En la enorme mansión de color blanco, con pisos de mármol y llena de muebles y demás artilugios con más valor que una persona de clase media se puede imaginar, se encuentran un par de muchachos sentados alrededor de una mesa redonda.

El aire que se respira está lleno de nicotina y la cantidad de humo ha causado que una ligera neblina rodee todo el ambiente. Del lado superior, vestido elegante y a la vez juvenilmente esta el propietario de la mansión: Capone Bege. Tiene 18 años, a pesar de que forma sofisticada de actuar y sus rasgos físicos lo hacen parecer mucho mayor. Del lado posterior, al otro extremo de la mesa, esta un joven de cabello negro peinado hacia atrás y una cicatriz que recorre su rostro de forma simétrica: Crocodile.

Al igual que su amigo, tiene dieciocho años, pero la diferencia es que el si los aparenta.

Ambos se han reunido a jugar su partida de cartas semanal, en donde el dinero y las cajetillas de cigarro fluyen al por mayor. Por el momento, Capone ha tenido una buena racha y lleva la delantera.

Crocodile ya ha perdido la valiosa cantidad de 5 mil berries, pero eso no importa , ya que todas las ganancias se reducen a la última jugada de la noche.

-No esta mal, pero si crees que puedes vencerme, estas fuera de tus cabales – comenta Capone sonriente – Full de Tréboles-

Una buena mano, conseguida gracias a la habilidad y a la buena suerte. Capone , al ver que Crocodile no piensa bajar sus cartas, se autoproclama el vencedor absoluto y estira su mano al centro de la mesa para reclamar su premio.

-Celebras demasiado pronto – lo detiene Crocodile. De golpe, tira sutilmente su cartas en la mesa. Capote siente un ola de impresión al ver que Crocodile ha logrado vencerlo, y de qué manera : con una flor imperial.

-Me parece amigo – dice Crocodile, mientras acerca si el dinero de la mesa que ahora le pertenece – que el que esta fuera de su cabales eres tu-

Terminada la partida, y después de varias bromas y comentarios acerca de la suerte que han tenido en sus juegos, Capote y Crocodile abren una botella de vino tinto y la comparten. No es lo suficientemente fuerte como para que lleguen al estado de embriaguez, pero tras acabarse mas de la mitad, la sensación de mareo es inevitable.

-Me alegra que por fin hayas podido venir, Crocodile. Desde que me cambie de escuela, hemos estado un poco distantes- dice Capone, secándose los labios con el dorso de las manos.

-Es natural. Más aun si tomamos en cuenta que las escuelas están ubicadas en los extremos opuestos de la ciudad.- responde Crocodile, cambiando los cigarrillos por un puro. A pesar de ser joven , sus pulmones ya están tan acostumbrados a ese tipo de productos.

-Dios bendiga a los ingenieros que construyeron esta maldita ciudad de porquería – brinda Capone, alzando la copa vacía al aire -Deberíamos vernos más seguido, ese es mi punto. No sabes cómo he sufrido con mis malditos compañeros de colegio, no son más que un montón de salvajes incivilizados y sin recursos económicos.-

-Sufrimos lo mismo-

-Exacto! Por eso me agradas, Crocodile, no eres como el resto de los vagos que infestan la ciudad y las escuelas. Tu…tu y yo tenemos eso que se esta extinguiéndo en esta sociedad : clase. Y dinero, Jaja, nos pudrimos en dinero. Eso se merece un brindis, si, y no con esta bebida para plebeyos. No señor, es hora de abrir el brebaje de los dioses : la champagne!. Mis padres me mataran al ver que la he tomado, pero no me importa un carajo!-

Capone descorcha la botella y sirve tanto en su copa como en la Crocodile el espumoso alcohol de color dorado. De tan solo mirarlo, se puede decir que en efecto se trata de un delicia de bebida.

-¡Salud, por la clase!- propone alegremente Capone.

Crocodile choca su copa con la de su amigo, ocasionando un tintineo que resuena por la cocina – Salud por la clase….y por los 7 mil berries que te gane esta noche-

-Si, brindo por eso también, suertudo bastardo –

Siguen brindando y brindando ( que por los negocio prósperos, que por el dinero que poseían, que por el tabaco, que por la ropa de marca ….) hasta que la botella de champagne se agota y la botan a la basura.

-Bueno, no es por echarte de mi propiedad, amigo mío, pero te voy a pedir que te retires. Debo acomodar todo antes de que lleguen mis padres y ver como quitarme esta aliento alcohólico que me ha quedado-

-Igual yo me debo ir. La escuela se interpone como siempre en mi camino y mañana hay clases. Que pérdida de tiempo….-

Capone pone un brazo alrededor de los hombros de Crocodile mientras ríe a carcajadas y ambos caminan hacia la enorme puerta de entrada. Crocodile tiene suerte de no resentir tanto los efectos del alcohol como Capone, pero aun así siente sus reflejos un poco torpes.

-Adiós, mi buen amigo. Espero que gastes el dinero en algo que valga la pena- lo despide Capone. Crocodile ríe secamente y le dice que todo lo que el compra vale la pena, después, emprende marcha su casa.

-Oh por cierto, puede que un día de estos vaya a tu escuela. – le anuncia Capone, gritando desde la puerta de su enorme casa. Crocodile siente como todos los ligeros síntomas que habia sentido a causa del alcohol desaparecen de inmediato y son sustituidos por un nudo en el estomago.- Y ese día podremos tener otra partida de cartas, e incluso puedes traer a tus amigos…siempre y cuando, sean …."de nuestro nivel"-

Ocurre un silencio en donde una ligera sensación , parecida a la advertencia, se siente entre los dos muchachos. Crocodile siente como su pulso se acelera de los nervios, pero la risa de Capone destruye el ambiente de tensión.

-Ja, es una broma, Crocodile – dice, enjugándose las lagrimas con las mangas de su camisa – Es obvio que tus amigos son de nuestro nivel. Después de todo, tú eres un mezquino elitista, justo como yo. No hay forma de que tus amigos de la escuela sean unos fenómenos….-

Fenómenos.…Fenómenos….

" Mi padre me llamo maldito vagabundo y para desmotarle que no lo soy, me tatué el pecho. Ansió ver la cara del maldito cuando se entere…."

"Oye Crocodile, no tengo mucho dinero….así que en vez de ir a comer al Baratie para tu cumpleaños, te hice una reservación en el puesto de sushi ambulante de Hachi. Recuerda llevar tus propio palillos a no ser que quieras agarrar una enfermedad del estomago. No tiene que agradecerme, es un regalo de tu amiga, Paula…"

" ¿Hey Crocodile, quieres ver mi nuevo baile que presentare para el concurso de talentos de este año? Lo llamo El ballet del cisne Okama! Hasta me he comprado un maquillaje facial para me combine en la ocasión!"

"Admira mi nuevo peinado en forma de número tres. Volverá locas a las chicas, Crocodile, te lo aseguro!"

"Mira Crocodile, Goldenweek nos ha dibujado a todos nosotros como si fuéramos Pokemones para su tarea de arte y ha subido una foto en internet! Que ya tiene más de tres millones de vistas! He de preparar unos chocolates para celebrar"

""Puse un explosivo en el inodoro de hombres y….bueno, digamos que no querrás entrar allí por al menos unos cuantos meses…."

"Dooooooooosssssss…..maaaaasssssss…dosssssssss…..essssss….iguaaaaaaalllll….aaaaa…..piiiiiizzzzzaaaa"

"Yo no sere reina de la primavera, yo seré reina de la Navidad, como mi nombre lo dice. Tu votaras por mi porque soy la chica más guapa de la escuela, ¿verdad, Crocodile?"

No, definitivamente, sus amigos no eran unos fenómenos. Eran algo mucho peor.

De tan solo imaginar la expresión en el rostro de Capone al verlos, sintió una gran vergüenza.

Tal vez seria mejor si…. Capone nunca los conociese. Por el bien de todos y mas que nada ,por el bien de la reputacion de Crocodile entre los miembros del Comite de los Jovenes mas Ricos de la Ciudad

Capone conocera a la banda de amigos de Crocodile?

Por que a Crocodile le importa tanto su reputacion entre el comite?

!Todos eso y mas en el proximo capitulo!