(Aclaro: No tiene nada que ver con "Pesadilla en La Calle Infierno"; las similitudes son pura coincidencia y de hecho, creo que lo único que es parecido es el título. En fin. Los personajes no son de mi propiedad -lo que me amarga mucho- sino de la de Ryan, Ian & Brad) -(Finchel-Klaine-Brittana-Samcedes-Tike-Pizes-Wemm a)

Capítulo 1.- *El Inicio: Sam descubre el juego*

Era un día normal, como cualquier otro. Se acercaba el otoño, y los restos del verano se iban consumiendo lentamente con el pasar de los minutos. Los chicos habían comenzado a emocionarse tras el anuncio del baile de otoño, donde incluso, algunas parejas habían comenzado a hacer campaña para postularse para Reyes del Baile. La rivalidad entre ellos había disminuido tras perder aquella competencia nacional contra Vocal Adrenaline, pero aún había vestigios de dudas y charlas sin hablar.

-¿Ya consideraste mi idea sobre postularnos como Rey y Reina del Baile?- le preguntó Brittany a su novia, quien sonriente caminaba por el pasillo de la mano de la rubia. La miró.

-No tenía idea de que te importaban ésas cosas, Britt-

-No me importan, pero si soy presidenta del consejo y soy reina... Eso significa que la escuela será un reino y podríamos usar vestidos como en la película de "La Otra Bolena" y tener sangre azul y en vez de autobuses amarillos tendríamos corceles blancos e incluso traería unicornios- comentó, emocionada. Santana López sonrió. Le encantaban las ideas de Brittany. Siempre que la rubia tenía algo que decir, procuraba dejar de hacer cualquier cosa para escucharla y no lo hacía simplemente por amor: Secretamente envidiaba su manera de ver la vida, aunque al resto del mundo le parecieran tonterías. Santana le apretó la mano.

-Supongo que tienes razón, pero, ¿No crees que sería muy difícil ganar? Digo... Somos dos chicas- puntualizó. Brittany la miró, entrecerrando los ojos.

-¿Te refieres a que Sam y Mercedes son más populares?-

-No. Sino que... No seríamos "El Rey y la Reina"... Seríamos "Las Dos Reinas"-

-Sí, eso es sexy- se quedó callada al intentar entender el rostro de Santana- ¿Te da miedo que perdamos porque no hay un hombre?-

Santana la soltó de la mano en cuanto entraron al salón del coro. Se detuvieron un momento en el centro y la rubia tomó asiento en el banco del piano.

-No es eso... -se cruzó de brazos- Ya sabes lo que le pasó a Porcelana el otro año... No quisiera que te lastimaran-

-Pero si eso sucede, tú puedes contra todos ellos-

-Sí, pero recuerda que el voto es anónimo y no sabría a quién partirle la cara-

Brittany puso cara de decepción, pero habló con cautela.

-Entonces... ¿estás diciendo que...?-

-No es un "No" definitivo... Déjame pensarlo un par de días más, ¿si? Veré qué puedo hacer para evitar... accidentes con el director Figgins y el señor Shue. ¿De acuerdo?- Se acercó lentamente hasta ella, pero se quedó a pocos centímetros de su rostro.

-De acuerdo- asintió la rubia y después se levantó y le plantó un suave beso en los labios. Poco después entraron Sam y Mercedes tomados de la mano, tras de ellos el resto de sus compañeros.

-¿Ya se decidieron a quién le van a dar sus votos?- preguntó Quinn, con la mirada en Mercedes.

-No- contestó muy lentamente Artie.

-Este año me gustaría que alguien del Coro ganara, ya saben- opinó Mike.

-El otro año ganó Kurt- asintió Puck.

-Sí, pero fue por broma. Ni siquiera yo era nominado... Dios mío, qué humillante. ¿Se dan cuenta que tuve que quemar ése traje?... Y con todo el trabajo que me costó terminarlo...- se lamentó Kurt.

-Estoy de acuerdo con Mike. Ya que siempre es una oportunidad para humillarnos, este año el baile debería ser especial- accedió Rachel.

-Y... ¿Eso será sólo si te damos un solo?- quiso saber Santana, mirando ceñuda a la castaña.

-No...-se apresuró a responder- También quiero que gane una pareja del Club, ya que Finn se negó a cooperar para nuestra campaña-

-Entonces con eso dices todo. Votarás por Sam y Mercedes- finalizó Quinn, con los ojos llenos de decepción.

-Y-yo no dije eso- tartamudeó.

-Bueno, "Samcedes" es la única pareja que está haciendo campaña; y por lo que dijo Jacob el otro día, las encuestas los ponen como la "pareja selecta"- habló Kurt, mirando a Rachel un momento, y luego miró a Quinn- Así que, no creo que el voto de Rachel vaya a cambiar algo, Quinn-

La rubia entrecerró los ojos.

-¿Sólo porque no tengo con quien compartir la corona?- se quejó ella.

-Sería más fácil que atrajeras a más votantes; Yo los atraigo porque estuve en las Cheerios, y Sam porque... bueno, míralo. Es súper sexy- habló Mercedes terminando con una sonrisa en el rostro. Sam sonrió y la atrajo más hacia él.

-Llévame a tu cabaña del amor, nena- dijo con voz rara. La mayoría alzó las cejas, sin entender. Después de esperar el minúsculo beso que se dieron ése par, aclaró:

-Hice a Edward, de Crepúsculo-

-Estoy muy segura que nunca ha dicho algo semejante.- mencionó Lauren.

Todos regresaron a sus conversaciones naturales, esperando a que el señor Shuester cruzara el umbral del salón del coro. Cuando lo hizo, se alegraron de inmediato.

-Señor Shuester, tengo la idea perfecta para mi presentación del baile de otoño... Aunque todavía no sé si hacer un dueto o un solo- se acercó Rachel hasta él.

-Sí, señor Shue, este año quiero hacer algo... "movido"- interrumpió Mercedes.

-Sí, sí, chicos, ya los escuché. Estuve hablando con el director Figgins, y resulta que sólo nos contrataron por dos horas y media, así que creo que todos tendrán oportunidad de actuar algo-

-¡Yo quiero hacer Give Your Heart A Break! - Chilló Rachel.

-¡Yo quiero hacer Falling Slowly!- gritó Mercedes.

-Yo sólo quiero bailar- murmuró Mike, sonriéndole a Tina.

-¡Yo quiero hacer Dirty!- habló Santana.

A pesar de escuchar gritos, Sam se concentró en otra cosa. Debajo de su asiento había una caja... no, no era una caja. Era una tabla algo gruesa, con símbolos negros y una figura de metal unida a la tabla a través de un cordón. Le dio varias vueltas, sin entender qué era o para qué servía. Su gesto cambió: de estar tranquilo y alegre, se transformó a frustrado y enojado.

-¿Sam?- lo llamó Mercedes, en voz baja y tocándole el hombro. El rubio levantó la mirada y se encontró al resto de sus compañeros mirándolo de forma extraña.

-¿Qué traes en las manos, Sam?- le preguntó el señor Shue. Sam se lo extendió.

-No lo sé... Lo encontré debajo de mi asiento- confesó. Artie, Rachel, Kurt, Sugar y Quinn fruncieron el rostro: Tenían una idea de lo que se trataba. Shuester lo examinó varias veces y miró al de labios grandes.

-¿Sabes qué es esto, Sam?-

El rubio se encogió de hombros.

-Sí, es mi "Jumangi".- contestó Pierce.

-No, es una "oujia", Brittany- explicó Artie. El profesor miró a sus alumnos, algo preocupado.

-¿Qué haces con esto?- le preguntó a la novia de Santana.

-Juego cuando me aburro. La última vez que jugué fue cuando usted faltó y mandó a su novia para cuidarnos- contó, tranquila, pero de repente comenzó a sentir la ansiedad que les provocaba a sus compañeros.

-¿Y sabes para qué sirve?- quiso saber Quinn.

-Sí, es como un "jumangi", las piezas se mueven solas y yo...-

-No, Brittany, eso es del diablo. Literalmente.- dijo Kurt. Rachel juntó las palmas de las manos.

-Ay, Brittany, ahora nos has traído la mala suerte. ¡Nadie juega con eso! Al menos no deberían... ¿Sabes qué puede pasar? ¡Estás hablando con el demonio y las fuerzas oscuras a través de eso!- se quejó Rachel.

-No es cierto. Ellos son buenos-

-Más que por cuestiones de religión, Brittany, este juego se considera peligroso porque pone en riesgo la salud mental- dijo Shue.

-Sí, pues la suya ya está bastante dañada- murmuró Rachel.

-¡Ya basta, Berry! ¡Deja en paz a Brittany!- gritó Santana.-Y señor Shue, es una escuela laica, o se supone que lo es. Brittany puede jugar con lo que sea-

-Y al pareces con quienes sean, también- susurró Quinn, haciéndole solidaridad a Rachel.

-No te metas "Doña nadie va a votar por mí". Eso es lo que tú crees, pues guárdatelo, ¿O te recuerdo lo que pasó cuando comenzamos a involucrarnos con la religión?-

Quinn se quedó callada, pero no la miró. Shue miró al resto de sus chicos, y la mayoría se veía preocupada y algunos (Artie, Blaine, Sugar y Rachel) hasta asustados.

-Lo siento, Santana, pero éste "juego" en particular es motivo para que haya sanción. Lo siento, Brittany, pero tendrás que ir con el director con una advertencia y después quisiera que te dieras una vuelta con Emma, ¿Estamos?-

La rubia ni siquiera levantó la mirada para responder, sólo se limitó a asentir. Cuando se dio el timbre, todos se levantaron para salir. Brittany todavía se veía triste por el castigo.

-No pasará nada, Britt... Es que son todos unos amargados- la abrazó Santana.

-Es que... tal vez tienen razón... Tal vez si estoy... loca o algo así- gimió, al borde de las lágrimas.

-No, no estás loca, Britt, es que... piensas diferente, pero no por eso estás mal. Eres muy original, y hay mucha gente que no lo entiende-

-Sí...-se encaminó hacia la dirección- Pero no puedo creer que mis propios amigos no entiendan-

¿Les gustó? Manden reviews. ¿Lo odiaron? Manden reviews. Bueno, a lo que vengo...

Esta historia anteriormente la había publicado en una página de fans y me pareció que ahora tenía que subirla por acá :B Como ya la terminé, voy a actualizar miércoles y sábados por la noche, para darle más efecto de terror y eso, ¡ja!

Soy casi neófita en eso de escribir sobre terror, sólo que esta idea la tuve hace mucho y tenía que expulsarla... eso sonó mal D:

En fin. Algunas personas que la leyeron me dijeron que sí da miedo, pero yo creo que lo hicieron por ser amables conmigo. De plano, si no les da miedo, igual no se incomoden y díganmelo. Las críticas constructivas se agradecen. Gracias.

Twitter: PlsImMarian... (Si ya leyeron mi fanfic anterior "Gives You Hell" y notan que cambié mi dirección de Twitter es porque así es. Sólo cambié eso, sigo siendo yo)

Facebook: Charlotte Marian MaBe

: SomeWhereOnlyWeSing

¡Espero sus comentarios! :B