hola! Que tal todos? Bueno... sean bienvenidos a "sucesos inesperados" creo que si han leído ya mi otro fic de "el regreso de los titanes" sabrán que había estado planeando escribir un fic donde ocurriera lo que había sucedido anterior a aquel fic y bien... aquí esta :D, no creo que este fic sea muy largo, máximo, llegara a los 15 capítulos y uno que otro especial ;) pero aun así espero que les agrade.
Por cierto... si notan que mi manera de escribir es diferente es porque ahora tengo mas tiempo y, no se porque, me sale mejor los géneros de tragedia ((no sera trágico... no mucho)) pero espero que les agrade aun así :) sin mas que decir les dejo con el fic, nos leemos abajo para el adelanto ((creo que esta vez sea como una descripción, prefiero hacerlo así a veces))
Sueños, amor y un gato
Su cabeza dolía, realmente se había pasado de copas la noche anterior… Miro a su alrededor, estaba en su habitación ¿Cómo había llegado ahí? Tendría que tratar de descubrir ese asunto pero por ahora eso era lo menos que importaba, había algo que no cuadraba en toda aquella escena, repasando; su ropa estaba regada por todo el lugar, su memoria era escasa de lo ocurrido la noche anterior, la maldita resaca que no le dejaba pensar con claridad y el mocoso durmiendo a su lado plácidamente… No había nada extraño en aquello, todo era no… ¿¡EL MOCOSO EN SU CAMA!? Rivaille fijo su vista en Eren quien continuaba durmiendo a su lado, ¿Qué mierdas hacia Eren en su habitación, durmiendo en su cama? Y eso no era lo peor del asunto, lo peor de todo era que el joven de actuales 18 años se encontraba DESNUDO. Trato de recordar lo ocurrido la noche anterior… imposible, lo último que recordaba era el estar conversando con Eren sobre algunos asuntos, los cuales ni siquiera recordaba, mientras tomaban unos tragos, después de eso no recordaba absolutamente nada.
Iba a tener una larga conversación con Eren más tarde, no podía dejar que ese mocoso se hiciera ilusiones o que tuviera una idea equivocada de él, lo último que desea era tener que lidiar con un adolecente enamorado… Como pudo tomo su ropa interior y su camisa que estaban tirados a un lado de la cama… la camisa le quedaba exageradamente grande, soltó un gruñido al notar que no era su camisa, era de Eren, ¿Cómo se atrevía ese mocoso a medir 20 centímetros más que él? Luego lidiaría con eso… por ahora…
- Oí, Eren – le llamo, el aludido solo hizo una mueca parecida a una sonrisa y se revolvió entre las sabanas, Rivaille frunció el ceño ¿Qué estaba soñando? – Despierta mocoso – ordeno, como respuesta Eren se apegó más al mayor, su paciencia se terminaba – Jeager, si no quieres que te muela a golpes hasta que solo quede polvo de ti, levántate en este mismo momento maldito mocoso.
Aquella amenaza fue suficiente para que el joven Jeager despertara de su sueño, Eren despertó de un salto así cayendo al suelo con la sabana enredada entre sus piernas cubriendo desde su cintura hasta sus rodillas, miro por unos momentos a su sargento directo a los ojos tratando de asimilar todo... Su mente era un circo con los recuerdos de la noche anterior, pero no había que ser un genio para saber lo que había pasado, primero estaba el hecho de que se encontraba desnudo en la cama del sargento, Su ropa estaba regada por toda la habitación y, para terminar de joder las cosas, su cadera dolía… mierda… la mente de Eren solo podía pensar en una sola cosa, no… él no podía haber tenido sexo con su superior la noche anterior ¿o sí? No… no podía pensar en eso, Rivaille era su superior… ellos no podían…
- Di algo, Eren – exigió Rivaille con su tono habitual sentado en el borde de la cama
- Eh? Ah… si, lo siento
No sabía si quiera porque se disculpaba, Eren bajo la mirada sonrojado mientras pensaba en lo que había sucedido la noche anterior… estaba confundido… una parte de él estaba feliz de todo aquello, después de todo había admirado al mayor por mucho tiempo, admiración que sin notarlo se había convertido en amor… pero que todo hubiera pasado de esa manera era algo que Eren…
- ¡Eren! – le llamo casi a gritos Rivaille – ¡di algo, mocoso de mierda!
- Yo… Sargento… yo…yo…
- ¿tú que?- se estaba comenzando a desesperar con esa situación - ¡Habla!
- Me gusta… Sargento
Eren tapo su boca al notar lo que había dicho, por otro lado Rivaille solo le miraba sorprendido, claro ante aquella inesperada confesión, aunque, claro, Rivaille trataba de no demostrarlo… Eren desvió la mirada al notar los ojos fijos del Sargento en él ¿Qué había hecho? ¿Por qué había dicho eso tan de repente? ¿Qué haría ahora? ¿Y si no le correspondía? No iba a poder ver al Sargento como antes. En ese momento hubiera querido que un titán apareciera y se lo tragara de un solo bocado.
Pero, para su sorpresa, Rivaille no dijo nada, solo se acercó a él tomando su barbilla haciendo que le mirase… grande fue su sorpresa al sentir los labios del mayor unidos a los suyos… le estaba besando… Eren no podía creer lo que estaba pasando ¿Era un sueño? Si… tenía que ser eso, pronto despertaría y todo volvería a la normalidad, él seguiría siendo solo un arma que pueden utilizar y desechar, Rivaille seguiría siendo simplemente su superior y el su subordinado… no quería aquello… le amaba… ¿Por qué tenía que ser todo aquello un maldito sueño? Cerro los ojos y sintió como comenzaban a caer saladas gotas de ellos… estaba llorando.
- ¿ahora porque lloras? – pregunto Rivaille separándose
- Yo… no quiero despertar…
- ¿Qué?
- Esto solo es un sueño, lo sé – sollozo Eren desviando la mirada – cuando despierte todo será normal… no quiero despertar, quiero estar con usted… hechou…
Rivaille se separó del menor con un suspiro, Eren le vio confundido… ¿Había dicho o hecho algo mal? No quería pensar en eso, después de todo Eren pensaba que eso era solo un sueño… que mal que no lo era… Eren fue enviado al otro lado de la habitación por la patada de su superior lo que ocasiono que chocara contra la pared del dormitorio, Eren vio como el mayor se acercaba a él para después sentir una fuerte patada en su cara, cayó a un lado golpeando su cabeza contra el ropero, luego sintió una patada en su estómago que hizo que perdiera el aire por completo para después ser levantado por el mayor que halaba de sus cabellos… volvió a sentir un segundo golpe de su superior en su vientre pero esta vez con la rodilla, para finalizar, le tiro a su cama de manera brusca, Rivaille solo le vio desde su puesto cercano a la puerta, Eren tenía los ojos cerrados y se sujetaba el estómago, tenía un pequeño hilillo de sangre bajando de la comisura de sus labios, Rivaille rio secamente.
- ¿aun crees que es un sueño?
No, ahora no pensaba que eso fuera un sueño… ¡ERA UNA PESADILLA! Una pesadilla hecha realidad, Eren quiso reaccionar de alguna forma, levanto la vista hacia Rivaille quien solo le miraba sin ninguna expresión, aparto la vista tan rápido como busco la mirada del otro… por lo menos ya podía estar seguro que aquello no era un sueño, hubiera deseado que lo fuera a decir verdad, pero ya había cometido un grave error… le había confesado sus sentimientos a su superior, hubiera preferido el quedarse callado y no decir nada y ser molido a golpes hasta la muerte pero no… tenía que decir que estaba enamorado de este ¿Qué iba a pasar ahora? Eren cerro los ojos esperando a que el mayor le dijera o hiciera algo… su cuerpo aun le dolía por la paliza que el mayor le había dado segundos antes pero eso era lo que menos le importaba…
- Vístete – ordeno el sargento dándole la espalda – luego hablaremos de esto… más te vale no decir ni una sola palabra sobre esto si no quieres que vuelva a pasar lo de hace unos minutos.
- Sargento… yo…
- Hablaremos más tarde – le repitió mirándole, su mirada era fría y se podía notar que estaba molesto… Eren solo asintió – así me gusta… vete.
Eren, como pudo, tomo su ropa y se la puso de manera rápida… salió de la habitación ante la atenta mirada de Rivaille, al oír cómo se cerraba la puerta volvió la vista hacia esta "me gusta… sargento" las palabras dichas por Eren regresaron a su mente, dio un suspiro… ¿Por qué su corazón al oír esas palabras dio un salto? ¿Por qué le había dolido tanto el golpearlo esa vez? Era un humano… era débil… no podía demostrarlo… no podía estar enamorado de Eren…
*-.-*-.-*-.-*
Jacob dio un salto hacia atrás esquivando el ataque de Mikasa, parecía que esta estaba de mal humor ese día… llegaba a ser un "poco" ruda con él durante los entrenamientos pero ese ya era el colmo, ¡pareciera como si lo quisiera matar! Hasta donde recordaba no había hecho nada malo…
- Ackerman, es un entrenamiento… no trates de matarme – le pidió sosteniéndola del brazo inmovilizándola – ¿Quién le hizo que a Eren?
- Agh – Mikasa halo del brazo a su compañero tirándolo al piso – No te importa… Darrel…
- Oye… ¡espera! – le grito levantándose rápidamente y siguiéndola – No nos conocemos desde hace mucho, pero sé cuándo estas a punto de matar al primero que se ponga en tu camino
- Si lo sabes ¿Qué haces aquí?
- Quisiera saberlo también…
Mikasa suspiro al oír esa respuesta, continuo su camino ignorando que el otro le seguía de cerca. Jacob Darrel se había unido a la legión de reconocimiento un año después que ella, desde el día en el que este entro comenzó a acosarla de una manera indirecta… no era como Jean que trataba de impresionarla o lanzaba cumplidos cada 5 segundos, no, Jacob era más el tipo de chico que actuaba como él mismo en todo momento, era alto, aproximadamente 1,90, su cuerpo estaba muy bien formado, de cabello un poco largo castaño oscuro y sus ojos… pequeños y hermosos ojos grises, estaba por demás decir que la mitad de las chicas de la legión estaba detrás de él, más él solo tenía ojos para una persona: Mikasa Ackerman…
Por su parte a la mitad asiática no le importaba que este estuviera atrás de ella todo el santo día, Jacob era un buen compañero, no lo negaba, además era bastante fuerte, se había graduado como el segundo mejor de su grupo… Mikasa no negaba que fuera un buen partido, ya se le había confesado un par de veces pero esta solo le ignoraba, para lo único que le hacía caso era para cuando quería entrenar o, como ahora, quería desahogarse con algo y no tener que golpear al maldito enano que tenían como capitán.
- Mikasa – le llamo Jacob haciendo que la pelinegra le volviera la vista, estaba molesta… era fácil de notar por su mirada – Por favor… no quiero morir todavía pero tengo que decirlo… Eren ya es un adulto, tiene 17 años, no es un niño a quien debas seguir protegiendo… eres su hermana, no su madre, Eren puede protegerse a sí mismo, no necesita que tu…
No termino su frase gracias al golpe que Mikasa casi le proporciona, gracias a esa chica mitad asiática había logrado mejorar sus reflejos... una de las únicas ventajas de casi ser matado en la mayoría de los entrenamientos con esta, Jacob entendió que era mejor callar antes de que terminara en la boca de un titán.
- He sido tolerante contigo, Darrel – gruño Mikasa – pero no tengo tanta paciencia como tú.
- Lo sé… Lo sé mejor que nadie.
- Eres un idiota…
- Un idiota enamorado
- ¿Otra vez con eso? Pensé que te ibas a rendir.
- Lo diré hasta que estés convencida de eso…
- Primero muerta.
- Veras que lo lograre.
- No lo creo…
Mikasa sonrió disimuladamente, aunque lo negase ya comenzaba a apreciar un poco a su compañero, pero no iba a dejar que este lo supiera… por lo menos no por ahora…
Ambos llegaron al comedor, al entrar el más alto pudo sentir la tensión que se vivía en ese lugar, de un lado estaba el Sargento Rivaille junto con la sargento Hanji y el comandante Irvin conversando (bueno, solo Hanji e Irvin conversaban) del otro lado del comedor estaban Eren y Armin, Armin conversaba mientras Eren solo daba respuestas monótonas como si no le estuviera escuchando… pero había algo que solo Jacob llego a notar… Eren mirada de vez en vez al sargento y este no le quitaba la mirada de encima, los que estaban en medio de aquello podían sentir la tensión entre ese par… ¿Qué estaba pasando?
- ¿vienes? – pregunto Mikasa al ver que su compañero se quedaba parado en la entrada, ya se había acostumbrado a que este comiera con ellos
- Ah… lo siento.
Ambos caminaron hasta la mesa donde estaban Armin y Eren, Mikasa se sentó al lado de Eren y Jacob al lado de Armin quien los saludo a ambos de manera animada, Eren simplemente volvió la vista a su hermana y a su compañero para luego regresar su vista a su desayuno.
- ¿Te ocurre algo? – pregunto Mikasa a Eren quien solo hizo una mueca – Eren… ¿Quién te hizo daño?
- Aquí vamos de nuevo – suspiro Jacob mirando a Armin – ¿Qué tal todo con los prisioneros?
- Aún no sabemos mucho sobre ellos… Annie es quien está más desesperada por salir de la prisión, no me gusta ver a mis compañeros de esa forma.
- Es verdad que hicieron daño a muchos pero… no creo que sea justo que los traten como si no fueran humanos, ellos, a pesar de sus poderes, siguen siendo humanos…
- La policía Militar no lo ve así…
- Es porque tienen miedo… si no puedes ver a Eren – ambos volvieron la vista a Eren quien comenzaba a discutir con Mikasa – es tratado como un monstruo… pero hay veces en las que los que nos hacemos llamar humanos somos peores que los titanes… el infierno y el cielo está en esta tierra… los humanos somos, en realidad, quienes nos condenamos…
- Por eso te uniste a la legión de reconocimiento ¿Verdad, Jacob?
- La verdad es que si… No me importa que me llamen suicida, pero si puedo hacer algo que esos cobardes de la policía militar no pueden hacer entonces podre morir en paz, tal vez se oiga solo como satisfacción propia pero… si puedo proteger a las personas que me importan… no me importa morir en batalla
Armin sonrió ante las palabras de Jacob, no llegaba a entender como era que Mikasa no había admitido todavía que estaba enamorada de este, Jacob a veces llegaba a parecerse a Eren, la conversación siguió de manera normal, Armin, Eren y Jacob hablaban sobre cosas triviales, el más alto había hecho que los pensamientos de este se distrajeran por fin de su sargento y lo ocurrido esa mañana.
El sonido de una alarma que indicaba que debían volver a sus actividades diarias hizo que Armin saliera de sus pensamientos, fue a dejar sus platos a la cocina, al salir de esta noto como Hanji el esperaba en la puerta, Armin lanzo un suspiro al aire tomando una bata de laboratorio blanca que había dejado sobre la mesa.
- Nos vemos en la cena – se despidió Armin con una sonrisa – Ah… Eren, no olvides que hoy tienes que llegar al laboratorio para unos exámenes clínicos.
- No lo he olvidado – suspiro Eren – Suerte, Armin.
- Gracias…
La iba a necesitar… después de todo se trataba de encontrar algo sobre los titanes, tenía que haber algo que ellos no supieran, algo que los prisioneros sabían pero que no querían decir… Armin camino hasta donde estaba la Sargento y ambos tomaron camino al laboratorio, iba a ser un largo día, aunque no esperaban que sus esfuerzos dieran frutos al final de aquel día y menos que un error de organización pudiera echar todo esto a la basura por unos cuantos años.
*-.-*-.-*-.-*
Papeles, papeles y más papeles, de eso estaba repleto el escritorio de Rivaille en aquellos momentos, gracias a que Hanji había tenido que ir al laboratorio por las estúpidas pruebas con los aun mas estúpidos titanes de prueba que habían capturado hacia poco tiempo junto con Arlett que ahora estaba en equipo de investigación con la loca de Hanji, odiaba hacer ese trabajo…
Al escuchar como tocaban a la puerta pudo dejar los papeles sobre la mesa y tras un "pase" vio como
- Hechou – vio como la chica de cabello castaño que se la pasaba comiendo todo el santo día entro a su oficina con una caja en manos… ¿Cómo era que se llamaba? Ah… Sasha Brown – acaba de llegar este paquete para usted… parece ser que es de parte del comandante Irvin.
- Déjelo sobre el escritorio – ordeno sin dejar su trabajo – gracias.
- Con permiso…
Escucho como la chica que comía como una vaca salió de su oficina, trato de concentrarse en los papeles que tenía en manos pero no podía evitar ver de vez en vez aquella calla que Irvin le había mandado sin razón aparente… ¿Qué habría dentro de esa cosa? Tal vez lograba disimularlo a la perfección pero, uno de sus muchos defectos como él mismo Rivaille decía, era su curiosidad, dejo los papeles con los que estaba trabajando a un lado y tomo la caja, había algo que no le gustaba en todo ese asunto… había algo que estaba olvidando y lo sabía, aunque no recordaba que podía ser… bueno… no sería nada importante.
Abrió la caja y sintió como un escalofrió viajaba por toda su columna…en esa tonta caja había un animal… si… un animal vivo, que se movía y que ensuciaba… era un gato recién nacido color negro, sus ojos eran grandes y de color amarillo, dentro de la caja, además del gato, había también una nota, comida de gato y una frazada.
Levi:
El gato de mi hija acaba de tener crías y este pequeño es uno de ellos, pensé que les vendría bien tener una mascota en el cuartel, después de todo tú también llegas a parecer un gato mal humorado a veces (espero que este pequeño no se termine pareciendo a ti) suerte con todo.
Erwin Smith
P.D: ¿ya hablaste con Eren o tendremos que interceder Hanji y yo para ellos?
P.D2: Asegúrate de ponerle un nombre apropiado al gato, si es necesario que lo haga quien sea menos tú.
Para esas alturas de la nota el pequeño gato ya había salido de la caja y comenzaba a caminar sobre el escritorio del hechou… Rivaille volvió a leer la nota un par de veces sin creer que Erwin podía llegar a tales puntos para fastidiarle la vida… y claro que había hablado con Eren… había hablado de tal forma que terminaron en la cama durmiendo juntos y quien sabe que mierdas paso esa noche mientras estaban juntos…
¡MIERDA! ¡EREN! ¡CAMA! ¡NOCHE! ¡HABLAR!
Eso era lo que se le olvidaba… tenía una conversación pendiente con Eren sobre lo sucedido la noche anterior, dejo la nota sobre el escritorio y salió de su oficina, tenía que hablar con Eren ¡Rápido! Lo último que quería era que ese mocoso pensara que él era un viejo depravado… por lo menos podía agradecerle a Erwin después por recordarle eso y, de paso, lanzarle al gato a la cara…
Rivaille trato de aparentar calma mientras caminaba por los pasillos, pero había olvidado un pequeño detalle que, obviamente, todos notaban tan solo pasaba el sargento frente a ellos… ¿Qué detalle era? El pinche gato que parecía un pato tras su madre con Levi, el pequeño gato negro le seguía los pasos al sargento tan rápido como podía caminar el pequeño.
*-.-*-.-*-.-*
Por fin había terminado de limpiar los establos como se le había encomendado, estaba agotado física y mentalmente, había pasado toda la mañana pensando en lo sucedido en la habitación de su superior… se sonrojo al pensar en lo que pudo haber pasado la noche anterior, sin mencionar que era posible que lo hubiera empeorado todo al confesarle sus sentimientos al mayor… le amaba… le amaba demasiado… bajo su vista al suelo recargando su peso sobre una de las paredes del establo, tenía que ser fuerte, tenía que aclarar todo aquel mal entendido con su capitán antes de que eso pudiese empeorar…
Sus pensamientos se vieron interrumpidos al sentir como algo arañaba sus botas, bajo la vista encontrándose con una tierna mirada amarilla… abrió los ojos sorprendidos al ver al pequeño gato negro en aquel lugar, se inclinó acariciando la cabeza del pequeño gato quien ronroneaba apegándose mas a Eren.
- ¿Qué haces aquí? – le pregunto como si de un niño perdido se tratase – si hechou te ve de seguro te hecha a patadas pequeño… créeme, no quieres verlo enojado.
- Ya lo vi si eso es lo que te preocupa – un escalofrió recorrió su espalda al escuchar esa voz – es un regalo de Erwin, el gato de su hija tuvo crías y nos mandó una de esas cosas…
- ¿no le gustan los animales, Hechou? – pregunto Eren tomando en brazos al pequeño – ¿Cómo se llama?
- Son asquerosos, solo se la pasan ensuciando todo el lugar… y no tiene nombre…
Eren, por un momento, olvido todo lo ocurrido esa mañana y miro fijamente al gato como si lo estuviera examinando, en ese momento se dio cuenta que no era un gato, si no que era una gata, un recuerdo afloro en su mente en unos instantes… tenía un nombre perfecto para aquel gato.
- ¿Qué tal si la llamamos Diana?
- ¿Diana? ¿Cómo sabes que es hembra?
- Cuando era niño tuve una gata que se parecía mucho a esta – dijo mirando a la nada mientras abrazaba a la gata – mi madre era algo así como veterinaria y me enseño mucho acerca de los animales, como cuidarlos y como identificarlos… creo que es un Bombay, son bastante sociables e inteligentes, creo que se sentirá a gusto en el cuartel…
- Si quieres puedes quedártelo tú… pero serás quien deba de asegurarse que no ande ensuciando todo a su paso…
- Los gatos son más limpios que los perros, hechou, no se preocupe por eso… yo me encargare de cuidarla.
Rivaille bufo al ver a su mocoso jugando con el gato… un segundo… ¿desde cuándo clasificaba a Eren como suyo? Su mente comenzaba a jugarle sucio, era verdad que estaba enamorado de ese mocoso pero no podía demostrar nada, por lo menos no por ahora, aunque debía de admitir que Eren con ese gato en manos parecía muy tierno a vista de cualquiera… bien… una vez no le hace mal a nadie. Se acercó lentamente a Eren tomando su barbilla, Eren le vio sorprendido ante el acto del mayor, iba a decir algo pero fue interrumpido por los labios del mayor… le estaba besando… Eren abrió los ojos sorprendido ante tal contacto… no podía creer lo que estaba sucediendo en esos momentos, la persona de quien estaba enamorado le estaba besando, cerró los ojos correspondiendo al beso soltando al gato quien cayo parado y se quedó observando a sus "dueños"… ahora si no había duda que estaba soñando… pero eso era un sueño del que no quería despertar…
Pero… para crear un sueño…
A decir verdad, ni Eren ni Rivaille lo sabían, pero aquello si era un sueño, un sueño que ellos vivirían en la realidad y un sueño que podría volverse una pesadilla en un abrir y cerrar de ojos, un sueño que hoy iniciaría… un sueños que ellos mismos comenzarían a escribir con su propio amor… si… todo lo que vivían en esos momentos iba a ser como en un sueño pero ellos tendrían que luchar para que ese sueño no terminara.
Debes ser inoportuno e insistir porque
Sin saberlo, al mismo tiempo, una pesadilla se incubaba en un lugar diferente… la pesadilla que buscaría terminar con el sueño que ellos iban a crear.
Siempre existirá
Un sueño y una pesadilla que describirían, posiblemente, el verdadero destino de los seres humanos de ese entonces… un ángel y un demonio que lucharían mano a mano para determinar el final de la época de los titanes, una última batalla… donde tendrían que sacrificar todo… pero esto era solo el comienzo… aún tenían que esperar un tiempo para que todo aquello se viera cada vez más cercano, tenían que esperar a que aquel sueño terminara de incubarse junto con aquella pesadilla…
Una pesadilla que quera destruir aquel sueño…
¿que les parecio? ¿merezco un review, tomatazos, pedrazos, balazos o librazos? =.= si quieren matarme lancenme los libros de educacion para el hogar... ahora si que odio esa clase mas que nada en el mundo... ((sigo traumada por mis examenes)) pero, sin mas que decir, les dejo el adelanto:
Adelanto:
A veces los detalles que olvidamos son importantes, hay veces que por esos pequeños detalles podemos causar un grave problema, será una lección que tanto Hanji como Armin aprenderán. Por otro lado, Rivaille, tratara de formalizar su relación con Eren, no será fácil ante todas las interrupciones de Hanji, Mikasa, Armin y de esa maldita gata llamada Diana. Esta gata también empeorara las cosas para todos… ¿o tal vez, en realidad, les estará haciendo un favor?
Y prometo actualizacion para el proximo sabado, miercoles si me va bien, y para quienes siguen mi otro fic la actualizacion ya esta fija para el miercoles ;) nos leemos dentro de una semana o menos! yane!