KIRAKURI
POV Len
No recuerdo bien lo que paso, tenía sólo 12 años , solo recuerdo estar en medio de esa matanza entre dos bandos y muchos civiles, uno era los "KIRAKURI" una organización muy bien organizada que tenia sus propias ideas de como debería ser el mundo, y otros eran los "NAZIS" estos eran como los kirakuris aunque con distintas ideas, dentro de poco por todo Japón empezó a estallar en guerra, lo peor de todo era que muchos civiles inocentes morían en ella, ¿Porque tuvo que pasar esto? Me lo preocupaba varias en las noches después abandonar el lugar donde vivía
Era una ciudad pequeña y tranquila, por tranquila no quiero decir que no había criminales de baja categoría como ladrones extorsionadores etc. Pero después de esa noche eso se me hacia insignificante.
Vivía con mis padres llegue ahí a la edad de 9 años mi familia era tranquila y amorosa, era...¡Perfecta! Y eso lo odiaba, me la pasaba levantándoles la voz, no obedecer sus ordenes, ir mal en la escuela y no porque no fuera listo de echo las pocas veces que no me "echaba la gorda" sacaba 10 en todo también era popular, pero solo era por el echo de que no había muchos rubios de ojos azules por ahí, odiaba que solo me quisieran por mi apariencia, odiaba todo de esa estupida cuidad, odiaba la perfección de mis padres, lo adiaba todo
Pasaron casi un año y ya había reprobado la escuela por tantas faltas, no salia de mi habitación no hablaba con nadie, no entraba a internet ni dibujaba o leía un libro, me limitaba a levantarme solo a comer, bañarme e ir al baño, mis padres estaban preocupados por mi, se sentían mal por haberme obligado a venir a esta maldita, aunque nunca me dijeron porque ¿Acaso huían de algo? .Bueno, después se les ocurrió algo aun mas estupido, o asi creía yo que era en un inicio
—¡Len cariño! ¿Podrías venir un momento?— grito mi madre desde la sala
—¡agh! ¡Mamá estoy ocupado dejame en paz!— decía yo de mala gana intentando volver a dormir
—será solo un momento, ahora ven o tirare ese colchón a la basura!— parecía mas enojada
Odiaba obedecer, pero no quería arriesgarme a perder la única cosa que usaba en esta casa, asi que me velante de mala gana, me puse una sudadera y medio acomode mi pelo, bajaba las escaleras y empece a escuchar una platica que no tenía mucho futuro, pero mi mamá se estaba esforzando en seguir, cuando llegue me encontré con mi padre y madre y...una ¿chica? Mas bien niña, parecia un año menor que yo, su pelo llegaba asta los hombros y era ¿rubio? Llevaba lentes negros y una ropa que parecía mas bien un uniforme, pero lo que hizo pararme en seca fue sus ojos...eran ¿Rojos?! Ese rojo era tan profundo fuerte que parecía sangre...¿Siquiera existían ojos de ese color?! ¿O acaso era un diablo? Las preguntas invadieron mi mente y fue cuando mi mamá me saco de mi trance
—te queremos presentar a alguien— mi madre parecía emocionada, pero yo estaba asustado
—h-hola...me llamo k-k-Kagamine Rin tengo 10 a-años— decía casi temblando de ¿Miedo? Y también note como le costo pronunciar la palabra"Kagamine"
En ese momento pase de miedo a horror ese era mi apellido ¿Se llamaba Kagamine?! Era...¿mi media hermana? O ¿coincidencia?
En ese momento vi a mis padres pidiendo una respuesta
Mi padre y madre comprendieron mi mirada y sonrieron al mirarse para después decir al unísono —ella es tu nueva hermana adoptiva— mi cara ya no sabia que expresar estaba impresionado, enojado y principalmente miedoso, esos ojos rojos observándome todo el dia seria como sentir un demonio absorber mi alma, tenia que preguntarle a mis padres porque escogieron a esa niña, de tantas normales ella ¿De que les servía su estupida perfección si escogieron a la rubia mas lejano a ello?!
—¿Yo nunca pedi un hermano?!— decía intentando convencerlos de hacer los papeleos para quitarle mi apellido a ese demonio, que me veía de una inocente manera, sin malicia
—lo siento Len, Rin ahora es una Kagamine y tu la ayudaras a conocer esta casa y sus alrededores— sentencio mi padre
Bueno aunque odiaba el echo, lo echo echo estaba asi que suspire —esta bien...¿Donde dormira para enseñarle esta maldita casa?
—¡no maldigas Len! ¡Acaso no te eh dicho que todo lo relacionado con el infierno es malo?!— regañaba mi madre
Mi mamá conocía un sin fin de religiones y a todas las admiraba y consideraba que todo lo que representaba lo malo según lo que decía cada cultura venia de un lugar en lo mas profundo de la caja de pandora
—¡Hay por favor mamá! ¿Te crees con mucha fe? ¿Entonces porque escogiste una niña con ojos de Satanás?!— dije sin pensar en la mencionada, cuando me di cuenta de lo que dije mis padres me miraron molestos y luego miraron a Rin preocupados, ella oscureció su mirada unos momentos e intente remediarlo
—p-perdón yo no quise decir qu-...—me interrumpió ella
—e-esta bien, se que estoy maldita...¿No?— dijo con una sonrisa que parecía muy natural, se veía tan natural que si no hubiera sido por lo que dije no sabría que fue fingida
Se hizo un silencio incomodo, nadie creyó que Rin actuaría asi, echo pensé que saldría corriendo y tendría que ir por ella de mala gana, mis padres solo sonrieron lentamente —Len, dormira en tu cuarto por favor lleva sus cosas y muéstrale la casa
—s-si...—dije por primera vez sin reprochar en varios años y seguí las indicaciones
Cuando llegue a la habitación tan espaciosa con dos camas juntas formando una gigante y varias muebles medio llenos entendí que mis padres llevaban tiempo planeando esto
—g-gracias por traer mis cosas...— Dijo mirando al piso mientras movia una de las camas al otro extremos de la habitación
—perdón, no quise darte mala impresión de mi con lo que dije— menti, ya sabia que mis padres harían algo, y fuera lo que fuera planeaba estropearlo, pero en ese momento me sentía terriblemente arrepentido y le hice una reverencia
Ella volvió a sonreír aunque mas débil —está bien, siempre me han tratado como si estuviera maldita—
Eso me hizo sentir peor, y me hizo entender un poco mejor todo ¿Malditas apariencias no? A unos les provoca odio de los demás y a otro el "amor" eso es tan estupido, como lo odio
—¡No! No esta bien! Yo no quiero ser como los estupidos de esta cuidad poniendo etiquetas a la gente!— grite un poco enojado, ella se sonrojo un poco y abrió mas los ojos esos ojos color rubí tan rojos como la sangre
También me enrojecí cuando analice lo que dije, no era a lo que quería llegar pero por idiota llegue —n-no quise decir eso!
—l-lo...lo se— sonrió —es solo que...por primera vez me trataran como un ser humano
Eso me hizo el corazón chiquito aunque me mostre algo serio, después comencé a imaginar como llego al orfanato donde mis padres la adoptaron y comprendí, "si mi vida era odiosa la de ella era para ya estar muerto"
Llego la noche y por fin acomode la habitación como creí que seria cómoda para ambos ya que ella era bastante sumisa y para ella todo lo que hiciera estaba bien incluso si dormía en el piso, la ayude a acomodar sus pocas cosas el los muebles de donde quite las mías bajamos a comer y luego a dormir, ella me imitaba en todo y era irritante pero no quería bajarle mas el autoestima mas de lo que estaba, llegó la hora de dormir, no recuerdo como quede dormido pero si como desperté
Mire mi reloj en la muñeca y vi la hora eran las 2:47am, me enoje ¿Que carajo eran esos ruidos que me despertaron? Me sente en mi cama y escuche a Rin, queria gritar pero se limitaba llorar lo mas silenciosa posible, llevaba un dia de conocerla y me di cuanta de dos cosas "recibía mal trato por sus ojos" y "cuando la lastimabas te sonreía para después llorar donde no la vieras" no se si debía sentir lastima o coraje, era tan patética que casi la odiaba
Descubrís varias cosas son similares con ella como el cumpleaños y pasatiempos, me gustaba fastidiarla aunque solo se quedaba sumisa o a veces reía ella creía que jugaba con ella pero bueno, también servia mucho para tranquilizar a mis padres, era muy útil, paso un año y mis padres me inscribieron de nuevo en la escuela donde estaba mi ahora hermana, y como había reprobado un año mis padres pidieron que me cambiaran al grupo donde Rin estaba, comencé con mis viejos hábitos de faltar y ella me encubría ante mis padres, todo iba perfecto asta que...
—L-Len-san...hoy tampoco iras a la escuela?— me pregunto diciéndome "len-san" ese apodo que me había puesto y me havia sentir superior a ella
—no ¿Porque preguntas?
—es que...queria saber si podría ir contigo
Me impresione un poco ya que ella no era mucho de faltar —¿Porque no quieres ir? ¿Que no a ti si te gustaba la escuela?
—s-si me gusta pero...siempre estoy sola y siempre me molestan todos, me jalan el pelo o roban mis cosas y...
Suspire, odiaba que no se pudiera defender —¿Porque no te defiendes o acusas con el maestro?
Ella bajo la cabeza —ya lo hice pero los maestros dicen que los provocó y cada vez que me defiendo llegan mas y me golpean
Momento el viento levanto un poco su falda mostrando casi todo lo que no tenia que mostrar, me sonroje ¡Carajo era mi hermana! ¡Incluso si no había conexión sanguínea! Pero lo que veía cambio mi sonrojo a un ceño fruncido tenia un gigantesco moretón, me impresionó que siguiera caminando aun con esa cosa punzante e inchada
—Rin...¿Quien te hizo eso?
Ella se sonrojo, era obvio que estaba preocupada de que viera su ropa interior o algo asi, pero no haría eso, no soy tan estupido para enamorarme de ella y tener mas problemas en mi vida
—...m-mis compañeros de clase
Esto era malo, muy malo se supone que yo tenia que cuidarla si mis padres se enteraban me matarían ¿Tan mal hermano era? La tome del brazo y nos dirigimos directo a la escuela
Cuando llegue me llene de rabia, por culpa de esos mal nacidos mis padres me hostigarían asta morirse Rin me dijo discretamente quienes eran y me les acerque tome a uno del cuello y lo azote contra la pared
—no vuelvas a tocar a mi hermana!— grite golpeando su abdomen haciéndolo toser sangre
—solo yo la puedo molestar ¿Te queda claro?— y era verdad si no fuera porque Rin había sufrido peores cosas consideraria un fastidio mi forma de tratarla, pero, a pesar de fastidiarla, convencerla de hacer mis tareas y nunca acusarme, nunca la golpearía, no soy asi, pronto un fuerte golpe hizo azotar mi cabeza contra la pared y lo ultimo que vi era a la rubia de ojos rubi corriendo hacia mi
Abrí los ojos y lo primero que sentí fue un estrujamiento parecía suave pero comenzaba a sentir romper mis huesos
—¡Len- kun! ¡Len-kun! Estoy feliz de que estes bien— decía la persona que me estrujaba con lagrimas en los ojos
—¿Len-kun? ¿Que paso con el "san"?— rei con aquellos
—eres su hermano mayor, no un dios caído de los cielos— decía mi padre entrando a la habitación con una sonrisa
—¿Porque estoy en el hospital? ¿Que no había herido yo al tipo?
Rin agacho la cabeza avergonzada —g-golpeaste a uno pero había más
Mi padre y madre pusieron una mano en el hombro de mi hermana para darle apoyó y mi padre informó —eres un buen hermano Len estoy orgulloso, puse una denuncia contra la escuela por permitir esas cosas y para no perder su prestigio expulsó a ese grupo de niños
No pude evitar sonreír por saber eso, pero en ese momento note que Rin no traía sus lente y sus ojos ya no se veían rojos...
—me golpearon muy fuerte...
—¿Porque lo dices Len?— pregunto mi madre
—porque puedo jurar que Rin tenía los ojos rojos y ahora los veo azules
Mis padres y Rin se rieron, no entendía que era lo gracioso yo estaba pensando si estaba loco o gracias al golpe mis ojos se dañaron, pero mi madre se limpio las lagrimas de rosa y por cin dijo algo
—Rin esta usando pulimentes azules ya que sus lentes los rompieron y ya viene diciembre
Rin sonrió ampliamente, parecía muy feliz —Ahora parezco la hermana de Len-kun
Ella realmente quería ser aceptada por mi me hizo sonrojar un poco...sus ojos habían cambiado de ver un rio de sangre a ver el despejado cielo, estaba feliz por ella al parecer eso le daba seguridad asi que sonreí y acaricie su cabeza
Pasaron los años y creí que Rin al fin me dejaría en paz, pero fue todo lo contrario ella era peor que un chicle pegado a mi zapato, pero ya no me molestaba me comenzaba a agradar, había comenzado a res mas responsable y asistir a la escuela, para mi era una gran mejoría pero para mis padres y mi hermana casi no había mejorado.
Rin había conseguido pocos amigos, pero prefería seguir pegada a mi, eso me hacia sentir muy importarte para ella y poco a poco deje de molestarla pata comenzar a tratarla mejor, ahora el que se hacia la apagado era yo, ya no podía estar sin su compañía, sentía mas cálidos cada abrazo y beso que ella me daba un dia mientas veía en YouTube listas de nuevos animes o series lo vi esa palabra me hizo entender que lo que comenzaba a sentir por Rin ya no era normal
—relaciones incestuosas— lei lento y con dificultad, pero que rayos me paso...
