Tú, yo y mi soledad.

Capítulo 1

Las tres hermanas caminaban por el pasillo de la escuela cuando por el final del corredor se escuchó un par de voces femeninas.

-¡burbuja!-eran Candy y dolls que llamaban a su nueva amiga-¡es hora de practicar!- Burbuja salió disparada despidiéndose de sus hermanas con un simple gesto de su mano.

Bellota y bombón se quedaron paralizadas por un momento, como pensando en que hacer o cómo reaccionar, pero a bellota rápidamente se le ocurrió una idea, así que sonrió nerviosamente y se despidió de su hermana rápidamente, era más que obvio que se dirigía con Butch, últimamente aprovechaba cualquier oportunidad para estar con él y no es que ya no lo odiara al contrario lo odiaba más que nunca pero había algo en el que le obsesionaba demasiado.

En fin bombón se había vuelto a quedar sola esto ya era una situación común para ella de hecho era normal verla caminar por la escuela como alma en pena tratando de matar el tiempo del receso, esta vez simplemente se acercó a un casillero y se recargo entre él y la pared, no es que se quisiera esconder no hacía falta, incluso aunque se parara en medio del campo de futbol durante un juego es probable que nadie la notara, no es simplemente que esa clase de lugares por alguna razón le resultaban muy cómodos.

Bombón respiro profundamente, bajo con tristeza la cabeza y empezó a jugar con el pliegue de su falda esperando la campana pero fue sacada rápidamente de sus pensamientos, alguien se había acomodado a su lado y al ver quien era se quedó aún más sorprendida que cuando descubrió a burbuja con su nueva imagen de gótica, era Brick con su maldita sonrisa burlona.

-¿por qué tan solita?- pregunto con el maldito cinismo que lo caracterizaba.

-quería estar sola y tú me estas estorbando para eso- contesto bombón lo más fríamente que pudo-y ¿Qué haces sin los estorbos de tus hermanos o fans?

Nada, solo quería estar solo y pensar-dijo Brick con una mirada completamente diferente, era casi casi como si estuviera "hablando enserio" pero no, no podía ser era Brick.

-bueno no te quito más mi tiempo, se ve que eso ultimo te cuesta mucho trabajo- dijo bombón tratando de enfadar al chico pero Brick reaccionó de forma poco común, solo respondió fríamente.

-ok

El pelirrojo se paró y se disponía a irse, lentamente se separó de la pared y empezó a caminar sin decir ni una palabra. Por alguna extraña razón bombón se sintió mal por la manera en que había tratado al chico así que antes de que se fuera decidió hacer algo.

-Brick. . . – dijo casi como un susurro, él se quedó de pie sorprendido-sabes . . .tu puedes . . . estar solo . . . aquí con . . . migo pero solo . . . sabes a lo que me refiero-dijo ella totalmente avergonzada por la incoherencia que acababa de decir.

-claro, ¿por qué no?-contesto con una sonrisa en su rostro.

Ambos se acomodaron como al principio. Una cálida idea cruzo por la mente de bombón.

-no es tan malo estar sola siempre y cuando él me acompañe en mi soledad.-lo volteo a ver y una tierna sonrisa se dibujó en sus labios, parece ser que Brick tuvo la misma idea porque hizo exactamente lo mismo.

-Brick, ¿puedo hacerte una pregunta?

-claro-contesto sin mucho interés.

-¿Por qué entraste a la escuela?-pregunto la curiosa de bombón- no eres de la clase de chicos estudiosos.

-¿es tan difícil de imaginar?-pregunto con cierta melancolía-lo hice por ti-bombón se sonrojo a mas no poder-tenía que fastidiarte más seguido-al decir esto puso la misma mirada maligna que caracterizaba al tonto Brick de siempre.

-que más se podía esperar de ti-dijo bombón con la misma mirada desafiante. Solo Para arruinarles el momento tenía que sonar el timbre inmediatamente.

-¿vienes?, de todas maneras tenemos la misma clase-dijo Brick extendiendo la mano para ayudar a bombón.

-que caballero-dijo ella tomando su mano para dirigirse juntos al aula para sorpresa de los demas