Sí estoy en racha y sigo subiendo estas especies de... ¿escaneos? de los personajes de Rowling vistos por mí. Ahí iba el disclaimer y la presentación. Un gracias a Miky por la idea.


El autoengaño de Lily.

Lily Evans fue traicionada (aunque traición quizá es exagerar… sólo fue una mentirijilla) por su amigo Sev de pequeña. Se suponía que ser hija de muggles no era ningún problema. Y cuando descubrió que sí (los libros, los de Slythrin y ese horrible nombre de sangre sucia), se sintió engañada. Traicionada. Mentida. Y eso le hizo refugiarse. Estaba un poco enfadad con Sev pero como se veían poco, procuraba no mostrarlo. Así que confiaba poco en la gente y se infravaloraba. Sólo un poco.

Lily Evans provocó un flechazo en el corazón de James Potter. Y él, lanzado como es, porque no tiene miedo, es un Potter y es valiente, de Gryffindor, se le declaró. La primera vez, o bueno, las primeras veces, Lily no sabía qué hacer. Era un chico muy pesado cuando quería pero a veces podía llegar a ser majo. No más. Oh, no. Y bueno, ella es algo tímida y que se le declaren siempre da vergüenza y miedo. Pero Lily, como buena Gryffindor, se armó de valor y le dijo que lo siento mucho, pero no me gustas… Y esperaba ver zanjado el caso. Ilusa.

Lily Evans cursa segundo, tercero, cuarto, quinto en Hogwarts y está un poco (bastante) hasta las narices si no es más arriba de James Potter. No le falta un solo día, nunca falla. Lily, sal conmigo. Ya no es dulce y comprensiva. Se ha hartado. ¡NO! Y asunto zanjado, hasta mañana.

Lily Evans tiene muchas razones para rechazar a James. PRIMERA: es un egocéntrico y presumido idiota. SEGUNDA: se da aires y va por ahí hechizando a la gente por diversión. TERCERA: no sabe perder ni entender una negativa. CUARTA: es un egocéntrico y presumido idiota. Oh, no, esa ya la ha dicho… CUARTA: Se da aires… no. No sabe entender una negativa. Vaya, esa no. ¿Qué más es malo en James Potter? Porque no es feo, ni tonto… ¡Oh, si! CUARTA: Sale con todas las malditas chicas a dos cursos a la redonda, por decirlo así. Está en racha, venga, otra razón…

Lily Evans sale en defensa de Sev cuando por enésima vez, Potter se mete con él. Y así se lo agradece. Sev era el único Slytherin que no la había llamado sangre sucia. Hasta ahora. Lily Evans tiene un problema con eso: desconfía. Se dice a sí misma que rechaza a Potter por lo engreído y chulo que puede llegar a ser… En realidad es que no cree que alguien, cualquiera, pueda fijarse en ella. Y bueno, por costumbre.

Lily Evans tiene un problema. Cursa sexto y septimo. Y un día, James… digo Potter, no le dice nada, no le pide nada… Y al día siguiente James… o sea, el idiota de Potter, tampoco parece interesarse en ella. Poco a poco durante seis o siete años, le había ido subiendo la autoestima. ¿Y ahora qué? No le gusta ese idiota, oh no. Qué va. Pero, ¿por qué ya no le pide salir? ¿No se habrá cansado? Es obvio, Lily, te gusta. No hay más que ver tus pensamientos. Oh no, no me gusta. Se empeña en pensar.

Lily Evans vuelve a sonreír cuando después de dos semanas, James le pide salir. Una lucha mental en su cabeza. NO me gusta. Pero quiero decir que SÍ. Es porque me da pena. Oh, no, Lily, te gusta. Se autoengaña. Intenta convencerse de que no es verdad. Tranquilos, porque ganará su amor a la moral. ¿Cómo le puede gustar? A saber…


TODOS sabemos como acaba esto, ¿no es cierto? así que final sin acabar.

¿Reviews?

Gui
SdlN