N/A: Fics cortito que he querido hacer hace tiempo, ojala les guste.
Disclairme: Ni Arrow ni The Flash me pertenecen, ellos son propiedad de DC Comic`s.
Capitulo Único: Panqueques.
Roy se lo había visto venir. Sabia que algo parecido sucedería ni bien vio a ese niño poner un pie en Starling City.
Solo fue cuestión de tiempo. Tampoco se debía ser un genio o un adivino como para no ver lo que sucedía con el paso lento del tiempo y sacar las suposiciones correctas que llevarían al resultado final exacto. Tal vez él no era muy listo, pero sabe que fue uno de los primeros en notarlo por ser un espectador de primera fila junto a Felicity.
Había pasado el tiempo, con sus buenas y malas, sus altas y bajas. Sabe que aunque haya tenido sus experiencias junto al forense, no puede evitar sentir cierto resentimiento para con él, sobre todo cuando a Oliver no le costaba nada de su esfuerzo en sonreír cuando el castaño esta cerca. Es egoísta de su parte, pero cuando Lyla le dice, con toda su ternura de mujer, que es natural sentirse de aquella manera, entonces la culpa pesa menos.
La cafetera en la cocina suena con esa musiquilla que tanto odia, pero no se levanta ni mucho menos de la mesa en la que lee el periódico como cualquier domingo. Casi de inmediato, Barry entra a escena dejando la puerta nueva de la cocina semi abierta. Llevaba puesto la camisa de gala azul aqua de Oliver con sus botones cerrados menos los primeros dos y unos calzoncillos de Superman que a cualquiera le parecería ridículo usar en publico, pero que al meta-humano no parecía importarle demasiado en realidad.
Roy se queda quieto en su sitio, tanto que le pareció una eternidad.
Barry le daba la espalda, sacando utensilios que no sabia que tenían y otros cuanto que no sabia que existían. Saca leche de la nevera, al igual que la harina y los huevos del estante a un lado del microondas. Solo cuando tuvo todo al alcance de su mano fue que el velocista volteo a verlo con una sonrisa sincera.
-Empezare a preparar los panqueques para el desayuno... -le aviso risueño.
Roy sonrió mostrando sus perfectos dientes.
-Ya era hora. Te habías quedado dormido -le reprocha, culpándolo de casi haberlo dejado sin desayuno.
Barry suelta una carcajada limpia, casi aniñada y Roy se permite también reír. Por que él también es joven y se lo merece.
Puede que al principio, Roy hubiese sentido celos de Barry. Por como podía resolver temas de su vida sin la necesidad de derramar sangre, por como había logrado cautivar a Oliver Queen sin esfuerzo cuando a él le había costado horrores.
Si, había sentido celos.
Pero si Barry aparecía con su sonrisa genuina y un plato de panqueques con miel solo y especialmente para él, entonces no había ningún problema.
N/A: ¿Les gusto? Ojala que si.
¿Caramelos y dulces?
¿Golpes a la cara?
¿Villancicos y pastel?
¿Comentarios? ¡Todo vale!