El día no había sido especialmente entretenido. No hubo ninguna llamada, ninguna investigación latente.. Solo papeleo... Hoy Castle estaba tranquilo intentando hacer pajaritos de papiroflexia, que claramente estaban muy por encima de su nivel.

-Tierra llamando a Beckett...pi pi.. Tierra llamando a Beckett .Dijo Castle moviento su "pájaro" de papel, si se le podía llamar a eso pájaro.

-Algunos tenemos que trabajar, no hacer muñequitos de papel. Contesté un poco cortante.

-Pero si no te he dicho nada. Contestó poniendo ojos de cordero degollado. -Además ahora Alexis me esta maltratando... Dice que no me va a decir lo que habla con sus amigas.

-Pues normal Castle, ¿tú se lo contabas a Martha?

-Dudo que la interesase, vamos con 15 años ya estaba encerrado en el internado.. Bueno en uno tras de otro. Contestó intentando disminuir lo que había sucedido.

Iba a contestarle pero, sonó el teléfono.

-Detective Beckett.

-¿Katie? Reconocí al instante esa voz, algo raro debía haber pasado para que estuviese llorando

-¿Lizzie? ¿Pasó algo? ¿Estaís todos bien? Pregunté nerviosa. Castle al otro lado me miró sorprendido, le hice una indicación para que se alejara pero no se movió.

Escuche sollozos al otro lado del teléfono y palabras entrecortadas sin sentido. Sabía que algo malo había ocurrido.

-Lizzie, necesito que respires y que hables un poco más calmada, no me entero de nada.

Se hizo un silencio y escuché nítidamente.

-Es Alex, ha...muerto..le atropellaron.

Me quedé en shock. Se me cayó el teléfono de las manos, no me podía mover. Reaccioné lo más rápido que pude y sentí como si me clavasen un puñal. Los ojos se me llenaron de lágrimas.

Sujeté con fuerza el móvil y me lo puse en la oreja. Al otro lado, Lizzie estaba llorando.

-No se cómo decirte cuánto lo siento..tras un breve silencio pregunté ¿los niños?

-Bueno, no no entienden mucho lo que pasó.. Kate.. ¿Podrías...

-Mañana como tarde estaré allí, no quiero ni que me lo pidas, voy a estar a tu lado, a vuestro lado. ¿Hablaste con...?

-Si..pero ahora tampoco quiero tener que pelearme con él y le pedí que no viniese... Dijo lo más calmada que pudo y se echó a llorar.

-Voy a prepararlo todo, se fuerte por ti y por los peques... Te quiero. Dije intentando aguantar las lágrimas que no dejaban de caer por mis mejillas.

Hablamos un poco más y colgamos, me derrumbé tapandome la cara con las manos. ¿Cómo era esto posible? ¿Entre toda la gente que puede tener un accidente le toca a él?

Pasado unos minutos me limpie la cara y levanté la cabeza y vi el rostro preocupado de Castle ofreciéndome un pañuelo.

-¿Puedo hacer algo Kate?

Negué con la cabeza, y me levanté. Castle me cogió de la mano, cosa que no hacíamos, al igual que llamarme Kate, y me dio un leve apretón indicando que estaba ahí, a mi lado. Le miré y le envíe una sonrisa un poco agridulce, porque agradecía que no me presionara y se preocupara por mí.

Toc, toc.

-Pase. Se oyó desde el otro lado de la puerta.

Pasé y cerré la puerta lentamente. Supe que Montgomery se había percatado al instante de que algo no iba bien. Me senté en la silla de delante de su mesa mirando al suelo.

-Roy, es Lizzie..su marido. Dije sin poder contenerme y me eché a llorar. Sabía que él me apreciaba como una hija y no sentía que tuviera que controlarme en su despacho, allí podía desahogarme.

El comisario se acercó a mí y me abrazó, permitiéndome liberarme y cuando me pude contener me separé y un poco más a gusto le conté lo ocurrido y mi necesidad de tomar una baja.

-Kate, no te puedo asegurar que te vaya a pagar todo el tiempo que estés allí pero, si tienes que estar a su lado, vete. Cuando vuelvas tu puesto estará aquí . Si necesitas más tiempo para dejarlo todo atado, no dudes en cogertelo. Elisabeth necesita de ti.

-Gracias señor.

-¿Lo sabe Castle?

Me sorprendió su pregunta.

-No señor, sólo lo sabe usted y mi padre. Montgomery no contestó y asintió con la cabeza, tras un breve silencio me despedí de él.

Al abrir la puerta y volver a mi puesto me encontré bajo las miradas de Expo, Ryan y Castle que me miraban fijamente con sus rostros preocupados.

No me sentía capaz de dar explicaciones y me fui al escritorio a recoger mis cosas.

-Kate, ¿qué ocurre? Castle se había acercado a mi y me lo preguntó bajito.

-Castle, me voy a tomar unos días tengo que solucionar un asunto. Le dije intentando dar por terminada la explicación.

Castle me puso la mano en el brazo y me susurró.

-Cualquier cosa que necesites o que pueda hacer por ti, dimela. No sé que ocurre pero debe ser grave, prometeme que te cuidarás.

No sabía si pegarle una torta o besarle tras esas palabras. En otro momento me habría enfadado porque yo sé que sé cuidarme por mi sola pero, su rostro demostraba su preocupación y no pude contenerme.

-Castle, pasate luego por mi piso.. Te lo contaré.

Castle asintió y me dejó ir.

...

Tres horas llevaba organizando y empaquetando. Comprar el billete a ultima hora había supuesto casi un mes de sueldo, había dolido un poco, pero necesitaba estar con ellos.

Abrí la puerta ante la timbrada de , muy posiblemente, Castle.

¡Oh! Traía unas flores y una bolsa.

No dije nada y él se quedó asustado y estiró el brazo con las flores acercandomelas.

-Hola...son para ti.

Cogí las flores de su mano y pasé hacia dentro invitándole a entrar. Ya había puesto en agua las flores y Castle aún no estaba dentro.

-Castle, entra ya.

Me hizo mucha gracia verle mientras volvía a tierra moviendo la cabeza y disculpándose. La verdad es que sin querer queriendo siempre sabía sacarme una sonrisa tonta.

-Te hice un pastel, bueno un bizcocho, es mi bizcocho de los días grises.. Tiene una receta castespecial, seguro que te gusta y si no... Bueno.

No entendía porqué estaba tan nervioso, pero me estaba amenizando un poco.

-Gracias.

-Siempre.

-Sientate en el sofá, te pongo un café, dame un minutillo. Y no cotillees que nos conocemos.

Era la primera vez que Castle venía a mi piso, el salón no tenía mucho pero le conozco y sabía fecientemente que no se puede controlar.

Unos minutos después, volví y le encontré sentado, sin haberse movido desde que me fui. Quizás le intimidé demasiado.

Me senté en el otro lado del sofá y tras probar ambos el café comencé a hablar.

-Tengo una hermana.

...

Este verano voy a ir actualizando las historias y esta la tengo ya casi acabada.. Espero qque la disfrutéis tanto como yo ^^