¡Ohayo! Sí, soy yo de nuevo con otra historia de la que avisé en mi otro fic. Quería hacer este hace mucho mucho tiempo pero primero debía terminar la historia que ya había empezado ("Todos tenemos secretos"). La idea para hacer este fic salió cuando estuve viendo en internet unas fotos donde Johan y Judai salían versión niños (una de esas fotos es la que está como imagen del fic), me emocioné y empecé a imaginar una historia con ellos así y surgió sola. Algo importante es que esta historia No es yaoi, por aquí creo ser conocida por escribirlo, pero no creo mucho que esta idea de fic sea bueno para un spiritshipping, además no habrán parejas de ningún tipo ya que se centrará en lo que es como verán en la descripción: friendship y humor, después de todo este fic se creó también para hacerlos pasar un buen rato y sacarles algunas risas o carcajadas si se puede :)
¡Espero les guste el cap y el fic en general!
Y para casi terminar: no poseo nada de Yu-Gi-Oh Gx. Esta es la leyenda del disclaimer, después de todo, por algo este sitio se llama fanfiction ¿verdad? ;)
—Qué día— diálogos
"Qué día" Pensamientos
(*) Dudas o palabras que resolveré al final.
[-EDITADO- Enero 2016.]
~*+~*o*-~Niños otra vez~-*o*~+*~
Capítulo uno: La máquina
Hasta ese entonces era un día que podría considerarse aburrido en la renombrada Academia del Duelo, o por lo menos eso pensaban los protagonistas de varias aventuras dentro de la isla, que en esos momentos caminaban por los pasillos hacia una sala en particular.
—Recuérdenme chicos ¿Por qué tenemos que ir a ver al profesor Einstein*?— Dijo Judai mirando al vacío mientras caminaban. Hasta ese entonces no habían hablado de mucho más que de la curiosidad sobre la razón del anciano para citarlos.
—…Einsenstein— Le corrigió Daichi suspirando, a lo cual el castaño solo soltó una risita y le guiñó un ojo. ¿Entonces lo haría a propósito?—tú… oh, como sea. Él nos dijo que quería mostrarnos algo.
—¿Qué cosa era?— Preguntó otra vez el duelista completamente distraído viendo cómo una mosca paseaba por ahí.
Todos negaron con la cabeza, Judai nunca cambiaría.
—No lo sabemos— Le respondió Asuka al castaño pacientemente, a lo que este apretó sus labios en una línea. La verdad era que no quería ver qué les tenía preparado el hombre y además había pospuesto una conversación con sus cartas para ir, y eso que tenía tantas cosas que decirles…
—Vamos Judai—Trató de animarlo Johan, a su lado— ¡tal vez será algo interesante!— A diferencia de su mejor amigo, el europeo estaba emocionado por saber qué les iban a mostrar y también por conocer al tal doctor Einsenstein, ni él ni Jim ni O Brian lo conocían aún y entre los tres él era al que más le gustaba conocer gente nueva.
—Sí sargento, quizás lo que nos muestre sea interesante—Se unió a la conversación Kenzan quien hacía un rato tenía una discusión en susurros con Sho por quién llamaba a Aniki a Judai.
—Tienen razón Aniki– Dio su opinión el pequeño peli celeste reajustándose las gafas, mirando enojado por el rabillo del ojo al moreno amante de los dinosaurios.
El castaño solo suspiró, y siguió caminando junto a los demás pensando qué sería lo que el profesor les mostraría, aún sin estar tan entusiasmado como lo estaban sus amigos, después de todo, lo más probable es que el científico les mostraría algo sobre ciencia y él no era muy fanático de aquello como lo era Daichi. Y como un gran extra, lo más seguro es que el mayor lo trataría de convencer de que los espíritus de duelo no existían.
Nada que hacer.
—Llegamos— Informó Daichi y se detuvieron frente a una puerta que tenía escrita "Laboratorio" como distinción.
Además, ya llegaban al punto de reunión.
—Así que aquí— Comentó para sí misma Asuka, mirando la puerta esperando a que se decidieran a entrar. Con una rápida mirada a su alrededor vio a los demás chicos y Rei observaban expectantes, sin dar señales de moverse para siquiera tocar, excepto por O'Brian, que parecía estar a punto de hacerlo de no haber sido interrumpido por Jun que un segundo antes juntó sus ojos con ella e hinchó su pecho con orgullo.
—Pues hay que entrar— Se acercó para girar la perilla, sin dejar que O'Brian se acercara. Cosa a la cual Asuka elevó una ceja. A un lado de todo Jim se rio por la pequeña muestra de celos por parte del menor de los Manjoume.
—¿No crees que es mejor tocar primero?— Aconsejó Johan al peli negro, recibiendo una mirada fulminante de este. —Okey, haz como se mande.
—Yo no toco las puertas, solo entro, no tengo por qué tocar— Dijo con un tono algo ofendido y molesto.
Los demás sonrieron nerviosamente. Manjoume giró la perilla, abriendo totalmente la puerta, hecho esto entró en la habitación como líder seguido de su séquito. Cuando entraron abrieron sus ojos de la impresión y a Daichi le brillaron los ojos de la emoción. La habitación de paredes blancas era perfectamente un paraíso para cualquier interesado en la ciencia, infinidad de objetos científicos, la gran mayoría sobre los muebles, prolijos estantes llenos de libros sobre diferentes temas divididos en series de tomos bien cuidados, instrumentos raros en los rincones, papeles repletos de notas y apuntes colgados y un par de diarios de investigación encima de una pequeña mesa que hacía de escritorio.
Al fondo del laboratorio pudieron ver algo que los sorprendió aún más.
Una estructura que parecía estar hecha de metal con un metro y algo de altura, de forma cuadrada, tenía un panel de controles y botones de colores rojo, verde y azul en los cuales estaban escritos diferentes palaras. Estaba conectada por varios cables gruesos a la pared como fuente de energía.
El grupo estaba boquiabierto ¿Qué rayos era esa máquina?
—Wow… ¿Qué es esa cosa? — Preguntó asombrado Judai al ver la máquina o lo que fuera, pues en las cosas random que había pensado, aquella cosa podría hacer bien de microondas.
—Es una máquina de rejuvenecimiento— Alguien habló detrás de ellos haciéndolos saltar de sorpresa e instintivamente darse la vuelta para encararlo, encontrándose con una cara conocida y envejecida que los miraba fijo. Era quien los había invitado, el profesor Einsenstein.
—¿Máquina de rejuvenecimiento?— Sho se atrevió tímidamente a hablar desde su puesto más atrás en el grupo— ¿Po-podría explicarlo mejor?
No podía ser tan literal ¿verdad? Esa clase de tecnologías solo existían en las historietas.
—¿Y actualmente funciona? ¿Está terminada? —Preguntó Rei mirando fascinada, al igual que el joven de los dormitorios amarillos, solo que él había olvidado cómo hablar.
—Se refiere jovencito y jovencita…— Empezó su explicación el reconocido científico poniendo las manos en su espalda— a que es una máquina que puede, como lo dice su nombre, rejuvenecer, ya sea personas o animales. Creí que estaría claro. Pasaré al último punto pronto.
El peli celeste se sonrojó un poco y cabeceó, mientras que la pelinegra sonrió con gratitud.
El profesor Einsenstein continuó, agregando información a su explicación – Es un proyecto que llevo meses desarrollando, nadie sabe de él ya que quería que fuera un secreto, no necesitaba gente interrumpiendo. Esta máquina me tomó mucha investigación y trabajo, pero al fin esta lista. De hecho, ustedes son unas de las pocas personas, junto con el director de esta academia que conocen su existencia hasta ahora; y si se lo preguntan los invité a ustedes especialmente porque quiero que tengan este gran honor, serán los primeros a quien les enseñe lo que puede hacer. O sea que sí, jovencita, es funcional—Sonrió orgulloso.
Todos se quedaron asombrados, dentro de ellos ya surgiendo la emoción de querer ser parte de aquello.
Asuka rompió el silencio—Una pregunta ¿Por qué nosotros y nadie más hasta ahora? — Todos cabecearon al preguntarse exactamente lo mismo.
—Excelente pregunta— Dijo Judai— ¿Por qué nosotros?
—Y no negamos que es un gran honor— Agregó Jim, acariciando a su compañera a su espalda— A Karen le gusta ser parte de esto.
Inmutable ante la gran criatura que lo miraba y las miradas asombradas de los duelistas. El científico sonrió ampliamente— Sencillo, me parecen de confianza.
—¿En serio? Vaya, ¡que honor! Muchas gracias profesor por confiar en nosotros y presentarnos su magnífico proyecto y su laboratorio— Exclamó emocionado Daichi (acordándose como dar palabra) mientras miraba con ojos brillosos y emocionados la máquina que recién les habían presentado, también miraba de reojo todo el laboratorio, todos los instrumentos científicos, junto con los diferentes libros que tenía el profesor simplemente le emocionaban… algo excesivamente.
A todos les salió una gotita estilo anime en sus cabezas al ver la emoción del joven que no paraba de alagar y mirar los objetos a su alrededor.
—Wow, realmente le gustan este tipo de cosas… —Murmuró Judai para sí mismo, aunque también lo escucharon los demás, no pudieron evitarlo y soltaron una pequeña risa, bueno, todos a excepción O´ Brian quien ni se inmutó y Manjoume, que por orgullos no se rio como todos los demás, en cambio, solo rodó los ojos.
Una fingida tos del científico fue suficiente para llamarles la atención —Creo que mejor les muestro cómo funciona—Dicho eso se acercó a su proyecto seguido por los jóvenes.
Cuando estuvieron lo suficientemente cerca del panel de controles Einsenstein empezó a teclear varios botones en la máquina lo que provocaba que esta hiciera ruidos y se le encendieran luces.
—Es muy difícil controlarla—Preguntó curioso Johan mirando con suma atención e interés, al igual que casi todos sus compañeros. El profesor seguía tecleando.
—No tanto. Pero si quiero prenderla o hacer que funcione tengo que poner todo un código del que solo yo tengo conocimiento, esto para mayor seguridad, así que agradecería que no me interrumpieran mientras lo hago— Informó concentrado en lo que estaba. Los chicos cabecearon y se dedicaron a, en lo posible, no hacer ruidos.
—Hey Johan— Le susurró Judai cuando se puso junto a él— ¿Tú crees que nos use como conejillos de indias? —El peliverde se volteó y enarcó una ceja divertido mientras seguía escuchando las ideas del castaño— Dijo que servía para rejuvenecer personas y animales pero no veo nada o nadie con quien pueda experimentar, aparte de nosotros.
A Johan casi le da un ataque de risa pero logró controlarse, pero eso no evitaba que mostrara una sonrisa entretenida— No lo creo Judai— le respondió también en susurro, dirigió luego su mirada hacia su hombro cuando sintió un ruidito conocido— ¿Tú qué crees Ruby? —lentamente se pudieron divisar al espíritu de duelos Carbuncle Ruby sobre el hombro del duelista poseedor de las bestias de cristal.
—Ruby ruby— Habló el pequeño espíritu haciendo que ambos rieran. Sin tomar en cuenta el sonoro 'SHHH' del que se vieron víctimas, simplemente disfrutaban del momento. Y más aún cuando se unió al trío Kuriboh, apareciendo justo al lado de Judai. De inmediato ambas criaturas empezaron a jugar haciendo que los dos duelistas miraran la escena divertidos.
Sin darse cuenta ellos eran observados por los demás que los miraban como si ellos estuvieran locos.
—Creo que otra vez están hablando solos…— Comentó Rei no tan fuerte, no quería que Johan o Judai la oyeran.
—Solo déjenlos solos, esos dos están dementes— habló Manjoume mirando la escena (*).
—No están dementes, solo… ven algo que nosotros no— Trató de defenderlos Asuka mirando con una expresión de comprensión a los dos jóvenes que seguían conversando al viento, o mejor dicho, hablaban con sus cartas como le había explicado una vez el castaño.
—¡No hagan ruido por favor! —El grupo casi saltó por la estridente voz del profesor que les dio una mirada de advertencia, faltaba poco para que todos se pusieran en fila militar. Ruby y Kuriboh se asustaron y desaparecieron por el momento mientras sus compañeros daban silenciosas miradas de disculpas a los demás— Si me equivoco todos seguramente lo lamentaremos, además de que una vez que empiezo a poner el código no debo detenerme hasta terminarlo ¿no nombré eso?— Avisó el doctor desde dónde estaba mientras seguí tecleando botones, en tanto, el grupo gritaba en sus cabezas un 'No, no lo dijo'
Trataron todos de quedarse lo más callados posible pero de la nada vieron como una "cosa" color café pasó corriendo junto a ellos, corrección, eran dos cosas cafés y una más grande que la otra. La menor huyendo en lo que parecía la carrera de su vida.
No les tomó mucho saber qué eran.
—¿¡Faraón!? —Sho ensanchó sus ojos para tratar de ver mejor, acomodándose en un rápido movimiento los lentes tratando de seguir la trayectoria del felino.
-¡Claro que es Faraón soldado!- Exclamó Kenzan al ver a la figura pachoncita del animal, recibiendo un 'Oh, cállate' del otro duelista que fue ignorado— Y está persiguiendo a ¿una ardilla?
Judai ladeó la cabeza—A mí me parece un ratón.
—O tal vez un lindo jerbo…—Agregó Johan imitando la acción del castaño.
—¡Eso no es lo importante ahora, ¿Cómo entró a este manantial del conocimiento?!-cuestionó Daichi poniendo ambas manos en sus mejillas con expresión de horror.
—…Seguramente por aquella ventana— apuntó Jim con total calma a una ventana que curiosamente estaba abierta.
—Y subiendo por aquel árbol que se ve asomando— Completó O' Brian con expresión neutra.
Lamentablemente después de ese comentario la situación empeoró fue peor.
La supuesta ardilla a la que el gato perseguía estaba corriendo desesperada por el lugar, y los jóvenes presentes no la estaban ayudando mucho que digamos. El problema era que en un intento de escapar dio dirección hacia donde estaba el científico, pasó junto a él y se escondió lo más rápido que pudo debajo de un mueble.
El lado bueno –para la ardilla- es que el gato ya no la perseguía, el lado malo - para los jóvenes y el profesor- era que Faraón al tratar de pasar junto al anciano lo pasó a llevar con su cuerpo, haciendo que este se desconcentrara (más de lo que estaba) y no pudo ingresar bien el código al presionar múltiples teclas erróneas por el impacto.
¿Resultado?
La máquina empezó a hacer ruidos y a moverse fuertemente como si rugiera. Ante esto el profesor y el gato retrocedieron hasta estar junto a los muchachos que estaban en shock mirando.
—¿¡Qué le pasa a su máquina!? —Manjoume interrogó al ser testigo de una fuerte sacudida de ese proyecto.
El doctor Einsenstein vaciló y tardó en responder por confundirse a sí mismo con las palabras—A-a juzgar por cómo está actuando y reaccionando…— Antes de terminar la frase ensanchó sus ojos al tener la respuesta— ¡Agáchense!
Casi todos reaccionaron a esto y se agacharon, y digo casi todos porque ni Johan y Judai lo hicieron al estar más concentrados en ver cómo el objeto de metal se sacudía.
Sin darse cuenta cometieron un error al no echarse al piso. Apreciaron que de un orificio que tenía el experimento del profesor salía una luz verde… que los apuntaba a ellos.
—Esto no es bueno…— Fue lo último que alcanzó a decir Johan antes de que el rayo los alcanzara a ambos provocando que toda la habitación por un momento estuviera completamente iluminada.
En breve se escuchó un fuerte ruido que provenía de la máquina que después de lanzar el rayo se apagó –o bloquearse si se quiere usar un término más exacto-
—¡Judai, Johan! —Gritó Asuka alzándose y dirigiéndose, junto con los demás de inmediato hacia los dos duelistas que seguían cubiertos por la luz, aunque esta poco a poco desaparecía. Silenciosamente rogaban que nada malo les hubiera pasado a sus amigos.
Todos dejaron de respirar ante lo que vieron. Casi entrando en pánico.
Los dos duelistas seguían allí, y eso era un gran alivio, pero con algunas diferencias que lograron que olvidaran temporalmente cómo hablar. Habían disminuido de estatura, tamaño y un poco en apariencia. Eran versiones miniaturas…
Versiones de sí mismos en la edad de 6 años.
—Uh-oh…— Se oyó la voz del doctor Einsenstein.
Fin del capítulo.
N/a: Este es el primer capítulo pero creo que la historia comienza en el próximo capítulo, por lo tanto este sería ¿el prólogo? No sé.
Explicaciones de los (*)
1* Creo que en la serie Einsenstein era profesor y científico, ¿cierto? díganme si me equivoco.
2* Aquí Manjoume no puede ver a los espíritus de monstruos (por lo menos eso es lo que tengo planeado pero podría cambiar de parecer)
Este fue el primer cap. pero desde el próximo empezaría creo la verdadera acción y las risas xD (creo tener muchas ideas para hacerlos reír ¡Yei!) ¡Dejen review para saber qué les pareció! :D
¡Saiyonaraaa!