Este fic está dedicado con todo mi yo a Hyal. Press usted sabe como yo la adoro y por eso me había propuesto hacerle un Uchihacest, pero esto es lo que ha salido. Espero que le guste, de verdad, ha sido pensando en usted, además de que sino me veré en la obligación de matarla. Pero no se preocupe, la libre expresión sobre todo eh ;D.

Mis agradecimientos por el beteo para Aelilim.

Disclaimer: Naruto no me pertence.

Su cuerpo se emocionaba y el corazón comenzaba a bombear con más rapidez la sangre cada vez que lo veía. Una reacción muy parecida a la de cuando se encontraba con el amor de su vida.

Solo que al amor de su vida no deseaba sacarle los sesos por la boca.

Cuando estaba frente a este otro sentía unas ganas tremendas de saltarle a la yugular, ver como su sangre, igual a la suya, bañaba sus manos y sus ropas; de deleitarse con la forma en la que se retuerza de dolor bajo sus pies. Cuando se trataba del amor su vida, también tenía ganas de verle suplicando y retorciéndose, pero no precisamente a causa de dolor alguno, sino del placer que él le proporcionaría si se dejaba acariciar por sus labios sedientos.

Sentimientos distintos. O tal vez no tanto.

Porque a pesar de que la acción no sería la misma, el corazón le late con igual intensidad. Ambos sentimientos tan fuertes que duelen.

Y es que el odio es también un sentimiento, tan fuerte, que te consume. Tan inmenso que abarca demasiado, que viene a ser todo lo que importa y en este caso, más la sed de venganza, se vuelve tanto, que te deja sin fuerzas. En ocasiones, ni siquiera para amar.

No importa la devoción por el rubio de mirada limpia como el cielo despejado, si siempre que te encuentras con aquel que lleva tu sangre, abandonas al primero sin miramientos.

Porque a veces el mismo Naruto se preguntaba qué sería más fuerte. Si el amor que el chico de mirada fría sentía por él, o el inmenso y profundo odio que le profesaba a su hermano mayor. Porque a veces ni el mismo Sasuke puede distinguir qué le interesaba más.

Porque ambos sentimientos involucran la pasión. Te quieres vengar con toda el alma. Es un deseo.

Uno muy fuerte. Una necesidad.

Tal vez por eso siempre dicen esa frase tan trillada, de que del odio al amor sólo hay un paso. Más razón no se puede tener.

Y eso fue. Me he dado cuenta de que soy una autora de puros drabbles, pero en fin.

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