CAPITULO 1: INTRODUCCIÓN.

:::::::::: TENTEN ::::::::::

Desperté muy de mañana en la lujosa suite que el comandante Fugaku Uchiha, en nombre de todo el departamento policiaco de Konoha , había reservado para mí. Un poco demasiado lujosa para mi gusto, pero verdaderamente esplendida.

Tome mi celular del buró para verificar la hora: las 7:00 am.

Se supone que mi cita con el el comandante Uchiha es a las 10 de la mañana así que me tomo todo el tiempo que necesito para ducharme y arreglarme. Después de todo, la primera impresión siempre es la más importante.

Después de mi ducha me seco el pelo y me pongo unos ajustados pantalones de mezclilla grises, y una camiseta blanca. Zapatos de tacón negros. Mi anillo de plata, regalo de Temari. Mi juego de pulseras de obsidiana, regalo de Gaara. Y un cordón negro que me pongo en el cuello, que contiene como dije una letra M de oro, que era de mi mama, una perrera, que era de mi papá y una pequeña llave que me regalo Kankuro el día de nuestro segundo aniversario, y que abre el candado que el mismo trae siempre al cuello

-Muy al estilo de Sid y Nancy, Tenten –me dijo aquella vez

Me cepillo el pelo, recogiéndolo en una coleta alta, y me maquillo muy levente. Lista para mi primer día de trabajo. Y solo son las 8:30.

Sin nada más que hacer, arreglo mis maletas. Si todo salía bien en esta entrevista, esta misma noche dormiría en la casa de concentración del escuadrón de infiltración del departamento de policía de Konoha.

Un nombre bastante largo, en Suna lo llamaban simplemente: "Los infiltrados". Pero ni hablar, cuando estés en Roma…

Master of Pupets de Metallica empezó a sonar en mi celular. Era el tono asignado para Kankuro

-¿Hola?

-¡Buenos días! Hace un calor de la fregada aquí, pero estoy seguro de que Konoha está muy fresca

-De hecho, sí. ¿Cómo estás? Ya te extraño

-¿Qué cómo estoy? Nena, si tú me extrañas yo estoy en algo así como depresión post partida de Tenten. Gracias a Dios que traje conmigo a casa a esa rubia anoche, ya sabes, para que verificara que no me cortara las venas o algo así. Espero que no te moleste.

-Claro que no me molesta. Saludame a Temari

-¡¿Cómo supiste que la rubia era mi hermana?!

-Porque me amas demasiado como para meter a alguien más a tu casa mientras no estoy. Por cierto también te amo

-Lo se bebé. Pateales el trasero a esos imbéciles de Konoha

-No sabrán ni que les pego tan duro

-Esa es mi chica –suspiró – Mierda Tenten, el trabajo no será igual sin ti aquí.

-Lo se cariño, pero esto es…

-importante para ti, lo sé. Como sea. Me voy, tengo que pasar a dejar unas cosas con Gaara antes del trabajo. Piensa en mí todo el día

-Solo si tú piensas en mi todo el día.

-Sabes que sí.

Y colgué.

Me puse un blazer negro, mi bolsa de mano blanca. Cogí mis maletas y baje a recepción para entregar mis llaves.

Cuando entre al estacionamiento busque con la mirada mi pequeña Jeep liberty roja. Cuando por fin encontré mi auto, y amontone mis pertenencias en él, maneje fuera del hermoso hotel cinco estrellas.

Tenía menos de una hora para llegar a la comisaria.

:::::::::: NEJI ::::::::::

El molesto sonido de la alarma de mi celular taladrando mi cabeza. Resaca. Un… amm… ¿Un cuerpo desnudo junto a mí?

Mierda. Estaba en problemas.

¿En qué maldito momento decidí meter una chica a la casa anoche?

Con cuidado de no despertar a la pelirroja junto a mí, me levanto de la cama y apago la alarma.

Me pongo unos boxers y asomo la cabeza por la puerta de mi habitación.

En momentos como este agradezco no tener un baño propio, pues así agarro mi ida al baño como pretexto para ver si la zona esta despejada.

Afortunadamente sí.

Entro al baño me lavo los dientes y la cara. Preparo en mi mente lo que le voy a decir a la chica y salgo sigilosamente de nuevo.

Tengo que sacarla de casa antes de que alguno de los chicos despierte y se dé cuenta de lo que hice.

Cuando entro a mi habitación la encuentro vestida con una falda rosa y una blusa negra, sus zapatos en su mano y se encuentra inclinada hacia mi buró escribiendo algo.

Cuando se da cuenta de mi presencia se gira para encontrarme y sonríe descaradamente

-Trabajo, me tengo que ir. Pero pase un buen rato anoche, si quieres que se repita llámame.

Camina hacia a mí, me besa en los labios y sale sin despedirse. Genial.

La suerte está de mi lado.

Sé que hoy es un día importante. Hoy almorzaremos con el comandante y nos presentara al nuevo integrante del equipo.

Un almuerzo con el comandante solo significa una cosa: Felicitaciones. Es su manera de decirnos que estamos haciendo las cosas bien.

En cuanto al nuevo…

No me emociona mucho el tener un nuevo por aquí. El último novato en el equipo fue Naruto, quien, lamentablemente estuvo a mi cargo. Solo espero que al imbécil de Shikamaru no se le ocurra mandar a este conmigo. Aunque pensándolo bien, un poco de carne fresca no le hace mal a nadie.

Cojo una toalla y salgo rumbo al baño. Para mi sorpresa Sasuke se encuentra en la sala viendo las noticias. Se encuentra bañado y cambiado. Maldito. Por ser el dueño de la casa tiene una de las dos únicas habitaciones con baño propio.

Se gira hacia mí y esboza una sonrisa sarcástica

-¿No se quedó a desayunar tu amiga?

Mierda.

:::::::::: SASUKE ::::::::::

Anoche sin duda se nos pasó la mano a los cuatro.

Salimos a festejar que habíamos resuelto nuestro último caso satisfactoriamente y se nos pasó la mano.

Shikamaru, que era el conductor designado se fue una vez que vio no habría más diversión para él que sentarse a vernos tomar. El muy idiota me dejo con Naruto, que después de tres tequilas dobles, estaba más que borracho.

Neji, después de sexto, se montó en un taxi con una sexy desconocida.

Y yo… bueno, yo perdí mi reloj. Lo peor de todo es que no recuerdo en que maldito momento me lo quite.

Y todavía me toco cargar con el amoroso y borracho Naruto, que en cuanto puso un pie en la casa, bautizo la terraza con jugos gástricos.

No podía culpar de todo al rubio estúpido. Después de ser el conductor designado por un mes, cualquiera enloquece a la primera.

Salgo de la cama y camino hacia la ducha. Mi ducha.

Una de las ventajas de ser el hijo del comandante es que en la casa de concentración te toca una de las dos únicas habitaciones con ducha propia.

Mientras me baño pienso en lo laborioso del día de hoy.

Shikamaru, (nuestro líder, por cierto) ya ha de haber recibido los archivos y expedientes del novato que se integra hoy al escuadrón de infiltración. Naruto limpio la habitación que le iba a tocar ayer, antes de irnos de juerga. Neji, quien se iba a hacer cargo de entrenarlo y capacitarlo, ya debería estar preparado mentalmente.

Debe de ser alguien importante como para que mi padre nos lo presente en su famoso almuerzo. Tal vez un niño rico traumado como Neji. O el hijo de algún político, como Naruto, o el de uno de los amigos de papá, como Shikamaru.

Lo que si se es que debe de ser realmente bueno. Pues aunque a primera vista no se da mucho por un cuarteto de muchachos mimados, somos lo mejor de lo mejor.

Cuando salgo de mi baño, me seco y cambio rápidamente. Escuche el leve murmullo femenino y no voy a perder la oportunidad de burlarme un rato del Genio Hyuga.

Salgo a la sala y enciendo la televisión en el canal de las noticias. Están pasando un reportaje sobre nuestro caso recién resuelto cuando en guapo Neji sale de su habitación con en boxers y una toalla al hombro.

-¿No se quedó a desayunar tu amiga?

Me mira fijo un momento y después entra al baño maldiciendo entre dientes. Sonrío por lo bajo y regreso mi mirada a la tele.

No puedo negar, muy en el fondo de mi ser, que esta es mi vida tal y como la soñé cuando era un adolescente. Ser una especia de Super Héroe, vivir con mis mejores amigos, que me paguen por hacer lo que me gusta. Si, este es mi ideal de vida perfecta.

Shikamaru sale bañado y cambiado. La segunda habitación con baño propio es la suya. Ventajas de ser el líder.

-Buen día. Escuche que anoche las cosas se pusieron agitadas. ¿Algo que deba saber?

-Naruto vomito en la terraza. –finjo pensármelo un momento antes de continuar. –si solo eso

-Bien –pone la cafetera y regresa a su habitación

Finjo como si nada, cuando Neji sale del baño envuelto en una toalla.

-No le digas a Shikamaru –me dice antes de entrar a su habitación dando un portazo

Como si fuera un acto reflejo Shikamaru sale de la suyo con un folder en la mano

-¿Naruto? -Me pregunta mientras camina hacia la cocina

-Neji

Me sirve café y me hace una seña con la mano para que me acerque.

Aunque Shikamaru es la persona más vaga que conozco, cuando se trata de trabajo es el más serio. No por nada lo eligieron como el líder, por encima de mí y de Neji.

Eso si, una vez que termina un caso, pasa el tiempo durmiendo o viendo las nubes en la terraza.

Vamos por la segunda taza de café cuando Neji sale, intachable como siempre

-Bien. –dice Nara, poniendo una humeante taza frente a él. –Sasuke, despierta a Naruto. Neji, te toca cuidar al novato. ¿Ya está lista su habitación?

-Sí. –respondo por inercia. -¿Algo que quieras compartir sobre el nuevo, antes de que traiga al idiota?

-La. La nueva. –contesta él hojeando el contenido del folder. –El novato es una chica. Bueno. Novato es un decir, tiene mas experiencia que nosotros.