"Extráñame"
Resumen: Prusia esta a punto de irse con Rusia. Pero Austria quiere hablar algo con él antes de que se marche.
Disclaimer: Hetalia Axis Powers no me pertenece.
Este es un fic para mi amiga Midori, que quería un fic de Austria x Prusia. Ojalá le guste xD.
Pronto sería mandado con Rusia. Un escalofrió recorrió su espalda al pensar en eso. ¡Ese tipo de verdad daba miedo!...Estaba solo en una habitación, esperando que la nación viniese a buscarlo.
La puerta se abrió y se sorprendió al ver a un hombre de ojos violetas y de cabello castaño obscuro.
-Pero si es el caballerito.-Dijo con una sonrisa, sus ojos rojos estaban posados en los del austriaco.-¿Hungría te dejó salir?...-Preguntó con sarcasmo.
-Obaka-san.-Dijo el austriaco mirando al hombre de cabellera blanca.-Dejaras de ser un país…
-Lo sé, pero eso no significa que no te haya ganado tus regiones vitales.-Sonrió con burla el prusiano. Antes de que Austria pudiera decirle algo Gilbert sacó al pajarito de su cabeza y se lo tendió.-Cuida a mi pequeño amigo mientras este con Rusia.
-No soy tu niñero, Obaka-san.-Aunque dijo eso de igual forma cogió al pajarito entre sus manos.
-Ten eso para que no extrañes al impresionante yo.-Habló el prusiano con una sonrisa de superioridad.
-¡No te voy a extrañar, Obaka-san pervertido.-Habló el austriaco seriamente. No lo extrañaría, claro que no… no extrañaría la manera en que Gilbert siempre estaba al lado de él. De la manera en que siempre lo sacaba de sus casillas. De la manera en que sonreía… ¡Claro que no lo extrañaría!.
-Sí lo harás, caballerito.-Dijo con una sonrisa Prusia. Antes de que Austria pudiera replicarle algo, Gilbert se acercó a él y lo besó. El austriaco estaba sorprendido… pero… le correspondió al beso.
Cuando se separaron el prusiano tenía una sonrisa socarrona en los labios, mientras que el austriaco estaba sonrojado hasta la medula.
-Obaka-san…-Dijo Roderich mirando a Gilbert, el prusiano nunca había hecho eso antes…
-Te dije que me extrañaras…-Dijo simplemente Prusia, en ese momento se abrió la puerta, dando paso al ruso, que entró con su sonrisa infantil.
-Vamos, da.-Dijo mirando a Prusia. Gilbert camino hacía la puerta, dejando a un sonrojado Roderich ahí.
-Extráñame, volveré… porque soy genial…-Dijo de manera de despido. Cuando las dos naciones salieron de la habitación, Roderich sintió un leve pío venir desde su cabeza…
-Cállate…-Murmuró hacía al pajarito.-Eres igual que tu dueño… que en verdad sabe que lo extrañare…
~ The end ~
Gracias a los que leen y dejan comentarios. Acepto críticas…
