Quizás la vida no era perfecta para él, pero a Boruto le gustaba como era.

Vivía en un lugar tan lejano, solamente con su madre y un puñado de gente como vecinos, era un lugar muy pequeño, pero le gustaba estar allí. Su mamá lo amaba más que nada en el mundo, sus momentos favoritos era cuando ambos se sentaban en el tatami a mirar el jardín mientras ella acariciaba sus rubios cabellos mientras le sonreía, a veces le cantaba hasta que él cayera dormido, algo simple, pero lo disfrutaba en verdad.

Otro de sus momentos preferidos era cuando entrenaban juntos, su madre le había dicho alguna vez que ella había pertenecido a una familia muy antigua, ella heredo sus ojos, él no, por eso no podía enseñarle todo lo que ella sabía, pero el Juken era útil a su modo de ver, y de alguna manera masoquista, disfrutaba que su madre le diera una paliza mientras practicaban, aunque sabía que ella se contenía lo más que podía, después de todo, su madre era la persona más amable que conocía. Cada vez que lo tiraba al suelo, podía ver su expresión de arrepentimiento y le preguntaba si se había hecho daño, él solo sonreía y le decía que estaba bien.

Como había dicho, no era una vida perfecta, a veces escuchaba los comentarios de los vecinos y a veces de los viajeros, la palabra "bastardo" siempre salía de sus bocas en susurros, él sabía que significaba y de cierta manera lo entristecía. Siempre que le preguntaba a su madre por su padre, recibía una sonrisa incomoda y luego su cara se teñía de un semblante de vergüenza y culpa, una vez cuando estaba realmente enojado, su madre le dio una explicación.

"Él no sabe que existes"

Entre todas sus teorías, nunca pensó que uno de sus progenitores no supiera de su existencia, cuando intentó seguir interrogando ella suspiró.

"Es mi culpa, por mi debilidad fuiste creado, pero tu padre ni siquiera recuerda como paso"

Ese día estaba tan enojado que salió de casa y no volvió hasta el otro día, luego ella se enojó de verdad con él por lo preocupada que estaba.

Los días posteriores solo se mantenía callado y lo más alejado posible, dentro de sus propios pensamientos, no quería pensar lo peor de su madre, porque sencillamente alguien tan buena no podía ser lo que los demás decían a sus espaldas, pero ella ni parecía enfadarse por esos comentarios, cuando su madre no soportó más simplemente le dijo lo siguente:

"Deje Konoha porque estaba enamorada de alguien que jamás iba a corresponderme, la deje porque pude tener una familia al lado del hombre que amaba pero que él jamás me amaría, yo lo quería tanto que no deseaba su infelicidad, así que simplemente desaparecí y jure que a la única persona que amaría de ahora en adelante ibas a hacer tú"

Y las preguntas acerca de "él" cesaron, lo que ella había dicho era cierto, ella lo amaba más que a su propia vida, la había arriesgado cuando ladrones intentaron asaltar el pueblo y ella los derrotó sola cuando trataron de hacerle algo, cuando ya no había comida, ella se lo ocultaba dándole lo poco que había y sonriendo diciéndole que todo estaba bien, lo cuidaba con tanta dedicación, así que Boruto supo que jamás podría odiar a esa mujer, no importa que hubiera hecho ni que fuera, él la amaría de la misma manera como ella lo había demostrado.

La vida que tenía le hacía feliz, pero esa felicidad no duraría para siempre, la gente a su alrededor empezó a enfermarse gravemente, poco a poco iban muriendo, y entonces su madre también enfermó.

Él trataba de cuidarla como ella lo hacía, le animaba para que se recuperará, ella asentía con una sonrisa, como siempre ocultándole las cosas. Pronto ella empeoró y ya ni podía salir de la cama, ardía en fiebre todas las noches, él pasaba todas las noches cambiando los pañitos de agua fría para intentar que la fiebre se fuera, pero no parecía funcionar, fueron varios días así, él cuidaba de ella mientras dormía, pero un día el cansancio le gano y se durmió a su lado sujetando su mano, antes del amanecer se despertó sintiendo el peor frio que hubiera podido sentir en su corta existencia, cuando abrió los ojos su mamá ya no respiraba y supo que su mundo se acababa de derrumbar.

No importaba cuanto llorará, ella ya no despertaría, cuando se cansó de llorar se sentó afuera de la casa sin saber que hacer, mientras miraba el suelo tratando de aceptar que acababa de quedarse solo sin la persona que más amaba, una sombra tapo la luz del sol.

— ¿Eres Boruto? — Preguntó un señor alto, blanco como un muerto y con ojos como los de su madre.

— ¿Qui- quién eres? — tartamudeó un poco al sentir su gélida mirada.

— Soy tu abuelo — Eso lo tomó por sorpresa, no dijo nada, pero parecía que él no necesitaba una respuesta — ¿Dónde está mi hija? — Cuestionó, pero él no podía decir nada, sus labios temblaron.

— Deja de estorbar — Él escuchó la voz de una mujer rubia que ni siquiera había visto llegar y ella pasó a su lado sin dirigirle ni una mirada.

El hombre también paso a su lado y entro a la casa, Boruto no los siguió, no quería volver a la casa, estaba cansado y una parte de su alma estaba muerta también.

— ¡Esa tonta! – oyó la mujer gritar frustrada, ni siquiera le importo que haya insultado a su mamá.

— Tsunade-sama , estoy seguro que ella pidió ayuda cuando lo creyó conveniente… — Oyó la voz de su supuesto abuelo detrás de él.

— ¿Conveniente?, ¡nunca debió dejar Konoha! — Volvió a gritar ella frustrada, salió de la casa y se perdió rápidamente por el camino.

El hombre salió también y se sentó a su lado, no dijo nada, solo cubrió sus ojos por unos minutos que se le hicieron una eternidad al niño.

— Empaca tus cosas, después de que quememos el cuerpo de tu madre nos iremos a Konoha —

— ¿Eh? — Por fin reaccionó al escucharle.

— Nos vamos a Konoha — Repitió él.

— Konoha… — El rubio empezó a sentir terror — No quiero ir a Konoha — él frunció el ceño, ese era el lugar de donde ella había huido.

— ¿Te piensas quedar aquí solo? — Cuestionó alzando una ceja — Tienes doce años, no puedes vivir tu solo sin un soporte — Justificó sus acciones.

— Espera… no te conozco, no sé si de verdad eres mi abuelo, además, nunca te interesaste por mí en todo ese tiempo, ¿por qué apareces ahora? — Él estaba extremadamente confundido.

— ¿Por qué ahora?, ¿no te parece suficiente la razón de que tu madre muriera? — El niño se quedó callado mientras hacía un puchero — Hinata no quería que nadie supiera su localización, solo la sabíamos dos personas, justamente las que vinimos hoy — Él recordó a la vieja amargada que apenas y vio.

— Pero…— No sabía ni que objetar, ni que pensar.

— Ve a hacer tus maletas, partiremos cuanto antes — Él se levantó del suelo y salió con dirección al bosque, seguramente a buscar madera.

— Ni siquiera sé tu nombre — Susurró con fastidio.

— Soy Hiashi Hyuga — El niño reconoció el apellido.

Luego todo pasaba como en cámara lenta, las llamas cubrieron el cuerpo de su madre mientras el asimilaba que jamás la volvería a ver, las cenizas fueron introducidas en un cofre que el viejo llevaba como si ya supiera el desenlace de su viaje, luego apareció la vieja y se disculpó con su abuelo, ella siempre que le veía directamente, lo miraba con rabia, murmuraba cosas a veces como "esa idiota", y a veces, "ese idiota".

Su abuelo le explicó que tenía que quemar el cuerpo ya que no podían dejar a su madre reposar en un lugar tan alejado porque alguien intentaría robarle los ojos, y que ella iría directamente al cementerio de Konoha junto con la familia a la que había pertenecido.

Después de eso, abandono su hogar.

— Muy bien, ¿qué piensas hacer con él? — Mientras iban en la carreta empujada por caballos, le cuestionó la mujer rubia cruzando sus brazos y sus piernas.

— Lo llevaré a Konoha —

— Claro — Ella rodó los ojos — ¿Estás consciente de que su padre esta allá? — La verdad es la primera vez que nombraban a su padre tan directamente, ellos sabían quien era y eso le generó cierto temor.

— No sabe que existe — Contestó Hiashi con total calma.

— Estoy enterada, pero… ¿lo notas?, es idéntico a él, solo es cuestión de tiempo para que se den de cuenta, en especial si llegas con el hijo de Hinata a tu casa — Hiashi se quedó en silenció meditando.

— No puedo dejarlo en un lugar tan remoto — Boruto escuchaba la conversación interesado, pero le daba miedo intervenir, de alguna manera los dos le intimidaban — Si se da de cuenta, entonces que así sea, Hinata ya está muerta de todas maneras — Una punzada en el pecho sintió al oír eso, ese recordatorio casi lo hace llorar de nuevo.

— Todo lo que hizo esa niña, lo vas a destruir — Tsunade habló frunciendo el ceño.

— ¿Qué quieres que haga entonces? — El patriarca Hyuga le preguntó, Tsunade le miró de reojo, pensaba su respuesta.

— Serían demasiadas preguntas si lo llevarás a tu casa — Ella afilo la mirada — ¿Quieres conocer a tu padre? — por fin ella le dirigió la palabra.

— No — Respondió sinceramente él.

— Esta decidido, en Konoha hay un programa de huérfanos a los que ayudan dándosele todo lo que necesitan — Respondió ella — No te involucres con los Hyuga y oculta quien es tu madre, y si alguien se da de cuenta, bueno, es porque así tenían que ser las cosas — Ella sonrió al encontrar la respuesta, Hiashi le miró seriamente.

— ¿Eso es lo que quieres? — Le cuestionó mientras Boruto trataba de adivinar cuales eran los verdaderos sentimientos del hombre.

¿Estaría triste por no vivir con él?, ¿estaría feliz por deshacerse de él?, ¿se sentiría arrepentido?

Era imposible saber exactamente que pensaba.

— Mi mamá quería que no supieran que era su hijo, así que respetaré sus deseos — El cerró los ojos aceptando el destino.

Hola a todos, soy nueva en esta sección, no creí escribir nunca sobre Naruto ya que nunca me había llamado tanto la atención, pero tuvo un hijo y ese bebé se convirtió en mi obsesión, este fic nació por leer tantos comentarios diciendo " Boruto no sabe lo que es no tener padres", asi que pensé en este universo, y no estoy segura si lo describiré bien, pero disfruten la lectura.

Aclaraciones:

Las parejas son las canon con los niños canon (excepto por naruhina y Himawari)

Como es un AU, Neji estará vivo (Sé que el naruhina tiene que ver mucho con su muerte).

Es posible que el fic sea abandonado porque supuestamente estoy retirada debido a mi carrera, pero que eso no les impida disfrutar la lectura, estoy trabajando en el segundo capitulo y lo traeré lo más rapido posible.