Hola ha pasado un tiempo, vengo a traer este corto dividido en tres partes, tiene una dedicatoria especial, para ti.
ADVERTENCIA.
Omegaverse, drama, mpreg, si no te gusta este género no lo leas para que no pases un mal rato.
Los personajes de XS no me pertenecen, son propiedad de Christy Hui
Parte I
Su mano estaba cubierta de sangre, el grito desgarrador y el llanto llenaban sus oídos rebotando en las blancas paredes, los sonidos, el ajetreo, el aroma lo golpeaban con fuerza aturdiéndolo por breves instantes.
Aquel desgarrador grito que rompió su alma acompañada de su nombre, y más sangre le hacía sentirse inútil.
Abrió sus ojos de golpe viendo el techo de su habitación, la tenue luz de la mesita de noche le daba una tonalidad naranja, miro a su lado dejando salir un largo suspiro, aquella pesadilla nuevamente.
Se sentó en la cama frotando su rostro para reaccionar, la puerta de la habitación estaba semiabierta, un nuevo suspiro dejo sus labios, salió de la cama y de la recamara viendo la puerta de enfrente abierta y la suave luz encendida.
Con amargura camino hasta la habitación, en una esquina estaba la silla mecedora y en ella su pareja ahí sentado, meciéndose lentamente, mirando la cuna vacía que permanecería así para siempre.
Chase, Lord Heylin camino hasta su pareja, un joven Omega que conocía desde muy joven, Jack Spicer, ex joven genio del mal.
Le vio sujetando su abdomen, mirando fijamente la cuna que tenía mantas color rosa y un hermoso cocodrilo de la misma tonalidad de las mantas.
Chase se acercó a Jack viendo su joven rostro húmedo por las lágrimas.
-Jack, regresa a la cama-
Pidió con voz suave, odiaba ver a su pareja así, tan lastimado, tan triste.
-no puedo hacerlo más -
Susurro de pronto con su voz afectada cargada con angustia, Chase entendía a qué se refería, era el segundo embarazo que terminaba de la misma manera.
-Jack... -
-no puedo... Ya no puedo perder otro bebé, me duele-
Le dijo con amargura, Chase podía sentir el dolor desgarrador en aquellas palabras, lo entendía, entendía que Jack ya no podía hacerlo más.
Se arrodillo frente a él y sujeto sus manos.
-está bien Jack, si no quieres no lo intentaremos más, no quiero que sufras de nuevo, no quiero estar a punto de perderte otra vez-
Hablo Chase con voz calmada para que Jack dejase de llorar.
Pero a Chase le afectaba también, ambos querían una familia, ambos lo intentaron y fallaron, perdieron dos niños y Chase las dos veces casi pierde a su Omega.
-lo siento, lo siento mucho-
Se disculpó llorando el pelirrojo, Chase se inclinó y lo cubrió con un abrazo reconfortante para ambos, era un cálido abrazo que servía para calmar a ambos.
Chase lo llevo consigo de regreso al dormitorio, le ayudo a acostarse ya que solo hace dos semanas habían perdido al bebé, y el cuerpo Jack aún estaba delicado.
En la cama lo cubrió con las mantas y lo envolvió entre sus brazos.
Jack y Chase intentaron tener bebés aunque sabían que estaba el riesgo de que los perderían, la razón es simple, Jack había sido marcado por otro Alpha muchos años atrás, y no podría tener familia con Chase.
Había sido marcado a los 16 años de una manera horrible, en un callejón a pleno día, sin que nadie le prestara ayuda, había sido algo traumático para Jack.
Chase fue su pilar de ayuda, aunque se había repuesto rápidamente, Jack era fuerte y salió adelante luego de beber varias píldoras para no quedar en cinta de aquel Alpha que debería ser su pareja destinada. Jack no quería otro Alpha en su vida, solo quería uno, ser marcado solo por uno pero, el destino es cruel y aunque quisiera a Chase, no podía hacer nada contra el destino.
Chase suspiro y atrajo más a Jack contra su cuerpo, sabia, conociendo su pareja debía estar sintiéndose inútil, pero no lo era, no era su culpa, solo el destino era cruel con ellos.
Protegiendo a su Omega se durmió pero a ratos despertaba para asegurarse de que estaba aún dormido entre sus brazos.
Luego de aquel día Jack no regreso a aquella habitación, Jack debería estar bien ahora, debería estar repuesto pero no lo estaba, Chase se estaba preocupando, solo se quedaba en la cama, comía poco, no quería salir del dormitorio, no le estaba haciendo bien ver así a Jack.
Pero no quería presionarle, sabía que debía ser doloroso para Jack, y aunque este siempre era ruidoso, feliz, algo ególatra, inquieto no podía pedirle que fuese el de siempre sabiendo lo que había sufrido.
Solo debía ser paciente y esperar, darle su amor u apoyo emocional en un momento tan delicado para su amado. Omega.
Una mañana despertó y Jack no estaba, sabia donde debía estar, fue hasta el dormitorio pero no esperó a ver lo siguiente.
Habían cajas apilada, la cuna y la mecedora no estaban, Jack estaba doblando la ropa que le habían comprado a la bebé y la estaba guardando toda.
Se acercó a él y lo abrazo por la espalda sujetando sus manos mientras tenía un vestido rosa entre sus blancas manos.
No dijeron nada, no hacía falta, Chase beso su nuca con amor, y Jack sabía que con ese acto, Chase jamás le dejaría solo.
-gracias... Por ser paciente Chase-
Agradeció Jack soltando el vestido y entrelazo sus dedos con los del Lord.
-gracias por darme tiempo y estar ahí conmigo, pero lamento no poder darte un heredero-
Se disculpó luego bajando la vista triste.
-está bien Jack, ahora me importa tu bienestar, has pasado por mucho, aun eres joven y... Siempre podremos adoptar si eso te hace feliz-
Le dijo abrazando su cintura y beso su hombro, Jack como Omega tenía su instinto "materno" desarrollado, pero solo había pensado en hijos cuando iniciaron su relación, antes le había dicho que no quería hijos con el Alpha que lo marco, pero si quería solo con Chase.
Jack sonrió y poso sus manos sobre las de Chase, quizás en un tiempo más, no sería mala idea adoptar para calmar su deseo de tener hijos, ahora se concentraría solo en su pareja y su trabajo, nada más importaba ahora.
-vamos, te ayudare a guardar-
Le dijo Chase separándose de su pareja y ambos comenzaron a guardar las cosas de la bebé.
Cuando la habitación estuvo vacía, Jack permaneció ahí de pie un momento pensando en todo lo que le había ocurrido, ser marcado tan joven por alguien que no conocía y supuestamente estaban destinados a ser pareja, su corazón siempre le perteneció a una sola persona y a pesar del amor que se tenían no podrían traer al mundo el fruto de este gran afecto.
Dejando salir un pesado suspiro se giró para salir de la cálida habitación, apago la luz dejando en penumbras el lugar que debería haber visto crecer al pequeño fruto de su amor.
Pero Jack estaba condenado por aquella marca.
Es habitación se mantendría en penumbras.
Para siempre.
~ ~ ~ ~ Explicación ~ ~ ~ ~
Okey, aquí va la explicación que nadie va a leer.
Hay un mundo del Omegaverse donde el Alpha y el Omega son destinados a ser pareja por selección natural, es decir que cuando el Omega entra en solo solo el Alpha destinado podrá marcarlo, los demás Alphas no.
Cuando un Alpha marca a un Omega este no entra en celo y cuando lo hace no es "atractivo" para otros Alphas ya que el Omega tiene un dueño.
Se da el caso en que el Omega no ama al Alpha y se niega a tener una relación, se queda con otro Alpha pero sucede esto, al no ser compatibles y al no ser marcado por el Alpha actual, el Omega no puede tener los hijos de este Alpha.
Así que se quedan así, juntos pueden estar pero no podrán traer un bebé al mundo.
Gracias por leer.
