Abril 1 de 2009

Hola a todo el mundo, este drabble es en honor a Sakura y su cumpleaños. Es un monologo por parte de Syaoran antes de marcharse a Hong Kong a arreglar sus asuntos familiares para pedir posteriormente matrimonio a sakura, aunque no parezca, pero aja. Espero que lo disfruten y sea de su agrado. Ya saben que Sakura Card Captor pertenece a Clamp y lo demás, es imaginacion mía...


Acéptame Así

Quisiera poder sentarme a tu lado y velar tus sueños. Quisiera lograr acompañarte en ese lugar donde residen ellos, mientras acaricio tus cabellos y me pierdo en el tiempo.

Si, eso quisiera hacer. Quisiera beber de la copa del ahora y del después de una sola vez, y tener la certeza que tu sabor hace parte de mi experiencia. Tantas son las cosas que yo quiero hacer, y sin embargo no las hago. No preguntes un porqué, que ambos sabemos que no tengo.

No me mires con esos ojos curiosos y ávidos de respuestas que no merecen ser pronunciadas por el bien de tu locura, y por el mal de mi cordura. No me obligues a hablar cosas que sabemos que nos distanciaran, ya que el olor de tu cabello no es un tema que quieras conversar cuando me miras con dolor, ni la falta de palidez de tu piel al despedirme de ti cada noche. Tan sólo, acepta mis silencios con delicadeza, que allí reposan mis anhelos mudos y mis confesiones ocultas. Acepta mis silencios, que no dicen mucho y a la vez te gritan verdades. Acéptalos y acéptame a mí también.

Acéptame ahora que no puedo darte más que esto. Acéptame así, mientras consigo estabilizar mi vida y retomar mi camino. Concédeme un tiempo, unas horas, unos meses o quizás hasta años me tomé lograr desenredar este nudo en que se ha convertido mi destino. Si puede con ello, si logras sobrevivir a la espera, juro regresar a ti y enseñarte a beber lentamente de mi locura, al tiempo que bebo de tu inocencia.

Quiéreme así, cuando aún estoy atado y no tengo más que mi corazón que ofrecerte, ya que ni siquiera mi apellido me pertenece. Perdóname por estas lágrimas que se que derramarás una vez de la vuelta y me marche, para volver en quien sabe cuanto. Perdóname por cada una de ellas, y por todas las que faltan por llegar. Ámame así, cariño. Y cuando nuestro momento llegue, te haré olvidar todo, hasta tu nombre y el mío.