Disclaimer: los personajes de Naruto no nos pertenecen, le pertenecen al genio Masashi Kishimoto
Bueno, me dio el loco y estoy editando el fic, ya que noté que tenemos ciertos problemas de puntuación. basicamente es lo mismo, pero con algunos leves cambios en la narración y redacción.
Este fic lo estamos haciendo en conjunto Nonahere y yo xD inspirado en "La vida es bella" pero no se relaciona con la película, ambas nos esforzamos mucho y esperamos que sea de su agrado, esperamos comentarios y criticas ^_^, el fic es shikatema y se pondrá muuy interesante conforme avance
SUMMARI:
¿Que tanto puede cambiar la vida por un viaje en avión? Casuales encuentro iniciados por miradas, Shikamaru y Temari viajan a New York tratando de olvidar su pasado, por casualidad se conocen, se enamoran, pero ¿Qué juego cruel les puede traer el destino?, son separados, aun así por casualidad vuelven a encontrarse, pero ellos no lo saben. ¿Casualidad o destino? ¿Sobrevivirá el amor o la separación y desconocimiento serán más fuertes?
Capitulo 1: Prólogo: "Avión"
Abriéndose paso entre muchas más personas de las que creyó habría ahí, logró llegar a su asiento del avión y, después de acomodar su pequeña mochila con una laptop y lo necesario para no aburrirse en el vuelo, se sentó junto a la ventana observando el gran aeropuerto. El joven pelinegro, de coleta alta, llamado Shikamaru vio como algunos aviones aterrizaban y otros más elevaban su vuelo, mientras esperaba el despegue del propio. En eso, una voz se escuchó desde los alto-parlantes.
"Pasajeros del vuelo 238-24 con destino a New York, este es su capitán. Les informo que estamos a punto de despegar y arribaremos, aproximadamente, a las 8:30 p.m. hora de New York. Disfruten del viaje"
Y, después de abrochar su cinturón de seguridad, sintió como el avión se elevaba. Miró una vez más por la ventana y se dio cuenta de que sería la última vez, en mucho tiempo, que vería su país natal. Japón.
Pasó varias horas entre dormiteos, un poco de comida y algo de distracción por internet. Además hizo unas llamadas a su amigo Chouji, quien decía que no podría recibirlo en el aeropuerto debido a cuestiones de trabajo, y escuchando los mensajes de su madre que, por cierto, no había contestado hasta ese momento. Sabía que ella se molestaría, pero en cuanto llegara a New York le llamaría. Y, por si eso fuera poco, tuvo que soportar las múltiples llamadas y mensajes de su ex, Ino, pidiéndole que la perdonara y que regresara con ella, cosa que -obviamente- no estaba dispuesto a hacer. Definitivamente, no quería ver nunca más a Ino, no después de aquello que ella le hizo.
Definitivamente, su vida estaba llena de mujeres problemáticas y, en resumen, ese había sido un vuelvo aburrido. Al menos, hasta ese momento.
Su fila de asientos estaba sólo ocupada por él, por lo que los dos asientos del corredor estaban desocupados. En ese momento vio algo que le llamó la atención, más bien, alguien. Una rubia bastante atractiva se puso de pie y comenzó a caminar rumbo a la parte trasera del avión. «De seguro irá al baño» pensó. No pudo evitar mirarla por completo, era una joven muy atractiva físicamente y no sólo él lo notó, sino que la mayoría de los hombres ahí presentes voltearon a verla, pero ella los ignoró.
Al cabo de algunos minutos vio como la joven regresaba y, en ese momento, un hombre de unos 50 años se puso de pie quedando frente a ella, "accidentalmente". El sujeto se detuvo y ella también, quedando en el pasillo junto a la fila de asientos de Shikamaru. Como el pasillo era muy estrecho, la rubia se giró de perfil dando al joven moreno una vista de su cuerpo totalmente completa. Era muy hermosa, con ojos color esmeralda, porte elegante y con un cuerpo perfecto, según el moreno y los hombres ahí presentes.
El hombre quiso hacer lo mismo que ella y pasó tras la joven de ojos verdosos como si nada, pero antes de seguir su camino la mano de aquel sujeto se deslizó frente a la rubia, tomándola por la cintura y tocando el vientre de ella casi llegando, con sus dedos, a su intimidad. El sujeto sonrió y dijo algo al oído de la chica. Shikamaru, quien veía todo, quiso por un segundo estar en el lugar de ese tipo, pero dejó de quererlo segundos después cuando la joven, peinada con cuatro extrañas coletas, se giró disgustada y golpeó al sujeto en el estomago. Alejándolo de ella ante de comenzar a gritar.
– ¡Maldito viejo degenerado! – Rugió, palmeando con su mano derecha el pecho de aquel atrevido. – ¡¿Que le sucede?! ¡No es esa la forma de tratar a una dama, le exijo una disculpa! –Terminó cruzándose de brazos y taconeando el suelo del avión, impaciente.
Tan pronto como la rubia comenzó a gritar varias azafatas se acercaron, mientras que los demás pasajeros veían aquella escena, sorprendidos.
– ¡Maldita zorra! – Dijo el sujeto tocándose el estomago, al parecer, el golpe había sido bastante fuerte.
– ¡Es usted un desgraciado! – Volvió a arremeter la fiera muchacha – ¡Deberían de tirarlo por el avión en pleno vuelo! Y así se estampase en el suelo y se quebrara toda la madre, desgraciado hijo de… – No pudo terminar, puesto que una de las azafatas decidió intervenir.
– ¡Señorita!, ¡por favor! – Exclamó, escandalizada, una joven mujer de cabellera cobriza atada pulcramente – Le pido que guarde la compostura – Le pidió la azafata, tratando de tranquilizar a la chica – Señor…no sé que sucedió, pero si sigue causando disturbios tendré que levantarle una advertencia que será llevada acabo en cuanto lleguemos al aeropuerto. Compórtese, por favor. Podría ser arrestado – Le advirtió al desgarbado sujeto.
– Personas como usted merecen pudrirse en la cárcel !Viejo verde! – Le espetó la muchacha de coletas, aun hecha una furia.
– Señorita – La llamó la azafata, con tono de reproche en su voz a pesar de haber sido poco más que un susurro –Usted también puede ser arrestada por disturbio, por favor, tome asiento y olvidémonos de este penoso asunto – La mujer de cabello cobrizo tomó, con su mano izquierda, el hombro de la joven mientras, con la otra, señalaba el asiento que ella antes había estado ocupando. La de ojos verdes bufó, pero obedeció a la otra mujer.
– Como sea, viejo idiota – Le susurró antes de alejarse del tipejo aquel. Ella, como si nada hubiera sucedido, llena de dignidad e ignorando las miradas de los demás pasajero, volvió a su asiento. Al igual que aquel sujeto.
Shikamaru, desde su lugar, aun estaba un poco intrigado por aquella mujer y no pudo evitar seguirla con la mirada y, gracias a que su asiento estaba en diagonal al de la rubia, la pudo ver de espaldas a él. Se quedó observándola detenidamente.
Ella tenía una laptop en las piernas y en el instante en que la apagó, la pantalla se puso totalmente negra. Justo en ese momento, sus ojos se encontraron por primera vez, aunque fuera a través de la pantalla, y ambos sintieron un cosquilleo dentro. La chica, al sentir el calor en sus mejillas al ver a aquel hombre tan guapo observándola, cerró de golpe la laptop tratando de distraerse. Estaba nerviosa y sus manos temblaban, pero –con esfuerzo- lo ignoró.
Shikamaru, sintiéndose pillado, volvió la vista a la ventana advirtiendo que sus manos se ponían frías en un instante. Al parecer, ella se había dado cuenta del atrevimiento de él al observarla y se había molestado. Para ser una mujer tan bella también era una muy gritona, como había comprobado minutos antes con el accidente con el anciano pervertido.
– Hermosa y…problemática – Se dijo a si mismo, en un susurro, mientras se formaba una sonrisa torcida en su rostro. Por alguna razón, eso le atraía aun más.
Las siguientes horas transcurrieron normales, sin nada de interés como el espectáculo de hace un rato. Él no pudo despegar la vista de aquella hermosa y gritona rubia; a la cual había vuelto a observar luego de varios minutos después que desviara su oscura mirada de ella. La joven, en un par de ocasiones más, se había levantado de su asiento y pasado frente al de él, ofreciéndole -sin querer- una hermosa vista de sus piernas y de todo su cuerpo, debido a la pequeña falda que llevaba puesta. Y, aunque había pasado por ahí, ella ni siquiera le había prestado atención al joven pelinegro con el que había cruzado su mirar rato atrás. Decepcionándolo levemente.
"Pasajeros del vuelo 238-24, estamos por arribar al aeropuerto internacional de New York a la hora programada. Les pedimos que no se levanten de su asiento hasta que el avión esté totalmente detenido y les agradecemos haber viajado con nosotros"
Tan pronto como el avión se detuvo las azafatas indicaron la salida de éste y todos se pusieron de pie. Shikamaru tomó su pequeña mochila y se dispuso a bajar, aun tenía que buscar un taxi e ir a casa de Chouji donde él lo esperaría. Mientras avanzaba volteó, una vez más, hacia el asiento, verificando que nada se quedara y, en eso, sintió su cuerpo chocar con el de alguien.
– Lo siento… – Dijo automáticamente, volteándose nuevamente, y se sorprendió al ver que con quien había chocado era la hermosa rubia que había estado observando durante el viaje, mas no fue capaz de decir nada más. Sus miradas se cruzaron y, en ese instante, ambos sintieron que el tiempo se detenía a su alrededor. Sin embargo, un ligero empujón que ella recibió los hizo volver a la realidad.
– No hay cuidado…– Susurró ella, una vez salida de su ensoñación, luego caminó rápidamente rumbo a la salida del avión. A los pocos segundos, aun con un calambre en el estómago y las manos frías de puro nervios, Shikamaru también bajó de éste, jurando que las mejillas de ella cambiaron de color cuando sus miradas se encontraron. Aunque sólo hubiera sido un instante, quería pensar que ella se había sonrojado, puesto que sería una señal de que ambos habían sentido esa extraña sensación en el estómago. Junto a esa extraña conexión.
Espero que siga habiendo gente que lee nuestro fic C: ! y que les guste la edición.
Traeré una nueva edición el proximo sabado y retomaremos este fic, probablemente, en Octubre.
gracias por la super paciencia que nos tienen y, sobretodo, me tienen xdd.
besitooos byeee. review? xD
