Es mi primer intento en esto xP.

A ver como sale.

Sólo quedan unos cuantos días para que llegue la fecha señalada. Ha pasado tanto tiempo desde que la vi. Era tan bonita, tan perfecta. Ahora que lo pienso me da rabia no haberme dado cuenta. Todos esos días que la vi y no aprecié su belleza. La hecho de menos... Ya hace tres años que no la veo. Tres años sin ver la luz del sol.

Los primeros días fueron los más duros, pero luego me acostumbré. Ya sabía de casos anteriores, pero nunca pensé que me ocurriría a mí. Y ahora, el día en el que hace dieciocho años que nací, el día en el que todo se humano quiere celebrar su "libertad", me encuentro presa de la soledad. Una presa forzada. Más hoy que cumplo la mayoría de edad he recibido la peor de las noticias de estos últimos tres años: dentro de poco, no sé de cuanto tiempo estoy hablando, va a venir a cobrarse "su pago". Él siempre me dijo que yo era libre, que me dejaba ir, pero después de salir siempre cerraba la puerta. Nunca le creí.

Ya no me acuerdo de sonreír. Tampoco recuerdo con exactitud los rostros de mis familiares. A la gente que se pregunte qué es el infierno, les diré que yo ya lo he vivido.

No he dejado ni un momento de pensar cómo salir de esta prisión. Me dije a mi misma desde el primer día que no me rendiría. Conseguiré escapar, tengo fe en mi. Todas las noches rezo para que me venga un plan, pero después de tres años ninguno a avanzado más allá de mi pensamiento.

Cómo puede estar tan ciega. Lo tenía delante de mis ojos y no lo vi. El plan estuvo debajo de mi todo el tiempo. Ya estaba pensado: rompería un tablón del somier de la cama y con él me defendería. Estoy nerviosa, ,pues nunca había estado tan cerca, ya casi puedo escuchar el sonido del viento.

Duermo todos los días con la madera bajo el brazo. No perdería esta oportunidad, ahora que estoy tan cerca no pienso dejarla escapar.

El día ha llegado. Ya oigo sus pasos. Estoy sentada al borde de la cama y cerca de mí, escondida bajo las mantas, está mi salvación.

Se abre lentamente la puerta. No logro descifrar su mirada. El miedo quiere apoderarse de mí, pero intento impedírselo. Sé que si algo sale mal nada va a acabar bien para mí.

Me tiene sujeta de las manos. Si no las suelta no podré cogerla. Mi respiración le ha hecho entender que tengo pánico, pero se confunde. No puedo negar el hecho de tener miedo en una situación como esta, pero lo que ocurre es que estoy nerviosa.

Ha llegado la hora. Es ahora o nunca. No puedo dejar que llegue a más. Lentamente voy alargando mi mano. Ya está en mi poder, no hay marcha atrás.

Todo a pasado muy rápido. Se que no ha muerto, lo he visto respirar. Mis piernas no dan para más, no he dejado de correr ni un solo segundo. Solo he dado la vuelta, una vez fuera de mi jaula, para cerrar la puerta. No permitiría dejarle escapar, tiene que pagar por lo que ha hecho.

Después de tanto tiempo la he vuelto a ver. Es más bella de lo que recordaba. El mundo es perfecto. El mundo ha seguido avanzando, ¿en qué estoy pensando? ¡Claro que avanza! Sólo soy yo la que no se ha movido. Tres años sin que el mundo sepa de mí. Pero las cosas han cambiado, ya estoy fuera y volveré a mi vida, lo sé.

Por fin veo una comisaría. Ya empezaba a creer que no habría una. Entro corriendo. Los policías y de más gente a mi alrededor se quedan mirando. Hay tantas caras en torno a mí, pero yo no veo nada. En mi mente sólo hay la imagen de una chica. En el fondo de la comisaría hay una foto colgada. Su rostro me suena. ¡Pobre! Está desaparecida.

Mi mente ha logrado reaccionar. ¡Claro que me suena!¡Soy yo! Así que todo este tiempo no han dejado de buscarme...

Un policía se acerca con una manta en las manos, parece preocupado. Me envuelve con ella y siento un gran alivio. No me había dado cuenta que estoy tiritando. Ahora me fijo en lo que llevo puesto. No me he cambiado desde que él me llevó a mi infierno. Pero la ropa está cortada. En mi jaula siempre era verano.

Acaba de llegar una familia. Esta llorando, perece nerviosa. Me miran. Parecen conocerme. No logro entender nada de lo que dicen. La mujer corre hacia mí y me abraza. En este momento me doy cuenta. Ha vuelto al mundo. Ella es mi madre. ¡Mi familia ha venido a por mí! ¡Por fin seré feliz!

Noto como los músculos de la cara se tensan y como las mejillas se empapan. He vuelto a sonreír.

Miro el reloj de la comisaría. Han hecho falta tres años, dos semanas, cinco horas y cuatro minutos para volver a ser feliz.

Espero que dejen sus comentarios. Gracias por leer!! ^^