Disclaimer: Dragon Ball le pertenece a Akira Toriyama

Día uno: Mudanza.

Todo valió la pena. Haberme sonrojado infinidad de veces frente a sus padres, aguantar las incómodas charlas familiares, morir de pena cada vez que nos sorprendían besándonos, seguir todas las reglas de su padre para ser digno de su pequeña. Todo, absolutamente todo, fue gratificante. Lo hice todo por ella, porque la amo y pretendo hacerla feliz, y ahora puedo hacerlo libremente.

Porque hoy es el día de la mudanza.

Hoy, Pan y yo comenzaremos a vivir juntos después de cinco años de noviazgo. En sí, convencerla a ella fue más difícil que pedirle permiso a Gohan y a Videl. Al principio no veía necesario compartir una casa, pero comenzó a verlo como algo indispensable cuando ya no teníamos privacidad…ni para besarnos. Así que conseguí una casa modesta en la ciudad y le propuse vivir juntos en aquél lugar. No era las Montañas Paoz, pero prometí hacerla feliz ahí y en cualquier otro lugar. Ella al final aceptó, y ahora está de pie en el umbral de la puerta del que será nuestro hogar, junto a mí.

Ya hemos terminado de cargar las cajas al interior de la casa. Ella, claro está, se negó rotundamente a recibir un poco de ayuda, cosa que siempre me encantó de Pan; no porque no quisiera ser un caballero, es porque ella es un espíritu libre. Y libre la quiero mantener. Así que después del arduo trabajo, de acomodar el sofá en la sala de estar, nos sentamos exhaustos a contemplar nuestro casi vacío hogar. No salió ni una sola palabra de nuestra boca; nos limitamos a pasar el rato sentados juntos, apoyados en uno en el otro.

Una media hora después, Pan se durmió sobre mi regazo. Le acaricié el cabello azabache, tan sedoso y hermoso; hacerlo siempre me conducía a un estado de paz. Sobre todo, porque a ella le encanta que le acaricien en cabello. Me permití dormitar sumergido en aquella acción, mientras ella se acurrucaba como una preciosa gatita negra, pues seguramente sentía mis dedos enredarse en su cabellera. Era algo que solo conmigo mostraba; ese pequeño ronroneo, ese tipo de lindura. Pues con la mayoría de las personas era agresiva; eso me hacía sentir especial. Mi chica es dura, por eso le amo. Y créanme, me costó demasiado llegar hasta este punto, pero como ya dije, todo ha valido la pena.

Pero recordé que aún faltaba acomodar la cama en la que sería nuestra habitación, así que con sumo cuidado me levanté del sofá, colocando la cabeza de Pan sobre una de las almohadas. Tratando de no hacer mucho ruido, usé un poco de mi fuerza para cargar con la pesada (no mucho) base del colchón. Luego, sin golpear nada, introduje el resto en la habitación; las sábanas, edredones y demás almohadas. Me dirigí de nuevo a la sala y cargué el delgado cuerpo de Pan, que a sus veintitrés años pesaba alrededor de cuarenta y ocho kilogramos, caminé de regreso a la habitación y la deposité con suavidad sobre el lecho. Enseguida se acomodó, buscando el calor de las sábanas. La besé delicadamente en los labios, la cubrí hasta los hombros y apagué la luz. Después, me dediqué a darle los detalles finales a nuestro hogar.

Finalmente, la mudanza estaba completa. Pan y yo comenzaríamos a vivir bajo el mismo techo.

¡Hola! Bienvenidos a este pequeño proyecto. Con esto, pretendo explorar cincuenta días al azar de esta pareja. ¡Es que realmente los amo! Me inspiran demasiado.

Algunas aclaraciones...

Una vez leí un fic sobre una pareja de un fandom diferente, donde mostraban las ventajas de vivir juntos. Y recientemente leí otro fic (de nuevo, un fandom diferente) donde eran 30 días, entre AU y realidad anime/manga.

Entonces, sin ánimos de plagiar ninguno de estos escritos, que en lo personal me gustaron, decidí hacer esta recopilación en honor a la pareja que más me gusta del fandom Dragon Ball... ¡Oob y Pan! xD

Nos leemos pronto... Besos.

¡Ciao!