Hinata estaba conmocionada.
"Ppero ¿Po-porque y-yo?" Preguntó a su padre. El siempre la ponía nerviosa, ni si quiera había logrado formar toda una oración sin titubear frente a él.
"Si no puedes deducirlo tú misma, no vale la pena que pierda mi tiempo en explicarlo." Dijo con un tono severo. No pasó mucho tiempo para que se retirara, dejando a la chica sola, asustada y confundida…
¿Asustada? Pensó la chica. No sabía el porque, pero sentía temor por lo que tendría que hacer.
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Miró al piso. Luego a la pared. Examinó todos y cada uno de los centímetros que tenía el techo. No quería mirarlo, no a la cara, menos directamente a los ojos. Pero como siempre, lo que ella quería no se cumplía.
El chico la tomó por la barbilla, haciendo que esta le mirase.
"Si sigues así no te gustará para nada convivir conmigo." Dijo en tono seco el chico, un escalofrío recorrió su espalda.
"¡H-hai!" Dijo la chica, y él la soltó.
El silencio volvió a hacerse mientras él seguía revisando papeles sobre esto y lo otro.
"Tú nivel." Dijo de pronto.
"¿lo-o sient-to?"
"Tú nivel. ¿Qué eres?" Preguntó con desinterés.
"A-acabo… acabodeconvertirmeenjounin." Dijo rápidamente. El chico volteó a verla.
"Curioso." Dijo, aunque realmente no parecía importarle la respuesta sino el modo en que lo había dicho. Aunque su rostro tenía un semblante neutro. "¿El nivel más alto que tienen en esta familia son los jounins?" Preguntó de nuevo, mientras leía el nuevo pergamino.
"N-no… So-solo y-yo soy jounin lo-los demmás sson ANBUs. Pe-pero Nneji está en una m-misión yy es el mmáas apto."
De nuevo se hizo el silencio.
"Y-yo m-me llamo Hi-hinata. ¿T-tú?" preguntó, algo nerviosa por la incomodidad. "S-sé lo q-que puedes ha-acer y lo q-que ssos p-pero nno sé t-tu nombre." Dijo, al verlo mirarla, e intuyó que lo que había dicho lo incomodó.
Después de unos momentos de verla, perforándola con sus ojos, volvió a su trabajo. La Hyuuga se resignó a que era mejor de aquella forma.
"Me llaman Sabakuno Gaara."