Chihiro de nuevo despierta con un nombre que pronuncia sus labios, mientras lagrimas se deslizan por sus mejillas con el corazón palpitante y sintiéndolo al sueño tan real.
No fue el primero y bien presentía que tampoco iba a ser el último.
Desde hace años, cinco años para ser exactos había comenzado a tener esos sueños. Soñando con lo mismo, un chico, un nombre, una promesa y una aventura que se repite y continúa en sus sueños, pero solo... ¿Es un sueño?
Esa pregunta que no puede responder también se repite, se siente tan vivido que siente que no lo es, a pesar de que no creer que lo sea, es una locura creer que sea lo contrario porque sino implicaría que existen espíritus, brujas y dragones. Demasiado fantástico, lo que su madre cataloga como una gran imaginación. Y en un principio eso es lo que creyó, pero los sueños se repetían y algunas veces se continuaban lo que hacían pensar que no debía ser un sueño.
No obstante no había forma de comprobarlo y no podía seguir creyendo que lo era, pero esa promesa que hizo Haku como se llamaba el chico de su sueños, le incitaba a seguir creyendo y no perder las esperanzas.
"¿Volveremos a encontrarnos?"
Pregunta Chihiro en el sueño.
"Estoy seguro"
Responde Haku y antes de que Chihiro pudiera replicar. Añade.
"Promesa. Ahora vete y no mires atrás"
Teniendo de vuelta Chihiro el mismo sueño, la misma escena y su corazón ansioso porque eso tenga continuación, pero después de decir él que no mire hacia atrás, él empieza a desvanecerse y ella despierta.
Sintiéndose tan real que no puede creer que solo sea un sueño. Sin embargo ahora que esta despierta, no quiere volver a dormir y a pesar de que aún es temprano, se prepara para ir al colegio, desayuna y se encamina al mismo a pasos lentos.
Mientras se repite esas palabras...
¿Volveremos a encontrarnos?
Estoy seguro.
Promesa. Ahora vete y no mires atrás.
Recordando el sonido de su voz. Tan...
Sus pensamientos son interrumpidos cuando justo siente que su brazo es tomado. Deteniéndose completamente, se gira. No pudiendo evitar que se le dilataran los ojos sorprendida por lo que esta presenciando, como sonrojándose al ver que el chico de sus sueños se encuentra detrás suyo, aunque se ve más alto y más varonil, indicando que aproximadamente tiene su misma edad.
¿Es un sueño?
Se preguntó al ver a Haku. Debía serlo, sintiendo que su respiración se detenía y los ritmos de su corazón aumentaban.
—Finalmente te encontré... Chihiro —Al oír lo que dijo y escuchar esa voz. Se le queda mirando, ya ignorando todo su alrededor, viéndolo solo a él.
Pudieron transcurrir minutos o solo segundos sintiendo ese agarre en su brazo, pero al final pudo responder esa pregunta que empezó a hacerse desde hace años.
¿Es un sueño?
Y ella esta vez muy segura, se responde que no lo es.