Hola¡ este es mi primer fic, por favor no sean duros con migo, bueno espero que les guste, y perdonen si tengo algún error ortográfico *u*
~QUEDARME EN EL PASADO~
CAPITULO 1: YO TE CUIDO.
-Vamos Len-kun corre más rápido¡
Decía una bella niña de cabellos peli turquesa de unos 7 años, con dos coletas un poco abajo del hombro y un vestido blanco, pero lo gracioso era que adeas traía unos tenis blancos llenos de tierra.
-Espera Miku-chan, no vayas tan rápido¡
Respondió un niño de una hermosa cabellera rubia de unos 7 años, con una camisa amarilla, unos pantalones de mezclilla un poco debajo de las rodillas y unos tenis.
Corrían atreves del inmenso bosque, a todo lo que podían, saltando cada tronco que se les atravesaba, riendo los dos sin ninguna preocupación. De pronto Miku lo paro en seco sujetándolo de la camisa.
-Para, ya, hemos llegado- dijo la niña jadeante de haber corrido tan rápido.
-A dónde?, solo hay árboles- respondió el niño también cansado de haber corrido mucho, y son sus cabellos pegados a su frente por el sudor.
-Sígueme- le respondió Miku con una gran sonrisa.
Len la miró extrañado, Miku siempre hacia esto, de seguro había planeado otra aventura alocada y divertida, o le enseñaría algo emocionante, a él le gustaba pasar las tardes con ella, porque siempre se la pasaba realmente bien, Miku era el tipo de niña alegre, temeraria y despreocupada, con la que te pasabas una divertidas tardes explorando, casando monstruos y salvando a los indefensos.
Len camino detrás de ella, cuando vio que ella empezó a escalar un árbol, entonces el hiso una mueca ya que no era tan bueno escalando como Miku y eso le disgustaba, trato de subir pero se resbalaba. Hasta que se dio por vencido, y se quedó ahí parado, con el ceño fruncido de brazos cruzados. Miku al notar que no la seguía miro para abajo y lo vio ahí con un gracioso puchero pateando la tierra, ella emitió una leve risita, entonces bajo y le dijo
-No puedes subir?, te ayudo- le dijo extendiéndole la mano con una gran sonrisa, sin embargo el la miraba enojado.
-No es justo, que tú puedas escalar un árbol y yo no- Miku dejo de sonreír por momento, entonces volvió a sonreír y le tomo la mano.
-Si no puedes pues entonces yo te enseñare y te ayudare, pero no te enojes si? eres aburrido cuando te enojas- Len dejo de fruncir el ceño,y su cara se puso roja y empezó a sentir algo en su pansa, entonces se le quedo mirando mientras que Miku lo jalaba de la mano y se dirigían al árbol. Cuando llegaron lo soltó de la mano, y Len por alguna razón que el desconocía no le gusto.
-Mira lo que tienes que hacer es agarrarte bien del tronco y procurar que tus manos no estén sudadas, una vez que estés bien agarrado del tronco te impulsas de un salto clavando bien tus pies e ir impulsándote hacia arriba, entendiste?- Miku lo miro sonriente esperando una respuesta de él.
-Sep- respondió el sonriéndole también.
-De acuerdo, primero mírame y después lo haces tú, sale?- Entonces Miku se posicionó, antes limpiándose las manos con el vestido para que estuvieran bien secas, entonces se agarró bien del árbol y empezó a subir rápidamente al árbol, entonces en una determinada altura miro hacia abajo y le grito -¡AHORA TE TOCA A TI¡- Entonces Len poniendo toda su concentración empezó a darse a liento y ánimos a sí mismo , se limpió las manos en el pantalón se agarró bien del tronco, y de un salto puso sus pies contra el tronco, y empezó a escalar con dificultad pero lo hacía, entonces el empezó a emocionarse al ver que no se caía, ni resbalaba y una hermosa sonrisa empezó a dibujarse en su rostro. Miku lo miraba sonriente desde arriba y como vio que ya la estaba alcanzando empezó a subir más y más arriba, Len ya estaba por llegar a la cima cuando de repente una astilla del tronco se le clavo en la mano y sintió un dolor punzante haciendo que se resbalara, sintió como caía desde una gran altura y sentía que se le oprimía el estómago, entonces serró los ojos esperando a que cayera al suelo, cuando de repente sintió como una mano lo tomaba del brazo y lo sostenía firmemente para que no cayera. Lentamente abrió los ojos y enfrente de ellos, vio unos hermosos ojos color turquesa bien abiertos y con unas lágrimas saliendo ellos. Se quedaron así por un momento cuando un de las lágrimas de Miku cayeron sobre la frente de Len resbalando por su mejilla hasta sus labios, entones el sintió algo realmente cálido en su estómago.
-LEN¡, NO TE QUEDES AHÍ Y AYUDAME, SE ME RESBALA LA MANO¡- Decía una asustada Miku, ya que Len estaba colgado mientras Miku lo sostenía con una mano mientras que con la otra se sostenía del tronco. Len todavía estaba en shock por lo que estaba ocurriendo así que no reaccionaba, a Miku se le resbalaba cada vez más la mano y se empezaba a asustar cada vez más.
-LEEN¡- Grito muy fuerte porque ya no podía resistir más, ya estaba por soltarlo. Entonces Len pudo reaccionar, y rápidamente se agarró del tronco y con todas sus fuerzas trato de impulsarse hacia arriba, cuando llego a la rama donde estaba Miku, se vieron directamente a los ojos, y de los ojos de Miku empezaron a salir más lágrimas entonces se llevó ambas manos a los ojos, y empezó a llorar. Len solo la veía directamente sorprendido, jamás había visto a Miku llorar, ella siempre estaba alegre a pesar de la situación, siempre tenía una sonrisa en su rostro, siempre que hasta que empezó a pensar que el enojo no existía en ella. Len se empezó a preocupar y a sentir feo dentro de el, se empezó a sentir triste por verla llorar.
-Miku…- Susurro el rubio mientras se iba acercando a ella, Miku todavía seguía llorando mientras tapaba su rostro con sus manos.
-Miku, ¿por qué lloras?- Entonces Len ya estaba muy cerca de ella, mientras que ella ni cuenta se había dado.
-…P..por…que..m..me..me..preo…cu..pe mucho- Decia Miku entre sollozos y jadeos que casi ni se le podía entender (ya me entienden xD). Entonces Len al escuchar eso lo que sentía en su pansa se hiso más grande.
-¿Por mi?- Pregunto muy sorprendido y sinceramente feliz por saber que a Miku le importara que él estuviera bien además de de su mamá.
-..P…pues..s..si..tonto… ca..casi…te matas- Entonces Miku sintió unos pequeños brazos que la rodeaban, abrió los ojos y vio a Len que la estaba abrazando algo rojo de las majillas, ella se empezó a sonrojar, ¿Qué es esto que estoy sintiendo?, se preguntaba ella misma mientras que correspondia al abrazo.
-Gracias- susurro Len mientras le sonreía, entonces Miku al verlo en su rostro se empezó a dibujar su hermosa sonrisa tan característica de ella. Len le limpio las lágrimas con su camisa.
-Y bien, ya que estamos aquí, ¿Qué es lo que me querías mostrar?- le dijo muy sonriente, Miku se paró rápidamente agarrándose bien del tronco para no caer de la rama, Miku lo miró y le hiso una seña que de que se acercara. Len se dirigió con mucho cuidado hacia donde estaba ella, ya estando a su lado, Miku empezó a apartar algunas hojas de la las ramas así descubriendo un pequeño nido con unos hermosos pajaritos sobre él, a Len se le iluminaron los ojos, él siempre había querido ver un nido con pajaritos adentro, pero no había tenido la oportunidad gracias a que o era bueno escalando árboles, él había llegado a pensar que jamas veria un nido de pájaros pero con Miku todo era posible.
-Sabía que siempre habías querido ver uno pero no habías podido, entonces aquí está, feliz cumpleaños- Len la miró extrañado, si su cumpleaños había sido hace cinco días.
-¿Cómo?- La peli turquesa solo sonrió ante la mirada graciosa del rubio.
-Ya sé que tu cumpleaños fue hace un chorro días, pero quería darte el mejor regalo del mundo- Miku lo miraba con una cálida sonrisa mientras que el rubio la miraba sorprendido y realmente feliz, sin duda la quería, y estando a su lado no podía evitar sentirse bien por alguna razón.
-Muchas gracias Miku- los dos se sonrieron, y se dispusieron a abajar, cuidadosamente bajaron e hicieron unas carreras haber quien salía primero del bosque. Ya una vez afuera se despidieron.
-Nos vemos mañana Miku- dijo Len mientras empezaba a correr en dirección a su casa.
-Si, adiós- respondió Miku agitado al mano mientras empezaba correr en dirección a su casa.
Los dos corrieron felices, esperando a que sea mañana para volver verse. Len llego a su casa, entro por la puerta trasera, y un silenciosamente se disponía a entrar a su habitación cuando escucha la voz de alguien que no esperaba.
-Le diré a mamá que otra vez llegaste tarde- Vio a la molesta y entrometida de su hermana Rin quien lo miraba con una mirada engreída.
-Jajaja, mira que miedo tengo- contesto con sarcasmo ya que era muy característico de su hermana molestarlo y ponerlo de mal humor.
-Adivino, estabas con Mikuu- Rin lo miró divertida, ya que a ella le gustaba molestarlo con eso
-Claro que no¡- Len se había puesto rojo y eso motivaba mas a Rin para molestarlo.
-Jajajaja lo sabía¡, sabía que te gustaba Miku- Len se empezó a enojar as con ella, porque lo que decía no era cierto para nada cierto, no podía negar que no la quería, porque en verdad la quería, pero como a una amiga, como una gran amiga….¿no?.
-Ya cállate que eso no es verdad, no me gusta Miku que asco¡- Rin no paraba de reír, le divertía mucho ver a su hermano enojado e iba a seguir con esto.
-OHH¡, MIKU ERES LA NÑA MAS HERMOSA QUE HE VISTO, ME GUSTAS MUCHO¡ OHH MIKU, OHH MIKUU¡- decía Rin que "supuestamente", imitaba la voz de Len.
-Y…YA CALLATE YO NO HABLO ASÍ,Y YA TE HE DICHO MIL VECES QUE LAS NIÑAS ME DAN ASCO¡- empezó a gritar el rubio que además de estar rojo de la vergüenza estaba rojo del enojo, Rin no podía parar de reír, cuando de repente baja su madre al escuchar todo el barullo que había abajo.
-Pero que ocurre aquí que es todo este escándalo, y Len donde estuviste, ya viste la hora que es, prometiste no volver a legar tarde¡- la madre de Len y Rin los veía reamente enojada que hasta la risa se le quito a Rin.
-Es que estaba con su novia Miku- Decia Ri entre risitas, Len la miro enojado mientras que a su mare se le dibujaba una leve sonrisa.
-Como esta eso de que mi bebe tiene novia?- Len la miro totalmente rojo.
-¡MAMÁ¡, QUE NO ES MI NOVIA, Y ADEMAS YO YA NO SOY UN BEBE,YO YA SOY GRANDE A SI QUE YA NO ME DIGAS ASI¡- ahora las dos se reirán lo cual irritaba a Len , vaya que a las dos les gustaba verlo así, entonces opto por irse a su habitación, entro se quitó la ropa y se metió a bañar ya que estaba realmente sucio al bañarse noto algo rojo en su mano, se fijó bien y vio un poco de sangre seca, entonces recordó la astilla que se había clavado en la mano y la razón por la cual casi muere ese día, vaya como ha sido posible que ni siquiera lo hubiese notado durante todo este tiempo, fue cuando entones sintió un punzante ardor en su mano e intento quitarse la astilla, de verdad le ardía mucho pero logro sacársela, y se limpió bien la mano, salió del baño y se puso s pijama de plátanos, entro a su cama y se quedó mirando un rato al techo pensando en todo lo que le había ocurrido en el día, habían pasado tatas cosas tanto malas como buenas, pero con Miku todo acababa bien sin importar que por eso le gustaba mucho estar con ella, a él no le gustaba Miku como decía su hermana, a él le daban asco las niñas además de que eran muy molestas, son mandonas, berrinchudas, chillonas, les gusta maquillarse en lugar de jugar videojuegos, no les gusta jugar en el lodo ni en la lluvia y eran en verdad aburridas, pero ahora que lo pensaba, Miku no era así a ella le gustan todas esas cosas, no le gusta maquillarse porque dice que las niñas se ven como payasos, no era mandona y mucho menos molesta, por eso le caia tan bien, y lo que acababa de sentir con ella era realmente extraño, nunca le había pasado algo como eso jamás ni siquiera con su mamá y eso que él, la quería mucho, era algo totalmente desconocido para el pero lo que el sabía era que el ya quería que fuera mañana para que fueran Miku y el al bosque para jugar, casar monstruos, ver dragones, buscar hadas y duendes, y recolectar gemas mágicas, y sobre todo tenía unas inmensas ganas de verla, no sabía cuál era la razón ni el por qué, pero eso era lo que el sentía y le agradaba.
BUENOOO ESO ES TODO COMO QUEDO? GRACIAS POR LEER, MUY PRONTO SUBIRE EL SEGUNDO CAPITULO ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO¡ *U*