Disclaimer: por más rubia que sea, no soy JK. Lo reconocible es suyo.


¿Era luz?

Melanie Stark


¿Qué se sentirá caer? ¿Verás toda tu vida pasar por delante de ti?

¿Cómo será morir? ¿Dormirse, y que todo se apaga?

¿Habrá algo Más Allá?

Muchas preguntas, pocas respuestas. La muerte es algo sencillo, simple... y aún así, misterioso.

La muerte, que parecía venir acompañada de un verde brillante ese día, en todo su mundo, en todo el mundo —porque no existía más mundo que el terror que se desataba en Hogwarts, y porque los Avada Kedavra volaban por todas partes, llenando el lugar con olor a guerra— iba ganando. Ella, que no entendía de bandos, ni distinguía entre rojo, azul, amarillo, verde y negro, los arrastraba a todos por igual, y era quien terminaría ganando. No era necesario ser muy inteligente para eso: la marea de cadáveres que yacían en los pasillos hablaban por sí solos —no literalmente, claro. Si lo hicieran, lo más prudente sería correr. Rápido. Pero como no lo hacían, uno podía quedarse tranquilamente sentado, esperando unirse a sus filas eternas—. Eran víctimas de una guerra injusta, sin mucho sentido más que... la eterna lucha entre el bien y el mal, la luz y la oscuridad, sin querer tener en cuenta a los que eran buenos, pero a veces, hacían cosas malas, o a las semipenumbras, o a los grises.

¿Dónde estaba situada ella? Era una Hufflepuff, que se había escapado para luchar en el bando de Potter. Pero, ¿era solo luz?

Luz o no, no le impidió a ese Mortífago a empujarla —al encontrarla cavilando sobre nimiedades, tales como la misma muerte— por la ventana de una torre.

Allí, ella descubrió que sí, que al caer, la vida pasa por delante de una.

Pero no mi vida propia, sino el hecho de estar vivo, de todo lo que tal vez pasaría. No estoy segura si es real, o un mero producto de mi imaginación, per—...

La frase nunca se completaría.

Contabilizando las muertes, al día siguiente, encontraron una joven, de unos quince años con la túnica de Hufflepuff, destrozada contra el piso. La única, en toda la Batalla, en morir así, sin un maleficio.

Claro que, con el correr de los años, y la maldita costumbre generalizadora de la historia, la olvidarían. "Todas las muertes causadas por el maleficio asesino".

Pues no. Ella, Pauline Rivers, Hufflepuff, había muerto en una caída. Pero era solo una estadística mínima y nadie la contabilizaría. Por supuesto.


No podía dejar pasar la oportunidad, aunque se me pasaron días, fue bastante a propósito :3

Homenaje doble... a los caídos de la Batalla de Hogwarts y a la verdadera Pauline Rivers.

Gracias por leer!