Todos los personajes son propiedad de Glee, Ryan Murphy y Fox. Yo sólo juego con ellos.
Ilusión o Realidad
El Autismo siempre fue su destrucción… acaso Kurt… ¿podría ser su cura?
Introducción:
E l Autismo era una de las enfermedades más raras en el hospital, ahí había de todo, gente con todo tipo de síndromes y de todas las edades pero sólo habían dos autistas uno de ellos era Finn Hudson, él era un caso especial, el no había nacido así, él lo había adquirido después de un accidente automovilístico, deambulaba perdido por el hospital solo, siempre solo o al menos eso creía.
Cuando tuvo el accidente fue porque no estaba lo suficientemente concentrado, iba con su novia Rachel Berry de regreso a su casa después de que le negaran una beca y que le dijeran que su talento en el futbol americano no era ni por si acaso suficiente. Lágrimas caían por su rostro y apenas podía ver, se sentía solo muy solo, el iba a ser un fracaso, no había nada por hacer, mientras su prometida iba directo a Nyada el no podía hacer nada para contribuir en su economía, estaba tan conmocionado por todo aquello cuando un camión se le cruzó…
Ahora Finn solamente divagaba solo en el hospital, aquella sensación de soledad nunca se le había quitado, no importaba que Rachel haya dejado la universidad por acompañarlo, no importaba que ella camina detrás de él todo el tiempo mientras divagaba, no importaba que en momentos de desesperación ella lo besara tratando de traerlo de vuelta, nada importaba, el se seguía sintiendo solo aún cuando con el tiempo eran dos personas las que lo seguían, su hermanastro Kurt que también estaba entre los finalistas de Nyada no había "tenido lo suficiente" en su última prueba, de modo que con los sueños rotos había decidido estudiar Psicología en Ohio mientras ayudaba a su hermano.
El médico de Finn, Estefan siempre hablaba con Kurt, simplemente lo hallaba fascinante y lo único que él veía como cura para Finn era que el dejara de sentirse sólo.
El otro autista había nacido con el problema, Blaine Ardenson era tal vez el caso más deprimente en aquel hospital, el nunca recibía visitas, siempre estaba solo pero a diferencia de Finn el no se sentía solo y no solo porque realmente lo estaba sino porque él no sabía la diferencia, había tenido cientos de enfermeras y doctores personales, algunos de ellos se habían encariñado de él pero a Blaine le daba lo mismo, es más ni siquiera se daba cuenta de quién era quién.
Otra gran diferencia con Finn era que Blaine obviamente no era un autista inducido por una causa mayor, el había nacido así, él vivía en su propio mundo un mundo donde solo la música existía, Blaine parecía dormir todo el tiempo, no se movía para nada, donde lo dejaban se quedaba, estaba prácticamente muerto, eso hasta que Estefan colocó algo de música como experimento, ahora Blaine tenía sesiones de música para estimularse pues solo cuando había música el caminaba, se movía… vivía.
Estefan nunca ponía música donde Blaine estaba, sino que la hacía apenas audible para él obligándolo a buscarla y cuando Blaine encontraba el origen de esa música una hermosa y amplia sonrisa aparecía en sus rostro antes de mover su cabeza a veces al ritmo otrs todo lo contrario,
Poco a poco los doctores habían descubierto que a Blaine lo que más le gustaba era el top 40, nunca entendieron como es que Blaine había desarrollado esa forma de desenvolverse y lo triste fue que cuando Estefan comunicó exaltado su avance a los padres de Blaine estos habían dicho: "llámenos si es que alguna vez se cura y es listo, de otro modo confórmese con cobrar"
Prólogo:
- Kurt! Kurt Hummel! – Estefan corre por los pasillos intentando alcanzar al hermano de uno de sus pacientes
Kurt se voltea al oír su nombre y en cuanto divisa al joven doctor recién egresado sonríe, Kurt no está seguro de porque le gusta estar con él, ni siquiera le ha preguntado sobre sus sexualidad pero ya está esperanzado en que el doctor sea Gay.
- ¿Qué pasa Estefan? – responde sonriendo y un poco sonrojado
El doctor está feliz de que después de tanta insistencia el castaño le llame por su nombre
- nada importante – se encogió de hombros – yo sólo quería saber si tú… ¿querrías ir a tomar un café en cuanto termine de revisar a Blaine?
- claro… ¿Blaine? ¿es un nuevo paciente? – preguntó sonriente
- no, está desde que trabajo aquí y de hecho está aquí desde mucho antes, creo que desde que tenía seis años, ahora tiene veinte como tú – el doctor suspira - entonces… ¿ nos vemos en media hora?
- está bien iré a ver a Rachel y nos vemos en media hora.
Ambos se sonríen y luego cada uno sigue su camino, Estefan no puede evitar voltear de rato en rato hasta que el castaño desaparece de su vista. Ese chico va a ser su perdición, desde la primera vez que le hablo para tratar de aprender sobre el síndrome que padecía su hermano, el no lo había podido sacar de su cabeza, le gustaba todo de aquel joven, su aguda voz, su tersa y suave piel, su… bueno ya, lo aceptaba… había incluso fantaseado con el castaño, pero es que él se lo hacía tan difícil poniéndose esos pantalones tan apretados que apenas y dejaban algo a su imaginación.
Casi sin darse cuenta ya había llegado al cuarto de Blaine, y este estaba como siempre mirando hacia el vacío.
Estefan hizo su rutina, revisó sus ojos, sus oídos, sus reflejos involuntarios, etc y como siempre Blaine no daba problema pero tampoco colaboraba.
Salió del cuarto con dirección al vestíbulo y al llegar encendió el estéreo, puso el Cd de una de las artistas que más le gustaban a Blaine: Katy Perry y se fue a preparar para su cita.
Blaine estaba en ese vacío blanco que siempre lo rodeaba, se sentía cansado quería dormir pero no podía conciliar el sueño… de repente un pequeño susurro inundó sus oídos, empezó a seguirlo, e chocó varias veces pero finalmente llego, él sabía que esa cosa negra era la que cantaba, se dirigió a ella sin ver que uno de los niños había dejado algo que no debía estar ahí, lo piso se fue al suelo de bruces….
¿Estaba escuchando a Katy Perry? Sí la radio estaba encendida, tal vez algún paciente la había encendido, decidió ir y apagarla pues no a todos los pacientes les gustaba el ruido y peor ese tipo de música.
Llegó al vestíbulo a tiempo para ver que un chico parecía tener la misma idea que él, estuvo por irse cuando el moreno cayó de bruces, se dirigió rápidamente hacia el para ayudarlo mientras los otros pacientes gritaban asustados.
El castaño tomó a Blaine en sus brazos y empezó a sacudirlo buscando respuestas pero Blaine ya no estaba ahí.
- por favor ayuda! – gritó el castaño asustado al no obtener respuesta – por favor reacciona – decía una y otra vez hasta que una mano se posó sobre él
- kurt el no te contestara no puede y… te aseguro que está bien, siempre está así – Estefan lo miro con tristeza y prosiguió a apagar la radio – enfermeras, el paciente 14 fallo en su tratamiento de estimulación de nuevo, llévenselo al cuarto – pido hablando por un intercomunicador.
Kurt no respondió y volvió la vista a Blaine para encontrarse con que este lo estaba mirando fijamente, Kurt sonrió y Blaine apenas e hizo el amague de responder, Estefan observó aquello e hizo una nota mental sobre aquello.
Kurt no pudo evitar pasar sus dedos por la mejilla del moreno y se quedó prendado de aquellos ojos avellana. Iba a decir algo pero sintió que Blaine era arrastrado de sus brazos, quiso protestar pero no tenía razón así que dejo que lo hicieran, se puso de pie para observar cómo se llevaban al moreno.
- ¿Qué tiene? – fue lo único que pudo articular cuando Blaine desapareció de su vista
- Autismo, pero en un grado peor al de tu hermano, el no tiene esperanza de cura, nació con ello. El es Blaine – respondió Estefan.
