Mis memorias por N.K. Fujino.
Prologo.
En aquel foro las luces caían sobre mi rostro, personas, rostros de fans y una reportera audaz, cual no escatimaba en hacer preguntas sobre mi último libro.
-"Detrás del arcoíris", es una novela romántica, muy linda a mi forma de ver- ella sonrió, todas eran tan fingidas, las sonrisas de todos los reporteros eran iguales, tan falsas. Continuo con las preguntas -¿Por qué "Detrás del Arcoíris"?
Por fin, la pregunta de todos los reporteros anteriores, era tan fastidioso contestar siempre lo mismo – en algunas mitologías o creencias el arcoíris refleja la esperanza, de amor, de amistad o… -hice una pausa – de que alguien vuelva – quería sonreír, pero a mi no se me daban muy bien las sonrisas falsas y sin sentido, solo podía mostrar aquellos ojos tristes y serios, que según varias personas afirmaban que me hacían única.
-¿Tiene alguna idea para su próximo libro? –al parecer a los reporteros les gustaba jugar con la cámara, pues nunca me miraban cuando hacían esa pregunta, pero esta siempre acababa enfocada en mi esperando una respuesta.
-creo… que lo dejare a su imaginación –para ser franca, no tenia ni idea de que seria lo próximo que escribiría.
Volvió a sonreír la reportera –damos por concluida la entrevista a la escritora N. K. Fujino – se despidió del publico presente en el foro, luego de la cámara. Como si esta tuviera vida. Me levante de aquella silla, cómoda por cierto, camine rápido hacia la salida, no quería toparme con algún otro reportero, pero, literalmente tengo tan mala suerte; la entrada del estaba cundida de fans, reporteros, muchos reporteros los cuales con sus cámaras fotográficas me asechaban, como león a su presa.
Tratando de buscar una salida, voltee la vista muy rápido y ahí estaba aquella persona, enfundada en un hermoso traje de gala militar, mire como sacaba un cigarrillo de su bolsa, lo coloco en sus labios, sonrío y sentí como sus penetrantes ojos carmín se enfocaban en los míos. Por escasos segundos me olvide de los reporteros, al volver a la realidad intente buscar a aquella persona, pero no estaba.
-¿fue un visión? –me dije a mi misma, comencé a caminar hacia delante donde me esperaba un coche negro, el cual me llevaría a un lugar llamado "casa". –Seria una ilusión –me preguntaba una y otra vez. Mi mente estaba viajando, cuando el escandaloso sonido de un claxon me trajo de nuevo a la tierra.
Comencé a burlarme de mi asistente, me miro con despecho – ¿a ti que te pasa, eh?
-es que eres demasiado estúpida –no paraba de reír, enserio que se veía tan tonta, no cualquiera se mancha la mejilla con chocolate.
-ah… -fue en tono de burla ese sonido –así que estas feliz, es curioso verte reír, ¿acaso sacaron lencería nueva en el mercado? –me miro con ojos de perversión.
-cierra la boca Nao – sonreí –es solo que quiero volver a casa.
Ella sonrío también, para nosotros no enfatizar la palabra casa era raro, éramos iguales, pero al mismo tiempo diferentes, por eso me entendía tanto con ella.
