El suicidio sólo puede producirse cuando un individuo trata deliberadamente de autodestruirse.

Nací con una fascinación por lo extraordinario, me dediqué a estudiar lo peculiar.

Me enamoré de la rareza.

Tal vez esta obsesión por lo inusual a lo largo del tiempo se proyectó en mí; quizás esta admiración no era más que un reflejo de mi propia singularidad y los estudios que seguí no fueron para entender a los demás sino a mí mismo. Pero, ¿quién soy yo para hablar de mí sin conocerme? ¿soy merecedor de la palabra a pesar de no saber lo que estoy diciendo?

Es por eso que necesito a Hugo, a diferencia mía, él no es un cobarde.

Ha aprendido a conocerse, a regocijarse en su extravagancia y disfrutar toda su morbosidad.

Ha sido mi estro en esta humillante e infinita espiral.

Ha traído la Verdad y no ha dudado en ayudarme a aceptarla.

Y por esto le estaré agradecido hasta que mi miserable existencia desaparezca.