Disclaimer: El potterverso pertenece a Rowling
Este fic ha sido creado para los Desafíos de el foro "La noble y ancestral casa de los Black"
Otro año más. Solo unos pocos metros adelante. Miles de recuerdos por florecer de nuevo ¿Cuántas lágrimas caerán esta vez?
Pasas la cerca y entras en el cementerio, no se oye ni un solo murmullo. Has hecho bien en visitarle pronto esta vez.
Caminas entre las tumbas, siguiendo la misma rutina de todos los años desde hace cuatro años, sintiéndote egoísta porque ni si quiera diriges una mirada a las demás, porque solo te importa llegar hasta la suya.
Como cada año cuando llegas allí reflexionas sobre el tiempo que pasasteis juntos, poco, muy poco, la guerra lo hizo más corto aún; la guerra te quitó aquello que tanto te había costado conseguir, se llevó su vida, pero no fue capaz de llevarse el recuerdo de lo que él fue.
O-o-O
A hero of war
Yeah that's what I'll be
And when I come home
They'll be damn proud of me
(Rise against, Hero of war)
Ese día le viste dejar vuestro hogar, salió para luchar en la batalla que se libraba más allá del marco de vuestra puerta. Quiso mantenerte a salvo.
Y lo hizo, pensaste que si tú cumplías tu promesa de no luchar él cumpliría su promesa de volver, fuiste ingenua al creer que era Remus quien barajaba las cartas, él no rompió su promesa, simplemente no le dieron oportunidad de cumplirla.
Nunca volvió, fuiste tú quien finalmente le fuiste a buscar al día siguiente, le encontraste, pero no como esperabas: le encontraste tendido en el suelo del Gran Comedor, con una expresión de suma tranquilidad en el rostro, sus gestos, inmóviles, incluso parecían felices.
Entonces lo comprendiste, él no había luchado por su vida; luchó por tu vida, luchó por la vida de Teddy, luchó para que vivieseis en un mundo feliz, para que su hijo no creciese rodeado de amenazas de muerte, para que su mujer no perdiese la vida en su trabajo.
Luchó, siempre luchó. Por una vida mejor, para vengar lo que hubiese sido su vida si aquel cabrón de Greyback no le hubiese maldecido de aquella forma, para vengar el hecho de que fuese el único merodeador vivo.
Y se vengó, antes de morir encontró la forma de matar al otro licántropo; después de morir se reunió con sus amigos, esta vez para siempre.
O-o-O
En este momento sonríes, no porque ya no queden lágrimas, sino porque está orgullosa de lo que fue, de lo que es.
Fue un luchador, un hombre que supo ver la luz entre la oscuridad en la que fue sumida su vida; un padre que prefirió sacrificar su vida para que su hijo viviese alegre.
Ahora es un héroe, el protagonista de las historias que tanto le gustan a Teddy, uno de los muchos que luchó y venció.