"BLACK BLOOD"

ESTO ES MI NUEVO FIC SUPER ASDFASDFG MUY DIFERENTE A LOS OTROS EL CAP DE SEXY Y REBELDE ESTÁ CASI LISTO SOLO ME FALTAN UNOS DETALLITOS

"No decido lo que soy decido lo que seré"

Shugo chara no me pertenece

Una mujer corría con su hija en brazos. Los llantos de la niña no ayudaban a su madre en lo absoluto.

-Maldición Amu. No llores-decía la mujer de tan solo 19 años a su hija.

-Pero mamá duele-decía mientras acariciaba su cabeza y en sus manos quedaban impregnadas gotas negras.

-No grites por favor-la sangre de su madre y padre era de un intenso carmín en cambio el de la chica era más oscuro que la noche. Pero, ¿Cuál es el problema?

FLASHBACK

-Como todos los años se realizará en Rose Delivan el "Royale Saint" que como saben es la ceremonia encargada de eliminar a todo niño que consigo lleve la sangre de un vampiro. Exterminaremos y sacrificaremos al demonio que esté a nuestro lado en el nombre de nuestro salvador.

Irá pasando cada madre con su niño y con esta cuchilla sagrada-el sacerdote mostró un cuchillo bañado en oro- se hará un pequeño corte en uno de los dedos del pequeño. Si un niño tiene sangre negra será golpeado con este mazo en espinas en la cabeza hasta que la última gota de su sangre sea derramada en el suelo. El cuerpo será descuartizado y llevado al fuego. Al niño hijo de Dios se le bautizará.

Midori miraba con gran ilusión a la niña con ojos ámbar, pelo rosa y piel muy blanca que sostenía sus brazos. Aunque la niña tenía tan solo 5 años parecía de 10 años, llevaba puesto un delicado vestido blanco con zapatos negros y un collar en forma de candado colgando de su cuello.

-La siguiente por favor-Midori entregó a su niña y esperó con grandes ansias. Se acercó para observar. Se estremeció al ver como hacían un pequeño corte en el dedo de su hija al salir le compraría algún caramelo para que dejase de llorar.

Al hacer la incisión la sangre demoró en salir unos segundos. Después de esperar se pudo observar una pequeña gota negra que salía de la herida y caía al agua. Convirtiendo el resto de esta con el mismo color oscuro.

-ESTÁ MALDITA-gritó un hombre horrorizado al ver la escena, hace más de 500 años no sucedía algo parecido. Midori estaba en shock. El sacerdote tiró a la niña en el suelo y majó su delicado cuerpo con fuerza. La niña soltó un alarido y la madre seguía inmóvil. El sacerdote levantó el mazo y con fuerza atinó el primer golpe en su cráneo salpicando a varia gente con la sangre. Alegrándose del milagro de poder acabar con una de las hijas del diablo. La niña pegó un grito que despertó a su madre.

Atravesando toda barrera humana posible agarró a su hija en brazos y escapó con ella. Escasos 15 segundos la gente empezó a salir fúrica del templo. A atrapar a la pecadora y a su hija. Midori salió en dirección al bosque donde sólo un milagro la salvaría.

FIN DEL FLASHBACK

Midori se vio acorralada. Antes de que la atraparan escondió a su hija en una madriguera.

-NOOOOOOOOOOOOOO-agarraron a la chica del cabello y la estrellaron contra el piso. La chica miraba a su hija con cariño en el suelo, mientras esta la miraba con curiosidad dentro de la cueva. Casi imperceptiblemente la le chica siseaba a su hija para que no hiciera ruido. Mientras amarraban sus muñecas con fuerza.

La niña tomándoselo como un juego rió quedamente tapando su boca, haciéndose para atrás y poniendo un dedo en sus labios sonriendo. Su boca mostraba pequeños colmillos blancos.

La madre sonrió, todo esto valía la pena. Tomaron un hacha y cortaron la cabeza de Midori quedando al lado de la madriguera. La chica se sorprendió varias gotas cayeron en su rostro. Una mano curiosa surcó su mejilla. Limpiando una gota del líquido rojo la pasó sobre sus labios. Sus ojos se oscurecieron y una risa de placer salió de su boca. Lo último que vio con nitidez fue lágrimas en el rostro de su madre inerte, negó y enfureció. Con odio salió de la cueva y se irguió sin que se dieran cuenta. Un hombre de cabello azul tenía la cabeza de su madre en las manos en la otra traía el hacha gritando con euforia. Se abalanzó sobre él y con sus manos arrancó su cabeza.

Arrancando partes de su cuerpo rápidamente. Mientras lo hacía una sonrisa de odio y placer apareció en su rostro. No perdonaría que su madre estuviese llorando por culpa de aquel hombre.

Así acabó con muchos hombres, pocos pudieron salvarse debido a la rapidez con que la niña de colmillos afilados y vestido impregnado de gotas rojas y negras, arrancaba sus vidas.

Un peliazul de unos 7 años miraba la escena horrorizado. Miraba con odio y rencor a la pequeña niña que tomaba la sangre de varios cuerpos en el suelo.

Una mujer haló al niño y empezó a correr.

-Pero mamá, ¡papá!-decía el niño con lágrima en los ojos

-Él ya no está, ¡corre!-el chico corrió con su madre. En cuestión de minutos estaban en su casa.

La madre se arrodilló en el piso y empezó a gritar con dolor e impotencia. El niño la veía con tristeza.

-¡TU!-agarró al chico de los hombros y lo zarandeó-Tú vas a hacer justicia-le miraba con esperanza-vas a honrar a tú padre y me traerás la cabeza de esa maldita contigo y la echaremos al fuego.

-Júramelo Ikuto-el chico asintió tímidamente, mientras la madre caía de rodillas en el suelo y besaba los pies del niño-Eres mi héroe Ikuto-el chico acariciaba el pelo de su madre y le cantaba.

-Sí mamá la traeré para ti- el chico volvía a grabar la imagen de la chica en su cabeza. Ella sería su mayor enemiga en todo el mundo-Yo la mataré.

Espero que les guste…

Kiyomi fuera…