Hola, Bien este es mi nuevo fanfic, espero que les agrade.
Un Saludo y Suerte
Axl
Nota de Axl: Pokemon no me pertenece y ese fanfic es hecho con fines de entretenimiento nada más.
Prologo
Se encontraba en la nada, todo era totalmente oscuro, no veía, ni oía nada en aquel lugar, podía hablar pero no habría nadie que le escuchara, podría caminar pero no tenia un rumbo fijo, no podía recordar los eventos que tuvieron lugar hace pocas horas, lo único de lo que podía estar seguro es del fuerte dolor que sentía en el abdomen, de repente una fuerte luz invadió aquella oscuridad y abrió sus ojos despertando tras varias horas de inconciencia.
Lo primero que vio era el oscuro cielo nocturno, curiosamente el firmamento estaba lleno de estrellas a diferencia de otras ocasiones que lo había mirado, había tantas estrellas que no creía que tantas pudieran estar juntas, de repente por su mente reacciono y volteo a mirar en todas direcciones observando un paisaje desolador.
Árboles semi arrancados de su raíz, una ciudad en ruinas y lo mas importante de todo no había ninguna persona o pokemon a la vista, ¿que había pasado?, ¿donde estaban todos?, ¿porque no podía recordar nada de lo que había pasado?
Desesperado grito esperando que alguien le respondiera, algo que nunca ocurrió, ante la silenciosa respuesta volteo a mirar en todas las direcciones encontrando el mismo desolador paisaje, ¿Que o Quien habría provocado semejante catástrofe?, se sentó en el suelo tratando de calmarse un poco, trato de pensar que pudo haber ocurrido...pero su mente le jugaba una mala pasada dándole una imagen totalmente blanca como respuesta y tras esto un pequeño dolor de cabeza el cual sentía como un zumbido, de repente volvió a sentir aquel dolor en su abdomen dirigió su mirada allí y descubrió algunos rasguños y heridas que parecían ser leves, ¿donde y como obtuvo aquellas heridas?, cada vez estaba mas confundido.
Trato de calmarse, respiro profundamente y no fue hasta entonces que noto que había alguien mas aparte de el en aquel desolado escenario.
Se acerco un poco hacia aquella persona, parecía que estaba inconsciente justo como el lo estuvo hace poco tiempo, no podía descubrir de quien se trataba ya que la poca luz no ayudaba, por lo poco que veía se trataba de una mujer, lo mejor seria trata de despertarla.
Su mente estaba nublada, estaba en un espacio totalmente vació, todo era blanco, al parecer no tenia ninguna compañía en aquel lugar, quería gritar pero tenia miedo de que nadie le respondiese, quería correr pero no veía ningún punto al cual llegar, sentía una extraña sensación de opresión en el pecho parecida a un dolor, no podía recordar que había ocurrido hace pocas horas, no le gustaba aquel vació e incertidumbre de repente una brecha de oscuridad se abría paso y despertó.
Al despertar lo veía todo borroso, veía una silueta pero no lograba distinguirla bien entre tanta oscuridad, su vista se fue aclarando poco a poco y vio a aquel chico pelinegro mirándola preocupadamente, apartando la vista de el y sentándose pudo observar aquel desolador paisaje con la sensación de soledad que ofrecía este no se veía persona o pokemon, mejor dicho no se veía ser viviente aparte de ellos dos, volvió a sentir aquella opresión en su pecho y al dirigir la mirada hacia el pudo ver una mancha roja al parecer de sangre a través de su ropa.
"¿Que ha pasado?" Fue lo único que pudo preguntarle.
"No lo se" La respuesta que obtuvo no fue la que ella deseaba.
"¿Donde están todos?" Intento con otra pregunta.
"No lo se" volvió a obtener la misma respuesta.
"!No tienes otra respuesta distinta!" Le grito frustrada.
"No recuerdo nada" Al parecer al igual que ella.
Justo en ese instante ambos fueron concientes de las heridas en sus cuerpos que no recordaban como habían obtenido, allí en medio de la nada y con el planeta al parecer a disposición de solo ellos dos, el pelinegro y la rubia, el entrenador y la campeona, llenos de ansiedad y temor, comenzaban su historia.
