Todos los derechos de los personajes le corresponden a Stephenie Meyer. Sólo la creación de la historia es de mi autoría.
Todos Humanos.
Edward y Rosalie son forzádos a casarse. Tratándo de comenzar una nueva vida se mudan a Forks dónde conocen a sus verdaderas almas gemelas, Bella y Emmett. ¿Lograrán ocultar su matrimonio de las personas que aman?
Cada capítulo lleva el nombre de la canción que me inspiró y forma parte de la historia.
Les agradecería, y ayudaría mucho a la experiencia, sí escuchan la canción elegida.
También, please, déjen sus reviews...
Son 18 capítulos los que tengo planeado escribir, por ahora llevo 4, si tienen alguna idea de cómo terminar la historia o alguna queja o sugerencia (hehe) please, please déjen sus reviews y/o comentarios!
¡Que la disfruten tanto como yo la he disfrutado al escribirla!
1er. Capítulo "Requiem On Water" -Imperial Mammoth
Requiem On Water.
Tomé un poco de labial y lo apliqué mientras una lágrima recorría mis mejillas. En menos de 2 horas sería una mujer casada.
-¡Basta! No más lágrimas - le decía a mi reflejo en el espejo al limpiarme la cara una vez más.
En ese momento entró a la habitación Angela, mi mejor amiga.
-Rose, ¿todavía no estás lista? Los invitados ya llegaron.
-Ya casi termino - dije fingiendo una sonrisa - ¿podrías ayudarme con la peineta?
Angela colocó la peineta de oro blanco y zafiros sobre mi cabello rubio.
-Te ves hermosa como siempre - dijo llena de emoción -Tu vestido está precioso, muy Kate Middleton, sencillo pero elegante - mencionó también - ¡Ay, Rose! ¿Porqué no me dijiste con más tiempo que te casarías? Podríamos haber planeado la boda del siglo.
-Reí nerviosa - Lo lamento, amiga. A Edward le han ofrecido el puesto de director del Hospital General de Forks, él no podía esperar más tiempo para casarnos.
-Aún así, me sorprendió mucho el anuncio de su compromiso - mencionó con indiferencia.
Me miré al espejo una vez más, trataba de recrear la cara de una mujer emocionada por casarse, quería que los invitados no vieran lo miserable que era. Aunque estaba segura que todos estaban sorprendidos de que a menos de un mes de conocernos Edward y yo nos casaramos... Y es que, la verdad, había toda una historia por detrás:
"Los padres de Edward, Carlisle y Esme, fueron intimos amigos de mi padre, cuando él murió les hizo prometer que cuidarían de mí, y así fue por varios años hasta que mi madre los convenció de que Edward y yo, al cumplir la mayoría de edad, debíamos casarnos.
La noticia me llegó hace exactamente 6 meses, cuando fallecieron los padres de mi próximo esposo.
Mi madre estaba que no cabía de felicidad.
-Rosalie, despídete de todos nuestros problemas financieros. Te he asegurado una vida llena de comodidades. Deberías de estar agradecida - me repitió una y otra vez.
Y es así como llegamos a este día. El día de nuestra boda.
Conocer a Edward fue una de las experiencias más incómodas de mi vida, él es alto, cabello bronce, hermosos ojos verdes, el tipo de hombre que todo padre quisiera para su hija, pero la verdad es que no me sentía atraída a él para nada.
-Trataré de hacerte feliz - fue lo único que me dijo ése día y no de una forma romántica o cariñosa, sino frívola y seria."
Al regresar a mi realidad más lágrimas cayeron en mis mejillas.
-Rose, ¿estás bien? - me preguntó Angela asustada.
-Es sólo que... - empecé a decir, pero al ver su cara y recordar mi promesa de casarme con Edward cayé y la abracé - es sólo que te voy a extrañar muchísimo, como no tienes idea.
Y no es que haya mentido, en verdad iba a extrañarla, todo iba a ser diferente ahora, Edward y yo nos iríamos a Forks solos, no conocíamos a nadie allá, bueno excepto a Alice, una amiga intercambio de la universidad de Angela, pero sólo la conocía por fotografías.
-Ella me dijo que vivirá muy cerca de su nueva casa, ella es muy agradable, te aseguro que te caerá bien.
La abracé una vez más.
-Eso espero - sonreí.
-Debo irme, nos vemos en un rato.
-Adios, Angela.
Cuando ella cerró la puerta terminé de preparame.
Estaba lista. Estaba lista para casarme con Edward, estaba lista para iniciar esta farsa.
