No soy dueña de los personajes propios de a banda ni de los creados por mis amigas.
Un relámpago iluminó el cielo nocturno, casi parecía amanecido por el brillo... 8 segundos después un trueno sonó con tal fuerza que los pequeños niños Niccals despertaron.
Otro relámpago, y el trueno sonó 4 segundos después, la tormenta se acercaba, y la guitarrista se asustaba, la aterraban las tormentas.
Akuma vio por la ventana de la cocina uno de los relámpagos, parecía la furia de un dragón. La electricidad le recordó a Milla y sonrió levemente.
Murdoc abrazó a sus niños y los acunó para que se durmieran nuevamente. La lluvia era tan torrencial que los zombies no habían salido.
Leez y 2D iban por toda al casa desconectando los electrodomésticos para que la tormenta no los dañase.
Russel estaba en la casa de Obsidian y la tormenta había tirado las líneas así que no podía comunicarse.
Milla se rezagó en su cuarto, ni el agua ni la tormenta eran buenas para su estado. Noodle como estaba aterrada decidió ir con ella. En el momento en que Akuma preparaba café para pasar la noche ya que los niños no se dormirían la luz se fue.
En la oscuridad Akuma podía ver como si de visión nocturna se tratase. Sin embargo lo que la preocupaba es lo que oyó, lo que todos oyeron.
_poco a poco, todos morirán, uno...por uno...-dijo una voz susurrando, desde las paredes.
Todos corrieron a la cocina como podían tropezando o cayendo, pero tratando de no quedarse solos.
_todos oyeron eso?-preguntó el vocalista, todos asintieron la diablesa generó una bola de fuego púrpura en su mano para iluminarlos.
_Solo es una broma de mal gusto, nadie quiere matarnos- dijo Leez algo escéptica.
_yo creo que fue muy real, amiga- dijo la ojiverde.
_Cielo, creo que será mejor que estés alerta- dijo el satanista y su mujer saco sus rasgos demoníacos al máximo, su cabello estaba largo casi hasta el suelo sus alas completamente desplegadas y sus uñas como garras eran tan amenazadoras como sus colmillos.
Un grito de mujer se oyó y Stuart reconoció la vos de su novia.
_ Leez!!- gritó el, pero nadie respondió. Había desaparecido sin mas.
_ Murdoc, dejaste solos a los niños?- preguntó Milla y al ver la expresión del bajista corrió a la habitación de los pequeños. Otro grito se oyó, esta vez era la rusa.
Todos corrieron a la habitación de los bebes para encontrar allí el cuerpo inerte de los niños y el de la loba amontonados a un lado de la vieja cama de la princesa del Averno.
_ NOO!!!!! –gritaron al unísono los padres de los diablillos.
_ no me agradaba ella, pero no quería vera muerta- sollozaba Milla mientras acariciaba el cabello de la loba- y los niños, porque se llevó a los niños?
_ Akuma...tu padre no podría..?
_ No Muds- interrumpió ella- cuando un demonio muere ya no puede ir a ningún lugar.- de sus ojos brotaban lágrimas de mercurio, abrazo a su esposo mientras ambos lloraban la muerte de sus hijos y compadecían a el vocalista que lloraba amargamente la perdida de la joven Lilith.
_uno a uno...seguirán cayendo... – Se oyó desde las paredes.
_ Milla, puedes restaurar la energía para tener luz?-preguntó la nipona
_supongo que puedo intentarlo- dijo ella
_ Pues voy contigo Milla.-dijo akuma- los demás quédense aquí.
Ambas muchachas se dirigieron a la caja de fusibles del segundo piso.
_ esto no me gusta nada, tres vidas inocentes se perdieron y no sabemos como- dijo la rusa.
_ por eso vine contigo, perdí a mis hijos y a mi mejor amiga, no dejaré que te pase nada a ti, mi pequeña.- dijo Akuma tomando la mano de Milla.
En la caja de fusibles milla trató de reestablecer la corriente pero no había caso.
Mientras volvían el pequeño demonio del baño se le presentó a Akuma.
_Alteza, el amo Murdoc me envía a comunicarle que dos cuerpos mas aparecieron el la habitación de forma misteriosa.- dijo el con una voz aguda y burlona.
_te dijo quienes eran?-preguntó la rusa
_ dijo que ustedes mismas deberían verlo.- la diablesa le dijo que las acompañara y tomando a milla por el brazo se deslizo a través del suelo al piso de abajo apareciendo en la habitación de los niños. El cuerpo de Russel y el de Obsidian yacían junto a los demás.
_ Ellos ni siquiera estaban aquí- se lamento la nipona y abrazó a su novia.
_No debemos lamentarnos hoy, hay que encontrar la manera de sobrevivir. Dijo 2D soltando la mano de Leez la cual había estado sosteniendo todo el tiempo.