Disclaimer: Dragon Ball y sus personajes son propiedad de Akira Toriyama.

SOLAMENTE TÚ

En medio de las lágrimas, de los abrazos apretados y los besos desesperados, lo hicimos. Hicimos el amor en completa tristeza.

Estaba mal, completamente mal. Lo sabía y no encontraba el modo de dejarlo atrás. No después de la primera vez.

El problema: la vida, la vida fácil; la vida adinerada, las falsas expresiones, la falta de realidad, las faltas de vivir.

Sólo hasta aquel día, o eso creía.

Se limitó a sus ojos y nada más que sus ojos. La verdad estaba ahí, la más cruda realidad.

¿Sería ella, todas sus ganas de vivir?

¿Un cuerpo pequeño, delicado, níveo y blanco, todas sus ganas de vivir?

En aquel instante se sintió un hombre sin experiencia, precipitándose a la locura.

Ella no era sólo un cuerpo que respiraba a la par de su demencia. No. Ella era más, mucho más. Sus labios rojos y abultados de tantos besos respiraban amor, el amor más simple y sincero que alguna vez alguien le entregó.

Labios apoyados en labios, se detuvo, respiró y habló:

—¿Por qué tú? ¿Por qué solamente tú?

Ella sostuvo su cara con ambas manos, quitó mechones lilas que entorpecían los azules de su otra alma, y susurró:

—¿Por qué tú? ¿Por qué solamente tú, Trunks?

Silencio.

Nuevamente, ahora ambos, se limitaron a los ojos del otro. Se profesaron un amor eterno en silencio.

Se movieron juntos una vez más. Ella, él, unidos por el placer, por la prohibición, por la locura que provocaban los besos y las caricias que no debían ser.

Los susurros se convirtieron en suaves jadeos, en aceleradas respiraciones, en pequeños quejidos. Apretó la almohada, la mandíbula masculina y cerró los ojos, y ella lloró. La miró, la abrazó, la acunó y le pidió perdón.

Las lágrimas brotaron, manchando el rostro perfecto—. No me dejes —pidió como niña, como lo que en realidad era.

No respondió.

Más lágrimas, más tristeza y más desesperación—. No me dejes, por favor —rogó.

Él sólo la abrazó, la apretó contra su pecho mientras una sola lágrima se deslizó y cayó sobre el hombro, aquel pequeño hombro.

Notas autora:

No sé qué es esto... solamente es.

Gracias por leer.

Kattie.-

10.11.2013