Letras Prohibidas:
Las Leyendas del Profeta del Olvido
By Srta Misao Maxwell
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Nota: Harry Potter y sus correspondientes secuelas no me pertenecen y tampoco sus personajes, todo es obra de J.K. Rowling, por eso no intento ganar nada con esta historia más que mi consagración como escritora, este fic NO tiene fines de lucro.
Advertencia: Esta historia ES SLASH, o sea relaciones amorosas entre hombres, y contiene escenas LEMON (escenas hentai o XXX, como deseen llamarlas); ésta historia también contiene algunas otras cosas que pueden no ser del agrado de todos ustedes (cosas que se irán descubriendo a medida que avance la historia), si no es de su agrado éste tipo de lecturas, POR FAVOR NO SIGAN LEYENDO; quedan avisados, no me hago responsable de ningun trauma post-lectura.
Aclaración: No tengo la menor idea de qué materias tienen y cuales no tienen en el séptimo año de Hogwarts, recién estoy leyendo el 4to libro, así que me tomé el atrevimiento de poner las materias que aparecen en el fic de Lilith Malfoy llamado "Cambios" (lo recomiendo, está muy bueno). Lilith, si estás leyendo ésto, espero no te ofendas con que yo halla tomado de tu fic eso, por favor perdóname si te ha molestado.
Ahora, sin nada más que aclarar, solo me resta desearles una agradable lectura y espero sinceramente que les guste mi primer fic de Harry Potter.
- - Diálogo
- " " - Pensamientos
- // - Recuerdos
// Sueños
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Capítulo I: Las conjeturas de Dumbledore.
Sus penetrantes ojos azules miraban extrañados a través de los cristales de sus lentes de media luna, la bola de cristal que estaba frente a él le estaba mostrando que un acontecimiento muy importante iba a suceder dentro de poco, un acontecimiento especial, hermoso y primordial a la vez, pero lo que su esfera no especificaba, era quien iba a llevar a cabo los hechos de dicho acontecimiento. Y eso le preocupaba.
Escuchó que alguien venía hacia su despacho; y cuando la gran ave de piedra dejó de girar, entró a la oficina de Albus Dumbledore la persona que él estaba esperando.
- Aaa, Minerva, te estaba esperando.
- ¿Qué puedo hacer por ti, Albus?
- Ven, acércate
La profesora Minerva McGonagall se acercó hasta donde el director y miró a la bola de cristal que éste le señalaba, y luego de mirar una y otra vez su entrecejo se frunció visiblemente
- Albus, ¿qué significa ésto?
- Significa Minerva, que aquello que tánto esperabamos, tal vez va a suceder dentro de muy poco
McGonagall iba a decir algo, pero fue interrumpida por un fuerte azote de una puerta, y la entrada de un Hagrid muy agitado no les permitió continuar
- ¡Profesores, vine a avisarles que los esperan para iniciar el Gran Banquete, los alumnos ya han llegado.
- Bien Hagrid, muchas gracias. Vamos Minerva, luego seguimos conversando.
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El Gran Salón se veía explendido, como todos los años. Las velas flotadoras iluminaban todo y los platos vacíos aguardaban la entrada de los estudiantes para ser llenados.
Y el momento no se hizo esperar, las puertas se abrieron de par en par y la alegría de los pequeños magos inundó el Comedor.
Harry, Ron y Hermione llegaron y se sentaron los tres juntos en la mesa de Gryffindor como siempre, cerca de Seamus Finnigan, Dean Thomas, Ginny Weasley y Neville Longbottom.
La ceremonia de Selección para los nuevos alumnos de primer año transcurrió sin inconvenientes y una vez empezado el festín, los chicos que ahora estaban en séptimo conversaban alegremente.
- ¡¡¡Ésto está riquísimo!
Exclamó Neville, con el plato lleno de ensaladas y puré, y en la boca un muslo de pollo. Todos rieron ante la escena que era ver al torpe mago tratar de comer todo a la vez, era cierto, el banquete estaba delicioso ese año, la vista se te iba y te querías comer todo lo que veías, cada cosa en la mesa parecía ser riquísima.
Aunque...
- Oye Harry, me parece a mi, o Malfoy está mirando para acá?
- Ron, no me amargues la cena por favor, hablemos de otra cosa, ¿si?
- Pero es que no para de mirar para acá
- Déjalo, que se pudra
Hermione (y todas las personas que estaban escuchando la conversación entre Harry y Ron) ya se la veía venir, si no hacía algo para calmar a esos dos, ya tendrían problemas antes de iniciar las clases por pelearse, y ella deseaba tener una cena tranquila
- Calma chicos, y por favor, ya que éste año es el último, traten de no meterse en muchos líos con Malfoy, ¿si?
- ¿Qué pasa Hermione, ¿temes que nos quiten por nuestra culpa los puntos que seguramente tu ganaras con cada paso derecho que des?
- Cállate Ron y come ¿quieres?
¿De qué servía quemarse las neuronas y gastar saliva en un Ron empecinado, Hermione sabía que no podría hacer entrar en razón a ese cabeza hueca pelirrojo, así que mejor dejarlo quieto
La cena continuó así, entre chistes, chismes y bromas entre y para todos.
Pero en Harry Potter, la curiosidad pudo más que otra cosa e inconcientemente giró más de una vez la vista hacia cierto Slytherin que, efectivamente, si estaba mirando hacia donde ellos se encontraban sentados, más exactamente, no apartaba la vista de Harry, cosa que, increiblemente, puso un poquito, solo un poquito nervioso al chico morocho.
Cuando el banquete de bienvenida hubo acabado, todos los estudiantes se dirigieron a sus respectivas habitaciones a descansar, ya que mañana iniciarian sus clases. Pero Harry, una vez más, no pudo evitar hechar un vistazo hacia el rubio Slytherin antes de retirarse con los chicos a su habitación.
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Toc, Toc, Toc.
Los leves golpes pusieron en aletra a Albus Dumbledore, que estaba distraido en su oficina acariciando las rojas plumas de su Fénix Fawkes. El banquete había terminado ya, y él había quedado con alguien a verse en su oficina después de la cena.
- Permiso Profesor Dumbledore
- Profesora Sinistra, la estaba esperando, pase, siéntese.
La profesora se sentó y esperó a que Dumbledore tomara su lugar detrás de su escritorio, y una vez ambos acomodados, fue Albus quien habló primero
- Bien, ¿haz podido con lo que te he pedido?
- Por supuesto Profesor, aquí lo tengo anotado, tome
Sinistra, profesora de Astronomía le acercó un pergamino al director y éste lo leyó interesado, asintiendo a cada palabra escrita.
- Bien, bien. Te lo agradezco infinitamente Sinistra, me haz ayudado mucho.
- De nada Profesor. Si me permite decirle, estoy sorprendida con los comentarios que usted me ha hecho, sus predicciones fueron exactas, todo está pasando tal cual usted me lo dijo.
- Gracias Sinistra, veo que mis suposicioes eran ciertas. Y ahora gracias a ésto que me haz traido lo confirmo todo.
- Pues estoy para servirle Albus. Ahora me retiro, si me necesita, llámeme.
Luego de que la profesora se retiró, Albus se quitó los lentes y se frotó los ojos en un gesto de cansancio, estaba agotado, había estado investigando mucho y a cada cosa que encontraba, más seguro estaba que aquello que él sabía desde hacía mucho tiempo estaría por suceder muy pronto, y por eso estaba contento.
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La mañana había llegado a Hogwarts, y con ella el inicio de las clases de ese año.
Harry se había despertado esa mañana un poco alterado, luego de un extraño sueño, del cual no se acordaba nada, solo recordaba un llanto, no era un llanto penoso ni desgarrante, solo era un llanto sumamente irritante; y también recordaba una voz calmada tranando de callar ese llanto.
En el gran comedor, mientras desayunaban, la profesora McGonagall les repartió a todos sus nuevos horarios. Ron casi salta de la sorpresa:
- ¿Han visto? ¡compartimos casi todas las materias con Slytherin!
- Demónios...
Harry lo que menos quería ese año era tener problemas, estaba en su último curso y lo que menos le faltaba ahora era que lo expulsaran por pelearse, porque de eso estaba seguro, si él estaba con Draco Malfoy en una misma habitación por mucho tiempo, por lo menos un insulto era seguro que se dirían.
En realidad Harry no quería odiar a Malfoy, no quería odiar a nadie, pero era tan grande el odio que sentía que Draco tenía para con él, que no le quedaba de otra que contestarle con el mismo sentimiento. Aunque... en el fondo, muy muy en el fondo, Harry Potter no sentía una pizca de odio por el rubio.
Leyó los horarios otra vez, con el fin de tratar de aprendérselos
Lunes
7:45 Transformaciones (Griffindor-Slytherin)
8:35 Historia de la Magia (Griffindor-Hufflepuff)
9:20 Herbología (Griffindor-Slytherin)
10:10 Herbología (Griffindor-Slytherin)
10:50 Encantamientos (Griffindor-Hufflepuff)
12:00 Almuerzo
14:00 Pociones (Griffindor-Slytherin)
14:50 Adivinación (Griffindor-Slytherin)
Martes
7:45 Pociones (Griffindor-Slytherin)
8:35 Adivinación (Griffindor-Slytherin)
9:20 Adivinación (Griffindor-Slytherin)
10:05 Defensa contra las Artes Oscuras (Griffindor-Ravenclaw)
10:50 Cuidado de Criaturas Mágicas (Griffindor-Ravenclaw)
21:30 Astronomía (Griffindor-Slytherin)
22:35 Astronomía (Griffindor-Slytherin)
Miércoles
7:45 Encantamientos (Griffindor-Hufflepuff)
8:35 Cuidado de Criaturas Mágicas (Griffindor-Ravenclaw)
9:20 Cuidado de Criaturas Mágicas (Griffindor-Ravenclaw)
10:05 Historia de la Magia (Griffindor-Hufflepuff)
10:50 Herbología (Griffindor-Slytherin)
12:00 Almuerzo
14:00 Defensa contra las Artes Oscuras (Griffindor-Ravenclaw)
14:50 Defensa contra las Artes Oscuras (Griffindor-Ravenclaw)
Jueves
7:45 Adivinación (Griffindor-Slytherin)
8:35 Cuidado de Criaturas Mágicas (Griffindor-Slytherin)
9:20 Transformaciones (Griffindor-Slytherin)
10:05 Transformaciones (Griffindor-Slytherin)
10:50 Herbología (Griffindor-Slytherin)
21:30 Astronomía (Griffindor-Slytherin)
22:35 Astronomía (Griffindor-Slytherin)
Viernes
7:45 Defensa contra las Artes Oscuras (Griffindor-Ravenclaw)
8:35 Historia de la Magia (Griffindor-Hufflepuff)
9:20 Pociones (Griffindor-Slytherin)
10:05 Pociones (Griffindor-Slytherin)
10:50 Transformaciones (Griffindor-Slytherin)
12:00 Almuerzo
14:00 Encantamientos (Griffindor-Hufflepuff)
14:50 Encantamientos (Griffindor-Hufflepuff)
- "¡Detesto los Jueves!"
Fue el primer pensamiento en la mente de Harry luego de leer los horarios!Qué Horror, ese día tenían absolutamente todas las materias con Slytherin...
Una de las primeras materias de ese día era Historia de la Magia con Binns, por suerte lo único que hacían en esa materia era dormir, así que no tendría por qué preocuparse, aunque después tenía Herbología con Slytherin...
Junto con Hermione y Ron, Harry se dirigió al salón de la Profesora McGonagall para Transformaciones, después de darle un último sorbo a su té y una última mordida a su pastelito.
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-Bienvenidos a mi clase muchachos!
Minerva McGonagall era una buena mujer, estupenda profesora, pero luego de lo que iba a decir a continuación, todos los presentes en esa aula creyeron que tanto tiempo junto con Albus Dumbledore le estaba atrofiando el cerebro a la mujer:
- Alumnos míos, estoy contenta de informarles a ustedes, que los jefes de las Casas estuvimos pensando en varias cosas. Una de esas cosas es la absurda rivalidad entre las casas, por eso hemos convenido en hacer un par de cambios en éste colegio, con motivo de estrechar las relaciones entre los estudiantes y crear lazos de fraternidad entre todos. Como habrán notado, el cambio más notorio es que todas las clases son compartidas entre dos casas, principalmente entre Gryffindor y Slytherin, que son los que más rivalizan, y el segundo cambio, que se mantendrá hasta fin de año, y no intenten protestar con nadie porque ya está decidido y el Director Dumbledore nos brinda su total apoyo a los Jefes, es que trabajarán en parejas, un alumno de cada casa.
Un murmullo en donde se podian escuchar claramente maldiciones e insultos se dejo escuchar luego de esa noticia, la mujer docente se vió en la obligación de elevar un poco la voz para volver a tener la atención de los estudiantes:
- ¡MUCHACHOS, ¡escúchenme por favor!... bien, como decía, cada alumno tendrá un compañero con el que trabajará en las clases y hará los trabajos y deberes, la formación de las parejas se llevará a cabo por sorteo, para que no halla quejas y sea más justo.
Minerva se dirigió detrás de su escritorio y expuso ante toda la clase dos cajas, una a su derecha y la otra a su izquierda
A Harry no le estaba gustando nada esa idea, los profesores realmente se habían vuelto locos... lo que más deseaba, sobre todas las cosas, era que no le tocara con Malfoy en las clases que tenía que compartir con Slytherin, eso sería un verdadero desastre
- ¡¡Chicos, ¡no se distraigan, bien. Aquí, en la caja a mi derecha estan todos los nombres de los estudiantes que pertenecen a Slytherin anotados en un papelito, y en ésta otra caja los nombres de los de Gryffindor. El sorteo se realizará de la siguiente forma: Yo sacaré un papelito de cada una de las cajas, y con las personas que les halla tocado, deberan sentarse en ésta y en todas las clases que compartan, ¿han entendido?
Un 'Si' muy desganado por parte de los alumnos fue la respuesta que obtuvo la profesora, y luego se dispuso a empezar con eso que casi todos llamaban 'castigo'
- Bueno chicos, ahora voy a comenzar, a medida que los voy llamando se van sentando con sus respectivos compañeros - metió la mano en la caja de Slytherin para sacar el primer nombre- veamos... ¡aquí, Pansy Parkinson, tu te sentarás con... - metió la mano en la caja de Gryffindor - ... con Ron Weasley, ¡vamos, qué esperas? ve a sentarte con tu compañero!
A Pansy le vinieron unas fuertes ganas de estrangular a algunos profesores, ¡qué horror, tener que sentarse con ese pobretón!... pero no le quedó de otra más que hacerlo. Fue hasta donde Ron con una mirada de asco que solo se comparaba con la de odio que el pelirrojo le daba a ella. Así fue con todas las demás personas cuando la profesora los tenía que obligar a que fueran a sentarse con quien debían
Como haciendo que no se daba cuenta de las obvias miradas despectivas, la profesora continuó con el sorteo
- Blaise Zabbini, tu te sentarás con... Hermione Granger, Vincent Crabbe con... Dean Thomas, Albert Garwood con... Seamus Finnigan, Gregory Goyle con... Neville Longbottom, Draco Malfoy con...
Harry contuvo la respiración por un momento, y todo lo que su mente repetía era 'Conmigo no por favor, conmigo no por favor', pero el alma se le vino al suelo cuando oyó su 'sentencia de muerte':
- ... con Harry Potter, Caine Pagan con...
Harry dejó de escuchar lo que la profesora decía, dejó de escuchar todo a su alrededor, lo único que pensaba era '¡Estoy perdido, si tengo que trabajar con ese maldíto hurón estaré expulsado de Hogwarts en menos de una semana!... esto no puede estar pasandome a mi, ¿qué hice para merecerlo?'
Al parecer su cara expresaba tal cual se sentía por dentro, ya que esa voz venenosa que arrastraba las sílabas al hablar le dijo cerca de él:
- Yo no estoy contento de trabajar contigo tampoco, Potter
El rubio se sentó a su lado con la arrogancia que tanto lo caracterizaba, y no lo miró en toda la hora, cosa que Harry secretamente agradeció, no quería que lo expulsaran en su último año por culpa de ese estúpido Slytherin, él no valía la pena, así que internamente hizo un pacto con sigo mismo, jamás de los jamases trataría al rubio con amabilidad, pero para evitarse problemas, lo trataría con indiferencia.
Cuando la profesora terminó de sortear las parejas, comenzó su clase.
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En la hora de Historia de la Magia se realizó el mismo sorteo de parejas, ésta vez Gryffindor con Hufflepuff, y los chicos estaban seguros que esa clase fue la más entretenida que jamás hallan tenido con Binns, aunque cuando el arreglo de parejas hubo terminado... :
- Y así fue como en 1464 éste mago descubrió que...
Harry cabeceó por vegecimaquinta vez desde que el sorteo se había terminado, como siempre, las clases del Profesor Binns no perdían ese toque somnífero que hacían a uno querer acostarse en el pupitre y dormir.
Los párpados se le cerraban solos, ya no daba más, un poco más y se ponía a roncar ahí mismo, Ron no estaba pasando por un mejor momento, igual que toda la clase, solamente Hermione parecía interesada de verdad en la clase.
Para su suerte el timbre sonó, y todos se apresuraron para salir del salón, los Griffindors directo a los invernaderos.
- Un poco más y me caigo al suelo dormido...
La voz de Ron se notaba sumamente adormilada, y su cara de recién levantado no ayudaba en mucho
- A mi solo me hacía falta la almohada - comentó Harry para luego bostezar
Harry también estaba más dormido que despierto, pero aún así dijo lo que en ese momento le rondaba por el adormilado cerebro:
- Qué bueno que ahora tenemos Herbología, esa clase es mucho más entretenida que Historia de la magia
- Harry... cualquier cosa en más entretenida que Historia de la magia - le contestó Ron
- Ustedes realmente no saben apreciar lo que es bueno... - terció Hermione
Sin hacer caso a lo dicho por la Gryffindor, Harry siguió hablando mientras iban camino a los invernaderos
- Lo malo de Herbología es que tenemos que compartir la clase con Slytherin...
- Herbología y cuatro materias más; de las nueve que tenemos, cinco las compartimos con Slytherin, por culpa de la falta de cordura de nuestros profesores...
- Y no creas que a nosotros nos hace mucha gracia compartir las clases con ustedes, Weasel
Esa voz, esa forma de hablar arrastrando las palabras, la tonalidad arrogante, la expresión sarcástica.. solo podía ser una persona, Draco Malfoy.
- ¿Cuál es tu problema Malfoy? - de tan solo tenerlo cerca, a Ron ya le comenzaba a hervir la sangre de ira
- Tener que estar bajo el mismo techo contigo, pobretón, ese es mi problema
- ¡¡No me provoques Malfoy! o sino
- ¡¿O sino qué, vas a golpearme?
Draco se corrió un poco dejando ver a los demás que venía acompañado de sus inseparables gorilas guardaespaldas Goyle y Crabbe, mastodontes dispuestos a acribillar a golpes al que se atreviera a meterse con Draco; y Ron tuvo que tragarse su orgullo y callarse, él tampoco quería problemas, ya bastantes cosas había hecho al correr de los seis años que estaba en Hogwarts, como para ahora pelearse por una estupidez y sumarle un pretexto más al colegio para hecharlo...
Nadie más que Harry notó, Que Draco hasta ahora no se había metido con él, nada de 'cabeza rajada', ni 'idiota con gafas' ni ningun insulto, ninguna mirada penetrante, nada. Eso le extrañó horriblemente, ¿era que acaso Malfoy ya se había cansado de humillarlo y se había olvidado de él, Harry se encontró rezando para que eso fuera cierto.
Pero como a él la suerte no le acompañaba, cuando Malfoy se retiraba con sus gorilas, caminó directo a Harry con la clara intención de empujarlo para pasar, Draco puso su mano en el pecho de Harry y luego de fulminarlo con la mirada con un fuerte empujón lo tiró al suelo, y siguió caminando con la cabeza erguida como si nada.
Ron y Hermione corrieron hasta donde un atónito Harry estaba tirado en el suelo, mientras la chica lo ayudaba a levantarse, el pelirrojo le gritaba maldiciones e insultos a Malfoy desde donde estaba, conteniéndose de ir a alcanzarlo y molerlo a golpes, "Te expulsarán si te peleas" se recordaba a si mismo cada vez que hacía en intento de salir corriendo y golpear al rubio.
El moreno ya estaba de pie y Hermione ahora se concentró en tratar de calmar al eufórico y furioso Weasley:
- ¡Ya cálmate Ron, déjalo! - la chica trataba de retener a Ron por el brazo, mientras éste forcejeaba y seguia gritando
- ¡¡Pero es que ése imbécil! ¡¡NO LO SOPORTO, ¡ya, suéltame!
- Si no te calmas ahora, te amonestarán por armar escándalo en la mitad del pasillo, ¡¿quieres que te expulsen!
Ese comentario final logró calmar a Ron, que se giró para ver el estado de su amigo Harry, mientras Hermione recogía los libros y pergaminos que se le habían caido al moreno cuando Malfoy lo lanzó al suelo.
Y Harry seguía atónito, aunque ninguno de sus dos amigos lo notaron. Tenía los ojos abiertos como platos y ninguna palabra podía salirle por la boca; cuando el pelirrojo y Hermione se disponian a ir a los invernaderos, al fin notaron que Harry estaba como pegado al piso, no se movía, no hablaba, solo miraba sin parpadear en la dirección donde Malfoy había desaparecido con su amigos.
- ¡¿Harry, estas bien!
- Oye Harry, ¿te lastimaste?
Y el moreno no contestó, solo sacudió la cabeza un par de veces y caminó en silencio hacia la proxima clase, y ahora eran los otros dos Gryffindors los atónitos, "Qué le habrá pasado?" se preguntaron mientras seguían a un ensimismado Harry hacia los invernaderos.
En la mente de Harry todavía estaban las incógnitas de lo que creyó que había visto, pero luego de pensarlo mucho dedujo que era imposible, conociendo a Malfoy.
A Harry le había parecido que al momento de que Draco puso su mano en su pecho para tirarlo, hizo una pequeña caricia acompañada de una sonrisa coqueta y un guiño, que al momento desaparecieron para dar paso a la ya conocida mirada penetrante, y después Harry ya estaba en el suelo, todo había sido muy rápido.
Era algo imposible el hecho de que Draco Malfoy, su más grande enemigo, le hubiera acariciado el pecho mientras le guiñiaba un ojo y le sonreía, era algo realmente imposible...
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La noche era hermosa, el cielo salpicado de brillantes estrellas y la luna en su cuarto creciente se veía estupenda. Sus ojos azules enmarcados en sus lentes de media luna recorrieron una vez más el trazo imaginario en el firmamento que unía a dos de las más grandes estrellas que estaban cerca de la luna.
Llevaba toda su vida esperando poder contemplar en el cielo eso que ahora estaba sucediendo, jamás pensó que estaría con vida para cuando eso que él tanto deseaba que ocuriera se realizara al fin.
Apartó su vista del cielo para concentrarse en un pergamino que tenía en la mano, era el pergamino con las observaciones que la profesora Sinistra del departamento de Astronomía le había traido la noche anterior. Lo leyó una y otra vez, sin decidirse todavía si exponer o no sus hallazgos a sus alumnos... aún no estaba seguro de si dejar saber a los estudiantes algo así...
Una vez más, los toques en la puerta distrajeron a Albus Dumbledore de sus pensamientos.
- Director, ¿puedo pasar?
- Si, pasa por favor, te estaba esperando.
La profesora de Adivinación, Sybill Trelawney, entró en el despacho del director admirando la gran cantidad de cosas extrañas que allí habían con ojos curiosos a través de sus lentes grandes. Se sentó frente al escritorio y esperó a que Albus tomara su lugar:
- Bien Sybill, sabes por qué te he llamado, ¿no?
- Puedo adivinarlo...
- Jajaja... y... ¿qué me dices, ¿haz previsto algo?
- Bueno... no es nada concreto, son imágenes borrosas, pero de algo estoy muy segura, profesor Dumbledore
La expresión en el rostro de la mujer cambió de una mueca dudosa, a una seria y fría. Sus ojos se achicaron un poco, y su voz se volvió más grave
- Y dime, ¿de qué estas tan segura?
- Sea lo que sea que valla a pasar, los principales involucrados serán dos alumnos de éste colegio
Continuará...
Notas de la autora:
Konnichiwa minna-san! sessha wa Misao Maxwell. (Traducción) Hola a todos, ¿cómo están, mi nombre es Misao Maxwell.
Bien... no sé por dónde empezar, pero desde ya les digo, no esperen una actualización rápida...
y no es por vaga que se los digo, tengo razones válidas para no poder actualizar pronto:
- El colegio, me he estado descuidando, y si no quiero pasar el verano estudiando para los exámenes, mejor me pongo las pilas ahora
- Estoy escribiendo otros seis fics junto con éste, y no es nada fácil actualizar siete fics regularmente, ¿no?
Aclarados esos puntos, vallamos a ésta historia.
Lo que han leido es solo el comienzo, mi intención con éste capítulo era tratar de atraparlos para que se engancharan con la historia, aunque creo que eso es imposible solo con un capítulo. Aún así, les pido que me lean, por favor, aunque tarde en actualizar...
Como abran notado, la pareja principal es Draco&Harry, y a esos dos les esperan cada cositas...
Solo quiero advertirles que soy conocida por poseer una de las mentes más pervertidas del mundillo, figúrense...
A Ron y a Hermione no sé con quién ponerlos, si juntos o con otras personas, no sé, ustedes dirán con quién quieren que vallan
Sobre la historia, solo les puedo decir que recién ha comenzado, cosas mucho más fuertes les esperan a nuestros queridos magos, para saber qué cosas, lean los próximos capítulos (propaganda).
Otra cosa, sé que no es muy original eso de hacer que Gryffindor comparta muchas clases con Slytherin, y que tengan que trabajar en parejas, y que 'casualmente' una de esas parejas sean Draco y Harry, pero es que así es más emocionante, y los chicos tienen más oportunidades de estar juntos, ya que si no se le obliga a juntarse, ellos jamás se acercarían el uno al otro, ¿no?
Sin más me despido, mis direcciones son despido humildemente
sayounara de gozaru
Srta. Misao Maxwell