que dos pares de ojos se posaban en el adulto y luego en el niño junto a él.

-Lucius cariño-dijo una mujer rubia y le dio un beso en los labios al mayor- Bienvenido, ¿Es él el niño? Pobrecito, parece un elfo doméstico- Se agacho hasta quedar a la altura del niño y le dijo- Hola Harry, soy Narcissa Malfoy, espero que nos llevemos bien.

Harry asintió tímido y se escondió ligeramente detrás de la pierna del patriarca Malfoy y vio que el otro niño de la sala hacía lo mismo detrás de la mujer.

-Hola-Dijo tímido el otro chico- Me llamo Draco

-Yo soy Harry-Respondió el ojiverde y sonrió tímidamente.

Lucius y Narcissa se miraron y sonrieron al ver que se llevaban bien. Lucius luego cogió a Harry en brazos y maldijo por lo bajo al ver que pesaba demasiado poco y lo llevo al baño donde le hizo un lavado completo y comprobó que el niño tenía muchas cicatrices y daños en su cuerpo

-Harry-Pregunto mientras el niño se lavaba como podía el pelo- ¿Esas cicatrices te las hizo tu tío?

-Sí-Dijo Harry sin dudarlo mucho- Mi tío decía que cómo era raro me tenía que golpear y así me quitaría la rareza.

El patriarca Malfoy sintió mucha ira al pensar solo en que el hombre se había atrevido a tocar a un niño mago y entonces se fijó bien en el niño y le surgió una duda más, que al decirla no pudo evitar que su voz temblara en caso de que sus sospechas se confirmasen

-Harry- el niño le volvió a mirar fijamente-¿Ese muggle asqueroso, quiero decir, tu tío te hizo algo más, te toco abajo o algo de eso?

-Señor- Dijo Harry respetuoso y a la vez avergonzado- Mi tío decía que era otra forma de castigarme y siempre me tocaba y me hacía daño por detrás. ¿Qué es un muggle?

Lucius entonces estalló ligeramente y Narcissa subió inmediatamente a ver qué había pasado y vio el cuerpo del pequeño y no pudo evitar asustarse por lo maltrecho y delgado que estaba. Luego Lucius la miró a los ojos y luego a Harry.

-Un muggle es una persona no mágica Harry- Dijo Lucius- Y lo que te hizo tu tío está muy mal Harry, a eso se le llama violación, y por eso van a castigar a tu tío.

Narcisa ahogó un grito al oír a su marido decir eso e inmediatamente decidió que ni uno solo de esos muggles volvería a tocar al niño ya que la próxima vez que les viera estarían muertos antes de decir quidditch.

Tras lavar y vestir al chico con unas de las túnicas de Draco disminuidas de tamaño por magia Lucius llevó al chico de nuevo al comedor y allí comieron los 3 Malfoy con el futuro hijo adoptivo de la familia y pudieron ver que los ojos del niño brillaban al ver una comida tan lujosa por lo que el niño comió hasta hartarse. Al acabar Lucius se excusó con su familia y se fue con el niño hasta St. Mungo donde les esperaba ya el medimago privado de los Malfoy. Llamó a la puerta de la consulta del medimago e inmediatamente les abrió la puerta un joven de pelo cobrizo y ojos azules oscuros.

-Bienvenido Señor Malfoy-Dijo el medimago –Supongo que tu acompañante es el pequeño Harry a quien debo examinar,¿no?

-Así es Navi- Dijo Lucius seriamente- Espero la mayor destreza con este muchacho, y cuidado, espero también la mayor discreción en el tema, sabes perfectamente que el chico no debe ser descubierto, por eso te lo traigo a ti especialmente, eres el medimago jefe de la sección privada.

-No hay problema Señor Malfoy- Dijo y luego miró al muchacho- Hola Harry, mi nombre es Navi Shafiq, medimago sangrepura, a partir de hoy me encargaré de tu salud y cuidado.

Harry no dijo nada pero asintió, más por la costumbre que su tío a base de palizas le había inculcado que por haber entendido completamente lo que el adulto había dicho, apenas era capaz de asimilar el hecho de que ya no estaba en la casa de sus tíos muriéndose de hambre, y que estaba al cuidado de Lucius y Narcissa, que es como se habían presentado, y había otro niño llamado Draco. Por otro lado en la mente de Harry todavía permanecían las palabras de Lucius "lo que te hizo tu tío está muy mal Harry, a eso se le llama violación, y por eso van a castigar a tu tío" El chico no sabía exactamente por qué pero la idea de ver a su tío siendo castigado se le hacía apetecible, y una voz al fondo de su mente le decía, como muchas otras veces antes en su vida, que por lo que le habían hecho se merecía eso y más.

El doctor empezó inmediatamente a indicar al chico que se quitase la ropa, excepto los calzoncillos y que se sentase en la camilla que había justo a un lado de la sala de consulta. El hombre ya había visto todo tipo de atrocidades, heridas y cicatrices, pero debió admitir asustarse y quedarse sorprendido por el estado del cuerpo del chico. Tenía cicatrices mal curadas por todo el torso y la espalda, moratones y se le marcaban muy fuertemente los huesos haciéndole parecer un cadáver andante. Cuando le vió ya había pensado que el chico estaba demasiado delgado para su bien, pero tras ver eso entendió a la perfección la insistencia del señor Malfoy en mantener esto en secreto, era demasiado peligroso que se exparciese el mal estado del chico, sobretodo si era cierto que provenía de los familiares muggles del menor, porque eso podría desembocar en un odio feroz sobre la comunidad no-mágica, que ya, gracias al Señor oscuro, era bastante odiada por gran parte de la comunidad británica. Él mismo confesaba odiarlos también, igual que el hecho de ser uno de los partidarios de los ideales del Dark Lord, y, aunque el niño que tenía delante había sido el que lo había derrotado, no sentía nada más que un irrefrenable deseo de protegerlo, creyendo fervientemente que, si el mismo Malfoy, conocido entre los partidarios como la mano derecha del Lord, había traído al muchacho en vez de matarlo, el niño solo era una vez más una víctima del bando de la luz, "por el bien mayor".

Lanzó con rapidez varios hechizos de diagnóstico, para hacer el más completo y exhaustivo posible en el muchacho evitando así la posibilidad de que nada se escapase, y frunciendo el ceño con cada palabra que los pergaminos que recogían los resultados mostraron. El chico había sufrido de todo, roturas de brazos piernas costillas, varias hemorragias internas, violaciones, ante esto el hombre puso cara de asco, también, por ese motivo repetidos desgarros, sufría de inanición haciendo que el niño apenas aparentas años, a pesar de tener 10, la lista de heridas y carencias no hacía más que aumentar, fisuras y huesos mal colocados, brechas, músculos apenas existentes y dañados, ¡era un milagro que el chico siguiera vivo! y casi más aún que apenas tuviese ningún daño mental, excepto un misterioso bloqueo mágico no solo de magia sino también de memoria, entre otras cosas.

Sin detenerse un segundo tumbó al niño y lo durmió, indicando al señor Malfoy lo que iba a hacer, iba a desaparecer los huesos dañados y hacerlos crecer de nuevo con la poción crece huesos, esos sí, con un acelerante especial que solo se usaba en casos de niños como él, o ancianos, para evitar que tuviesen que pasar la noche inconscientes mientras el largo proceso terminaba.

Mientras al chico le crecían los huesos el medimago se sentó en us messa e indicó al otro adulto de sentarse en frente suyo.

-¿Qué piensa hacer, señor Malfoy?- Preguntó Navi- ¿Va a denunciar este inadmisible y bestial maltrato?

-No puedo- Dijo el mayor- Básicamente he secuestrado al niño del infierno que era esa casa, si denuncio esto me acusarán de ser yo el que le causó el daño, y le devolverán a los muggles.

-¿Y entonces qué va a hacer?-le inquirió sin comprender al rubio- ¿Vas a adoptarlo mágicamente? es lo único que se me ocurre que puedas hacer sin levantar después sospechas.

-No- Respondió Lucius- Tengo pensado devolverlo a su verdadera familia, tu también has notado el bloqueo mágico en el chico, ¿no? Tengo sospechas de quiénes son sus padres, pero debo admitir que hasta que no podamos quitarle el bloqueo, el chico seguirá siendo Harry James Potter.

-Podemos quitárselo cuando despierte- Dijo Navi- Pero necesito involucrar a uno de los psicomagos de la sala de curación mental.

-No es un problema mientras se cure- Dijo Lucius tajante- Mi hijo tiene su misma edad y el pensar que podría haberle pasado esto a mí Draco hace que se me hiele la sangre, si los de la luz supiesen esto cambiarían de bando, estoy seguro, pero no debemos permitir que eso pase, ya por el bien del chico, ya te explicaré más detenidamente el porqué en otro momento.

-¿Entonces es cierto que eso se lo han hecho muggles?- Preguntó el medimago- Parece que lo llevan torturando mínimo desde los 3 años

-Pues sí- Dijo Malfoy resignado- Y lo peor es que se supone que esos eran sus tíos, sus familiares, y Dumbledore ha sido el que lo ha colocado allí, se supone que le vigilaba, se supone que este chico era el salvador del mundo mágico, ¡No entiendo como puede haber pasado esto!¡Aunque el chico fuese un Potter de verdad, jamás le desearía a ningún niño mágico lo que le ha pasado a este niño!

- Puedo preguntar-Dijo el moreno- ¿Como has llegado a conocer esta información?

-Fue una carta de un antiguo amigo-Dijo el rubio- un amigo que creí que había muerto hace mucho.

-Pues ese amigo tuyo le ha salvado la vida al niño- Respondió el medimago- Su magia era lo único que le estaba manteniendo con vida, a pesar del bloqueo.

La hora pasó con los dos hombres comentando aun sobre el muchacho, las heridas, cicatrices y necesidades del muchacho. Cuando apenas quedaban 5 minutos para que pasase la hora de sanación Navi salió de la consulta a buscar al psicomago, para nada más el niño despertase retirar el bloqueo mágico y de memoria, y a ser posible, desvelar la identidad verdadera del chico, para poderlo llevar con su verdadera familia. El medimago entró en la la especial y llamó a uno de sus mejores psicomagos.

-¡Danny!-Exclamó al verle sentado en su despacho- Te necesito para un paciente privado

-Suena grave- Dijo el psicomago- Dime de camino lo que es

. Danny era un hombre joven de pelo negro carbón y piel ligeramente bronceada, ojos marrones chocolate y un poco de barba que se dejaba crecer porque "era la moda", el hombre vestía con unos pantalones negros y una camisa blanca, encima llevaba una bata, muy al estilo muggle, pero así era el uniforme de la sección mental, ya que no solía requerir túnicas hombre se levantó y cogió su varita de la mesa y nada más y siguió al de pelo cobrizo, mientras andaban rápidamente Navi le comentó:

-Mi cliente es el Señor Malfoy- Dijo girando en las pertinentes esquinas- Ha traído a un niño muy importante que ha sido maltratado de todas las formas posibles por muggles al menos por 7 años, mientras hacía el diagnóstico he descubierto que tiene un bloqueo mágico, de memoria, y al parecer el mágico oculta su verdadera identidad.

-Pues si que es un caso grande- Dijo el otro hombre- Entiendo que todo esto debe permanecer en el más absoluto secreto y que desde que vea al muchacho probablemente seré su psicomago hasta que alguna de nuestras vidas se acabe.

-Pues supongo que sí- Dijo Navi sonriendo y entrando en su consulta, el Señor Malfoy estaba sentado frente al niño con una cara imposible de descifrar, con una perfecta máscara sangrepura inexpresiva, al verlos entrar el hombre se levantó y se acercó al psicomago

-Muy buenas- Dijo Lucius- Mi nombre es Lucius Malfoy, Lord de la Noble y Ancestral casa de los Malfoy

-Encantado-Dijo Danny- Mi nombre es Danny Rowle, Lord de la Noble y Ancestral familia rowle, nada que ver con Thorfinn Rowle, quien es da la rama secundaria de la familia. ¿El es el chico?¿Puedo saber su nombre?

-Su nombre actual-Comenzó el lord rubio-Es Harry James Potter, también conocido como El-Niño-Que-Vivió.

Los ojos de Danny se abrieron de par en par al oír el nombre, sobre todo teniendo en cuenta lo que le había dicho el medimago antes sobre su estado. Antes de que pudiese incurrir nada más el chico se despertó sobresaltado, miró a su alrededor e inmediatamente se escondió bajo la camilla asustado. Danny escuchó a Malfoy chasquear la lengua de la molestia ante esto, pero inmediatamente cambió su cara por una mucho más dulce y relajada y se inclinó ofreciéndole su mano al muchacho que la tomó sin miedo y se volvió a sentar en la camilla.

-¿No estoy soñando?- Preguntó el pequeño-¿Lo de antes no fue un sueño? ¿tengo que volver a casa de mi tio?

Las últimas palabras las dijo con una mirada de terror en sus ojos, y temblando, casi con lágrimas asomandose, mostrando el gran pavor que le producía solo pensar en volver a ese lugar.

-No ha sido un sueño-Le dijo Lucius- Ahora mismo estamos curandote, no tendrás que volver nunca más allí, este hombre de pelo negro se llama Danny y va a quitar una cosa que te impide usar parte de tu magia, ¿vale? no te muevas y mirale a los ojos.

Danny no se preguntó cómo es que el otro hombre sabía el proceso para el desbloqueo, simplemente puso su mejor sonrisa para niños, reconfortando al meno, y mientras Harry se distraía analizando el sutil tono ámbar claro de los ojos chocolate del mayor, se introdujo en su mente, sin fijarse en sus memorias aunque sin poder evitarlo asustándose al ver algunas de pasó, hasta que llegó a lo que él podría describir como una puerta enorme de madera con un gran candado de metal que restringía una parte de la magia y memorias del menor, por suerte lo podría deshacer todo a la primera facilmente. Dentro de la mente del menor proyectó su propia varita y con un suave movimiento comenzó a trazar ciertas runas e con ella que se grababan una a una en la puerta haciendo que el candado rechinase al verse poco a poco desintegrado por la fuerza que lo intentaba invadir. Tras unos momentos, con un suave sonido de metal desintegrándose, el candado desapareció, y con ello la puerta, haciendo que de golpe todo lo que estaba contenido volviese a su lugar, memorias, identidades, herencias, y sobretodo magia pura, que obviamente debido a la edad del menor, apenas estaba desarrollada y mucho menos era la cantidad completa que el chico tendría, pero aun así era una cantidad descomunal, que durante toda su carrera sólo había visto en Albus Dumbledore, por su aura, y en el mismísimo Lord durante el tiempo que le apoyó, aunque claramente, esto era una ola pura liberada, mientra que la de los dos Lores, de la luz y oscuridad, normalmente era solo la efímera cantidad que se les escapaba naturalmente. Danny entonces sintió que al haber liberado esa magia estaba presenciando el nacimiento de un nuevo Lord, y aún no sabía si de luz u oscuridad, aunque visto que había sufrido en la luz, la última era la que más papeletas tenía. Salió entonces de la mente del menor y observó cómo las facciones del chico cambiaban ligeramente, como sin que ninguno de los adultos lo hubiera visto, hubiera habido siempre en el cuerpo del menor un ligero Glamour que cambiaba ligeramente sus facciones. El niño, mientras tanto había agarrado sus pequeñas piernas y las apretaba con fuerza contra su pecho, con los ojos y boca cerrados como si contuviese cualquier tipo de sonido o gesto salir.

-¿te duele algo?- preguntó Navi inmediatamente acercándose al chico- Acabamos de liberar un bloqueo, ¿como te sientes?

-No duele- Dijo tras unos segundos- Es solo como si mi cuerpo ardiera, no duele ni quema, es solo la sensación, y muchos recuerdos hay en mi mente y es raro…

Lucius entonces le puso una mano en el hombro haciendo que el menor le mirase, dándole una mirada que le hacía entender que no pasaba nada, que estaba bien. El mayor entonces dijo

-Ahora que ya hemos liberado el bloqueo, deberíamos poder comprobar la parentela del chico, ¿no?- Y vio cómo el niño le miraba con sus ojos verdes esperanzados- Así podré asegurarme de que debo hacer.

Los dos medimagos asintieron y en sintonía recitaron una suave letanía en lo que parecía ser latín, mientras Lucius le indicaba al chico de beber una pequeña poción, a los pocos segundos después de que la tragarse, un pergamino apareció flotando frente al menor, Lucius lo tomó inmediatamente y leyó, con una suave sonrisa en su rostro, el verdadero nombre y parentela del chico.

Nombre: Corvus Regulus Black

Padre: Regulus Arcturus Black - Actual Lord Black

Madre: Bellatrix Lestrange(nee Black)

Si bien ya lo sospechaba y era cierto que hasta cierto punto podía ser perturbador el hecho de que Regulus y Bella eran primos, se sorprendió al ver que Regulus era el Lord Black, ya que no creyó que hubiera desheredado a Sirius oficialmente. Cuando los dos médicos vieron los nombres en parte se asustaron, Bellatrix era fácilmente reconocida como una mortífaga y Regulus había desaparecido hacía muchos años.

-¿Cómo es posible?- Preguntó Danny- Se supone que tanto incesto en la línea Black no podría hacer nacer a un niño tan poderoso como este, he sentido su poder desde dentro…

-A pesar de lo que se dice- Dijo Lucius para aclararlo- Aunque es verdad que las familias más antiguas como la Black o la Malfoy acabamos casándonos a veces entre primos, si que llega sangre nueva a la familia, si miráis bien el pergamino hay un pequeño dibujo junto al nombre de Corvus, un cambiaformas, el niño es un metamorfomago, una magia que solo se obtiene cuando una familia se mezcla con ciertas...criaturas oscuras, y con eso añaden la sangre nueva, manteniendo la pura igualmente.

Los dos hombre se quedaron mirándose el uno al otro, a pesar de ser ambos sangrepura de familias de los Sagrados 28 siempre habían considerado eso rumores solo, pero parecía que era cierto, eso explicaba la apariencia de los Malfoy, influencia Veela, o de los Prince, de vampiros, entre otras.

Lucius, mientras los dos hombre pensaban se acercó al niño y le dijo

-A partir de ahora- Dijo sonriéndole- Dejaras de ser Harry Potter y vivir con esos muggles, tu nombre es Corvus Regulus Black, y tus dos padres están vivos, aunque por ahora solo te puedo llevar a ver a tu padre.

Los ojos de Harry se llenaron de alegría, ¿no tenía que volver con sus tíos? ¿además tenía padres vivos? En su propia mente ya no era Harry Potter sino Corvus .

-Antes de que os vayáis- Interrumpió Navi a Lucius quien ya le indicaba al menor que se preparase- Aquí está la lista de las pociones que debe tomar para terminar de sanar sus músculos y poder nutrirse, entre otras cosas, ademas, necesito que venga dentro de un mes para revisarle, y también para comprobar que no haya secuelas del bloqueo.

Lucius asintió y tomó el pergamino y con su otra mano tomo la de Corvus, y los dos, con una gran sonrisa en la cara, volvieron a la mansión Malfoy, dejando a dos médicos atrás planteando si esta vez inmiscuirse del todo con el nuevo Lord que surgía.

Narcissa abrió inmediatamente la puerta de la casa nada más el elfo le avisó de que su marido y el niño habían vuelto a la casa.

-¿Ha ido bien?-Preguntó nada más verles, y al percibir la gran sonrisa de ambos dijo- Parece que tenías razón,¿no cariño?

-Así es- dijo el rubio dando un rápido beso a su esposa- Te presento a Corvus Regulus Black, hijo de Bella y Regulus, y un metamorfomago, aunque sólo desde hace un poco.

Narcissa casi se atragantó con su propia saliva al escucharlo, el niño era su sobrino e hijo de su primo, no era capaz de entenderlo, pero conociendo a los dos, sabía que era más que posible, solo se preguntaba qué iba a penar el marido de Bella al respecto si se enteraba, y también ella, y que harían con el, Regulus vendría a por él, lo dejaría aquí, había demasiadas cosas por aclarar, pero antes de eso tocaba celebrar que el chico estaba ya mejor, hasta Draco había bajado y, aunque abrazado a la pierna de su madre, sonreía al otro chico sintiéndose poco a poco más cercano a él


ACLARACIONES:

Navi de la cosnstelacion cassiopea, en la designacion Epsilon Cassiopeiae

Familia Shafiq:Shafiq era el apellido de una familia de magos de sangre pura, existente al menos en la década de 1930.

Los Shafiqs fueron incluidos en el Directorio de Sangre Pura (publicado anónimamente en Gran Bretaña, aunque se cree extensamente que pudo haber sido escrito por Cantankerus Nott), lo que les aparece como una de las veintiocho familias verdaderamente de sangre pura (los llamados "Sagrados Veintiocho").

Danny de Danniel...me gusta el nombre y se me antojó

La familia Rowle era una familia mágica de sangre pura. El autor del Directorio de Sangre Pura la considera como una de los Sagrado Veintiocho.

Miembros de la familia

Damocles Rowle - Ministro de Magia desde 1718 hasta 1726.

Thorfinn Rowle - Uno de los mortífagos de Lord Voldemort activo durante la Segunda Guerra Mágica.


Yay! Acabe el capitulo con 5021(sin notas de autor obviamente) me ha cotado bastante y tal vez los capítulos de esta historia los haga de 4000 si veo que me toman demasiado tiempo...

Bueno,¿Que os ha parecido? Dejad un Review plis y hacedme feliz sabiendo si os gusta o no...vuestras ideas... posibles cosas... que esta historia acaba de empezar y todavía puedo jugar mucho con ella

Ya dije arriba las parejas principales que barajo, pero acepto sugerencias, no del canon plis,me ayudais a decidirme que soy una indecisa de mierda

Por lo demás... Ah si, los apellidos de Navi y Danny son de verdad sangre pura de Harry Potter, sacados de la Wiki para evitar confusiones, explicado arriba.

Creo que ya no se me olvida nada que decir, dejad vuestro reviews y hacedme feliz y eso y tendréis capítulo, ya sea de esto o Perverse pronto.

Besos y Abrazos

Rika Regel

PD:Se que soy pesada, pero.. REVIEWS PLIS