Disclaimer: Naruto es propiedad de Kishimoto. Y el siguiente aviso: Este Fic participa del Reto Palabra al azar del Foro La Aldea Oculta Entre las Hojas.

Bien comencemos, espero les guste y esta pequeña historia les haga feliz.

"Tu belleza ilumina mi camino y a la vez tus ojos me hacer perder mi camino. Haré que de mi amor nunca te olvides, y que en tu mente, mis recuerdos queden, y si es cierto que el amor con el tiempo muere, haré que el tiempo detenido quede."

Suspiro como cualquier mujer enamorada haría, porque los versos trazados en línea eran tan sinceros. Brinco de alegría mientras abrazaba a su confidente de ojos negros. Estaba entre la débil línea de sorprendida y alegre.

Sorprendida porque ¿Quién iba a pensar que las hermosas palabras fueron escritas por nada más ni nada menos que Fugaku Uchiha, el patrocinador de los emos Uchhas? Y alegre por ver esa hermosa sonrisa dibujada en el rostro de Mikoto que siempre había sido como una brillante chica enamorada.

Itachi, venia cargando a su hermano pequeño de tan solo unos meses y miraba la escena divertido. Nunca le había dicho nada a su mama pero su papa se pasaba noches en vela para poder escribir esas simples líneas. Era gracioso ver a un hombre tan fuerte y poderoso ser desesperado por un poema. Pero también era almirante el sudor de su frente para ser feliz a su enamorada.

-¿Tu esposo nunca te escribe nada? – Mikoto pregunto sorprendida. Ya para ese instante ambas se encontraban sentadas en la sala de estar una frente a otra mientras tomaban él te.

-No, pero él es más práctico.

-¿Mas practico?

Sonrió en respuesta. Más bien era despreocupado, pero sonaba mejor como decir que era práctico. Ya que tampoco era el mejor filosofo de Konoha. Aunque eso no quisiera decir que no la quería, al contrario le demostraba todo su amor a través de acciones. Pero las que más le hacían feliz, eran las palabras que sin esfuerzo escapaban de entre sus labios. Eran tan sinceras y claras. ¡Por dios! ¡¿A quién no le gusta que le digan qué guapa estas hoy?! O que la comida que uno prepara es deliciosa y que es el hombre más afortunado del mundo por tenerla a su lado.

Y si nada más a ella le gustaba esos pequeños detalles era por culpa de Minato que la había enamorado de esa forma. Como olvidar aquel día cuando el la salvo de ser secuestrada y le dijo que su cabello es hermoso De repente, Minato parecía ser el más magnífico Shinobi. Se veía como un hombre que haría que todos sus sueños se hagan realidad. Y lo más importante, él la cambió... Su cabello rojo se volvió su alma gemela... se convirtió en su "hilo rojo del destino". A partir de ese día, le gustaba su pelo y, sobre todo, se enamoró de Minato