Disclaimer: CCS pertenece a CLAMP, por lo tanto, cualquier personaje que parezca conocido, no me pertenece.
¡Lamento lo poco y horrible de esta historia! Pero... ¿Saben? Es mi primer fic de CCS, y mi segundo fic publicado. Lo lamento...
Quebrarse.
"Entonces te quiebras, no lo soportas, no soportas verlo besarse con otra que no seas tú".
Ahora lo entendía. Ahora entendía el sentimiento que pudo haber sentido él. No ser correspondido.
—Tomoyo, Syaoran...
Se apoyó en la blanca y lisa pared para dejarse caer al suelo. ¡Qué irónico! ¿No? Me he enamorado de ti después de haberte rechazado tantos años. Pensó suspirando y dejando caer interminables lágrimas.
—¡Sakura!—Justo en ese momento pasaba él, uno de los causantes de aquél dolor; Syaoran Lee.
Sakura rápidamente se limpió las lágrimas y se levantó del piso.
—¿Qué sucede, Syaoran?—Masculló sin mirarlo a los ojos. ¿Cómo iba a hacerlo, si los tenía rojos de llorar?
—¡Aceptó! ¡Lo ha hecho! ¡Gracias a ti, Sakura! ¡Tú nos dejaste solos apropósito! ¿Verdad?—Habló emocionado, sin percatarse, que en ese mismo momento el corazón de Sakura parecía quebrarse en mil pedazos.
Oh, cuán equivocado estás Syaoran. Si sólo supieras que te dejé sólo porque sabía que yo sobraba, que en ese momento yo no era más que un estorbo...
Sakura sonrió débilmente.
—Qué bien, Lee.—Susurró con voz quebrada. ¡No podía quebrarse allí! ¡No delante de él!
—¡Sí!—Gritó sonriente, pero al percatarse de que lo había llamado por su apellido, se preocupó y quitó aquella expresión de felicidad a cambio a una de seriedad. Seguidamente miró fijamente a Sakura—¿Te sucede algo, Sakura?
La castaña rió sin gracia. Se apartó un poco sin levantar la vista. Syaoran la miró confundido.
—No me pasa nada, Lee.
Levantó su cabeza a medias, dedicándole una sonrisa sarcástica. Y finalmente, se alejó corriendo.
Desde aquél entonces, Sakura había tomado importantes decisiones. Tales como dejar todo atrás para y olvidar aquellos tiempos de gloria y desdicha. Pues a pesar de ser difícil olvidar, más difícil es soportar verlo con alguien que no sea ella misma.
Sí, podía sonar egoísta, pero no lo soportaba, se sentía débil...
—Si tan sólo hubiera correspondido a sus sentimientos aquellos días, quizás, esto nunca hubiese pasado.—Se dijo a sí misma.
Recorrió la habitación del apartamento que compartían Tomoyo, Lee y ella. Dejó caer unas últimas lágrimas, tomó las maletas sin antes dejar un pequeño trozo de papel, dejando en claro que era solamente para él...
¿Sabes Li? Quizás pude haber sido muy despistada aquellos años de cazadora de cartas Clow, pero eso no se compara con lo despistado que eres tú. Que después de miles de indirectas y hechos... Jamás te diste cuenta que yo me he enamorado de ti.
Con amor, Sakura Kinomoto.