Uniforme… ¿Arreglado?
"Está bien, me declaro totalmente culpable, yo y solo yo tengo la culpa de que Harry ande por ahí todo el tiempo con el uniforme arrugado, bueno para ser más específicos con la camisa muy pero muy mal acomodada: los botones siempre los trae mal alineados, desfajada a la mitad, y el cuello de la camisa, ¡Oh por dios! Ese cuello que me vuelve loca, no el de Harry, bueno si pero ahora estamos hablando del uniforme…"
-¿Hermione?—Una voz la saco de sus pensamientos.
-¿Si, Harry?—Pregunto con voz temerosa e insegura.
-¿Podrías ayudarme?, ¿Por favor?—Insistió.
-Cla-ro…-Sé aclaro la garganta a base del miedo—Claro, ¿A-a qué?
-Bueno, es que mi camisa está muy mal acomodada, ¿Podrías ayudarme a acomodarla?—Esto último lo dijo al odio en un susurro muy coqueto.
Hermione dudo un momento, sabía que si lo hacía podría llegar muy lejos y es que la última vez le costó mucho detenerse "Maldito Potter ¿Te gusta hacerme sufrir?"
Sus manos temblorosas sé comenzaron a acercar a los botones, desabotono uno, se arrepintió de decir que si con sus acciones, su razón entro en acción y sé detuvo.
Harry al ver la duda de Hermione decidió darle un "pequeño" empujoncito: tomo con sus manos las de ella acercándolas al siguiente botón.
-N-o creo-que dé-deba—susurro Hermione como pudo mientras intentaba forcejar con Harry—N-o aquí.
-¿Por qué no?, si no es la primera vez—Pregunto extrañado Harry ante la actitud de Hermione.
-Harry, estamos en la entrada del gran comedor y todos nos están observando.
Harry sé quedo pensativo por un momento, voltio a ver a todos los presente los cuales los observaban, algunos emocionados, otros asombrados y había el caso de varios que los veían con asco.
Sin pensarlo más, salió corriendo de ahí con Hermione aun sujetada, al irse escucho muchos silbidos.
-Harry, ¿A dónde me llevas?—Silencio-¿Harry?
De un momento a otro sé detuvo, miro hacia todas las direcciones, todo estaba desierto.
-Bien, creo que aquí será perfecto—Harry voltio a ver a Hermione la cual lo miraba interrogante—Hermione, veras sé que últimamente somos más que simple amigos y es por culpa de tú gran terquedad de que todo este perfecto—Recibió un pequeño golpe en el hombro, sonrió—Y es por eso que te amo, amo ese y cada de tus defectos; adoro que tengas esa incitante manía por quererlo saber todo; también me fasina tú pelo, si ese pelo que tú dices que está horrible, bueno pues a mí me fasina. También me gustan mucho tus virtudes, eso e solo que te hace aun más Hermione, la Hermione que amo con todo mi corazón.
No sé escuchaba nada más que la acelerada respiración de Hermione y la tranquila de Harry, el cual aunque parecía tranquilo estaba muy ansioso un respuesta de parte de la chica que amaba, hasta que recordó que sé le olvido un pequeño detalle.
-Hermione, ¿Quieres ser mi novia oficial?—pregunto mientras se acercaba a su rostro.
-¿Oficial?—lo miro extrañada ante la palabra que utilizo.
-Si, bueno es que últimamente no somos precisamente amigos nada más, así que cuando digo oficial es porque quiero que todos sepan que somos pareja, ¿Acepta?
-Mmm…con una condición—espero a que Harry le dijera algo pero simplemente hiso un pequeño movimiento con la cabeza alentándola a proseguir—Que por favor traigas el uniforme acomodado.
-Me gustaría que tú me lo "acomodes" pero está bien, ya no tendré que usar escusas para hacer esto.
Termino de decir mientras se acercaba para besarla y ella gustosa lo recibió.
"Bueno pues ahora me declaro culpable pero de que Harry siempre traiga el uniforme arreglado pero no precisamente porque él lo arreglara, digamos que sigue siendo un niño pequeño el cual me fasina cuidar"
