Sailor Moon y sus personajes, pertenecen a la genial Naoko Takeuchi.

La siguiente historia no tiene absolutamente nada que ver con Sailor Scouts, ya que es un Universo Alterno.

¡Espero que les guste!

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MI REDENCIÓN

CAPÍTULO 1

"CULPAS"

Hay veces en que los recuerdos amargos se vuelven tan agobiantes, que algunos prefieren olvidarlos... otros, en cambio, optan por el camino más difícil y cruel... cargar con ellos el resto de sus vidas y obligarse a nunca olvidar...

Era el camino más difícil, pero sin duda, el que a ella le correspondía seguir. Por momentos, parecía que todo hubiera quedado atrás, ya que la mayoría de las veces, lograba engañar a todo el mundo, tomando una postura distante y fría, pero cuando se miraba al espejo, lograba entender que jamás olvidaría, que la culpa siempre estaría como su fiel compañera.

Ese día, como todos los demás, tendría que lidiar con sus problemas, los cuales, cada día estaban aumentando más... pero no había tiempo para lamentarse por ello, cuando ya se había lamentado todos esos años por su propia vida, así que se arregló lo mejor que pudo y partió con dirección al banco, tal vez este día sí la escucharían y podría salvar su hogar.

"Hogar..."

Era irónico llamarlo así, ya que desde hace mucho tiempo que no lo era, al menos, ella dejó de verlo como su hogar el día en que ellos se fueron...

Era difícil no recordar sin que las emociones vividas volvieran a florecer, pero desde hace varios años ya, que había aprendido a cargar con eso, por lo que esta vez, como muchas, no había lágrimas, sólo un profundo dolor y resentimiento con la única persona culpable de sus problemas y de su actual soledad: Ella misma.

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"Señor, sólo déjeme explicarle, le prometo que conseguiré el dinero..."

"Lo siento, señorita, pero los bancos no funcionamos con promesas, así que, por favor, si me disculpa, tengo asuntos importantes que atender".

"¡Pero, esto también es importante!"

"Lo sé, y por eso le pido que se retire. Es lamentable que no haya podido conseguir el dinero para pagar la hipoteca, pero negocios son negocios, así que, por favor..."

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"Maldito banco, maldito encargado¡malditos todos!..."

Pero... no tenía por qué ser diferente a las demás ocasiones¿verdad, aunque en esta ocasión el golpe fue más fuerte, porque era una negativa definitiva. Por lo mismo, su reacción también fue mucho más fuerte, permitiéndose hacer lo que hace tiempo no hacía... llorar.

En ese momento sintió como si todo el peso del mundo estuviera sobre ella, no podía parar de llorar... tristeza, rabia, resentimiento, incluso odio, fue lo que sintió, pero lo peor de todo es que no era en contra de ese hombre del banco, ni contra aquellas que la habían convencido de hacer malas inversiones, si no contra sí misma, la única responsable de que le arrebataran el último de los recuerdos tangibles que le quedaba de su familia...

"Familia..."

Qué lejana se le hacía esa palabra, qué amarga le parecía... después de todo, ella se había encargado de acabar con lo que más quiso... El resto siempre habló del 'accidente', pero ella sabía muy bien que no era así, que sí había un culpable por la muerte de sus padres y hermano, y esa culpable... era ella.

Trataba de poner atención al camino, pero era inútil, las lágrimas no querían parar y sus manos no paraban de tiritar, sin duda, ese era el peor ataque de nervios, dentro de los muchos que había tenido ese último tiempo, por lo que manejando aún, buscó desesperadamente esas píldoras que para ella eran mágicas, aquellas que en los últimos meses se habían vuelto una verdadera necesidad...

No supo cómo ocurrió, pero en un segundo todo se volvió negro, sintió un espantoso ruido de fierros retorciéndose y después no supo más...

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"Doctor¡la paciente está despertando!"

Le era difícil abrir los ojos, pero al hacerlo, casi instantáneamente volvió a cerrarlos, pues la luz la encandilaba.

"Al fin despertaste, nos tenías muy preocupados".

"¿Preocupados?"

Quiso reír ante esa frase que le pareció la más graciosa que hubiera escuchado en el último tiempo, pero se contuvo, al percibir un intenso dolor en su rostro.

"No te conviene hacer eso, tienes contusiones en toda tu cara y cuerpo, pero debo decirte que has tenido mucha suerte, ya que eso no es nada para la magnitud que tuvo el accidente... perfectamente pudiste morir..."

"Morir..."

Nunca le pareció más atractiva esa palabra como ahora... o quizás sí, siempre había contemplado la muerte como una posibilidad, pero la culpa y la cobardía no la dejaron concretar su cometido.

"Enfermera, podría dejarme un momento a solas con la paciente, por favor".

Escuchó como la puerta de la habitación se abría y cerraba, percibiendo ahora sólo el sonido de la máquina que registraba sus signos vitales. Se sentía tan cansada, que lo único que quería era volverse a dormir, pero al parecer, ese doctor no tenía intenciones de callarse...

"Creo que ahora podremos hablar con más confianza. Sé que puedes hacerlo, aún con esos golpes en el rostro, ya que aunque te molesten, en realidad no fueron tan severos, así que espero que me respondas con la verdad... Serena".

Escuchar su nombre de la boca de ese desconocido le pareció lo más extraño del mundo, quizás porque desde hace mucho tiempo que escuchaba ser nombrada sólo como 'Srta', o simplemente como 'Tsukino', después de todo, aquellos a los que les debía dinero, no se iban a tomar la molestia de tratarla con tanta cortesía.

"Qué...quiere... que le... diga..."

"Quiero que me expliques por qué abusas así de los tranquilizantes..."

¿Abusar, claro que no, ella sólo los tomaba cuando era necesario... casi siempre. Simplemente quería volver a la normalidad cuando le venían esos ataques de nervios, por lo que sabía que una pastilla no era suficiente. Además, el médico se los había recetado¿qué podía haber de malo en eso?

"Son...para mis...nervios".

"Ya veo, estabas tan nerviosa, que tomaste un montón de esas píldoras y ni cuenta te diste de los autos delante de ti".

No entendía el por qué del tono que él estaba ocupando. ¿Acaso era enojo¿Rabia?

"Eso...a usted... no le... incumbe..."

Sin duda, volvía a colocar su careta de 'chica fría' una vez más.

"Tienes razón, puede que no me importe, pero lamentablemente para ti, tendré que involucrarme, ya que estarás los próximos 6 meses en mi clínica de rehabilitación".

"¿Qué?..."

¿Rehabilitación¡pero si ella no lo necesitaba, ella no era una de esas que no podía controlarse... necesitaba esas píldoras para tranquilizarse¡pero podía dejarlas cuando quisiera!... o ¿no?

Él pareció ver la confusión en su rostro, ya que no se demoró en contestar algo para lo cual no estaba preparada...

"Lo que escuchaste, tendrás que ir a esa clínica, si no quieres ir a la cárcel por conducir bajo el efecto de estupefacientes... esa es la condición que puso la policía, ya que sólo se trataba de tranquilizantes, pero si te niegas a cooperar, tendrás que cumplir condena".

Debió haberle inspirado mucha lástima, porque después suavizó el tono y agregó:

"No te preocupes, lo que sea que te llevó a abusar de esas sustancias tiene solución y yo me voy a encargar de que así sea..."

Sintió un nudo en la garganta. Era la primera vez, en mucho tiempo que alguien mostraba tal interés en ella, aunque sólo fuera un doctor, pero, pese a sus palabras, no pudo creerle. Habían muchas cosas que el ignoraba y una de ellas, era que NADA tenía solución, que si se iba a esa clínica perdería su casa definitivamente y que en realidad la única solución que le parecía viable, era aquella a la que cobardemente quiso evitar en todo ese tiempo y la cual se le había negado en esta oportunidad...

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¡Hola!

Al fin me animé a publicar en Fanfiction. Tenía varias dudas de si hacerlo o no, pero por fin me decidí. Es mi segundo fanfic (aunque el primero aún no lo termino y lo tengo en otra página)

Del fic: Quisiera decir que ya tengo varios capítulos de esta historia y que ha sido muy gratificante poder escribirla, no solo porque al ser un universo alterno cualquier cosa puede pasar, si no también, porque uno de los personajes es mi preferido (aún no lo diré, pero se sabrá en el segundo cap)

Desde ya, a todo el que ha llegado a este punto le digo; Muchas Gracias por leer mi historia… sería un gran aliento para mí recibir algún review…

Danyseren