AN: Esta es la versión en español de 'The Seven Nation Army' (Mi primer fic que ya está completo en ingles pero que quería traducir porque, grandísimos demonios, el español es mi lengua natal y NECECITAMOS poblar este sitio con mas fics en el idioma). Haré que algunas cosas varíen para hacerlo más interesante pero la historia es básicamente la misma. Pienso traducir también las estrofas de canciones que aparecen antes de cada capítulo ya que es lo que utilizo para marcar el humor y tono de cada uno. Antes que nada, estoy consciente que hay dos versiones de South Park en español. La que transmiten en España (Que me encanta porque, como no soy española, me suena súper sexy y exótico el acento) y la que transmiten en Latinoamérica (Que es bastante más -digamos colorida y explicita- en lo que se refiere a expresiones verbales… lo que la hace realmente hilarante). Con la que yo crecí es con la segunda (Realmente, ahora solo veo los capítulos en ingles ya que, obviamente, salen más rápido y están sin censura en southparkstudios. Después de ver las tres versiones, yo les recomiendo la original pues me parece lejos la más simpática) y por eso tal vez se me escapen expresiones muy especificas de la región. Igual, prometo intentar mantener el lenguaje tan democrático como pueda para ambos lados. Ojala disfruten!
Acid
South Park es propiedad de Matt y Trey… yo solo puedo soñar
Agradecimientos especiales al departamento de edición (Que cuenta solo con un fabuloso miembro): cofee. apples. cookie. eater
La armada de las siete naciones
Capítulo 1: Tan insano
El mundo en que vivimos está loco y sencillamente no puedo ver esa mitad de nosotros que se halla hundida en el pecado" Virtual insanity, Jamiroquai.
"No es más que poesía barata"
"Hmm…"
"Es basura corporativa que te llena la cabeza con ideas de que es totalmente necesario comprar chocolate y rentar películas si estas soltero- o venderle tu alma a Satanás para que tu mujer abra las piernas si no lo estas… Porque hay que hacer algo en Día de San Valentín que no sea parte de tu rutina diaria. Si te pones a pensar al respecto, el día de san Valentín no es más que pura mierda. Es decir, no tengo idea de quién demonios fue el amigo Valentín ni que hizo para tener su propio día, pero realmente dudo que hubiese querido que todo el mundo fornique en su memoria" '¿Cuánto tiempo ha pasado desde que empezó a hablar?'
"Si hubieses sido tú, así lo habrías querido" Fue mi cansada respuesta. Había escuchado ese tipo de cosas proviniendo de sus labios demasiadas veces como para estar sorprendido, intrigado y/o enojado.
"Y esa es la razón por la cual nunca me harán un santo. Ya hice mi paz con eso"
Solté una risa corta mire a Kenny de reojo. Se sentía bien no estar solo después de clases por una vez.
El no asistió a clase ese día por un desafortunado accidente. Tuvo que ver con un gato y un roble… no pregunten.
Ya el sol estaba a punto de ponerse y estábamos pasando a buscar a Stan. En el trayecto, Kenny empezó a filosofar sobre el Día de San Valentín y lo estúpido que era emocionarse tanto por una marca de tinta roja en el calendario. Cualquiera que no supiera cómo es él, pensaría que estaba tocando puntos muy buenos, pero yo lo conocía. Solo estaba tratando de armarse una excusa para sentir que estaba bien el hecho que no le había comprado nada a su novia y ni siquiera había ahorrado para hacerlo. Solo faltaban días para dicha celebración y un obsequio todavía no era algo en lo que él se estresase por más de quince minutos.
Qué suerte tiene esa niña, eh?
Verán, Kenny es un vicioso y eso es solo para no decir que es toda una puta. No había mujer que le durase más de lo que dura ropa en el cuerpo de Paris Hilton.
Katie era solo-
"Karine" Me corrigió y me di cuenta que lo había dicho en voz alta. Como sea, Karine era solo la novia semanal de Kenny así que, y con toda honestidad, no debería esperar tal romanticismo de él.
Solía preguntarme cómo es que se ha levantado tantas faldas cuando es un idiota tan grande con las portadoras de estas. El no había cambiado tanto desde el kínder. Claro, ahora estaba más alto, más que todos los hombres en nuestro salón. Su cabello seguía siendo del mismo rubio sucio y despeinado el 90% del tiempo. Seguía riéndose de los chistes de Terrance & Phillip tanto como siempre y todavía pasaba su tiempo libre en internet, acosando cada sitio porno que encontraba.
Las niñas nunca habían le habían dado un segundo de su tiempo antes y mucho menos si tomaban en cuenta su reducida cuenta bancaria, pero ahora parecía que siempre tenía a alguien colgando de su brazo.
Aunque tengo que admitir que si había un cambio bastante grande en lo que se refiere a su personalidad. Había ganado un carisma especial que solo alguien que no le teme a nada puede poseer ya que una vez que le pierdes el miedo a la muerte, no hay mucho más que pueda asustarte.
Quizás era la confianza que proyectaba lo que hacía suspirar a cada par de pechos que se encontraba.
Tan pronto como doblamos en la siguiente esquina y la casa del terapeuta se hizo presente, note a otro de nuestros compañeros de clase sentado en el pórtico, fumando con los ojos cerrados y descansando todo el peso de su espalda en la pared que tenia detrás.
Es la persona más holgazana del universo, lo juro.
"Craig" Sus ojos se abrieron lentamente para descubrir quien fue aquel que se atrevió a quebrar su momento de paz.
"Stan está con el loquero. Ya saldrá" Dijo y cerró los ojos nuevamente, probablemente tratando de reunir la energía necesaria para levantarse. Nos ofreció cigarrillos y Kenny tomo uno. Yo solo le hice un gesto de negación mientras veía a mi amigo encender el delgado tubo cancerígeno y sonreír cuando la nicotina llego a sus pulmones. No entiendo cómo es que todos se emocionan tanto al fumar… nunca le vi el sentido. ¿Sería divertido? Porque con toda honestidad, luce increíblemente aburrido.
Me quede escuchando a mi propia versión rubia de Confucio intentando convencer a Craig que sus ideas sobre San Valentín eran acertadas. El necesitaba que alguien le diga '¿Sabes algo? Tienes razón' antes de convencerse que era en verdad una teoría y no solo una excusa.
Craig, Kenny y Stan se habían hecho muy cercanos últimamente pero no me importaba tanto. Siempre y cuando su hermandad los mantuviera lejos de problemas me venía muy bien. Yo estaba casi siempre muy ocupado con mis estudios por lo tanto estaba feliz que Stan tuviera otras personas con quien juntarse y que no lo llevaran por un mal camino.
Antes de que se vuelva confuso, debería explicar el porqué de nuestra visita a la casa del terapeuta. Suena algo raro teniendo en cuenta que Stan solía desvivirse diciendo lo inútil que era la ayuda psicológica.
Cuando estábamos en primaria y hasta terminar la secundaria, Stanley Marsh era el niño con el que todos querían relacionarse de algún modo. Era el tipo de persona que nunca hizo mucho por ser popular pero siempre se encontraba rodeado de gente de cualquier modo. Era la estrella del equipo de futbol americano y parecía casi intocable cuando caminaba por los pasillos.
No fue hasta unos años después que las cosas cambiaron.
Pongámoslo de esta forma, los años de preparatoria no fueron los mejores de Stan. Fue como si el destino hubiese decidido que la vida le estaba yendo demasiado bien para ser un engendro de South Park.
Comenzó cuando Sparky, el perro homosexual de Stan cayó enfermo y al fin lo pusieron a dormir. Era muy viejo y ya casi ni podía caminar pero si conocieran bien a mi mejor amigo, entenderían lo fuerte que fue ese golpe. El es el tipo de persona que tiene a su perro como a un jodido hijo. A veces hasta me molestaba que tuviera que compartir mi lugar de mejor amigo con un can pero nunca lo mencione por la leve sospecha de que Stan lo elegiría a él si tuviera opción.
Se puso muy mal por lo del perro pero unos cuantos viajes a Burger King y algunos días de videojuegos extensos levantaron su ánimo de forma satisfactoria. Hasta entonces, lo peor que le podía haber pasado era eso y estaba…tan equivocado.
Un millón de viajes hasta cada antro de comida rápida no podrían haber mejorado su ánimo con respecto a lo que paso después.
Randy Marsh, el orgulloso padre de mi mejor amigo y geólogo celebre falleció ebrio tras un accidente ocurrido en un bar.
Había sido una noche demasiado común. Randy fue a un bar después del trabajo para ver un partido de Futbol americano con algunos amigos y tomar unas cuantas cervezas. Lo hacían una vez por semana al menos e incluso mi papa los acompañaba de vez en cuando.
Bien, lo que ocurrió fue nada más que una riña. Un borracho imbécil empezó a ponerse agresivo con todos cuando su equipo empezó a perder y Jim, el tío de Stan, se metió en el pleito como todo buen redneck. Randy siempre fue el tipo de sujeto que está sumamente listo para probar su hombría a cada momento y pronto, se armo una buena orgia de puños y patadas. Nadie está seguro de cómo sucedió, pero cuando algunos terceros intentaron separarlos, fueron descuidados…tan descuidados como toda persona que se encuentra bebiendo en un bar.
Randy cayó de espaldas hacia la barra y se golpeo la nuca en.
Y eso fue todo.
Ese fue el golpe que acabo con su vida.
Fue totalmente estúpido
Fue la forma más jodidamente estúpida de morir.
¿Como pudo un hombre que fue capaz de sobrevivir cada cosa que ocurría en nuestro pueblo morir por un accidente tan ridículo? Fue gomo si el Karma nos hubiera dado una bofetada gigante a todos.
Recuerdo el día que me entere de lo sucedido y fue la tarde del día siguiente. Stan no se había presentado a clases ese día y me preocupe bastante ya que el siempre solía avisarme antes de faltar o llegar tarde.
Fue hasta el receso de almuerzo que recibí su llamada. Cuando atendí, su voz no daba indicios de problema alguno. Solo note que estaba algo callado cuando me pregunto si podía ir a su casa después de la salida. Cuando llegue a casa para tomar una ducha antes de ir donde Stan, mi madre me detuvo. Estaba sentada a la mesa del comedor con un rostro melancólico y los ojos rojizos cuando me pidió que tomara asiento por un minuto.
"El padre de Stanley falleció anoche, bubalah*" Me dijo con una voz suave.
No fue un solo segundo más tarde que estaba corriendo tan rápido como me lo permitiesen mis piernas hasta su casa. Ni siquiera tenía pensado que le iba a decir o como actuar, solo sentía que debía ver a Stan y debía hacerlo rápido.
Apenas llegue a la vereda cuando la puerta del frente se abro de golpe y Stan corrió hacia mí, hundiendo su rostro en mi hombro y apretando la tela de mi camisa con todas sus fuerzas mientras las lagrimas le resbalaban del rostro furiosamente. Cayo de rodillas y yo caí con él en el pavimento mojado por la nieve, abrazándole con fuerza mientras él descargaba su dolor en mí. Me quede con a su lado toda la noche y también todo el día siguiente en el velorio. No puedo ni explicar el estado miserable en el que se encontraba. Ni si quiera podía hablar sin que si voz se quiebre agudamente y le costaba siquiera mantenerse de pie para recibir condolencias. Nunca lo había visto así y fue verdaderamente horrible.
Y yo ni tenía palabras para ayudarlo a sentirse mejor.
Stan siempre pensó que su padre era algo tonto y que él debía hacerse cargo de que nada le ocurriera pero en verdad lo admiraba muchísimo. Randy era especial para todos nosotros que nos relacionábamos con su hijo. Fue el que nos llevo a nuestro primer club de Strippers, nos dio nuestro primer sorbo de cerveza y siempre era el chaperón en todas esas actividades que nuestros padres no querían que hagamos sin supervisión adulta. Fue la persona que nos hablo de sexo correctamente por primera vez y el que nos pasaba a buscar de cada antro de mala muerte a horas terriblemente avanzadas en la noche. Era el sujeto que escuchaba todos nuestros 'problemas de hombres' cuando teníamos demasiada vergüenza de hablar con nuestros propios padres.
Sin importar lo que pareciera, Randy era el héroe de Stan y fue casi como que su mundo entero se le vino abajo cuando murió.
Y fue después del funeral que todo eso se detuvo.
Entro en un estado catatónico total. Ya no lloraba por él y su voz dejo de sonar entrecortada y rasposa. Estaba callado todo el tiempo, como un juguete que se rompe y sencillamente permanece inmóvil hasta que alguien lo levante del suelo y lo tire a la basura.
Nunca vi nada más parecido a la expresión 'muerto en vida'
Y sin siquiera darle tiempo de respirar, Wendy termino con el unos meses después. No fue algo sorpresivo pues el y todos ya lo veíamos venir.
Solo quiero decir, antes de pensar en milésimos insultos para ella por dejar a Stan en su momento de dolor, solo consideren la posición en la que estaba. Si, lo admito… yo fui uno de los primeros en pensar 'Jodida perra sin corazón' pero eso no era del todo justo. Stan estaba demasiado deprimido todo el tiempo y se rehusaba a salir de su casa. Casi ni se alimentaba a menos que alguien le obligase y la puerta de su habitación parecía estar permanentemente llaveada.
Realmente, no hay forma de culpar a Wendy por no poder aguantar el infierno en el que mi amigo se había encerrado.
El resto no fue más que una cadena de eventos desafortunados. Debido a su ansiedad y estado mental, el asma de Stan volvió con fuerza y le daban ataques muy grandes donde perdía completamente el aliento y hasta se llegaba a desmayar en prácticas del equipo hasta el punto que el Chef lo echó del equipo.
Fue así como las vacas de South Park perdieron a su mariscal de campo.
Ahora que lo pienso, tal vez solo se canso de ser el héroe de todo el mundo. Sus antiguos amigos lo dejaron totalmente de lado y los que lo idolatraban se echaron a un lado sin importarles lo que esto le podía hacer a su delicado estado emocional.
Para fines de año, fue como si un Stan totalmente diferente se había apoderado de mi mejor amigo.
Luego de eso, el ya ni estaba deprimido.
En su lugar, estaba enojado… Y esa rabia se extendía hacia todos.
Lo primero que hizo fue correr hasta donde vivía el hombre que separo aquella pelea y termino la vida de su padre. Fue hasta ahí y golpeo a la puerta como si quisiera romperla con sus puños. Le gritaba al hombre que saliera y le mostrara su rostro.
Entiendo que Stan solo estaba buscando alguien a quien culpar y con quien descargarse pero ese hombre realmente no tuvo la culpa de nada. El solo estuvo en el peor lugar y momento posibles.
En fin, el hombre termino llamando a la policía y encerraron a Stan por el resto de la noche. Al día siguiente, se le informo que el foco de su enojo había levantado una orden de restricción contra él, lo cual solo empeoro su humor ya que usualmente, cuando algo se nos prohíbe- eso solo hace que lo queramos mas.
Stan era solo un muchacho de dieciséis años pero no por eso era poco intimidante. Era de estatura más baja que Kenny y apenas unos tres centímetros más alto que yo y tampoco era una masa caminante de músculos pero era realmente fuerte, de modo que la orden de restricción no fue una sorpresa.
Después de eso, era prácticamente imposible alejarlo de cualquier pelea. O las empezaba- o las terminaba pero siempre estaba en algún problema u otro.
Su madre estaba totalmente desesperada, sin saber qué hacer para que su hijo volviese a la normalidad. El siempre estaba en su límite y cualquier cosa que se dijera lo hacia explotar.
Digamos que el momento en el que las cosas dieron un giro final cuando mi amigo finalmente decidió romper la orden de restricción y fue nuevamente a tocar la puerta tras la que se hallaban sus problemas más grandes.
Había estado callado el día entero y desapareció a penas escucho el timbre que señalizaba el final de las clases.
Para tempranas horas en la noche, cuando su Sharon llamo a mi casa para preguntar por Stan que empezamos a preocuparnos.
Llegadas las diez de la noche, ya todos estábamos buscándolo. Kenny, Cartman y yo por un lado y los padres por otro. Ya me había hecho la idea de que quizás había hecho algo realmente estúpido y aquello me aterraba. Pensar en el estado que podría estar cuando lo encontremos me hacia un nudo en el pecho que no me dejaba en paz.
Cuando lo encontramos, sentado en el pórtico de la misma casa a la que había acosado antes con la cabeza hundida en las palmas de sus manos y el brazo del hombre al que había buscado le rodeaba los hombros. Mientras caminaba hacia él, note una ventana rota a un costado y escuche la temblorosa voz de Stan disculpándose una y otra vez.
También recuerdo la voz de su madre mientras corría hacia él y lo envolvía en sus brazos, gritándole algo que no tengo muy claro pero creo que fue 'No vuelvas a hacerme esto'.
El tipo no presento cargos contra mi amigo siempre y cuando el entrara en algún programa de control de ira y Sharon acepto inmediatamente, agradecida de sobremanera. Mientras esperábamos a la policía y él se hallaba sentado en el coche de su madre conmigo, al fin decidió dirigirme unas cuantas palabras.
"Yo… ya no quiero ser esto en lo que me estoy convirtiendo" Fue lo que me dijo.
Y bien, eso es lo que me tenía ahí, frente a la casa del psicólogo esperando que asome su rostro afuera.
"¿O sea—que realmente no le has comprado nada a Katherine?" Pregunto Craig.
"Karmin" Le corregí yo.
"KARINE" Corrigió el definitivamente. ¿Por qué me resultaba tan difícil recordar su nombre? "Dios, no es tan difícil"
"Nos encontramos el jueves, Stanley. Que tengas un buen día" Escuche desde la entrada sobre los gruñidos de Kenny y note a Stan parado ahí, sacudiendo la mano de un hombre de mediana edad con una suave sonrisa en el rostro. El tipo sonrió y luego dio un paso atrás para poder cerrar la puerta.
"Stan" Dije en voz alta para llamar su atención y su mirada se volvió hacia mi mientras crecía su sonrisa. Levanto una mano en forma de saludo para Kenny y Craig antes de caminar hacia nosotros.
"Ey" Era muy difícil creer que estaba perturbado, psicológicamente hablando, cuando lo veías así de casual y relajado. Parecía casi otra persona.
"No… No iré a ver como esta tu madre, gordo" Un momento de silencio indicando que la otra parte le estaba hablando "¡Ella intenta abusar de mi cada vez que la veo!" Grito Kenny "¿Y qué? Mejor que se tire al lechero que a mí, idiota" Para ese entonces, yo también empecé a reír. Stan tenía su frente apoyada contra la superficie de la mesa, tratando de disimular y aun Craig sonreía de forma burlona "Hablas como si fuera mi culpa. Tu madre es una puta notoria, acéptalo"
Se preguntaran donde andaba la usual cuarta parte de nuestro grupo con la que crecimos.
Cartman- el… Dios ¿cómo decirlo de una forma un poco menos ofensiva?
Nah, sonara igual sin importar como lo diga. El estaba en una clínica para deshacerse de toda la grasa que le impedía moverse libremente en el mundo. OTRAVEZ. Solo que ahora, ya no era el campamento para gordos, por lo que no había forma de salir a menos que los números de la balanza en que se pesaba todos los días fueran disminuyendo.
Ya había estado medio año por esos lares y todos nos preguntábamos si le había hecho algún efecto.
Es decir, yo me preguntaba si le había hecho algún efecto.
Bien, lo admito, me estaba muriendo de curiosidad y necesitaba saber si seguía igual de obeso.
Si- si, soy una persona horrible y debería estar orgulloso de que mi amigo hizo un cambio positivo en su vida. Si hubiesen tenido que convivir con Cartman como yo lo he hecho, entonces estarían tan entretenidos por el asunto como yo.
¿Y quién podría culparme? Cartman es el tumor más jodidamente desgraciado con el que me ha tocado vivir. Desafortunadamente para Kenny, ellos dos tienen una especie de lazo de amistad que nunca comprenderé, por eso siempre era él quien recibía las llamadas de Cartman.
Stan se acerco a mí y hablo en voz baja "¿Sabes? Cualquiera que no haya visto las panties de Liane debería recibir un premio. Es decir, nosotros ni habíamos estado intentado aquella vez en el cumpleaños de Cartman y aun así recibimos una vista bastante desafortunada mientras cortaba el pastel" Me atragante con el agua que estaba bebiendo y el panorama de mi asfixiándome le fue simpático a Craig, quien empezó a reír con fuerza. Y no hay palabras en el idioma para describir lo graciosa que es la risa de Craig, por ende mi problema solo empeoro al oírla.
Kenny volvió a sentarse una vez que Cartman colgó el teléfono y yo tenía esperanzas de que dijera algo para que yo pudiese respirar otra vez.
En su lugar lo que dijo fue "Mensaje de la clínica de grasa. Cartman extraña a su mami y no le importa que esta me viole con su no verificado pene femenino"
Casi morí por asfixia en ese momento.
No fue hasta que sentí unos fuertes golpes contra mi espalda que al fin pude tomar algo de aire.
"¿Estás bien?" Había sido Stan, por supuesto. Craig estaba fulminando al suelo con la Mirada por que todos se rieron del sonido de su risa y Kenny estaba muy ocupado con su Banana Split. Cuando hay helado en la mesa, nadie nunca es un verdadero contendiente por la atención de McCormick, eso es seguro.
Si, helado, eso era lo que estábamos haciendo. ¿Sorprendidos? Tres rebeldes con problemas de ira y un nerd que no despega los ojos de sus libros estaban sentados juntos en una heladería. Y si, mis amigos de infancia no tienen la consideración suficiente conmigo como para no comer dulces frente a un diabético.
Asentí con la cabeza a la pregunta de Stan y mi mirada se vio atrapada con la suya un segundo antes de que una sonrisa apareciera en mi rostro.
Hubiera sido una verdadera lástima que el Stan que apareció cuando falleció Randy se hubiera llevado a este y me alegraba mucho que estuviese volviendo a ser esa persona a la que yo llamaba mi mejor amigo. Me dejaba un sentimiento muy cálido en el pecho y era algo que todavía me costaba reconocer como lo que era.
"Vaya, ustedes dos sí que son maricas" Fue el comentario de Craig.
TBC
Bubalah: Significa 'dulzura', o 'cariño' en hebreo (He leído que literalmente significa 'muñeca' pero se usa como un sobrenombre afectivo. SI estoy equivocada, me corrigen, si? Yo no hablo hebreo y tampoco soy judía). Para los que no vean la serie en inglés, Sheila suele llamar a Kyle así. En español, creo que no lo hace.
Gracias por leer! Me avisan si les gustó, si?
