Nueva historia mis amores, descuiden no dejaré Algo hermoso olvidado, pero perdón por el retraso.

Pero tenía muchas ganas de hacer esto.

Me inspiré en una fanfic en ingles con la misma temática, y le pedí permiso a la escritora si me dejaba usar su idea y acepto.

Así que aquí estamos.

Espero la idea les agrade. Tengo muchas ganas de continuar con esto.

Todos los personajes y fondo de ellos pertenecen a Shungiku Nakamura.


¿Cómo termine en una situación como esta? Es que acaso el destino me odia.

-Hey, Ricchan no sabía que te gustaba el sexo en la oficina.

Si, era definitivo, el universo mismo me odiaba ya que si no era cierto no me haría pasar por esta vergüenza tan grande como la de este momento.

Ah sí, ya lo recordé.

&Introducción&

Odio mi vida, odio mi trabajo y sobre todo ¡Odio a Takano-san!, otra vez él me había dejado una carga extra de trabajo porque, según él, me ayudarían a mejorar como editor aunque yo sé en realidad lo hizo porque la noche anterior después de dormirnos juntos me escabullí y regresé a mi apartamento cuando él todavía se encontraba dormido.

Despertó un poco malhumorado y por lo tanto esto significaba que ese día sería malo para mí, y debido a que hui no desayuné con él y por lo tanto tenía que cenar con el debido a que por el trabajo extra no pude salir a almorzar con él y yo sabía que el cumpliría su promesa autoimpuesta de comer al menos una vez al día con él.

Y yo estaba ahí en el apartamento de Takano-san esperando a que el saliera de la ducha para poder comer la cena y no podía escapar porque en serio no tenía ganas de trabajo extra mañana y de una actitud aún más tirana de parte de Takano-san en el trabajo.

Pareciera que tuviera en serio mala suerte, tener que vivir algo tan extraño y cansado como mi vida sin duda es mala suerte o… es que acaso es buena, supongo que mucha gente les gustaría tener una vida como la mía con un trabajo estable, una familia adinerada y una…. Persona que te esperé para cenar aunque nuestra relación sea complicada.

A veces odio no tener alguien con quien comparar mi relación o alguien con quien hablar, ya que una relación como la mía no es algo sencillo de hablar y no lo puedo hablar con cualquiera, An-chan sería una opción si no fuera por lo que paso y varios de mis amigos están en Inglaterra.

-¿Por qué mi vida parece un manga de comedia romántica sacado de Sapphire?

-Yo diría que eso es más digno de Emerald –dijo una voz a mis espaldas.

-¡Ah! ¡Takano-san, no aparezca así de la nada! –respondí enojado.

Ahí estaba parado Takano-san con dos platos de comida humeante en cada mano mientras usaba unos pantalones de dormir holgado y una camiseta negra.

-Yo no aparecí de la nada –replicó el con fastidio-, lo que pasa es que el señorito estaba demasiado metido en las nubes.

Él dijo eso mientras se sentaba al otro lado de la mesa para cenar y dejaba los platos sobre la mesa, ambos agradecimos por la comida y el silencio incomodo usual se instaló mientras ambos cenabamos

-Dijiste que un manga de mi vida era digno de Emerald ¿no? –Yo solo quería iniciar una conversación-. ¿Por qué?

-Porque sería una linda historia de amor muy empalagosa –decía eso sin una pisca de pudor.

-Pe…Pero es entre dos hombres –replique con vergüenza.

-Esa historia sería demasiado buena para dejársela a la arpía jefa de Sapphire –explicaba con el ceño fruncido-. Además sería la mejor ya que en ella participo yo, el mejor editor de Shojou.

-Te tienes bastante autoconfianza –respondí hastiado de lo que dice.

-Claro… Pero en realidad lo que pasa es que no me gustaría que llevarán esa historia lejos de mí, lejos de donde yo participó y… donde tu estas –dijo de lentamente mientras toma un bocado.

No respondí nada porque no sabía qué decir y creí que ahí las palabras sobrarían mientras el calor subía a mi rostro.

-Aunque sin duda sería un éxito tal que conseguiría un anime –exclamó con ese tono que usa para fastidiar a la gente.

Ahí es donde el momento dulce acabo junto con la cena, dormimos juntos, no es como si me pudiera negar en realidad, además era una noche fría y teníamos el día libre mañana.

Podía descansar aunque sea un poco de mi vida ajetreada; que me pregunté que con una vida como la mía en serio le gustaría un anime sobre la misma, supongo que si fuera así la gente que o viera tendría algunas ideas de lo que debería de hacer con ella.

Pero solo es algo bastante imaginativo.

Me acurruqué en la persona a mi lado, era cálido y cómodo y no pude evitar sentir como unos brazos me abrazaba mientras yo hacía lo mismo en la cintura de Takano-san.

Desperté en al sentir que la persona a mi lado comenzó a moverse, abrí un poco mis ojos y noté que todo a mi alrededor era desconocido.

Fue ahí cuando mi cerebro decidió trabajar y me levanté de golpe, Takano-san me siguió y estaba tan anonadado como yo, pero trataba de mantener su cara calmada.

Vi el lugar en el que me encontraba, era como un gran almacén vacío, con unas pequeñas ventanas en la parte superior de las paredes, me levanté de la cama y fue el momento en que escuche un ruido e instintivamente agarre el brazo de Takano-san, volteamos a nuestras espaldas de donde escuchamos el ruido.

Lo único que vi fue mis compañeros de trabajo y unas cuantas caras familiares saludarme a mí y a Takano-san, pero en sus rostros se reflejaba la incomodidad y recordé que yo solo traía puesto mi ropa interior y una camiseta prestada de Takano-san que me quedaba grande.

-Oh miren si es Ricchan y Takano-san –dijo Kisa-san con la cara de cansancio y molestia-, espero que ya hayamos llegado todos.

-¡Ahhh! ¡Esto no es lo que parece, yo estaba en otro lado de repente aparecí aquí! –Expliqué tan aprisa como pude- y-y… ¡Aparecí de casualidad junto a Takano-san!

-¿En serio crees que alguien como Kisa te creerá eso? –dijo Takano-san con burla.

-Cállate, Takano-san –exclamé con enojo.

-Takano-san, ¿A qué se refiere a que alguien como yo? –replica Kisa-san con una sonrisa pero que parece más bien una advertencia.

-Kisa, no eres una persona muy ingenua y por demás eres perspicaz y además –explica Hatori-san con calma-, un poco manipulador ya que siempre consigues todos los chismes de Sapphire y de la editorial en general con tus habilidades, no eres alguien que ve lo que acabamos de ver y le vas a creer a Onodera.

Kisa-san solo torció su boca y no dijo nada más.

-Bien, ahora que todo este alboroto se calmó –dijo con cansancio Yokozawa-san-, ¡¿Alguien me puede decir cómo demonios llegamos aquí?!

Y así de la nada la cama que estaba en la habitación desapareció en un destello y desde el techo un papelito apareció cayendo en la cabeza de Yukina-kun.

-Oh, esto es muy raro, pero al menos parece que no ha pasado nada malo –dijo Yukina-kun mientras tomaba el papel entre sus manos y lo desdobló para leerlo.

-Al menos parece que no nos harán daño, quien sea que nos trajo aquí –mencionó Yoshino-sensei de manera nervios-. ¿No es así Tori?

Hatori-san solo asintió, y pareció que Yoshino-sensei simplemente pudo calmarse y empezó a respirar con calma.

En serio había muchas caras familiares, y parecía que todos se conocían y era algo muy extraño.

Yukina-kun aclaró su garganta para llamar la atención de todos.

-La nota dice esto: "Hola, lamento las molestias causadas, descuiden nada malo pasará aquí solo es un pequeño intento de que se conozcan mejor entre ustedes. En este momento debe aparecer una pantalla y unos paquetes que contienen un anime".

De la nada una sala con un sillón grande y una mesa con unas cajas encima junto con un mueble y una enorme pantalla aparecieron en un destello, de nuevo.

Este lugar era cada vez más raro y todo esto le traía un mal presentimiento.

-Continuo: "Vean ese anime, sino no pueden salir de aquí, y no se preocupen todo lo que necesiten pídanlo y lo tendrán, tampoco se preocupen por sus trabajo o familia en cuanto acaben el anime regresarán a su vida como si nunca se hubieran ido. ¡Suerte! Con amor, la dueña del lugar."

-Esto es una locura –decía Yokozawa-san de manera incrédula-, pero fingiré que le creo para quitarme problemas, así que empecemos.

-Espere Yokozawa-san, la nota dice otra cosa –exclamo Yukina-kun con un leve sonrojo en su rostro-: "Posdata, el anime trata de sus vidas, y solo diré que el anime es de genero comedia romántica."

-Espera ¿qué? –exclamé de manera consternada-. ¿Por qué de eso específicamente?

-Me duele la cabeza –dijo Kisa-san de manera simple-, pero no se puede hacer nada. Empecemos antes de que quiera ahorcar a alguien.

Yokozawa-san miro intrigado a Kisa-san, no era raro, normalmente Kisa-san es más alegre y actúa muy diferente a su edad, solo habla así cuando estamos en fin de ciclo.

Nadie dijo nada más, unos tenían unas expresiones más consternadas que otros y otros parecían que la situación no les afectaba en lo más mínimo o al menos, pensé, que trataban de aparentar eso, pero todos simplemente se sentaron.

Yo solo podía pensar que acaso el universo le hizo caso a lo que dije anoche o es que me estaba castigando por haber maldecido mi vida anoche.

Salí de esos pensamientos al escuchar una voz de parte de Yukina-kun.

-Hey, la nota decía que esto era para conocernos mejor –dijo con una sonrisa-, así que sería bueno presentarnos, a pesar de que parece que ya conozco a la mayoría.

Nadie realmente quería decir algo, todos estaban incomodos, la mayoría nos veíamos cansados por estar recién levantados y en ropa para dormir. Yukina-kun parecía alegre incluso ahora con un aura que parecía de lastimaba los ojos, pero él se veía con ganas de continuar, dirigió su mirada a Kisa-san, quien trato de ignorarlo pero al final solo soltó un suspiro.

-Kisa Shouta, editor de Emerald –dijo Kisa-san con resignación.

-Yukina Kou, estudiante de universitario de arte y vendedor de manga shojo en la librería Marimo.

Lo dijo con una gran sonrisa mientras mandaba una mirada alegre a Kisa-san.

-Kirishima Zen editor en jefe de la revista Shounen, Japun -. Después le dio un codazo a Yokozawa-san, quien solo frunció el ceño.

-Yokozawa Takafumi, jefe de la sección de ventas de manga –dijo en tono de fastidio.

-Incluso cuando te presentas frunces el ceño –exclamo Takano-san con burla.

-¡Cállate, Masamune!

-Mmm… Si… Si… Soy Takano Masamune editor en jefe de Emerald –dijo ignorando con facilidad a Yokozawa-san.

-Onodera Ritsu, editor de Emerald –dije de forma apresurada a para evitar problemas.

-Hatori Yoshiyuki, editor de Emerald –su tono de voz era monótono.

-Yoshino Chiaki, mangaka –dijo Yoshino-sensei de manera alegre- y él es mi mejor amigo y asistente Yanase Yuu.

El chico a lado de Yoshino-sensei saludo a todos con una sonrisa, pero Hatori-san lo ignoró e incluso frunció el ceño. No era común ver eso de parte de siempre cortes Hatori-san.

-Bien, creo que ya es momento de iniciar -. Yukina-kun se levantó para colocar los discos en el reproductor.

En la pantalla solo apareció un menú lleno de flores y encaje lleno de colores pasteles y un pequeño conejito alado y un título brillando en medio que decía: "El Primer Amor más Grande en el Mundo".

Todo esto solo logró darme jaqueca y un deseo de esconderme de todos, lo último que deseaba era que todos vieran toda mi vida.

-Cálmate, no puedes ser tan malo –una voz calmada hablo a mi oído-, y más si es sobre ti y mi, no creo que sea tan malo.

Me sentí más reconfortado y vi una expresión amable en la cara de Takano-san. Un calor agradable se instaló en mi pecho, mi mano tembló al acercarla a la de Takano-san, pero el solo colocó la suya sobre la mía.

-Y estoy seguro de que esto cubrirá todo, así que debe ser bueno –dijo Takano-san con burla-, si era eso lo que te preocupaba.

-¡Eres un idiota! –repliqué con enojo mientras quitaba mi mano debajo de la de él.

-Shhh, el episodio ya empezó –. Takano-san siguió fastidiándome-. Todos desean ver nuestra linda vida de enamorados.

-Sí, si así logramos salir de aquí más rápido –respondió Yokozawa-san desde el otro lado del sofá.

Fue cuando algo llamó la atención de todos en la pantalla.


Espero lo hayan disfrutado. Ya subí el capitulo 2 de la historia.

Disfrutenlo.

Y espero ver sus opiniones.