Acto 0.
Caminando tranquilamente por esta maldita zona de guerra, no pude evitar apreciar lo jodidamente crueles que podían ser los Seres Sobrenaturales, entidades que han decidido hacer todo lo que esté en su poder para erradicar a la humanidad de una vez por todas, salvos algunas pequeñas excepciones que no quiero mentar en esta ocasión, principalmente porque me generan malos recuerdos que no quiero traer a la mesa.
Había cientos de cádaveres de humanos que no eran para nada inocentes dispersados por todo el lugar, lo que suamdo al extraño cielo de color rojo como la misma sangre, le daba al mundo un cierto aire apocaliptico que tantas veces he visto en Animes y Mangas... Pero con la ¨ligera¨ diferencia de que este era el mundo real.
Escuchaba explosiones por todas partes, cortesía de los humanos que aún se estaban resistiendo a los Sobrenaturales simplemente por puro orgullo. La humanidad siempre se ha jactado de su superioridad ante los demás, y ahora que han obtenido una fuerza con las que podían hacer frente a los Sobrenaturales, era obvio que este escenario sucedería. Era algo simplemente inevitable, que estaba en cada ser humano, pero supongo que en parte ese pensamiento fue el que nos llevó hasta donde estamos ahora.
Ejecutando un Poder con el que podemos enfrentar incluso a los mismísimos
Miré con cierta indiferencia al pobre y desgraciado humano en sus últimos momentos de vida, el cual se estaba peleando contra ese Demonio con toda la voluntad que tenía, la cual era mucha si consideraba que tenía una pierna totalmente destruida junto con parte de la cara totalmente rostizada... Tristemente, en la vida no se puede obtener todo solamente con buena voluntad y nunca rindiéndose. De hecho, lo mejor que podía hacer ese humano era retirarse si es que quería seguir viviendo. Esa era una lección que aprendí al estar en constantes actos bélicos.
No me sorprendería si nunca más pueda volver a ser un humano normal con esta peligrosa racionalización que asumo como ¨realidad¨. La gente sana mentalmente no quiere un recordatorio constante de que la vida, efectivamente, es una gran bola de mierda que nos aplastara tarde o temprano. Pero lo hará: Nunca dudes de ello. Y aunque fuera un proceso largo, estaba seguro de que podría crear un mundo un poco mejor...
Simplemente eliminando la basura de una vez por todas.
Estar nuevamente en la sociedad normal no era algo a lo que pudiera aspirar. Ya nunca podría ver el mundo de la misma manera en que lo ven el resto del mundo, a los cuales llamo simplemente ignorantes que se resisten a saber la verdad. En serio, no pueden ser más idiotas. Yo tengo el pensamiento de que si todos los humanos nos enteramos de esta verdad y no la negamos, antes podremos combatirla.
...
Como pudieron apreicar, no es extraño que tenga esta premonición sobre mi futuro si estos son mis pensamientos cotidianos. Incluso tenía mis dudas sobre si siquiera podré tener alguna clase de vínculo con el resto de la sociedad ¨normal¨. Los amigos que tuve al comienzo de este largo viaje, por así decirlo, o habían muerto contra los Sobrenaturales en una de las incontables luchas que hemos tenido en muy pocos años, un nuevo record del que la humanidad debería sentirse orgullosa, ya que era lo único en lo que somos buenos, o se convirtieron en lo mismo que yo: Una persona que no podría llamarse normal y quew tenía una línea de pensamiento bastante inquietante sobre el mundo. Y eso se multiplicaba por diez cuando sabes el pequeñísimo detalle de que ninguno de nosotros ha terminado siquiera de pasar la pubertad.
Aunque no es como si eso fuera nuevo para empezar, si puedo agregar. Los niños que fueron tomados bajo estas filas difícilmente podrían ser considerados como niños para empezar. Todos nosotros poseíamos la inteligencia y mentalidad de un adulto... bastante cínico, y en la mayoría de casos sarcasticos hasta más no poder, pero adultos al fin y al cabo. Personas que maduraron a un nivel insano para nuestra edad. Inlcuso yo, el más traumatizado, herido emocionalmente y con ciertos ataques de depresión, apenas acababa de cumplir trece años hace tan solo una semana.
Si: A ese nivel estaba jodido el mundo si que los adultos, quienes se supone deben tener la mentalidad de no involucrar a los niños para no crear un futuro bastante oscuro para el planeta y el sistema de gobierno actual, nos metieran de golpe en toda esta mierda. La brutalidad con la que terminamos asesinando a los Sobrenaturales sin sentir la más mínima muestra de temor prueba que, si los adultos se lo proponen, son capaces de crear toda una generación de ¨monstruos¨, según el pensamiento ¨normal¨.
Salí de mis horribles pensamientos sobre la crueldad de los humanos cuando presencié como el humano parecía estar en los últimos momentos de su vida. Pobrecito el niño, apenas tiene ocho años y tiene que morir si haber logrado vengarze del mundo, justo como pensaba el 99,99% de esta maldita generación de asesinos. Por más que sea imposible de creer, yo soy la excepción a esa regla. Honestamente, no me importa que me utilicen para estas cosas, ya que tengo el poder de cumplir mi objetivo.
Podría salvar al niño, pero a juzgar por su expresión de profunda paz y hasta un poco de felicidad, supongo que esto es lo que desea.
Tch. Aunque lo considero de cobardes simplemente tirar tu vida por la borda sin siquiera intentar dejar tu legado en el mundo, no lo puedo culpar, honestamente. Esta vida no es para cualquiera, independientemente de cuánto nos hayan entrenado para esto. Había muchos niños que pensaban justamente como él, pero por su temor a la muerte y quizás soñando con un futuro mejor, no lo hacían, continuando como armas valiosas de la humanidad.
En cierto modo, que no le tuviera temor a la muerte era digno de respeto, y demostraba su gran valentía mezclada con estupidez... como también que seguramente estaba sufriendo mucho con esta situación.
Quizás sea uno de esos niños que fue separado de su familia, justo como yo. Aunque a diferencia mía, seguramente él sufra mucho más por esto, para que negarlo. Podría amar con locura a mi padre, pero general pase un horrible infierno por culpa de esas cucarachas que siempre me estorbaron en mis momentos de felicidad. Honestamente hablando, disfruto mucho más esta vida que la anterior... Al menos aquí tengo solamente a mi Maestro, quien es un buen reemplazo de mi padre.
Pude sentir un ligero cosquilleo en mi nuca, algo que no pude negar su importancia, pues tras años de vivir con este Poder, llegué de descubrir que esto pasaba siempre que corría alguna clase de peligro. Algo así como el ¨Sentido Aracnido¨ de Spider-Man, si quieren un ejemplo.
En cierto modo, [Yami] era la única persona en la que podía confiar... Y supongo que no hace decir lo destrozado que estoy emocionalmente si considero a mi Poder como una persona en lugar de una extensión de mi cuerpo, como prácticamente todo el mundo tiene asumido.
No me hizo falta voltearme para saber que un Sobrenatural estaba detrás de mí. Sinceramente no es que hubieran muchas opciones a la mano, teniendo en cuenta que estaba en pleno territorio Español, lugar donde los Sobrenaturales tomaron el control completo. Personalmente no tenía nada en contra de los Sobrenaturales, ya que nunca han asesinado a alguien importante para mí... O al menos lo suficientemente importante como para que me dignase a sacar una lágrima, así sean falsas. De hecho, en cierto modo los apreciaba, pues gracias a ellos soy capaz de tener esta vida, la cual es, en mi humilde opinión, mucho mejor que la anterior.
Gracias a [Yami], sentí como estaba empezando a cargar alguna clase de Hechizo que conocía perfectamente: El Poder de la Destrucción, del Clan Demoníaco Bael. Suspiré internamente ante lo que iba a suceder. Tan solo esperaba que el pobre desgraciado no sufriera mucho. Como dije antes, no odiaba a los Sobrenaturales, y si resultaban ser personas muy jóvenes, como de mi edad, los dejaba ir tranquilamente, pues al menos quiero creer que cada uno de ellos posee una familia amorosa que le está esperando.
Aunque si aún quería luchar debido a su orgullo, no tenía reparo alguno en matarle. Alguien que no es capaz de dejar su orgullo de lado para salvar su vida no merece vivir en primer lugar: Esa fue la primera lección que me inculcó mi Maestro, y el motivo por el que incluso me consideran despiadado para los estándares de mi grupo, niños que son capaces perfectamente de matar con indiferencia grabadas en sus rostros de infantes... Bueno, supongo que esto también demuestra que mi Maestro no es la persona más cuerda del mundo, y la que definitivamente no querrías hacerla enojar, si es que apreciabas tus bolas justo donde están.
Justo cuando me lanzó esa especie de esfera compacta, pero increíblemente peligrosa, abrí mis ojos repentinamente, demostrando que eran de un color muy similar al que poseía Sirzcehs Lucifer: Un carmesí increíblemente hermoso, capaz de hipnotizar a cualquiera con su intrigante bellleza... O al menos así serían las cosas si no fuera yo quien poseía estos ojos en pleno acto de guerra. Me contaron que incluso estos ojos causaban pesadillas en los más jóvenes de los Sobrenaturales... Creo que podría considerarlo un logro para mi vida, de alguna manera bastante retorcida, si puedo admitir.
No creo que cuando había deseado ser respetado y temido hace tantos años hubiera pensando en este esecenario.
Pero volviendo al tema primordial, que he estado divagando mucho, si he de ser sincero: Realmente no había algún motivo en especial para hacer esto de abrir los ojos de golpe, como si de repente activara alguna clase de Super-Poder que había visto en ese Anime llamado Hamatora, siendo que mi Poder simplemente actuaría cuando estuviera en peligro, pero siempre quise imaginarme como el protagonista de algún Manga Shounen que tanto leía de pequeño. Aún ahora pienso que esa actitud es genial, y tal vez se deba a que todavía no soy lo suficientemente grande como para cambiar mis gustos... creo
Aunque... Tal vez lo haga para recordar mis buenos tiempos que pasé con mi padre hace tantos años. Ahora son solamente un simple recuerdo lejano de un pasado que perdí... Joder, eso sonó muy épico, si debo ser honesto.
Tal vez podría convencer a alguien de que creara un Manga sobre mí y mis penurías. Apuesto a que se vendería muy bien.
CRACK
Ese fue el sonido de la [Hakai Bouro], uno de los ataques más básicos de los Bael, aunque no por eso era menos dañino, al ser destruido sin piedad por alguna razón que el Demonio no supo... Y que nunca sabrá. Seguramente estará en un estado de shock, ya que aunque [Hakai Bouro] era una de las técnicas más básicas y que todo miembro que se precie del Clan Bale aprendían con suma rapidez, no dejaba de ser uno de los más temidos.
Después de todo, la velocidad con la que se podía ejecutar era bestial. Y si le sumanos que con un simple roce es capaz de dejar graves daños, se entiende porque es tan necesario aprenderlo.
De repente, desde mi espalda sale una sombra, la cual es generada por mi Poder, [Yami]. Según el resto de personas que he conocido y que han sido testigos de este poder, lo consideran algo bastante asqueroso por un únanime que fráncamente me dejo un poco descolocado, ya que, por lo general, mis compañeros de equipo no suelen discriminar entre los Poderes. Según sus palabras, se sentían extraño por cómo actuaba mi sombra, ya que actuaba como si de verdad estuviera viva, algo que les generaba una sensación muy mala sensación a las personas en general, independietemente de su Raza... No pude evitar apreciar la ironía de que sus suposiciones que fueron dichas en broma estaban muy cercanas a lo que yo consideraba como realidad.
Después de todo, la sombra era una extensión de mi cuerpo. O más concretamente, de mi alma: Así es cómo todo el mundo creía que pensaba, pero estaba seguro de que [Yami] era algo más.
Sentí como la sombra se estiró velozmente hacia su objetivo. No es por alardear... tanto, pero mi [Yami] era capaz de viajar a una velocidad muy superior al de los mejores [Caballeros] de parte de los Demonios, por poner un ejemplo. Nadie, ni siquiera uno de los mismísimos Maous había logrado escapar de mi [Yami] sin haber recibido una herida seria en la batalla.
No escuché un grito de sorpresa por parte de mi atacante, asi que es seguro asumir que ni siquiera tuvo el tiempo para procesar lo que estaba ocurriendo. Al comienzo me daba pena matar a las personas, sobre todo con mi [Yami], ya que sabía muy bien cuál era el destino de aquellos que murieron por mi Poder, algo que aún no he logrado quitarme del todo, pese a las miles de personas que había matado. Pero si fueran parte de esa ¨Raza¨ que a mis ojos no debería, todo cambiaba.
Decidí que lo mínimo que podía hacer al ver como mi atacante estaba a punto de morir miserablemente, sería apreciar sus últimos momentos en la tierra de los vivos, como una manera de demostrar mis respetos ante un oponente que, sinceramente, me sorprendió al ver que se había atrevido a atacarme, algo que casi nadie suele hacer dada mi reputación en el mundo.
Intenté demostrarle una mirada que transmitía puro respeto por su valentía que fácilmente podría haber sido confundida por estupidez... Quizás fuera una mezcla de ambos, aunque a estas alturas de la película, creo que poco debería importarme. Siempre me consideré alguien que, aunque no fuera bueno, sabía cuándo mostrar mis respetos por un oponente. Me giré lentamente para darle un aspecto drámatico al momento, una manía que suelo hacer para olvidarme de toda la mierda que me ha arrojado la vida, intentando darle una mirada de solemnidad a mi ¨oponente¨.
...
Sí... Ese pensamiento murió en el momento en que descubrí que era de ¨esa¨ Raza que tanto sufrimiento me ha causado a lo largo de mi vida. Incluso aunque ya hayan pasado varios años desde que se me formó esta línea ¨equivocada¨ de pensamiento, nunca me olvidaré de todo lo que sufrí por culpa de estas abominaciones contra la naturaleza. Quitando toda mi muestra de respeto e intento de simpatía, cambié todo eso por una sonrisa psicópata que tanto he usado y que fue el principal motivo por el que terminé completamente solo, aparte de mi Maestro.
Vi como mi futura víctima parecía espantada ante mi repentino y para nada agradable cambio de actitud, pero eso no me afectaba de ninguna manera negativa. Todo lo contrario, si era capaz de admitir. Me sentía muy contento de que pudiera generar esta clase de expresión en los rostros de aquella Raza que ni siquiera deberían considerarse al mismo nivel que los animales, sino mucho más abajo.
Esto era lo único bueno que me podía brindar esta maldita Guerra que no guardaba ningún significado real para mí, más allá de una manera libre de poder torturar a esta maldita especie que tanto mal le hacen al planeta. Que tanto mal me han causado en los pocos años que llevo de vida, si puedo agregar. No pude disfrutar matar a una de esas cucarachas desde hace mucho tiempo, así que me tomaré mi tiempo para disfrutar esto.
Sentí como el Demonio que había logrado salir airoso se acercaba a gran velocidad hacia mí, seguramente intentando salvar a su ¨compáñero de Raza¨, además de ganarse el prestigio de matarme. Ni siquiera me molesté en mirar cuando levanté mi mano derecha hacia el cielo. El Demonio me vió con una expresió confusa, algo que pude adivinar gracias a que entró en mi [Campo Limitado] recientemente.
Un grave error que terminará pagando muy caro.
BOOOM
Una gran explosión se escuchó en toda la zona, algo que detuvo al Demonio de continuar su vuelo hacia mí por un segundo por mero instinto. En ese segundo que se detuvo, una gran flecha hecha de Oscuridad cayó del ¨cielo¨ a una velocidad pasmosa. El pobre Demonio ni siquiera pudo enterarse de que estaba pasando hasta que la [Yami no ya] se empalara sin tapujos en su torso, algo que ninguna persona normal debería ver si quería mantenerse sano de mente.
Por suerte o desgracia, dependiendo el punto de vista, ninguno de los presentes podría ser considerado una persona normal, o siquiera una persona para empezar. Ni siquiera el insecto que tenía detrás de mí podía ser alguien normal, independientemente de cuánto odiara a su especie. Y no me estoy refiriendo a que sean seres asquerosos, que lo son, para que engañarnos, sino que también habían algunas excepciones que demostraron ser fuertes... para los estándares de las cucarachas, para que quede claro.
No me molesté en observar la explosión y en su lugar me dediqué en presenciar la expresión de aquel ser inmundo. Parecía que había perdido por completo las esperanzas cuando vió como había matado con gran facilidad al que seguramente sea su compañero o algo así. Pero me extrañó que el insecto estuviera empezando a derramar lágrimas al presenciar la sonora explosión.
Bueno, como pienso dejar que su sufrimiento se alargue un poco más, y francamente me estoy empezando a aburrir de este páramo tan desolado por tanto, creo que no haría tanto daño saber un poco de la vida de este ser inmundo, en caso de que haya perjudicado a alguien de mi Raza. En general, no tenía apreció por los Humanos, pero todo cambiaba cuando estas cucarachas estaban involucradas.
Estos seres inferiores deberían desaparecer: Ese era el lema que regía la totalidad de mi vida actual, y la razón de que luchara en esta Guerra sin sentido.
-[Maindoriudingu]- Diciendo esta simple frase, entré en el horrible mundo de este insecto que se encontraba en sus últimos momentos. Fue una experiencia ciertamente asquerosa estar en los pies de este ser inferior, pero en parte creo que no fue una perdida total de tiempo, ya que fui capaz de conocer parte de su mundo y cómo hacían sus horribles actos. Estuvo bastante bien descubrir la mentalidad de esta abominación para futuras referencia, pero repentinamente toda esa sensación se esfumó cuando descubrí un detalle importante.
Esta cucaracha había contraído matrimonio... con el Demonio que acababa de asesinar hace pocos segundos... Ah, no puedo evitar sentir una profunda lástima... por el hombre. Pensar que terminaría siendo utilizado por esta mujer para tener una vida de ensueño... Ciertamente es algo de lo que me podría esperar de su clase, pero nunca dejaba de sorprenderme lo brutales que podían llegar a ser.
Ella no está llorando porque acabará de matar a su amor verdadero o algo así, sino porque ahora su vida soñada se acaba de ir a la mierda.
Sus sentimientos de amor son pura mentira. ¡No hay manera en que estos seres fueran capaces de sentir amor alguno por nadie más que no fueran ellos! ¡Tan solo me estaban mostrando lo que quería, una técnica que estos seres inmundos aprendieron para engañarnos! ¡Lo sé! ¡No puede haber otra explicación!
-¡[Kyushu]!
¡NO HAY MANERA DE QUE UNA MUJER PUEDA AMAR A UN HOMBRE!
-DragonPulse-
Hola a todos. Este soy yo, DragonPulse, trayéndoles una historia que considero algo refrescante, por así decirlo. Ya que, honestamente, nunca he visto una historia de DxD donde el protagonista odie a las mujeres. Creo que soy una especie de ¨pionero¨, de alguna extraña y bizarra.
Bueno, ¿qué pueden esperar de esta historia? Sinceramente, aunque el tema central será Issei y si misandría exagerada, también tengo pensado gran cantidad de batallas y conflictos ideológicos entre los personajes.
Tengo mucha fe en los ¨enemigos¨ que pienso mostrar.
Quizás el Acto 0 no haya explicado una soberana mierda, pero les asuguro que intentaré darle un sentido a todo...con el tiempo.
Agradezco a quien se haya tomado el tiempo de leer esta pequeña y humilde historia. Actualmente estoy trabajando en mi fic de Pokémon, pero si esta obtiene una buena recepción, prometo actualizar de vez en cuando, lo cual se traduce, espero, en una vez al mes.
Bueno, sin más que decirles, espero que estén bien y que hayan podido llegar hasta el final.
DragonPulse se despido.
Bye.
