Bueno, esta historia mayormente es inventada, y ambientada en la época actual, pero intentando mantener el estilo del manga de Pandora Hearts.

Esta historia esta escrita por dos personas, mi novia, quien ha hecho este capitulo, y yo, que haré el siguiente (si es que logra captar la atención). Obviamente, tengo su permiso para ponerlo aquí.

Odio, detesto…. Esos ojos, ver como cada vez que salgo del cuarto ese viejo que se dice padre mío me mira con recelo, no es culpa mía que no seamos realmente familia, salgo de casa, prefiero incluso dormir bajo un puente antes de esa casa mas solo voy por… mama, sigo sin creerme que aguante tanto, realmente es una loca de patio pero no queda de otra, miro el cielo, toco sin quererlo mi ojo, azul como el más el otro lleva una lentilla morada, no quiero que nadie vea su color real, ese dorado viejo, suspiro nuevamente mientras camino por las calles, cargando a lo que más amo en esta vida, mi peluche, siento el sonido de mi móvil, no contesto, no tengo ganas.

Entro a las tiendas de ropa para buscar algo de mi interés y nuevamente suena el teléfono lo sacó del bolsillo y veo que es Ayuko, sonrió sutilmente, una de mis amigas, cierto, hoy es su cumpleaños, se me quedo el presente en casa y no planeo volver, ni modo se lo daré otro día, por ahora con algún llavero se conforma, la conozco, contesto.

-Alice! malamalamalamala-

Grita a lo que despego el teléfono de mi oreja aguantando la risa ante su infantilismo para luego volverlo a mi oreja ya sabiendo que dejo de gritar

-perdón ¿que hice esta vez?-

Pregunto riendo relajándome lentamente para luego escuchar lo de la fiesta y que tenía que ir a lo que bajo levemente la vista, no quiero

-Si no vienes me enojare-

Definitivo, si no voy la pagare caro, ni modo, suspiro y voy a la casa de mi amiga luego de ver un peluche de lobo que sé que le gustara, comienzo a apresurar el paso a el paradero para subirme en un autobús para unos paraderos después bajarme y caminar a la puerta de mi amiga, de seguro estará ella y su primo, no me junto con mucha gente, me repelo bastante

Noto como se abre la puerta y se trata del mayor el cual me saluda con la mano para dejarme pasar, me agrada bastante aun cuando no hablemos mucho, paso y le saludo mientras hablamos calmadamente más repentinamente siento un empujón y me veo en el suelo con la azabache encima abrazándome sonriente, me separa luego para mirarme alegre y que hablemos un poco, dentro de esto saco el peluche de lobo y se lo entrego a lo que esta torpe infantil me abraza nuevamente sonriendo por el regalo para luego invitarme a su cuarto junto al mayor

Como siempre una larga conversación entre amigos, es como cuando nos conocimos de niños, un chico silencioso que daba algo de miedo pero siempre jugando con esa niña de cabello extraño, siempre sonriéndole

-Alice, ¿en que piensas?-

Repentinamente escucho la voz de Ren, le sonrió y toco su frente, pensar en ese pasado es cálido pero no puedo quedarme en el, no puedo seguir pensando en cosas así como así, noto sus ojos mirarme fijamente, mis mejillas se enardecen mas rápidamente volvemos a la conversación que teníamos junto a la traviesa que esta sentada jugando con su peluche, realmente la quiero, Ayuko siempre será esa pequeña niña, esa pequeña que nos anima siempre, la quiero mucho

-Alice-chan, Ren-nii, vayamos a comer algo jaja-

Dice repentinamente y la veo fijamente, ella decide hoy, total es su cumpleaños, noto como afuera comienza a hacer frió y suspiro, salir apresurada de casa no fue buena idea como me visto yo siempre, noto en ese momento una mano en mi cabeza y como luego esta baja a mi hombro

-Venga Alice, yo te presto una chaqueta pequeña damita descuidada-

Comenta el mayor a lo que afirmo con la cabeza sonrojada, cuando hace estas osas no puedo evitar colocarme nerviosa, noto levemente como la eterna sonrisa de Ayuko se desdibuja mas rápidamente vuelve en si

-Ok, vamos Ren-

Digo para luego acompañarle a su cuarto esperando en su cama la chaqueta, noto como busca una pequeña para mi que de seguro aun así me quedara grande, cierro un poco mis ojos acostándome con poco en su cama meditando todo a mi alrededor, noto un peso sobre mi y es la chaqueta que el me paso, se le nota sonrojado, toco mi rostro y estoy igual, noto como se me acerca estamos a centímetros

-Solo por hoy quiero probar algo-

Comenta para repentinamente besarme, no lo correspondo ni lo rechazo, simplemente la cosa se da, nos separamos mirándonos rápidamente mas nada ahí que decir, camino rápidamente cargando en mis brazos a mi peluche y el camina atrás mío, ¿decepcionado quizás?, Ayuko como siempre se cuelga de mi brazo y de el de su hermano nos mira como si nada mientras comenzamos a caminar a algún lugar para comer, no se que decir, ¿debería saberlo ella?

Llegamos a la tienda y miramos que comer luego de encontrar una mesa, miro a los hermanos, noto como siempre la mirada de Ayuko, mirando como siempre a Ren, no se que sentirá por el, puede que amor o respeto, ella es a difícil de entender par quien la conoce realmente, terminamos de comer y nos separamos en la puerta tengo que llegar a mi casa al final de cuenta, ellos igual, noto la voz de Ayuko dar un pequeño grito y luego una reprimenda y a mi lado repentinamente pasar alguien para a los segundos ser seguido por el castaño el cual rápidamente a los segundos llega a mi lado la morena respirando agitada

-Ese-ese tipo se llevo mi peluche-

Dice a lo que les seguimos mas no pensábamos que veríamos algo así, noto a Ayu-chan correr tratando de ir a tomar su mano mas es tarde, desapareció, ese chico que es importante es nuestras vidas, ese chico que me robo un beso, ese chico que vuelve realidad la sonrisa de mi amiga acaba de ser absorbido por un orificio negro en el suelo junto al sujeto de antes

Duele… duele bastante mi pecho…. Ren… ¿Qué paso?