Miraculous: Les aventures de Ladybug et Cat Noir no me pertenece, escribo esto por entretenerme y entretener sin animos de lucro ¡gracias por leer!
Att: Kalpana R.S
One-shot escrito para el reto mensual #AgostoPV
Calendario dedicado a: Sonrais777 (En Fanfiction) y a LadyDoptera (En Wattpad)
Tema día 1: Primer encuentro.
Género: Hurt/Comfort
(Bridgette/ Ladybug y Claude/Kid mime)
¡Comencemos!
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Claude tenía tan solo siete años de edad cuando su padre decidió que debían mudarse y vivir en Paris, la capital de Francia. El motivo que había impuesto por aquel cambio tan radical había sido que su trabajo como mimo sería mucho mejor apreciado y pagado en aquella zona llena de turistas nacionales y extranjeros. Sin embargo, pese a su corta edad Claude ya era capaz de entender que aquel no había sido el verdadero motivo por el que habían salido casi huyendo de Barfleur.
La realidad era que la muerte de su madre había sido algo tan doloroso para ambos que permanecer en aquel pintoresco y encantador pueblo marcado por un enorme lago y caracterizado por las casas verdosas de granito gris y pizarra, así como por las playas de arena y roca que invitaban a perderse del mundo dando un relajado paseo y observando el atardecer, estaba lleno de recuerdos sobre ella.
No intentaban olvidarla, para Claude pensar en esa posibilidad le parecía casi una blasfemia, pero también había considerado que marcharse era lo mejor pues Barfleur únicamente lograba hacerlo sentirse abrumado por los recuerdos y el dolor que representaba incluso su propio hogar. Porque ya no eran la familia feliz que tuvo la suerte de conocer antes de que el cáncer comenzara a marchitar a su madre poco a poco.
Sintiendo un nudo en su garganta Claude tomo una pequeña piedra que se encontraba en el suelo para comenzar a jugar con ella, observándola y raspándola con sus pequeñas uñas sin verdadero interés. Sentado en el marco de la puerta de aquel edificio donde ahora vivirían y por el cual iban y venían varios trabajadores de la mudanza y su padre subiendo los muebles y demás objetos personales.
¿Por qué? ¿Por qué la vida tenía que ser tan injusta? ¿Por qué tenía que llevársela?
"La vida puede llegar a ser muy difícil, pero también muy hermosa. Solo hay que vivirla sin miedo para descubrirla" recordó las palabras de su madre mientras se encontraba recostada en la cama del hospital, un par de días antes de marcharse.
"Yo siempre te cuidare, este donde este" había prometido después, "Permaneceré junto a ti, dentro de tu corazón. En compañía de tu ángel guardián"
Notando como sus ojos se cristalizaban, Claude apretó la piedra con furia y se limpió los ojos con el dorso de sus pequeñas manos.
-La vida es horrible –murmuro el pequeño, intentando ignorar los deseos que sentía de llorar y concentrándose en la rabia que comenzaba a brotar en su pecho –Y los ángeles no existen –añadió antes de lanzar la piedra entre sus manos a la calle.
-¡AUCH! –sonó de pronto la infantil voz de una niña.
Al instante Claude sintió como su sangre bajaba hasta la punta de sus pies y busco rápidamente a la que sabía, había resultado víctima de su piedra. Encontrándose con una pequeña niña, probablemente de su edad, de largos cabellos negro azabache tirada en el suelo mientras se frotaba la cabeza adolorida.
-Oh no –murmuro Claude arrepentido, levantándose de la entrada y comenzando a correr hasta ella para disculparse. Deteniéndose repentinamente y abriendo los ojos asustado al ver cómo, de alguna manera que no lograba entender, al intentar levantarse la niña pisaba la piedra y tropezaba con ella. ¡Con la piedra, con su diminuta piedra!
Gritando de nuevo antes de caer en un charco que había debajo de la banqueta y mojándose completamente al ser rematada por un auto que pasaba lo suficientemente cerca como para levantar el agua de otro charco a su paso. O al menos eso pensó hasta que vio como una paloma que pasaba volando demasiado bajo decidió justo en ese momento hacer sus necesidades sobre la niña, específicamente sobre su hombro.
– ¡Increíble! –exclamo Claude sin pensar, incapaz de creer que tanta mala suerte fuese capaz de afectar a una persona en tan poco tiempo. Sonrojándose como un tomate maduro y arrepintiéndose al instante cuando noto que había llamado la atención de la niña.
-¿Te causa gracia? –pregunto ella empequeñeciendo los ojos.
-¡No, no, no! –Apuro a negar Claude –Es solo que… Jamás había visto algo así –se explicó nervioso, acercándose hasta ella para tenderle la mano y ayudarla a salir. Sonrojándose aún más al ver como ella soltaba una encantadora risa y notando mucho mejor el adorable rostro de la azabache.
Su piel era tan blanca y tersa que por un momento recordó las muñecas de porcelana que solía coleccionar su madre. Sus ojos tenían un bonito color azul intenso, eran tan profundos y brillantes como el lago de Barfleur bajo un día soleado de verano. Su sonrisa era tan hipnótica como la luna resplandeciendo en la obscuridad y sus regordetas mejillas ligeramente sonrojadas como sus labios, le recordaban la calidez del atardecer.
Ella era sin dudarlo la niña más linda que jamás había conocido, parecía un pequeño y dulce ángel.
Sin saber porque, sus manitas comenzaron a temblar y el corazón se le acelero con la misma emoción que sentía cuando sintonizaba su programa favorito en la televisión, cuando su padre le enseñaba algún truco o cuando su madre lo llevaba a los columpios. ¡Cielos, incluso el vuelco en su estómago era el mismo! Asustado retrocedió y se lamentó por ello al observar como la niña dejaba de reír.
-Tranquilo, no estoy enojada –dijo ella con su tierna voz, tan melodiosa y suave como una pequeña campana mecida por el viento –En realidad me caes bien.
-¿En-Enserio? –pregunto Claude, sorprendido y confundido. Sin poder entender cómo podía simpatizarle después de haberla golpeado y causado tantas desgracias. Ella asintió sonriendo de nuevo –Pero…
-Eres nuevo aquí, ¿Verdad? –pregunto ella, interrumpiéndolo alegremente –Yo vivo junto a este edificio, somos vecinos. ¡Mis padres tienen una panadería! ¿Puedes verla? ¡Es esa! –Exclamo emocionada, señalando el letrero que sobresalía en la esquina de la banqueta -¡Hacen unos macarons deliciosos! Hay de muchos colores y sabores, hay de vainilla, de chocolate, de stracciatella, de caramelo…
Claude frunció el ceño, sin entender como después de haber pasado semejante accidente la pequeña podía lucir tan feliz y tranquila en lugar de ponerse a llorar o molestarse. Un poco sorprendido también por su capacidad de hablar, hablar y hablar sin al parecer tener la necesidad de tomar aire.
-De avellana, de champán, de amaretto, de castaña, de mocha…
-Oye –hablo Claude, intentando detenerla y sonriendo sin darse cuenta al verla mecerse despreocupada mientras miraba el cielo intentando recordar más sabores.
-De canela, de limón, de mandarina, de frambuesa y… Ya no recuerdo más –admitió lo último riendo mientras se rascaba la nuca. Contagiando al niño y sacándole una sutil risa que intento acallar al darse cuenta de lo que hacía –Como sea, ¿Cuál es tu nombre? –pregunto ella, dejando de reír y acercando su rostro sonriente un poco al de Claude. Encadenando sus zafiros a los celestes de él.
-Claude –respondió sonriendo nervioso, intentando ignorar el sonrojo y las sensaciones dentro de su pecho y la boca de su estómago por la excesiva cercanía que tenían – ¿Y tú?
-Bridgette, es un placer conocerlo caballero –respondió ella alejándose y haciendo una pequeña reverencia mientras imitaba la voz de una dama. Haciéndolo nuevamente pensar que se trataba de la niña más linda y simpática que había conocido en toda su corta vida. Luciendo incluso más bella que un pequeño y dulce ángel.
-¡Brid, cariño! ¡Ya está la comida! –se escuchó el grito de un hombre, llamando la atención de ambos infantes quienes observaron al responsable rápidamente. Un hombre alto y corpulento de cabello castaño y bigote que se asomaba sonriente de la puerta que daba acceso a la panadería. Agitando la mano para el pequeño niño a modo de saludo y volviendo a entrar en el local.
Bridgette sonrió y Claude correspondió apurado el saludo, no deseando parecer grosero con aquel simpático señor que manaba seguridad, amor y confianza.
-Debo irme, nos vemos después Claude –dijo la pequeña, antes de tomar la pequeña mano del niño que torpemente continuaba agitando y colocar en ella una pequeña florecita que guardaba dentro del bolsillo de su overol de mezclilla –Bienvenido a Paris.
Y dicho aquello, la adorable niña dio media vuelta y se alejó dando pequeños saltitos, como si estuviese jugando un avioncito imaginario que desaparecía poco antes de llegar a su hogar. Agitando poéticamente sus largos cabellos sujetos en un par de coletas por dos brillantes listones de color rojo. Despidiéndose con la mano a lo lejos y esfumándose de su vista dentro de la panadería.
Dejando a Claude paralizado y con el corazón hecho un caos, sin entender muy bien todo lo que acababa de suceder. Sin entender todo lo que sentía ni la actitud de aquella niña tan linda, pero sonriendo sin darse cuenta al estar convencido por primera vez en su vida, de que tal vez su madre tenía razón y los ángeles realmente existían. Y ella era uno.
Esa misma noche Claude guardo la flor en una pequeña caja de madera, la misma donde guardaba las fotos de su madre y lugar de donde nunca volvió a sacarla.
Notas de autora:
¡Hola, hi, nihao, namaste!
Tercera vez que me animo a escribir un reto tan grande como subir un OS todos los días basado en una palabra como tema principal, ¡Pero es imposible no hacerlo! Escribir del universo PV es una oportunidad de oro y me gustaría invitarlos a todos a participar :D
El calendario se encuentra en la cuenta de Facebook: Fanfics Miraculous Ladybug –Miraculer Lectora y en la cuenta de Wattpad: MiraculousFanfics ¡Seria fantástico si se unieran!
Hablando un poco del OS, fue escrito en aproximadamente 2 horas, así que ahora entienden porque no fue la gran cosa Fueron 1516 palabras y fue lo primero que se me vino a la mente cuando vi el tema del día 1. Nada especial pero de igual forma espero que les guste al menos un poco y si no, que los entretenga por un rato :)
Para Sonrais777 y LadyDoptera ¡Espero que les guste! Al menos un poquito, las admiro mucho chicas. Son unas escritoras sencillamente maravillosas que llenan de alegría mi vida con sus hermosos escritos.
Nota para los lectores de Fanfiction: Hace mucho que no publico nada en esta plataforma y me siento como si fuera mi primera vez de nuevo :v poco a poco estaré subiendo los trabajos que durante estos meses publique en Wattpad pero no por aquí. (Ayer-hoy en la madrugada subí 12 y en la noche durante estos días subiré los otros 10)
Nota para los lectores de Wattpad: Hoy actualizo el capítulo 12 de "Noir et Blanc" y subo el primer capítulo de mi castigo (El fanfic Adrinette y Ladrien +18 :"v )
En fin, gracias por leer esto, dudas, comentarios y quejas ya saben dónde.
¿Y qué? ¿Merezco review? Jejeje
¡Adiós, good bye, sayonara... alvida!