ola ola:P

bueno esta esta historia la realice con ayuda de mi sister! Emi-chan!

se la dedico a ella 100 ya que ella penso en la trama xD

tambien se la dedico a coni-chan!... que tambien espero que le guste

esta historia es un YONITA y un NARUSASU...

porque para mi, naruto seme 4ever!! xD

CAPITULO 1: "Conociéndote"

Fuego y miedo era lo que se podía sentir en el aire, gente que corría de un lado a otro buscado un lugar seguro donde refugiarse, todo estaba siendo arrasado por las llamas y los sollozos de los desafortunados aldeanos que veían como sus casas caían destrozadas por el fuego. Ninjas por todos lados intentaba salvar a la mayor cantidad de gente que pudiese, mientras que el líder de todos luchaba contra la amenaza de la mitológica bestia que quería arrasar con la aldea.

hokage-sama! que vamos ha hacer el kyuubi ha ingresado derribando la muralla principal – uno de los ninjas a su lado corría a mayor velocidad tratando de alcanzar al rubio, no por nada le llamaban el rayo amarillo de konoha.

La gente de la aldea¿se ha tomado las medias de seguridad? – pregunto el alto rubio, tenia unos brillantes ojos azules que resplandecían con determinación, una larga capa blanca y un ligeros pantalones negros. Una joven de cabellos castaños se acerco.

Si, hokage-sama, todo los aldeanos fueron llevados a la montaña de los hokage – el rubio asintió satisfecho ­– además…

Hokage-sama, Kushina-san ella… - el ninja de largos cabellos azules y ojos negros, interrumpió a la castaña para mirar al rubio – esta entrando en labor – el rubio se detuvo rápidamente para mirarlo fijo, suspiro

"¡¿¡que demonios haré!?!" Pensó el rubio contrariado, miro alrededor como buscando respuestas en el bosque, un rugido los saco de sus pensamientos, rápidamente camino hacia la entrada de la aldea donde pudo observar a la poderosa bestia que aparecía frente a ellos. Imponente el kyuubi surgía con todo su poder devastando todo a su alrededor, los pocos ninjas que podían escapar de las poderosas colas del Bijuu, se alejaban para observar y analizar todas las posibilidades para tacar.

Minato corria por los techos de las casa que aun no eran arrasados, como el líder mas joven de la aldea, con solo diecisiete años tenia que ver que cada jefe de su sección trabajara con el máximo de eficiencia en momentos críticos como el que ahora vivían. Observo a lo lejos a al jefe de la policía ninja, ordenar a todo su clan para ayudar a salvar a los aldeanos, se detuvo al ver a un joven de nos mas de siete años mirando todo a su alrededor, sus largos cabellos negros perfilaban su infantil rostro ligeramente adornado por unas ojeras, sus ojos negros observaban la situación con una inusual mirada analítica para un niño de tan corta edad.

Asombrado se pregunto quien seria tal pequeño, camino hacia él acercando sutilmente, donde estarían sus padres, sabia que era un Uchiha, todo su uniforme lo decía, y lo mas importante cual seria su nombre.

Para sorpresa del menor, el rubio lo tomo rápidamente en sus brazos, cuando una explosión estallo cerca de ambos, el pequeño sorprendido de verse en brazos de un desconocido se revolvió inquieto tratando de que lo soltara, pero el firme abrazo de Minato evito que el chico se soltase hasta que llegaron al hospital de konoha. Minato, aun sorprendido de su propia actitud, miro fijamente al chico antes de soltarlo en el piso, el pequeño lo miro también sin mostrar ninguna expresión en su infantil rostro.

¿Cuál es tu nombre? – dijo el rubio, su mirada se fijo en la recepción del hospital

¿Quién eres tú? Y ¿Por qué me sacaste? – hablo rápidamente el pequeño, arreglando su ropa y su pelo.

Sabes que es de mala educación no responder una pregunta – el pequeño resoplo molesto – ¿es que no responderás?

Y porque debo hacerlo – minato se empezó a molestar, pero que maleducado el enano, iba ha hablar cuando en ese momento un ninja medico apareció frente a él.

Hokage-sama… kushina-san! lo llama – la joven ninja dio rápidamente el mensaje para mirar al joven líder y hablar – por favor sígame, lo guiare a ella. – minato iba a seguir rápidamente a la joven cuando recordó que tenia a un pequeño a su lado, lo miro y este pareció mirarlo con sorpresa para volver a su usual mirada sin expresión.

Preguntare de nuevo¿Quién eres? – esta ves el pequeño lo miro con una pizca de curiosidad

Uchiha Itachi – le respondió el niño, resoplando al final

Bien ita-chan – sonrió al ver la mirada molesta que le envió el pequeño – no deberías estar en la montaña junto a tu madre – pregunto el rubio, el moreno solo ignoro.

Estaba junto a mi padre cuando me sacaste – el chico camino hacia uno de los pasillos con el hokage siguiéndolo sin decir nada - es mi deber proteger la aldea para mi hermano pequeño, así él puede crecer tranquilo – camino un poco mas rápido por los pasillos

¿Que edad tiene tu hermano? – pregunto por curiosidad, siguiendo inconscientemente al arisco chico.

Cuatro meses, nació el 23 de octubre, tiene un mal genio impresionante cuando lo despiertas – dijo el chico, sonriendo ligeramente ante el recuerdo.

Por eso tus ojeras – el rubio rió suavemente observo al chico detenerse ante una puerta – sabes hoy nace mi... ¡O demonios¡Debería estar con kushina! … - el rubio miro al pequeño chico reírse entre dientes, se volvió enojado – ¡de que te ríes!

Mira delante de ti – el rubio miro la inscripción de la puerta

Pero… como – dijo confundido se voltio al pequeño

Soy lo que llaman el genio de la familia Uchiha – observo su alrededor mientras hablaba sin emoción en su voz – por lo cual el rastreo de chakra es algo que debería saber – miro a los ojos del rubio ligeramente encantado - porque no pasa a ver a su mujer

Ella no es mi mujer - el rubio se quedo ahí un rato parado frente a la puerta escuchando la atenuada voz de la mujer, a su lado el pequeño lo tomo de la mano

Entremos, si nace hoy tu hijo deberías verlo – el ojinegro camino tirando levemente del mayor – a demás me agradan mucho los niños – dijo un poco sonrojado

¿Si?… y como lo llamarías – pregunto el rubio, todavía no elegía un nombre para el bebe, así que seria bueno escuchar opiniones, el pelinegro se detuvo y lo miro con los ojos brillantes, el había elegido el nombre para su hermano, Sasuke. Ese nombre siempre le había gustado, pero el había querido tener otro hermano más, para colocarle…

Naruto – pronuncio con su voz infantil – me encantaría haber tenido otro hermano para llamarlo, Naruto – el rubio lo miro enternecido, se notaba cuando le gustaban los niños. En ese momento una ninja medico salio de la puerta tropezando con el rubio mayor.

Hokage-sama… kushina-san… - iba ha hablar cuando la voz de Minato lo interrumpió

Lo sé, vamos ita-chan, camina – el pelinegro lo miro confundido – iremos a ver a mi hijo.

Pero… yo… - el chico intentaba detenerlo, él no tenia nada que hacer ahí, de hecho ni siquiera conocía en persona al hokage, hasta ahora

Camina, ita-chan tenemos que apurarnos – entraron por la puerta donde se podía ver a una joven morena de pelo celeste y ojos miel, sudaba por el esfuerzo y el dolor de las contracciones. – kushina…

Minato – sonrió ligeramente – espero que hallas venido por voluntad propia – la mujer desde su puesto en la camilla sonrió amargamente

Es mi hijo – respondió el rubio - pero no hablemos de eso ahora¿como te sientes? – La chica bufó molesta – está bien, entendí

Y ¿quien es ese mocoso que traes a tu lado? – dijo la mujer molesta por la falta de tacto del rubio, el hokage se molesto por la forma que trato al chico

Uchiha Itachi, es mi nombre señora – dijo el pequeño enfatizando las ultimas palabras, que molestaron a la joven, iba a responder por el insulto cuando las contracciones se lo impidieron, con un fuerte grito de dolor empezó con el parto.

En ese momento un ninja apareció por la puerta principal, llevaba en su espalda el sello de la policía de Konoha, y Minato lo pudo reconocer como el líder de la familia Uchiha, Uchiha Fugaku. Su rostro firme, sus ojos negros, las ligeras ojeras que el pequeño Itachi había heredado, su estatura y porte, todo revelaba el porque eran llamados el clan mas poderoso.

Hokage-sama – la voz del hombre era fuerte y ronca, hablaba con mucho respeto – kyuubi ha traspasado la tercera barrera necesitamos sus indicaciones – el mayor parecía no haberse percatado que su propio hijo se encontraba de la mano con quien hablaba, hasta que miro hacia el pequeño frunciendo ligeramente el seño. – Itachi ¿Qué haces aquí?

Con el hokage, oto-san – le dijo el chico sin emoción en su voz y mirándolo fijamente – me saco de la batalla

Lamento haber tomado de improvisto a su hijo – hablo Minato – pensé que estaba perdido y lo traje conmigo, ahora veo que el podía haberse defendido solo – el mayor de los Uchiha asintió, haciendo un gesto para que su hijo se acercara, el chico camino lentamente hasta su padre. Minato lo miro en silencio, enojado con la idea de que deseaba estar más tiempo junto al calor infantil del niño.

Bien hokage-sama, que debemos hacer – hablo el Uchiha, la joven cerca de ellos estaba apunto de parir y los demás teniendo una insensible platica sobre guerra, pensó una de las enfermeras.

Demonios, esta acercándose demasiado rápido a la aldea – medito en voz alta el rubio – ha este paso en menos de hora y media acabara con las ultimas dos barreras y con la aldea.

Hay una forma de evitarlo – hablo el pequeño seriamente, los demás no entendían como un niño de cinco años podía estar en una platica sobre tácticas de guerra.

Silencio Itachi, esta es una platica de mayores – le dijo su padre sin siquiera mirarlo.

No, no lo calles¿que ibas a decir? – hablo el rubio, todos los demás lo miraron sorprendido, es que no podían entender como es que le ponía atención a un niñito, el hokage había perdido el juicio

el pergamino de sellado – hablo el pequeño caminando hacia un asiento en la sala, observo como la mujer respiraba dificultosamente, sonriendo perversamente ante el dolor de aquella que lo había insultado, Minato y los ninjas se sorprendieron, como es que no se les había ocurrido – pero hay un problema de hacerlo, el que realiza el ritual… morirá

¿Como sabes de la existencia de ese pergamino? – dijo un ninja de ojos blancos y largos cabellos negros. El pequeño lo miro sin emoción en su rostro para después esbozar una cruel sonrisa.

Soy el genio Uchiha – dijo mirándolo fijamente, su padre sonrió con orgullo, pero itachi lo miro despectivamente. Minato lo observo, antes de que recordara el pergamino

"¡como no se me ocurrió antes!" – pensó el rubio, miro a itachi sonriendo ligeramente, se le acababa de ocurrir una idea y ese niño era quien le había inspirado, tendría que bajar a los registros de sandaime y revisar rápidamente los pergaminos. Camino hacia la entrada y se dio la vuelta mirando a los presentes

Uchiha-san, retengan el mayor tiempo posible al kyuubi – el pelinegro iba a responder, cuando el rubio siguió hablando - las barreras que necesitan son de controladores tipo agua y carecemos de ellos, pero algunos anbu podrán ayudarlo, se que Hyuuga-san y Aburame-san lo ayudaran de momento – miro ha uno de los ninja medico – cuiden de kushina, que mi hijo nazca bien.

Hokage-sama… si usted no se encuentra¿Qué nombre le pondremos al niño? – minato miro a la peliceleste rápidamente, para después centrar su mirada en el pequeño pelinegro y sonrió.

Naruto…. el niño se llamara, Naruto – itachi miro con los ojos ligeramente abiertos, por la sorpresa, y una pequeña sonrisa en sus labios.

A demás Uchiha-san, quisiera pedirle si me puede prestar a Itachi-kun un momento – el rubio hablo para sorpresa del par de pelinegros, el mayor lo pensó rápidamente para después asentir con la cabeza. Minato sonrió para hacerle un ademán al pequeño de que se acercara, el niño corrió a su encuentro y ambos salieron de la pieza

Gracias – dijo el pelinegro sin mirar al rubio, el mayor solo sonrió, sabia el porque le daba las gracias - ¿A dónde vamos?

A los registros de Sarutobi-sama – dijo el rubio caminando por los pasillos, salieron del edificio para caminar rápidamente hacia la torre de los hokages que quedaba cerca de la montaña, y lo suficientemente apartado de la entrada.

Mientras corrían por los techos miraron el paisaje desolado de la aldea, no había nadie más que alguno que otro ninja corriendo de un lado al otro, todos se habían refugiado para evitar que alguien saliera lastimado a causa de la mitológica bestia. Llegaron a la torre que parecía ser el único lugar donde aun había gente rondando, algunos ninjas de logística se encontraban ahí, en especial los líderes de la familia Nara, quienes se encargaban de las posibilidades de protección a la aldea.

Itachi miraba fascinado todo ha su alrededor, no era la primera vez que entraba a la torre hokage, pero era la primera vez que entraba en preludio a una batalla por lo cual había mucho movimiento en el lugar. Caminaron por los pasillos llenos de ninjas que iban de un lado a otro y algunos que se detenían frente al hokage para pedir aprobación a distintos planes, explicándole brevemente la función que se desarrollaba.

Minato estaba más que tensionado con el asunto, después que se alejaron hasta llegar cerca del despacho del antiguo hokage, mientras recordaba como era el pergamino que buscaba. Recordaba perfectamente cuando su sensei le enseño el contenido de ese pergamino, no había pensado en esa posibilidad pero ahora con las palabras de itachi recordaba el porque jiraya-sensei le había dicho que no ocupara la técnica, si no era de vida o muerte.

Itachi al ver al rubio preocupado le tomo la mano, reprendiéndose mentalmente el mismo del gesto, él no era una persona muy afectuosa, de hecho a la única persona que le dedicaba sus gestos era a su pequeño hermano, se sonrojo ligeramente al sentir el calor emanando de la calida piel del rubio. Minato lo miro sorprendido para después sonreír ligeramente, era tan tierno ese pequeño. Llegaron al despacho y empezó a buscar dicho pergamino.

Itachi solo observaba al rubio ir de un lado al otro de la sala buscando algo, pensó en preguntarle que buscaba, pero el rubio estaba tan concentrado buscando el pergamino, que hubiese sido ridículo intentar sacarlo de su estado. Camino dentro de la habitación, pensando que el pergamino que buscaba el rubio tan desesperadamente debía ser importante por lo cual debía estar bien escondido o… muy a la vista.

Recordó que cuando el quería que sus padres no se enteraran de algo lo dejaba a la vista de ellos, entonces ellos pasaban junto a el y no lo tomaban en cuenta porque pensaban que, si él tenia algo preciado lo escondería.

Así que observo la ligera pieza llena de libro y pergaminos ordenados, pero le llamo la atención un jarrón que ha simple vista lo tomarías como uno común y corriente de adorno, pero si te acercabas te debas cuenta de que parecía estar modificado. Camino hacia el jarrón para tomarlo, cuando vio que el rubio rápidamente lo tomaba entre sus manos para observarlo detenidamente, se mordió el dedo y dejo caer un poco de sangre al interior del jarro que rápidamente cambio de forma a un pequeño pergamino.

¿Que es eso? – pregunto el pelinegro, confundido.

Una extraña forma de jiraya-sensei de guardar cosas – dijo el rubio leyendo la inscripción dentro del pergamino – maldición, esto me sirve pero tendré problemas.

El pequeño lo miro confundido, para después mirar como el rubio se sentaba en el suelo de la habitación leyendo el pergamino, cuidadosamente se acerco hacia el para colocarse en su espalda y leer el lo que alcanzaba de pergamino.

"Técnica de sellado cronometral"

….Esta técnica tiene un control absoluto sobre el chakra de la persona, por lo cual quien lo desarrolle tiene que poseer la convicción y fuerza para resistir las consecuencias de la técnica… -minato paso rápidamente a las formas de desarrollar el ritual, ya cargaría después con las consecuencias - … para desarrollar el ritual, se debe tener dos contenedores, uno que guarde la esencia y otro que sea la llave, cada cual será importante en el desarrollo de la celda para apresar a las esencias…" – eso! Ahora necesitaba dos contenedores capaces de resistir el poder de las bestias.

Podría ser Naruto – hablo el pequeño itachi, quien se había movido rápidamente de atrás del hokage para sentarse en la mesa del despacho.

Es peligroso y si muere en el sellado – dijo sin pensar en que se suponía que nadie más debía leer el pergamino. – no puedo arriesgarme a perderlo

No morirá – dijo itachi convencido – tu eres fuerte, él es fuerte, será capaz de soportarlo.

Quizás – dijo el rubio mirando al pelinegro rápidamente, como es que era convencido tan rápido por un niño. – Pero aun faltaría otro contenedor para el sello… - Itachi lo miro largamente sopesando las posibilidades.

Sasuke – dijo el pequeño, el rubio no entendió – el otro sello podría ser Sasuke.

Piensas arriesgar a tu hermano – miro incrédulo al pequeño

Piensas arriesgar a tu hijo – le rebatió sarcásticamente el niño, minato solo lo miro indiferente, ahora solo quedaba la decisión final y no quedaba mucho tiempo.

Ve por tu hermano – dijo minato cortando el tenso silencio que se instauro entre ellos – yo iré por Naruto. – Itachi asintió en silencio, sabían que ambos estaban condenando a dos pequeños inocentes pero era por un bien común – sabes donde debe estar tu madre, con tu hermano – el pequeño asintió.- Te veo en diez minutos – le dijo el pequeño para después correr a una gran velocidad hacia los territorios de los Uchiha.

Sabia cual era el refugio de su familia y siempre en caso de emergencia se escondían por esos lugares.

Llego hasta un complejo de casas todas adornadas con los sellos de su familia, camino a paso rápido por los alrededores hasta llegar a la entrada de la montaña alejada de la casa principal donde él vivía. Camino con seguridad por los terrenos que desde que nació recorría, ahora buscando al único que podía ayudarlo, su pequeño hermano.

Se detuvo frente a una gran puerta de acero y la toco dos veces, una pequeña abertura se abrió y una ligera voz se escucho.

¿Quien es? – itachi miro por la rendija

Itachi – dijo el pequeño molesto por el tiempo perdido en ridiculeces como esta.

Clave – dijo la voz, he itachi solamente mostró el sharingan en sus negros ojos, ahora rojos, lo que demostraba su linaje. La puerta se abrió dejándolo pasar.

Dentro del lugar itachi pudo observar como habían mujeres y niños en el lugar, se encontró con toda su familia, pero rápidamente busco entre la multitud a su madre y la vio sentada cerca de una fogata con cuna a su lado donde su hermano estaba recostado.

"Ni siquiera puedes cargar a tu hijo" – pensó el moreno, se acerco hacia su madre quien lo miro sin ninguna expresión. – madre

Itachi, veo que decidiste esconderte – le hablo la mujer sin mirarlo, y fijar su vista en el fuego

Veo que pudiste controlar a mi hermano – le dijo el chico pasando a su lado para llegar a la cuna, la mujer le miro de reojo, tomo el cuerpo de su hermano entre sus brazos – hola pequeño – le susurro al oído, el pequeño sonrió emitiendo un ligero gorgogeo feliz.

¿Que piensas hacer con tu hermano, itachi? – pregunto su madre sin mirarlos, en su voz ni siquiera se podía escuchar preocupación alguna.

¿Estas preocupada por lo que nos pase? – pregunto sin sentimientos itachi, aunque interiormente tenia una ligera esperanza de que a lo menos se preocupara por ambos. La mujer lo miro en silencio por unos minutos para levantarse y encaminarse hacia un grupo de mujeres sentadas junto a una fogata. Itachi la miro dolido, pensaba que quizás con el tiempo su madre podría haber cambiado, pero parece que siempre ambos serán iguales, no les importaba ninguno de sus hijos. El ligero movimiento de sasuke en sus brazos le recordó la razón por la cual había venido.

Camino entre su familia con su hermano en los brazos llego hasta la puerta donde la chica que le abrió la puerta lo detuvo.

¿A dónde crees que vas? – pregunto la chica, tenia una polera celeste con el símbolo uchiha y unos pescadores blancos.

No te interesa – dijo el pelinegro, calmándose para que su hermano no sintiera su enojo – abre la puerta que tengo que salir

Lo lamento pero no puedo dejar que los dos salgan – dijo la castaña – si tu quieres morir no interesa, pero tu hermano no morirá, uno de los hijos del cabeza de familia debe guiar el clan, así que no morirá por tu culpa.

¡Que sabes tu de lo que haré! – Dijo el chico alzando la voz ligeramente, el sharingan en sus ojos brillando peligrosamente – abre la puerta de una vez que si ustedes no harán nada para salvar la aldea lo haré yo

¿Llevando a tu hermano a la muerte? – le pregunto ácidamente la chica, enojada por la falta de respeto del niño

¡Estoy aquí por orden del hokage, shisa, así que córrete de una vez! – el chico se empezó a enojar y su hermano en sus brazos se removía inquieto.

Como te atre… - la chica no alcanzo a terminar de hablar cuando la puerta volvió a sonar, siguiendo el protocolo abrió la pequeña ventana. - ¿Quién es?

Yondaime hokage – se escucho una voz en al otro lado de la puerta, itachi se alegro de escuchar la voz de Minato y miro a su pariente con desprecio - ¿es que no abrirá? – la molesta pregunta que se formulo obtuvo una rápida reacción, la chica abrió velozmente la puerta donde se pudo observar a un rubio de ojos azules cargando a un pequeño que parecía dormido.

¿Ese es naruto? – pregunto itachi sorprendido al ver al pequeño niño, el rubio asintió en silencio, el pelinegro extrañado lo miro preguntándole que pasaba

Murió – dijo el rubio, el pelinegro rápidamente entendió – no la amaba pero tampoco deseaba su muerte – mientras miraba al pequeño pelinegro recordó cuando había llegado al hospital

//Camino rápidamente por los pasillos del hospital hasta donde hacia unos minutos se encontraba, al abrir la puerta lo único que escucho fue el llanto de un bebe.

Hokage-sama!, su hijo… ya nació – una de las enfermeras arropo al pequeño para colocarlo entre los brazos del rubio, quien emocionado lo estrecho contra su pecho, tomo sus manos para notar la suavidad de su piel.

Bienvenido a konoha… naruto – hablo el rubio en voz alta mirando el rostro ahora dormido del pequeño.

En ese instante la enfermera lo miro con una ligera lastima, sin entenderla pregunto como estaba la mujer, pero lo único que obtuvo fue un silencio sepulcral, miro hacia la cama y vio el rostro de la peliceleste que ahora parecía dormida, besando su frente se despidió de la que había sido su compañera por un tiempo//

Lo sé – le sonrió, la triste mirada del rubio le preocupo e intento animarlo de alguna forma – mira te presento a mi hermano, saluda sasuke – el pequeño chico emitió un gorgogeo al mirar al rubio, mientras el mayor se acerco y acaricio su rostro, observando los negros ojos del chico tan parecidos a los de su hermano.

Hola sasuke, te presento a mi hijo, naruto – ladeo el cuerpo del rubio quien abrió ligeramente los ojos para observar a sasuke, al verse entre ellos sonrieron y balbucearon incoherencia o por lo menos sasuke lo intentaba ya que naruto lo miraba aun con una sonrisa y los ojos ligeramente abiertos, minato los observo sonriendo para después recordar que todavía tenían una aldea a la cual poner a salvo – vamos itachi tenemos que empezar el ritual – el pequeño avanzo tras él, mirando a su prima con desprecio, ella solo lo miro indiferente aunque se podía notar la ira en su rostro.

Itachi camino rápidamente entre los techos de las casa sujetando firmemente a su hermano contra su cuerpo, delante de él, Minato corría repasando mentalmente el ritual tenia a los contenedores, tenia el poder, ahora solo quedaba realizar el circulo.

Llegaron a unos dos kilómetros del kyuubi, aun no eliminaba la ultima barrera por lo que la aldea todavía estaba a salvo. Minato camino hasta un altar donde dejo a naruto posado sobre este junto a unas velas que adornaban el ligero lugar, a su lado itachi lo imito dejando a sasuke al lado del pequeño rubio, ambos se acomodaron, desde las pequeñas mantas sacaron sus manos las cuales se entrelazaron para sujetarse ambos. Itachi los miro con una ligera sonrisa, pensando que ante cualquier cosa los mantendría juntos aunque eso le costara caro, miro a minato un breve instante.

Quiero que te alejes – le dijo el rubio seriamente, confiaba en el pequeño, había demostrado seguir órdenes y ser fiel a pesar de todo.

Pero… - intento negarse, pero la mirada del rubio le ordeno que ni se atreviera a contradecirlo, se dio la vuelta para irse cuando un abrazo lo detuvo.

Acabo de descubrir que soy un pervertido – le susurro el rubio apoyando su frente en la nuca de itachi – solo tienes siete años – le acaricio el cabello, un ligero estremecimiento recorrió el cuerpo del pequeño – quiero pedirte que si no regreso, cuides de naruto, por favor. - Itachi se dio la vuelta entre los brazos de Minato, quedando su rostro a escasos centímetros del otro, miro fijamente los rasgos del rubio como tratando de grabar sus facciones en su mente.

No era necesario que lo pidieras, ahora es parte importante para mi – itachi sonrió levemente sonrojado, escondiendo su confusión mientras enterraba su rostro entre el cuello y el hombro del rubio, Minato con delicadeza levanto el rostro del pequeño pelinegro quedando a unos centímetros del suyo, cuando deposito un casto beso en los infantiles labios del pequeño.

Lo sé, cuento contigo – dicho esto lo dejo inconciente, el cuerpo del pequeño callo como peso muerto entre los brazos del rubio quien lo acomodo detrás del altar, usando su capa de cama para el niño.

Miro el altar y vio los cuerpos de los dos pequeños, tan diferentes, uno rubio de tez morena, y el otro un pálido chico de pelo negro, sonriendo ligeramente corrió unos metros lejos de los chicos para realizar el sello de invocación. Un sapo gigante apareció, sonrió levemente para llamar la atención del gigante animal. Se ubico sobre el animal mirando al kyuubi que trataba de destruir todo a su paso, rápidamente se puso a realizar sellos mientras que moldeando ligeramente su chakra creaba un hilo que se unía junto al de el par de niños que estaban en el altar.

"espero que estén bien" pensó con angustia el rubio, ahora solo quedaba esperar que todo saliera como lo tenia planeado, no importaba que quedara maldito por el resto de su existencia pero tenia que evitar la destrucción de la aldea.

"todo sea por que puedan crecer" dicho esto la esencia del kyuubi empezó a unirse a la esencia del pequeño niño rubio del altar, mientras su frágil mano era sujeta por el pálido bebe a su lado. Quien en su interior y ante tanto despliegue de chakra logro liberar parte de una antigua esencia de su familia. Ahora solo quedaba esperar.

Después de eso un haz de luz cubrió el lugar y minato desapareció, los pequeños cayeron inconcientes por el esfuerzo, sin saber que dentro de ellos unas poderosas esencias guardaban su poder.

CONTINUARA….