Pareja: Fudo x Fubuki [Hermosa pareja crack]
Nota: Algo corto que salió de mi loca cabecita exactamente a las 3:06 AM, disfrutenlo
"El día en que lo conocí"
El día en que lo conocí, fue un día frío, lo recuerdo muy bien. No quería levantarme, pero debía ir a trabajar a la biblioteca. Envuelto en una frazada me dispuse a salir de la cama e ir a prepararme un termo con café. Con desgano llegué a la cocina, encendí la televisión y calenté agua en el hervidor, para después sentarme a ver las noticias, y justamente estaban dando la sección del tiempo. Ese día hicieron cinco grados, literalmente me estaba congelando; adoraba mucho el frío, pero tener que trabajar y hacer cosas en un día así, no me agradaba para nada.
A eso de las once de la mañana salí de mi departamento y con el frío calando mis hueso caminé hasta mi trabajo—El cual no quedaba muy lejos—por lo que no tenía que tomar algún transporte. Llegué a tiempo y me coloqué a trabajar de inmediato, ordené libro tras libro en su respectiva sección y estante, mientras los clientes entraban y salían del local sin interrumpir mi tranquilo labor, al menos hasta que entró él: Un muchacho de cabellos grisaseos, casi plateados y atrayentes ojos—Al menos para mi—color grisaseos, llegando casi al color azul. No pude quitarle la vista de encima y le seguí de cerca. Era un chico bastante atractivo, me gustó desde el primer momento.
El muchacho volvía cada tarde con el libro que se había llevado el día anterior.
Al terminar la semana supe que su nombre era Fubuki Shiro y tenía dieciocho años.
Al terminar el mes me habló para pedirme ayuda para encontrar un libro.
A mitad de mes le hablé y terminé confesándome.
—Es muy lindo, me gustas—Dije cuando me entregó un libro
Me miró con sorpresa. Le observé de reojo y pude percibir el suave rubor que había coloreado sus mejillas, una automática sonrisa surcó mis labios.
—Vaya, Akio-kun—Me sonrió suavemente—No esperaba una confesión hoy y menos de ti, gracias.
Me rechazó sin dejar de ser tan lindo y gentil.
—Sabía que no podría gustarte—Deje el libro en una canasta junto a otros.
—Pero, me gustaría conocerte—Alcé la vista viéndole con sorpresa—A las ocho en el café de la vuelta
Asentí encantado, él solo me sonrió. Le acompañe hasta la salida, besándome la mejilla antes de irse. Le miré hasta perderle de vista sonriendo como idiota enamorado.
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—Hey, Akio—
Su voz hermosa me sacó de mis recuerdos.
—¿Que sucede Shiro?—Pregunté sonriendole.
—Te quiero—Dijo Shiro.
Me sonrió. Que bella sonrisa es la que tiene
—Yo también te quiero—Respondí abrazándole.
Se inclinó dándome un corto beso.
—Te amo—
—Yo también te amo—
Nos sonreímos acercando nuestros rostros terminando con la distancia entre nuestros labios, sellándolos en un suave y dulce beso.