Bueno... Empezaré esta historia que tenía en mente. Antes que nada, tuve que eliminar 'El túnel' gracias a un comentario que dijo que tendría problemas y blabla. Y pensé que era lo mejor, no quiero tener problemas después. Por eso decidí empezar esta historia y espero que les guste. Tal vez lo que tenía planeado para el túnel lo cambie lo a algo totalmente diferente y la retome. Por ahora seguiré con este proyecto. En serio lo lamento mucho pero es lo mejor. Por eso los recompenso con esta historia.
Esta historia es después de iGoodbye. Sam jamás fue L.A. Ya verán después porque...
iCarly no es mío. Y me pone muy triste
JUST COME BACK TO ME
Prologo.
-¡Mami! – la pequeña de 8 meses gritó desde su sillita de comer, mientras tiraba su papilla por todos lados y pronto empezó a llorar.
-¿Qué paso babe? ¿Bebé está llena? – Preguntó la rubia volteándose a ver a su pequeña hija toda llena de papilla de zanahoria mezclada con sus lágrimas derramadas.
La respuesta de la bebé, fue estirar sus bracitos para que su madre la cargara.
-Dame un minuto bebé, mamá necesita terminar de limpiar, y cuando acabe te daré un buen baño de burbujas. – Contestó la rubia sonriéndole a la pequeña Anabela. La bebé lo único que hizo fue mostrar su pequeño dientecito apenas creciendo a manera de sonrisa como respuesta al escuchar la palabra "burbujas".
Después de unos minutos de terminar de limpiar el desastre que hizo Anabela en su sillita con la papilla y brevemente limpiar los restos de ella de su carita, Sam la tomó para darle un baño de burbujas y llevarla a dormir…
En sí, la bebé con apenas 8 meses y medio era muy inteligente algo que para ser sinceros no le impresionaba a Sam del todo, porque era muy obvio que se parecía mucho a su padre, aunque a veces hacía cosas que a su edad no eran muy comunes. Anabela era muy parecida a su padre físicamente en una versión femenina, y eso a Sam le agradaba porque ese pedacito de humano era un gran recuerdo de… el. A excepción de los ojos porque en eso Sam ganó la partida.
La adoraba con todo su corazón y era su vida entera y obviamente no la cambiaría por nada ni nadie. Todo fue difícil para Sam, desde dejarlo a él, hasta el nacimiento de Anabela, tuvo que batallar sola, el parto, los días y noches en vela con Anabela los primeros meses y trabajar para darle lo que ella necesitaba. Nadie sabía dónde se encontraba, y sinceramente esperaba que nadie supiera, por el bien de ella y el de su hija. Únicamente Carly, aunque hablaban muy poco, se comunicaban una vez al mes para saber lo más nuevo de sus vidas y para Sam, saber noticias de… el. Nadie sabía la existencia de Anabela, solo Carly y Sam sospechaba que Carly le había contado a Spencer, aunque sabía que si así fuera el no diría nada.
-Muy bien bebe, hora de las burbujas… - Dijo Sam, echando jabón de bebé en la bañera para formar espuma.
-¡Bubas! – Gritó Anabela entusiasmada, aplaudiendo con sus manitas y sonriendo, mostrando su dientecito que parecía un granito de arroz.
-Si bubas, bebé. – Contestó Sam dándole un beso en la frente a su hija.
Sam estaba a punto de meter a Anabela en la bañera cuando sonó su teléfono. Recordó en ese instante que podría ser Carly por su llamada del mes…
-¿Hola? – Preguntó Sam contestando el teléfono, poniéndolo entre su oreja y el hombro mientras cargaba a Anabela. La pequeña trato de quitarle el teléfono a Sam mirando con curiosidad. –Bebé, no… Mamá esta hablando- Dijo Sam tratando de detenerla.
-Sam, Hola, Es Carly. – Respondieron al otro lado de la línea.
-Ah, Hola Carls… ¿Oye podrías llamar en una hora? Es que estaba a punto de bañar a Anabela – Dijo Sam mirando a su hija, que aún trataba vanamente de quitarle el teléfono a Sam. La bebé hizo un puchero cuando Sam quito su manita del teléfono.
-Sam, es urgente. – Sam escuchó como su amiga castaña hablaba con un tono de nervios.
-¿Qué pasa Carls? – Preguntó Sam ansiosa. Presentía lo peor.
-Freddie está aquí en Roma, en un viaje de negocios. Me pidió que lo dejara hospedarse en nuestra casa por unos días, para no pagar un hotel y George y yo acordamos en que estaba bien, fue algo de último momento. Pero… -Carly se detuvo por un minuto y suspiró –Irá a Londres en unos días y se quedara un buen tiempo, es uno de sus viajes de negocios.
Sam dejó de escuchar. Freddie, ¿Vendría a Londres? ¿Por qué justamente aquí?
-Sam, sé que la probabilidad de que se reencuentren es de cero sobre cien, pero solo quería advertirte. Sabes que el mundo es un pañuelo… - Carly se detuvo de nuevo y suspiró –Y además me pregunto si sabía de ti. Odio mentirle Sam…
-Carly no le digas nada… Él no se merece nada de mí, de nosotras, no después de lo que pasó... Y no quiero que sepa de Anabela… Sé que es egoísta pero es lo mejor por ahora. – Contestó Sam, aun procesando la información.
-No lo haré. Solo piénsalo, por favor – Pidió Carly.
- Esta bien – Sam suspiró. –Carly, tengo que darle un baño a Anabela. Te llamaré después.
-Bien… adiós Sam-
-Adiós Carls y gracias...– Sam terminó la llamada…
No quería verlo… no quería. Solo esperaba que su viaje de negocios fuera al otro lado de la ciudad, lo más lejos posible y que tal probabilidad de verlo fuera tan pequeña que jamás pasara tal reencuentro y que él no supiera de Anabela… no aun.
Sam sabía que algo iba a pasar, lo presentía en su interior… y a decir verdad sentía miedo.
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Por favor dejen un review diciendome que opinan y si debo continuar. con el 1er capitulo..
Besos xxxx