Disclaimer: Ni Dragon Ball ni sus personajes me pertenecen.
Adagio de primavera
– ¿Quieres un bocadillo más, Videl?
– No gracias, si como algo más voy a reventar.
Sonriente, sintiendo como ella se reclinaba junto a él, Gohan se armó de valor para demostrarle su afecto en público abrazándola por su cintura. En un principio tal acción lo avergonzó al encontrarse rodeado por su familia y Mr. Satán, los cuales, platicando entre sí, no disimulaban sus recurrentes miradas hacia ellos que, inevitablemente, sembraron un colorido sonrojo en ambos.
La tarde comenzaba a madurar llenando de tonos rojos y amarillos el horizonte, la noche no se demoraría en llegar cubriendo las montañas Paoz con un infinito manto de estrellas. Aún así, ninguno de los comensales pensaba en irse de aquella verde y cómoda colina. No era para menos, desde muy temprano se habían reunido en aquel sitio para celebrar que ya eran parientes.
Tanto Gohan como Videl tuvieron dificultades para dar la noticia, los dos se vieron arrinconados por la vergüenza no sabiendo cómo tocar el tema. Pero Gohan, en especial, fue quien padeció los mayores problemas al no poder controlar la efervescencia de su hermano menor; quien, adelantándose a los hechos, no tuvo la más mínima indiscreción al gritar por toda la casa lo que Gohan decía en susurros.
Su padre, teniéndole más comprensión, lo felicitó con una sonrisa sin dejar de comer. Milk, planeando desde ya su futura boda, no perdió la costumbre de ir demasiado lejos; coloreando, todavía más, las enrojecidas facciones de su primogénito. Videl, por su parte, gozó de mejor suerte al sólo tener que lidiar con su papá, quien, de inmediato, se alegró por los poderosos nietos que llevarían su apellido.
– Es un lugar hermoso, muchísimas gracias por habérmelo mostrado.
– No hay de qué, Mr. Satán–Milk, respondiéndole, recolectaba las torres de platos sucios que tendría que lavar al volver a casa–nos complace mucho que haya podido acompañarnos.
Gohan, contento al ver como su madre socializaba con su suegro, se sorprendió al terminar de entender que a partir de hoy lo llamaría de esa manera. Y siguiendo con esa lógica, el saiyajin apretó un poco más el cuerpo de su novia invitándola a anidarse entre sus brazos. Aceptando su invitación, deseosa de también obsequiarle su cariño, Videl se sentó en sus piernas dándole un beso en la barbilla.
Así pues, con el pasar de los días, gracias a ella Gohan superaría con creces cada temor y duda que lo encadenaba. Ya sea en la soledad de su habitación o en la vacía terraza de la escuela, Videl lo llenaría de felicidad al besarlo en los labios, aprendiendo, mutuamente, cómo darse amor al dejar atrás la inexperiencia. Ella, sacando a relucir su yo más pasional, fue tanto su maestra como su amante.
No obstante, sin importar cuántos años estuvieran por venir para los dos, Gohan nunca olvidaría que su primer gran momento lo vivieron sobre un humilde mantel cuadriculado de un día de campo.
Fin
Hola, antes que nada quiero agradecerle a la página de Facebook Fanfics de Gohan y Videl en español por haber organizado este desafío. Espero que esta pequeña historia haya sido de su agrado, estaré muy agradecido por cualquier opinión que me regalen. Muchas gracias por leer y hasta la próxima.
