BPOV
Caminaba con dificultad por los callejones de Onnet (que conocía como la propia palma de mi mano) respirando pesadamente, resistiendo el agudo dolor en mi costado "Estúpido guardia real" maldecí por lo bajo. Había repasado por semanas la invasión a la sala de tesoros del palacio real, parecía un plan estúpido y codicioso, pero nadie en todo el reino era tan ágil y sigiloso como yo (o eso creía).
La infiltración había sido muy sencilla, me escabullí en la fiesta por el balcón, que a pesar de encontrarse en el segundo piso, estaba bien escondido y era de fácil acceso, incluso con el pomposo vestido azul que tenía puesto, por suerte era una mascarada, por lo que mi identidad estaría mas o menos protegida...
Fingí estar interesada en las tonterías de las que me hablaban los hombres que me perseguían, y me confundí entre la multitud, entonces escuché el ruido de una explosión unida a los chillidos de la multitud y los guardias reales apresurándose hacia el lugar del suceso, lo cual me dio la oportunidad perfecta para infiltrarme en los pasillos, despojarme de mi vestido azul, que guardé en la bolsa guardada bajo mis faldas (esas cosas son tan grandes que podía hasta guardar un circo entero).
Entonces estaba allí otra vez, con mis ropas negras y mi máscara de arlequín, la legendaria (o mas bien EL legendario como creía todo el mundo) "Arlequín oscuro". El título que me había ganado por mi fama de ladrona profesional en los paises de Aquilan, Toluma y Corma, robando tesoros reales sin dejar ni un rastro, y ahora, era el turno de Onnet, ellos me esperaban, pero como las otras veces,no serían un inconveniente para mi, hasta que el me encontró.
Estaba parado muy tranquilo frente la sala del tesoro real, su cabello cobrizo caía a los lados de sus ojos verdes desafianes, blandía una espada plateada en sus musculosos brazos No será un inconveniente para mi... pensé ingenuamente.
"Valla valla!- dijo con su voz de.. terciopelo?- así que nos honras con tu presencia, arlequín oscuro- sonrió torcidamente- siento que no te puedas quedar.
E inmediatamente, con una velocidad que no había visto antes, arremetió contra mi con su espada, lo pude esquivar de milagro su filo. Intentó apoderarse de mi bolsa, pero la alejé de su mano rápidamente. Salté lejos de el mientras entraba en pánico Si ve el vestido sabrá que soy mujer, muchos se lo podrán confirmar y mi identidad será mas difícil de ocultar, ¡no puedo permitirlo! debo optar por la retirada.
Empecé a correr a todo lo que mis piernas le daban por los pasillos, pero el era incluso mas veloz ¿cómo era posible?. Divisé la primera ventana a mi izquierda, era el tercer piso ahora, pero sobreviviría la caída.
Me agarré del alfeizar, y cuando me dispuse a saltar me alzó con un solo brazo por la solapa de mi camisa
- No irás a ninguna parte- espetó
Me tiró en el suelo al otro lado de la habitación, dejándome sin aire. Lo único que podría hacer era una técnica muy precisa y arriesgada porque exigía mas cercanía, no soy una persona de armas blancas, así que aprendí a inmovilizar con mis manos, me acerqué lo mas rápido posible esquivando el golpe de su espada, que cortó mi piel en un costado y di dos golpes certeros en la parte delantera de cada uno de sus hombros. Los brazos del guardia cayeron inútiles a ambos lados, mientras me miraba incrédulo, y evitando un gemido de dolor me escabullí por la ventana...
Espero que hayan disfrutado el primer capítulo! por favor díganme lo que piensan, publicaré muy pronto (hoy) el segundo capítulo...