Advertencias: BL/Yaoi (relación chico-chico), si no te gusta por favor no leas. Posible OoC (nunca he escrito sobre personajes que no sean creados por mí y soy una principiante en esto .)
Disclaimer: Star Wars pertenece a George Lucas y a Disney y a no sé quién más xD Este fic está hecho sin ánimos de lucro.
Pareja: Poe DAMNeron (lo siento, tenía que escribirlo xD)/Finn
Dedicado a: Mi sis, Ocean's Whispers. Sé que ahora estás en el infierno Kylux :P pero meh, me introdujiste en este ship que adoro tanto así que espero que lo disfrutes :3
Finn POV, escena situada durante el viaje en el Halcón Milenario hacia Takodana donde encontrarán a Maz Kanata.
A veces me despierto sobresaltado. Una destartalada y vieja nave no es el mejor sitio para dormir. Pero no es por ello por lo que muchas noches me veo abriendo los ojos de golpe, con la respiración agitada y con un grito arañándome la garganta, luchando por salir.
En realidad es mucho más que el polvo que pulula por el aire, metiéndose en mis ojos desorientados y enrojecidos; y más que los ronquidos tan desagradables que resuenan como truenos a punto de descargar centelleantes rayos.
Porque lo que me tortura cada noche, al cerrar los ojos y dejar que la oscuridad me arrope es algo mucho más primitivo que eso: se trata de puro y simple miedo.
¿Pero miedo a qué?, me pregunto…
Miedo a todo, me respondo.
Los últimos días han sido los más intensos, inesperados y descontrolados de toda mi vida, literalmente. La "visita" a Jakku fue el comienzo de todo, de mi despertar, de mi viaje a la libertad… Por primera vez me sentí vivo, me sentí yo… Pero también fue el comienzo de la montaña rusa en la que se ha envuelto mi vida. Empecé a sentir, todo lo bueno sí, pero a su vez todo lo malo. Y estoy tan confuso… Demasiadas cosas han pasado en demasiado poco tiempo. Y ahora que parece que hay un poco de paz no puedo sino temblar de miedo por las noches, incapaz de hacer frente a las pesadillas que me acosan.
Porque repito, tengo miedo, mucho.
Lo primero que veo al cerrar los ojos es a ella. De entre la oscuridad en la que me veo envuelto se va formando una figura, desde los pies hasta la cabeza. Es alta y cuando la miro a los ojos se convierte en un gigante con su capa ondeando al viento. Entonces me devuelve la mirada y todo mi cuerpo se estremece y tiembla descontroladamente, a pesar de que la máscara de metal cubra su rostro y no pueda observar su expresión. Estoy completamente paralizado, me siento incapaz de hacer nada frente a la gigante de metal, además ¿qué puede hacer alguien tan pequeñito que ni siquiera llega a la altura del pie de la mujer? Entonces ella alza una de sus enormes botas mientras la oscuridad se va aclarando y del cielo comienzan a caer estandartes con el símbolo de la Primera Orden. Ahí es cuando corro. Pero me cuesta. Intento dar un paso y después otro, intento alejarme de Phasma y de los estandartes que caen amenazándome con aplastarme y engullirme, pero mis piernas se mueven a cámara lenta. Los latidos de mi corazón se aceleran hasta que me cuesta respirar, desesperado por poder correr y salir de ahí, huir a un lugar en el que no me encuentren. Huir, huir, huir… Es todo lo que me repito mientras intento que mis pies avancen más rápido. Pero es imposible. Sé que no podré huir lo suficientemente rápido… e incluso si algún día lo consigo, la Primera Orden me seguirá hostigando en mis interminables pesadillas…
Y es ahí cuando me revuelvo inquieto y consigo abrir los ojos, repitiéndome constantemente que estoy a salvo, lejos de ellos, de camino a mi completa libertad. Sé que eso no es suficiente para tranquilizarme (nunca lo es), mi corazón sigue latiendo alocado en mi pecho sabiendo que por más que huya no será suficiente; me encontrarán. Paso una temblorosa mano por mi frente en un intento de hacer desaparecer el sudor que se escurre por mi piel y vuelvo a cerrar los ojos con fuerza, apretando los dientes para hacer callar la voz en mi cabeza. No funciona y me remuevo, incómodo, justo cuando percibo que la chaqueta de Poe Dameron se desliza de mi pecho al suelo. Entonces abro los ojos bruscamente y, desesperado (¿desesperado?), busco a tientas la cazadora en el frío suelo, soltando un suspiro de alivio (¿alivio?, ¿por qué?) cuando la encuentro. Con las dos manos me la llevo a la cara y al fin mi cuerpo (y corazón) dejan de temblar y sacudirse tras envolverme en el suave aroma que todavía desprende. No sé por qué pero siempre que me encuentro agitado el recuerdo de Poe y su chaqueta me hacen recobrar la paz. Todo se llena de silencio y vuelvo a cerrar los ojos, esta vez ya relajado y suspirando, con el intento de esbozo de una sonrisa.
Hasta que el silencio se rompe al volver a caer en el mundo de los sueños donde todo se retuerce. Esta vez la oscuridad que me rodea no es tan profunda y poco a poco una figura se va formando enfrente de mí. Al reconocerla sonrío sin poder evitarlo, y extiendo mi brazo en un intento de alcanzarle. Él al principio tiene una expresión ausente, pero al verme sonreírle me responde, con la sonrisa iluminándole los ojos (ah, cuánto había echado de menos ese brillo en sus castaños orbes…). Entonces, cuando nuestras manos van a alcanzarse, de pronto caemos y aparecemos en una nave que me es terriblemente familiar. Poe ya no está delante de mí y puedo escuchar su voz alterada y angustiada, intentando huir de lo que nos persigue. Pero es demasiado tarde para escapar y nos disparan, derribándonos. Cierro los ojos, intentando deshacer la sensación de déjà vu que me da dolor de cabeza y vuelvo a abrir los ojos, mareado. No nos hemos estrellado y percibo que estoy en un lugar diferente. Poco a poco me doy cuenta de que los pies me pesan, la respiración se me dificulta y tengo algo en la cabeza que me la cubre completamente. Tras al fin enfocar la vista, siento un peso en mis manos y las levanto, percatándome de que tengo un bláster negro y reluciente, desafiándome. Me asusto. Yo no quiero estar ahí, no quiero volver a sentir ese traje engullirme y ahogarme. No quiero sentir ese pitido en mi oreja derecha que me impide concentrarme en mis manos que se están moviendo como si alguien las estuviese manejando desde fuera, como una marioneta. Y mis ojos se llenan de lágrimas de desesperación al darme cuenta de a dónde apunta mi arma. O mejor dicho a quién. Poe me mira arrodillado desde el suelo, con el rostro descompuesto en un gesto de estupefacción, miedo, rabia y dolor a partes iguales.
—Finn… —suplica con la voz ronca y desgarrada.
Y yo quiero gritar, quiero que mi cuerpo me responda y tire el arma para abalanzarme hacia sus brazos y estrecharle como si no hubiera un mañana, rogando por su perdón. Pero mis manos siguen apuntándole y siento que me voy a desmayar. Entonces él agacha la cabeza, derrotado y sin esperanza… Y disparo.
Me incorporo sobresaltado, aullando "Poe" al vacío de la nave y rápidamente me giro a la izquierda, donde un cuerpo en otra cama (aunque a eso no se le puede llamar cama, no llega a tanto) se remueve molesto por el ruido. Retengo la respiración unos momentos, los suficientes para calmar mi respiración y para comprobar que el cuerpo no se despierta, y entonces siento que algo apretuja mi corazón, sin piedad. No es Poe, es Rey. Y no sé por qué pero darme cuenta de ello me destroza por dentro y los ojos se me llenan de lágrimas. Poe está muerto… me repito como un disco rayado. Poe está muerto… El labio me tiembla y reprimo un sollozo. Con cuidado y algo mareado estiro el brazo izquierdo hasta rozar la mejilla de Rey. Ella está aquí, me digo. Y un escalofrío me recorre entero porque tengo miedo de perderla a ella también… Al darme cuenta de este pensamiento mi primer impulso es cogerla de la mano y estrecharla entre mis brazos para no dejarla ir nunca. Pero en vez de eso retiro la mano y me restriego los ojos, impidiendo que salga alguna lágrima traicionera para después abrazar la chaqueta de Poe mientras me vuelvo a tumbar mirando hacia el lado izquierdo y observando a Rey dormir. Sé que ya no volveré a conciliar el sueño o si lo consigo sé que serán más pesadillas; todas iguales… sobre la Primera Orden o sobre Poe o sobre Rey, así que me limito a velar el sueño de mi amiga mientras vuelvo a recordar la sonrisa de Poe y el color de sus ojos y su desordenado pelo... Si bien ya no está conmigo siempre puedo revivirlo en mi mente, me digo, y aunque suena muy patético es lo único que por momentos alivia mi aturdido corazón.
Si solo pudiera volver a verlo una vez más…
Notas de la autora: Hola hola! Bueno al fin, después de llevar bastantes años aquí en fanfiction, me he atrevido a publicar algo :) La historia tratará de varios capítulos cortos en orden cronológico (o esa es la intención), todavía no sé cuántos serán y todavía no me atrevo a hacer una historia con una trama en condiciones, así que de momento solo escribiré fics de este estilo pero sobre otros fandoms. Y con suerte en un futuro cercano os pueda presentar un fic largo y retorcido en condiciones xD
Lamento de antemano los posibles errores que pudiese haber en este escrito, pero en mi defensa alegaré que hace mucho que no escribo u.u Y también lamento si Finn quedó muy llorón o sensible pero el pobre ha pasado por mucho en muy poco tiempo y considero que sentirse así sería bastante normal en su situación. Aun así acepto sugerencias y críticas CONSTRUCTIVAS, me encantaría mejorar para que los siguientes capítulos sean cada vez menos OoC ^-^
Por último (lamento estas notas tan largas) solo diré que el objetivo de este fic es que, por un lado, mis ansias de esta pareja se calmen un poco (estoy bastante obsesionada con estos dos xD) y por otro lado que aumente el número de fics StormPilot en español. He visto muchísimos en inglés y de hecho era la pareja más popular del fandom (hasta que llegó Kylux… ¬¬ xD) y me da mucha pena que haya tan pocos en español :(
Gracias por leer ^3^