Hola!
Este fic está en correcciones ya que fue uno de los primeros que escribí y la última vez que lo trate de releer para retomarlo me revolví, no seré una escritora profesional, pero incluso yo tengo mis límites.
Gracias por sus lecturas…no prometo ir corrigiéndolo rápido, pues tengo otros fic que retomar, pero este que tiene mucho que seguir y ya tengo planes por delante (una secuela en proceso), tendré que ponerme en marcha primero con este.
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Un extraño contrato
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-ring, ring, ring...- el teléfono sonaba en la desordenada sala- ring, ring- seguía sonando.
-Tch! maldición, siempre se les ocurre hablar en los peores momentos- replicaba un joven en toalla con cabellos plateado, su musculatura bien formada dejaba aquel cuarto que antes ocupo, caminando con algo de pesadez por lo inoportuno del asunto, suspiro al llegar a su objetivo tomando aquello que aún seguía sonando-bueno, débil muy cría- contesto al levantar el auricular- aja, SIP, ok, permítame- dijo mientras tapaba el auricular para girar su cabeza hacia un punto- lady! tenemos contrato con el vaticano, mañana me voy hacia Europa- grito dirigiéndose a la cocina.
-¡Que!- la chica de cabellos cortos negros- como el vaticano, haciendo contrato con nosotros- un tanto confunda contesto acercándose hacia el punto donde la llamada estaba siendo tomada, su gesto era algo digno de ver pues la confusión era obvia en esos ojos severos- eso es imposible- siguió, mientras el chico la ignoraba ya que habia retomado la llamada.
- sí, voy para allá- termino para sacudirse un poco el cabello, sin darle oportunidad a la acompañante anonadada por lo que aún estaba digiriendo el nuevo contrato que se presentaba, este subiendo de inmediato a su cuarto para prepararse, solo las pisadas y movimiento se escucharon.
-¡en que piensas dante!- lo siguió hasta la recamara en donde este le cerró la puerta-Vas a tener trato con ellos, ¿es acaso que saben a lo que nos dedicamos? ¿Lo que eres?-se rasco la barbilla, no cuadraba algo en realidad, pues antes esa organización tenía su propia rama caza demonios, demasiada casualidad, resignada siguió a lo que parecía ser una sala, para sentarse amenazadoramente con su enojo obvio pintando su cara.
Pasos pesados bajaron por las escaleras, solo diviso el hombre dirigirse a la puerta-solo espero que sea un pago digno de tanto riesgo-susurro al ver que ni una mirada le fue dada.
-¡ya me voy!- grito al girar la perilla de esa vieja puerta, su maleta de equipaje era simplemente una maleta, sus dos revolver y armamento definido, algo que un buen guerrero como el no cargaría, ignorando a la mujer que seguía mirándolo a dagas para cerrar la puerta y seguir su camino, la brisa de ese dia era extraño y él lo sabía, pero no importaba…sería divertido.
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Una reunión se llevaba a cabo en la santa sede, encabezada por el propio líder vigente- su santidad, está usted seguro de lo que vamos a hacer- replico un hombre que se encontraba al lado del principal
- sí, camarlengo- contesto con voz preocupante- es la única manera de enterrar a aquello que quedo hace años atrás- se levantó de su asiento dirigiéndose a otros de los padres que se encontraba al otro lado de la habitación, con cabellos rojos
- ya está listo, su santidad- haciendo reverencia dijo este- está en camino-informo al final.
-¡pero es un demonio!- siguió otro padre de una lente y cabellos largos- no pueden contrario, no es de fiar- se levantó de su asiento con un golpe.
-lo siento ministro, pero ya está hecho- el Sr. de cabellos rojos dijo, mirando a su santidad.
-tranquilízate secretario, vale la pena por el resultado que se tiene pensado- dirigiéndose al señor exaltado- esto será lo último que vera de aquella guerra- termino su santidad dirigiéndose a su recamara, dejando atrás al inconforme, que miraba con odio al padre de cabellos rojos, que miraba como su santidad se retiraba del cuarto.
-¡Tch! - se levantó el secretario dando un golpe a la mesa- ¡que es lo que planeas padre!- exclamo por ultimo azotando la puerta.
El padre de cabellos rojos, de mirada fría y triste… hondeaba en sus pensamientos, con una expresión de preocupación, observando con detenimiento uno de los papeles que su santidad habia dejado en la mesa, en el que venía anexado una imagen, - espero que funcione- termino al observar la foto en la que venía un joven de cabellos blancos y larga gabardina roja.
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En el aeropuerto las miradas acrecentaban el ego del hombre de gabardina roja, quien se paraba de manera imponente y regalaba besos a cuanta incauta que atrapaba- que nunca han visto a alguien guapo- decía mientras caminaba dirigiéndose al mostrador, lo que ocasionaba que este se sintiera la estrella de ese lugar,- buenas tardes, nena, no tienes algo para mí- dijo mientras miraba a la jovencita, de tal manera que hizo que esta se ruborizara
- b-buenas tardes joven en que puedo ayudarle- pregunto tímidamente
- creo que tiene algo para mí, soy dante Sparda- termino guiñándole el ojo a la muchacha
- s-si aquí tiene, joven Sparda- dándole un par de boletos.
-gracias, my lady- con un tono, que hizo que la chica se pusiera más roja, riendo ligeramente mientras se alejaba,- ¿dos boletos?- comento al dirigirse a la entrada que lo llevaría a su avión- bi,bi,bi- un sonido lo detuvo.
-¡espere señor!- gritaron unos guardias acercándosele a este con macana en manos- deténgase y suelte eso que trae en la espalda- siguió uno de ellos, apuntando una gran funda negra que se encontraba colgando detrás de dante.
-¡mph! al parecer esto va a ser un poco molesto- dijo mientras seguía dirigiéndose a la puerta, sin preocuparle la situación en la que estaba.
- ¡espere le digo!- siguió el guardia - sacando su arma y apuntando al chico de gabardina, que de repente ya no estaba en su vista- ¿eh? adonde se dirigió- preguntaron todos al ver que el extraño no estaba.
-ja, esperaban que eso me detuvieran- se oyó una voz detrás de ellos, con un tono sarcástico.
- c-como has...- al momento de querer apuntarle con sus armas los guardias se dieron cuenta que estas ya no las tenían.
-creo que buscaban esto- dijo el chico mientras alzaba las manos a la altura de sus hombros dejando caer las armas, con una sonrisa - deberían dejarme ir- con tono burlón continuo.
-sí que es un problema- siguió un anciano que se diga a ellos, con mucha seguridad y sin miedo a la situación, con un atuendo muy extraño y con un parche en el ojo- joven Sparda-
-¿quién eres tú? viejo- pregunto el joven mirando a aquel extraño- creo que el asilo esta en otro lado- siguió soltando una carcajada
-maldito mocoso- el anciano se abalanzo, dándole una patada voladora, que mando a dante a volar hacia una pared, para sorpresa de los presentes- con los años no saben respetar a sus mayores- refunfuño el viejo mientras se dirigía a los guardias- lo siento Sr. guardia, este no sabe de respeto- dijo mientras se inclinaba ante el guardia- el viene conmigo, es un asunto secreto- dijo mientras enseñaba una insignia que comprobaba que era miembro de la santa sede.
-está bien- contesto- por esta vez dejamos ir al joven, pero manténgalo controlado-mientras se dirigía a recoger las armas- por cierto él está bien- mirando el montón de escombros que habia dejado dante al chocar contra la pared, para la expectación de los demás, que se reunían alrededor del escombro, tomando fotografías con sus celulares y cámaras.
-si no te preocupes, eso no es nada- con reverencia se dirigió hacia el tumulto de gente, que al verlo le tuvieron miedo y le abrieron camino- ¡idiota! deja de hacerte el muerto- grito con tanta fuerza e ira, que ocasiono que toda la gente a su alrededor le temieran y se fueran alejando del espectáculo.
-aahhooo! no dejan dormir a gusto- se levantó el chico de cabellos blancos como si se hubiera recién levantado- ¡tú anciano! me debes una- replico apuntando al viejo- quien diablos eres... -fue interrumpido por otra patada.
-te explicare en el avión- se volteo el anciano ignorando los reproches del otro que se iba levantando y sacudiendo del escombro.
-¡maldito viejo!, no deberías andar dando patadas asi te romperás un hueso- siguió, lo cual hizo que se ganara una mirada asesina de este- ja jajá, maldito anciano, ven atácame- ínsito al señor, esperando que este respondiera- que me tienes miedo- continuo en posición de batalla.
-maldito mocoso, muévete- ignorando las palabras del chico, dándole la espalda y dirigiéndose a la puerta.
-mph! -dante lo siguió de cerca- oye anciano, que con la edad se te olvidaron los modales-
-y a ti no te enseñaron a respetar a tus mayores- continuo este- y no soy anciano me puedes llamar seeker, estúpido- continuo sin miran al otro
-qué clase de nombre es ese, seeker- dijo con tono sarcástico- ese no es un nombre-
-cállate imbécil, y sigue que se nos hace tarde- continuo el anciano
-oye anciano, tiene muchas cosas que explicarme- pregunto dante al subirse a las escaleras que dirigían al interior del avión- como sabía que a mí me contrataron ellos- continuo esperando respuesta, la cual no llego- Tch! maldito parche- no termino su frase cuando sintió un manotazo que lo dirigió al suelo destruyendo por completo las escaleras-
-respeta a tus mayores, eres retardado o que, mi nombre es seeker, recuérdalo idiota- reclamo el anciano que por extraño que parezca ya estaba en la puerta del avión.
-tu maldito seeker, me las vas a pagar- mientras se levantaba del escombro reclamaba, al sacudirse su gabardina, mirando al anciano con serenidad,
-te dije que era seeker, mocoso cabeza hueca-se dio la vuelta y entro al avión-
Dante dio un salto y en cuestión de segundos ya estaba al lado de seeker, - deja de jugar y vámonos- exclamo el viejo de parche, al entrar a la cámara de 2da clase todos se quedaron asombrados, no por el hecho de que dante era alto, de cabellos blancos y de gabardina roja, si no por el alboroto que habían ocasionado hace unos momentos.
-mira mama, ¿esos no eran los señores que estaban jugando peleas en la sala?- pregunto un jovencito apuntando al extraño dúo.
- no apuntes a las personas, es de mala educación- reprocho la madre, tratando de no voltear hacia los extraños, quienes por el gesto entendió la mujer que fue escuchada, alejando al pequeño indiscreto ante de que fuera envuelta en algo más grande, temiendo por su vida y la de su niño, solo el ansiando negó con la cabeza.
-esto es molesto- continuo el viejo adentrándose al transporte, seguido por una mirada fría, en cambio a Dante parecía alegrarle tanta atención y la expectación que ocasionaba su presencia ahí, dejando soltar una sonrisa y caminando con mas altanería, mientras se dirigían a sus asientos-deja esa actitud idiota- grito el anciano con voz agria.
-eres un aguafiestas- reclamo el joven,- maldito panda-puso ese sobrenombre al notar esas figuras negras que estaban cubriendo sus ojos, riéndose un poco de su creatividad.
-cállate de una vez-el ambiente entorno de seeker cambio por completo, a uno de instinto asesino, mirando con odio a aquel joven que habia dicho lo anterior.
-mmm... tienes tu lado sensible- se burló dante al ver la reacción de este- acaso no te gusta esa palabra- lo miro con detenimiento arrebatando por completo al anciano, dejándolo atrás, hundido en sus pensamientos-
-muévete anciano-grito en las escaleras que se encontraban al terminar el pasillo, que dirigían a la 1ra. Clase, ocasionando que este reaccionara, ya que se encontraba hundido en sus pensamientos- tu, maldito mocoso- dante lo ignoro y sonrió levemente, subiendo despreocupadamente.
Cuando el anciano subió, se dio cuenta que a pesar de que habían recién llegado, el joven ya habia pedido un montón de bebidas y se encontraba acostado en su asiento con los pies subidos al que se encontraba enfrente- ah! ya llegaste, a tu edad no deberías subir escaleras- se burló dante, el anciano lo ignoro por completo y se sentó junto de este.
-bueno empecemos la explicación- cruzo los brazos y empezó a hablar- bueno este es tu trabajo.
-je, por fin, seeker- lo miro con altanería- de que se trata...
-bien, tenemos que encontrar a este sujeto, y exterminarlo- le enseño una foto, un poco vieja, y unos cuantos papeles- esta es su información.
-Qu es esto lo sacaste de tu álbum de fotos- se burló mirando la imagen, un poco maltratada y amarilla por los años-aparte te has equivocado, anciano- regreso está a su acompañante - yo no asesino a humanos- se volteo a la ventana al ver que el avión se movía.
-él no es humano- interrumpió el anciano- y soy seeker, estúpido, a parte solo lo quieren encontrar-
-¿no es humano?- volvió mirando extrañado al anciano- como que no es humano.
-tarado que no ves su cabellos blancos- dándole un sapo al joven sentado junto a la ventana
-maldito anciano agresivo- dijo mientras se sobaba la cabeza- entonces es un demonio- siguió preguntando.
-no tampoco es un demonio, es algo aún más complicado que eso- dándole otro sapo, que para sorpresa fue detenido por el joven- no tengo solo esa mano- exclamo al patearlo en la cara- Tch! maldito mocoso no entiendes-
-pues explíqueme, maldito panda agresivo- miro al anciano para ver si ponía la expresión de hace rato-
-¿panda?- lo golpeo con tanta fuerza que rompió el asiento en el que se encontraba-porque me llamas panda-exclamo ignorando el desastre que habia hecho, sentándose de nuevo para seguir con su explicación.
-¡anciano tonto! rompiste mi asiento- reclamo el joven tirado en el suelo, mientras se acercaban los guardias del avión.
-no pasa nada señores, el joven es tan estúpido que se cayó de su asiento- excuso el ansiando dirigiéndose a los guardias
-¿no pasa nada? - pregunto el guardia
-si- contesto seeker con una mirada de seguridad
-está bien, se lo dejaremos a su encargo- se fueron los guardias, bajando por las escaleras.
-estúpido mocoso, ves lo que ocasionas- reclamo el viejito mirando al joven levantándose de lo que era su asiento.
-tú tienes la culpa maldito, tu eres el que reacciona asi conmigo, solo porque te dijo viejo panda- siguió mientras se limpiaba de nuevo su gabardina, susurrando cosas un poco ofensivas al verse privado de su asiento.
-porque me dices asi- contesto- asi yo le decía a mi maestro, que ocupo mi puesto actual-una nostalgia vino a el mismo, haciendo que su compañero alzara su ceja con cierta duda pero curiosidad.
-¿maestro?, tenía un maestro- se burló el joven para sentarse, su idea de creatividad se iba con cada escombro limpiado por el mismo, aunque no era su culpa con solo ver al ansiando le dirían asi.
-¡cállate! me haces decir cosas de mas- se volvió a sentar dejando al joven parado, mirándolo con detenimiento- te seguiré explicando que es...
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Unos días antes en un pueblo escondido, en Inglaterra , se oía una melodía, una triste melodía, que llegaba a los oídos de los niños que dormían plácidamente en sus cunas- que extraño se durmió antes de su cuento- las madres exclamaban al ver a sus pequeños dormir, al adentrarse al bosque, en lo profundo de este, se lograba ver unos extraños cristales con unos números grabados en la punta y un joven descuidado de apariencia, y con cabellos blancos decía - es hora de ir a pasear- siguió dejando atrás los cristales, se tocó la frente y estos desaparecieron, hundiéndose en el suelo.
Se adentró al pueblo, viendo su alrededor,- en verdad esto ha cambiado mucho, ¿cuánto tiempo habrá pasado?- se preguntaba, mientras observaba su entorno, se dirigió a una estación de tren que por apariencia parecía hechas a principios de siglo- ja- exclamo ligeramente- al menos esto no ha cambiado, aun se siguen usando- miro detenidamente un tren que llegaba con un poco de nostalgia, de repente unos chicos con extrañas maletas tropezaron con el vagabundo.
-ah! lo siento- un chico como de cabellos rojos- mama, papa todos espérenme- siguió el chico corriendo.
-¡vamos ron! llegaremos tarde- siguió una chica de cabellos alborotados, mientras un chico con lentes se reía ligeramente.
El vagabundo miro como se alejaba el grupo, riéndose serenamente- su cabello me recuerda a alguien- pensó mientras observaba la escena, dando una vuelta para perderse entre la multitud, ya estaba oscureciendo cuando regreso a aquel bosque, toco su frente y volvió a llamar a aquellos extraños cristales.
-¡quien está ahí!- pregunto observando hacia la oscuridad del bosque- ¿qué necesita?-cuestiono de manera cortes.
Unos aplauso se fueron acercando, dejándose ver un anciano de larga barba- eso en verdad me impresiona- dijo mientras aplaudía- y pensar que es una magia perdida- siguió mientras se acercaba al vagabundo.
-que es lo que quiere, y como supo donde localizarme- pregunto, y rápidamente se colocó detrás del anciano- y como sabe de esto- con una serena sonrisa pregunto con un cambio de tono un poco más amable- señor- termino.
-me lo dijo un pájaro- calmadamente le contesto- lo estaba buscando señor... como debería llamarle, si no es mucha molestia-dijo sin perder su aire tranquilo a pesar de la amenaza obvia pero cortes.
-mana Walker- termino aquel joven de desgastadas ropas- mana Walker, mucho gusto y usted es...-aun con las dudas anteriores, no confiando lo suficiente al anciano, pues tenía un aura extraña para su gusto.
-Albas Dumbledore, mucho gusto- término este volándose y haciéndole una reverencia.
-no era necesario hacer eso- también haciendo reverencia el extraño vagabundo- y como sabe de esta magia- le pregunto
-yo eh vivido mucho…1881 si bien recuerdo - explico el señor- digamos que se algo de lo ocurrido en ese tiempo-se rasco la barbilla, ahora el vagabundo entendió todo, entrecerrando sus ojos con cierto aire ligero.
-mmm... asi que sabe quién soy en realidad- su cara y su tono de voz cambiaron completamente- entonces ¿quiere respuestas?-el habia estado escondido de su pasado, de su gente…de todo en realidad, pues fue mucha su tristeza que fue mejor para el aislarse, perdiéndose en el tiempo y en su propio ser, pues la gente exclamaba respuestas.
-no, en absoluto- interrumpió el anciano- solo quiero pedirte un favor...
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Presente
El aeropuerto Ingles se hacía un tumulto, ahí dos figuras resaltaban, aunque solo una se mostraba orgullosa de esa atención propia de los actores de Hollywood –Esto me gusta-se agosto la gabardina roja y mostro su sonrisa, guiñando su ojo discreto a la jovencitas, quienes se sonrojaban por esta acción.
-deja de lucirte mocoso estúpido- saltando y golpeándolo hasta estrellarlo en el suelo- vamos que nos esperan-
-Tch! tú y tus secretos- dijo mientras lo miraba desde el suelo- me están hartando
-noah! ya llegaron- aplaudió ligeramente una señora ya grande mientras se dirigía al par- mi nombre es Dolores Umbridge- dijo mientras alzaba la mano, esperando una respuesta de estos dos, que la estaban ignorando, concentrados en su discusión- este,...- siguió mientras miraba a estos- señores?- pregunto
-ah! disculpe señora- hizo una reverencia y tomo la mano de la señora en frente- por nuestra tardanza
-¡rayos! madamas falta que me lleven a un asilo- dijo sarcásticamente el joven mientras se levantaba- ahora estoy entre ansia...- fue golpeado de nuevo por seeker
-disculpe señora Umbridge, este no respeta a sus mayores- otra vez se disculpaba con la señora que miraba el espectáculo con repugnancia-estos barbaros… ¿quiénes son?- pensaba- acompáñenme señores- se volteo y siguió hacia un extraño coche,- les explicare en el camino a la academia-
-¿academia?- dante pregunto, mirando al anciano, al ver que este no le respondió, alzo los brazos los puso detrás de su cabeza, levanto los pies los puso en el asiento de enfrente y miro hacia el cielo, quedando en silencio
-mph!- exclamo el viejo al ver la actitud del joven- ya te rendiste mocoso- pregunto dibujando una leve sonrisa en su rostro.
-no es eso anciano- contesto rápidamente- es solo que aunque te pregunte, sé que algunas cosas no me contestaras, mejor las descubriré solo- reclamo ignorando por completo a la señora que también se encontraba en el transporte.
-señores, entonces ustedes son enviados del vaticano, ¿verdad?- pregunto la mujer -saben de la magia- el viejo asintió la cabeza, mientras Dante solo tomo su posición anterior, ignorando a la señora, lo cual molesto a la anterior lo cual esta dijo- ¿disculpe señor? no le enseñaron modales- dirigiéndose al joven que la miro ligeramente y volvió a mirar a la ventana, otra vez pregunto- disculpe ser... fue interrumpida por dante.
- ya la oí vieja sapo- respondió altaneramente- solo que usted no me da buena espina-gruño, valiéndole el nuevo apodo, aunque el viejo solo negó para llamar a su paciencia, pues aunque no le parecía la actitud del joven….la mujer tampoco era alguien a quien tuviera su respeto.
-¿vieja sapo?- respondió indignada- usted es...- pidió Umbridge al retomar su posición recatada y mirar a dagas al joven.
El viejo volvió a golpear a dante en la cabeza y se le acercó al oído- no digas estupidez, mocoso inútil, estamos con ella por algo... - le susurró al oído-
-maldito anciano- sonrió ligeramente- sin embargo no le pediré disculpas a la anciana- apunto a la mujer que se encontraba ahí.
-continúe- seeker prosiguió, tratando que la mujer olvidara lo anterior
-bueno...- siguió la señora- ustedes fueron enviados del vaticano, ya que por estos rumbos se ha visto la persona que buscan- siguió- asi que se adentraran en la escuela como miembros del ministerio.
Dante se levantó de un golpe-¡que! voy a esta en medio de un montón de mocosos- reclamo, pero fue sentado, por su acompañante.
-tranquilízate, dante,- dirigió la mirada a la señora, que tenía un gesto de miedo al ver la reacción del joven- como sabe lo que estamos buscando y que tiene que ver el vaticano con esto- respondió
-bueno- sonrió como si hubiera ganado una batalla- según mis fuentes están buscando a esta persona- les enseño una imagen de dos personas, era un aciano de túnica azul y larga barba, y un extraño joven de cabellos cortos y blancos, en un andén- fue vista entrando en la escuela de Hogwarts- siguió- asi que por eso fueron enviados hacia aquí
-asi que ya se dejó ver- exclamo el viejo con una mirada de nostalgia, dante se dio cuenta que esa mirada era de alguien que habia perdido algo- lo conoces viejo- pregunto con una mirada burlona.
-si- respondió- éramos viejos amigos-comento con tristeza.
-¿amigos?, pero si se ve que es un mocoso- miro la foto con detenimiento.
-¡que!- exclamo el viejo mientras golpeaba al muchacho de gabardina roja- no pusiste atención a todo lo que te dije en el avión- le reclamo
-ahh! si todo lo de un tal Allen no sé qué, una no sé qué tanto de no, y un no sé cuánto tiempo...- dijo mientras esquivaba los golpes que el anciano seguía mandando.
-Tch! maldito mocoso, eres un cabeza hueca- dijo con ira, dejando de golpear o al menos tratar de golpear al joven...
-que ya te cansaste- dijo el chico esperando molestar al viejo- los años te pesan, verdad
-bueno entonces nos dirigimos a ese colegio, verdad señora Umbridge- miro nuevamente a la señora, ignorando las frases del chico a su lado.
-si exactamente, es muy probable que director, este juntando un ejército- contesto la anciana, mientras trataba de alejarse del chico de gabardina
-¿ejercito?-pregunto el anciano
-eso suena divertido, ese muchacho… ¿es fuerte?- pregunto dante, con un tono de emoción
-cállate, chico que ignora toda explicación- replico el anciano, que estaba siendo ignorado
- Tch! maldición, al parecer es muy difícil hablar con el- reclamo la señora mirando con odio a dante.
- y eso que no has viajado desde estados unidos con el- respondió el viejo señalando al otro chico, que pensaba si sería emocionante tener una batalla con ese mocoso-
-recuerda cual es nuestra misión,- el viejo cacheteo al joven, bajándolo de su nube.
-sí, si panda- respondió burlonamente- pero solo lo quiero tener una pelea divertida-exclamo restándole importancia al asunto, valiéndole la información.
-bueno tendrás una pelea con el- respondió el panda- como quiera tenemos que exterminarlo, ¿no?-
- hemos llegado- interrumpió la anciana al llegar a una estación de tren- este es el lugar-
-¡mierda! otro aburrido viaje- reclamo dante al salir del extraño coche
-cállate, niño- le siguió el anciano- asi que este es el lugar para partir a aquella escuela, verdad-
-sabe mucho, verdad viejo panda- el de cabellos blancos dijo, esperando un golpe del anciano- ya no te molesta- volteo a mirarlo con una expresión burlona
-qué caso tiene, estúpido mocoso, ya te lo dije en todo el camino- camino hacia la estación, dándole la espalda al joven, que reía de victoria, - y si, se mas que tu- siguió el anciano- entrando los dos a la estación, ya que la mujer se habia adelantado para preparar el viaje...
XXXXXXXXX FIN
Le di una leve corregida….hasta nuevo aviso revisare los demás capítulos.
17/02/16